Editorial


 

¿Moderados Vs. Ultras?

Recientemente, la opinión pública ha notado lo que muchos de nosotros ya habíamos previsto y visto desde antes. Las acometidas constantes y cobardes que miembros de la Red hacen en contra de las Asambleas y del CGH mismo, con el fin de IMPONER su propuesta, que es la de rectoría y la del gobierno, que es la de los eméritos, que es la de los blandengues, cobardes y poco congruentes.

Es claro que lo que se aprueba una semana o se "avanza" en beneficio de los esbirros de José Luis Cruz, se revierte a la siguiente. ¿La causa?, muy simple, mientras las propuestas no sean verdaderamente consensadas y respeten el espíritu del movimiento, respete a los huelguistas y conforme en sí misma una solución, el CGH no podrá avanzar en ningún sentido.

Desde nuestro punto de vista, hemos dicho desde siempre que más vale estar sólo que mal acompañado, que el daño que hacen al interior del movimiento es el mismo o mayor que el que harían estando fuera, para nosotros, el control y momento "político" que tanto defienden muchos miembros del CGH y RECOMIENDAN tenerlos dentro de nuestras filas no es válido, pues ahora más que nunca, impiden el avance contundente de las negociaciones, niegan el cambio hacia un debate propositivo y de alto nivel, en resumen, más valdría fajarnos los pantalones y expulsarlos del movimiento, de hecho, están fuera desde el momento que sólo se presentan a asambleas y casi nunca hacen labores dentro de las instalaciones, incluso, ocupan su tiempo inscribiéndose , cochupando, etc.

Seamos claros, los moderados no son otra cosa más que entes "titireteadas", que sólo buscan una salida, mientras que los llamados "Ultras" pugnan por una solución. Basta con analizar las propuestas.

La primea pregunta que surge en nuestra mente, ¿por qué negociar lo de las reformas del '97 si ya se habían aprobado por las autoridades en el congreso del '90? El modificar nuestro pliego petitorio es necesario, pero hay que hacerlo con "giribilla". ¿Por qué no eliminar los puntos que se refieren a las reformas del '97 lo del CENVAL, y las cambiamos por un solo punto que dijera que deseamos respeto a los acuerdos y resoluciones alcanzados en el congreso universitario así como la salida de la UNAM de la COMIPENS y la CONAEVA, organismos que obligan a nuestra universidad a estar dentro del CENEVAL.

Con lo anterior, flexibilizaríamos nuestro pliego petitorio, no renunciaríamos al CENEVAL (aunque sea de manera velada) y lo mejor de todo, obligaríamos a las autoridades a explicar la causa, motivo o razón por la que no aceptan algo que ya habían aprobado. Sería un golpe político.

Finalmente, terminamos con una reflexión. Los ultras existen desde que el hombre es hombre, por ejemplo Semervais consideraba necesaria la higiene al interior de los nosocomios, sobre todo en las salas de operaciones, aconsejaba lavarse las manos antes de intervenir, desinfectar el instrumental, utilizar sábanas limpias, etc., otro ultra, fue Galileo, quien tuvo la osadía de afirmar que la tierra giraba en torno a la tierra, Colón, quien a pesar de ser un oportunista, se atrevió a ir más allá del horizonte a pesar de que se "iba a caer" pues llegaría inevitablemente al fin del mundo, aunque el sabía que no, pues consideraba que la tierra era redonda, Einstein, quien se atrevió a decir que había otra física distinta a la de Newton, etc., etc., etc., todos ellos, fueron considerados ULTRAS por los moderados, sin embargo, el tiempo se encargó de ponerlos en su lugar, así, los ultras eran los inteligentes e instruidos, mientras que los moderados eran los ignorantes, retrógradas y ultra ambiciosos y estúpidos.

 

 

 <Portada> <Índice>