PARTE I - DÉCIMA
PRIMER DENTELLADA
Encender
un fuego
Incendio
de monte
Arreglo
de la ropa
Limpieza
de calzado
Entrega
de mensajes
Brújula
Aseo
RECORDARÉIS LA
HISTORIA de los duendes, aquellos buenos hombrecillos tan útiles en la casa que
hacían el trabajo antes que nadie se hubiese levantado; recordaréis también a
los Boggarts, pequeños flojos, que no hacían otra cosa sino correr de un lado a
otro haciendo un ruido infernal y poniendo todo sucio y fuera de su
lugar.
Los Lobatos jamás
desean parecerse a los Boggarts, por el contrario, quieren ser como los duendes,
útiles en su casa y a sus semejantes, especialmente útiles a su padre y a su
madre.


Encender un fuego
"Preparar,
encender y apagar una fogata"
Para ser un buen
Lobato un muchacho deberá saber cómo se coloca la leña y se enciende un
fuego.
Es mucho más
divertido encender una fogata en el campo, que la lumbre en una chimenea. Ya
algún día, cuando seáis Scouts, aprenderéis a hacerlo con propiedad. Hasta
entonces más vale que dejéis esta tarea a los Viejos Lobos cuando salgáis a
explorar.
Colocar la leña y
encender un fuego en un hogar requiere alguna práctica, si se desea que éste
prenda luego y vivamente; por tanto, practicad mientras seáis Lobatos. Lo
primero que hay que hacer es limpiar bien la chimenea, quitar la ceniza y
sacudirla bien.
Muchas personas
desperdician combustible tirando todas las cenizas: vosotros debéis tirar
solamente lo que se convierte en polvo, y conservar los trozos medio quemados.
Las cenizas mezcladas con el nuevo combustible dan todavía calor y ahorran
dinero.
He aquí algo de lo
que yo hacía para separar las cenizas inútiles de las útiles. Si no tenéis una
criba, usad una malla de alambre cualquiera Con una pala, poned sobre ella todas
las cenizas para que caiga en el bote de la basura todo el polvo, y quede sobre
la malla aquello que puede utilizarse todavía.
Al hacer fuego
tened cuidado de hacerlo en la mejor forma posible pues si no lo hacéis así, os
será difícil encenderlo, y tendréis que repetir la operación. Los principiantes
generalmente usan mucho papel, demasiado carbón y muy pocas astillas de madera.
Para comenzar se necesita poca cantidad, especialmente de carbón, pues el peso
de éste hace que el fuego se ahogue.
Haced pedazos un
periódico, enrollad estos pedazos en bolas sueltas y pequeñas y en tirabuzones
largos y sueltos, los cuales colocaréis en el piso de la chimenea; pero tened
cuidado de no usar demasiado papel. Conseguíos algunas tiras secas de madera -la
madera blanca es preferible- y colocadlas encima del papel, sin que lo
compriman; construid un emparrillado formado con estas tiras (como si
estuvierais construyendo con tabiques), de tal manera que no se caigan cuando se
ponga sobre ellas el carbón, y permitan que el aire pase entre ellas con
facilidad Hecho lo anterior, colocad pedazos pequeños de carbón sobre ellas, con
la mano y con sumo cuidado. No pongáis el carbón con pala, o cenizas y carbón
medio quemados, al principiar. Cuando todo esté listo, prended fuego al papel en
todo el piso de la chimenea -usando un solo fósforo-. Vigilad el fuego hasta que
haya prendido bien y la madera arda ya -no os retiréis pensando que el resto se
hará sólo-. Una vez que la madera y el carbón han cogido bien el fuego, se puede
echar más carbón por medio de pala, así como también hacer uso de las cenizas
que han quedado de fuegos anteriores. Ocasiones habrá en que tendréis que
encender el fuego haciendo uso de leña mojada, de palos viejos y duros, de
carbón malo y cenizas, y en una mala chimenea. Tal cosa es difícil, pero un
Lobato no se deja vencer, He aquí algunas sugerencias.
 |
El lado de
sotavento de una roca está muy
bien. |
Procuraos aunque
sea un pedazo pequeno de madera y convertidlo en astillas, como lo hace un Scout
que trata de encender un fuego al aire libre. Encended entonces un pequeño fuego
con estas astillas y un puñado de palos. Con seguridad lograréis encender este
fuego, al que después sólo habrá necesidad de ir agregando paulatinamente otros
palos y carbón. Un cabo de vela constituye, por supuesto, una ayuda, pero eso es
demasiado para un Lobato (constituye gran desperdicio y produce un olor muy
desagradable). Una buena ocurrencia es conseguirse papel engrasado -como por
ejemplo, la envoltura de la mantequilla y de la margarina-; con este papel se
puede encender un magnífico fuego; vale la pena conservarlo para el objeto. El
papel viejo que ha servido de servilleta para un quinqué de petróleo y en el
cual hay algo de éste derramado. es muy bueno para el objeto; pero hay que tener
cuidado porque levanta mucha flama: no hay que echar nunca petróleo en el
fuego.

Incendio en los
bosques
"Preparar, encender y apagar una fogata"
Todo Scout sabe la
importancia que tiene el cerciorarse de que el fuego que ha usado para cocinar
está bien apagado, antes de retirarse del lugar. Se echa agua a las cenizas aún
calientes, para que no haya chispas que prendan fuego al pasto que rodea el
acantonamiento. El pasto en el verano constituye un gran peligro, ya que es
difícil prever hasta dónde llegará el incendio del mismo en un campo, una vez
que éste ha cogido fuerza.
Los viejos Scouts
tienen mucho cuidado de cortar y quemar buen tramo de pasto alrededor del lugar
donde van a establecer la fogata de campamento, para que cuando ésta haya sido
encendida, no se propague el fuego al pasto vecino.

El lado de sotavento de un
fuego es otra cosa
Cuando han
terminado de cocinar, como viejos acampadores que son, ponen especial cuidado de
acabar con el fuego separando todos los leños a medio consumir echando agua
sobre las cenizas, de tal manera que una chispa no vaya a dar principio a un
nuevo fuego. Los incendios de pastos y bosques nunca son provocados por los
verdaderos Scouts, sino solamente por tontos pietiernos. Un arbusto, una vez
encendido, alza grandes llamaradas que se propagan a tremenda velocidad, y
quedan en unos cuantos minutos convertidos los alrededores en una hornaza
demasiado grande para poder ser apagada por un solo hombre. Hay, además, el
peligro de que se quemen cosechas, arboleda, rebaños y ranchos y aun poblados y
ciudades: todo lo que el fuego encuentra.
Ésta es la razón
por la que el verdadero hombre de bosque es tan cuidadoso, es un hábito
constante, tanto que cuando quema las ramas y las hojas secas de su jardín, lo
hace en forma perfectamente segura, quitando antes todo aquello que puede tomar
fuego, y cuando acaba de quemarlas, pisotea cuidadosamente hasta la última
chispa antes de retirarse.
Recordad que la
tierra y la arena son a menudo tan útiles como el agua para apagar un
incendio.
Los Pietiernos al
tratar de apagar un fuego con ramas y sacos que es la forma correcta de hacerlo,
con frecuencia lo hacen en forma indebida, por el lado de sotavento. ¿Sabéis lo
que esto quiere decir?
Barlovento quiere
decir del lado del viento, o sea del lado de donde el viento sopla, del lado
airoso. Sotavento es el lado opuesto.
El lado de
sotavento de una cosa o de una piedra, es el lado bueno para colocarse cuando
sopla viento helado; pero en el caso de un fuego es el lado malo para colocarse,
ya que el humo, las llamas y las chispas, son llevadas precisamente hacia ese
lado.
Sin embargo, con
frecuencia es el lado escogido por los Pietiernos cuando tratan de apagar un
fuego. Yo he sabido de un muchacho que se quemó seriamente por hacer
esto.
Cómo salvar a una persona que se está quemando
Si veis a una
persona que es presa del fuego, recordad que lo primero que hay que hacer es
tratar de cubrirla rápidamente y tan apretado como sea posible con un saco, una
manta o una alfombra. El fuego no se propaga sin aire; cuanto más aire tiene,
mejor arde.
Si una persona
cuyos vestidos están ardiendo echa a correr, el fuego levanta llama
inmediatamente. Vosotros deberéis obligar a esta persona a que se tire al suelo;
la envolveréis inmediatamente y tan apretado como sea posible en una manta para
acabar con el fuego, e iréis inmediatarnente en busca de ayuda.

No es agradable el ser
enrollado en una alfombra o tapete y ser rodado por el suelo, pero es la única
forma de salvar a una persona cuyas ropas han cogido fuego.
Arreglo de la ropa
"Doblar
correctamente las prendas de vestir..."
La Divisa de un
Scout es "Siempre Listo", que quiere decir que debe estar preparado para
cumplir con su deber de día o de noche. Los soldados y los marineros, los
bomberos y los policías, y otros como ellos, deben estar listos a cualquier hora
del día o de la noche y, por tanto, acostumbran tener su ropa en lugar y forma
adecuados y de tal manera, que puedan tomarla sin dificultad aun en la oscuridad
y ponérsela rápidamente.
Los Scouts y los
Lobatos deberán hacer lo mismo: tener cuidado de doblarla y colocarla en el
orden en que se la van a poner. Deberéis vosotros, de cuando en cuando saltar de
la cama y poneros vuestra ropa en la obscuridad, y veréis cuánto más rápido
podréis hacerlo si la tenéis en orden y lista, que si la tenéis en desorden y
regada por todas partes.
Algún día podría
ser esto motivo de salvar una vida.
Los marineros y los
soldados tienen que guardar su ropa en lugares sumamente reducidos. Un soldado,
como vosotros sabéis, lleva una muda de ropa y muchas otras cosas, como
cepillos, navaja de rasurar, jabón, etc., en su mochila, sobre su espalda. Para
hacer tal cosa tiener que doblar cada artículo en forma conveniente y apretada,
pues de otro modo no les cabría todo.
Si vais de
acantonamiento, tendréis que hacer lo mismo; sed. pues aptos para doblar y
empacar vuestras cosas en un espacio muy reducido.
Sería imposible
hacerlo si vosotros no tenéis costumbre de doblar vuestras cosas en forma
adecuada, así, pues, acostumbraos a hacerlo todos los días y en vuestra propia
casa.
Esta costumbre es
provechosa aun para la ropa: si se guarda en debida forma, se conserva mucho más
y se ve mucho mejor cuando la traemos puesta.
También cuando os
encontréis fuera de vuestra casa y deseéis que de ella os manden algo, podréis
con precisión decir dónde han de encontrar aquello que vosotros queréis, si cada
cosa se encuentra en orden en vuestro cuarto.
Sed aptos
para empacar y doblar vuestras cosas |
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Limpieza del calzado
"Limpiar
y engrasar un par de zapatos"
De igual manera que
me gusta hacer mi cama y guardar mi ropa, me gusta limpiar mi calzado.
Produce gran
satisfacción llevar un calzado bien pulido, cuando éste es fruto de nuestro
propio trabajo. Esto es tan agradable como pulir cosas de metal con un poco de
líquido limpiador y de un pedazo de franela. Los útiles necesarios para limpiar
el calzado son:
1. Una cuchilla
vieja para quitarles el lodo.
2. Un cepillo
duro para quitarles el polvo.
3. Una brocha
para ponerles la grasa.
4. Una caja de
grasa.
5. Un cepillo
suave para sacarles lustre.
6. Un pedazo de
franela para pulirlos.
Cuando uséis botas
para el campo, lo mejor es limpiarlas, pero no pulirlas: untadles grasa.
especialmente entre las costuras, con un cepillo viejo de dientes. Cualquier
grasa es buena para el objeto: aceite o vaselina.
Si deseáis
conservar vuestros pies secos, no os olvidéis de engrasar también las suelas,
además de los tubos.

Entregar un mensaje
"Correr o
caminar en bicicleta, llevando de memoria un mensaje de quince palabras cuando
menos, siguiendo una ruta determinada, y entregarlo correctamente."
Esta es otra prueba
de Segunda Estrella. Muchos muchachos piensan, cuando van a pasar esta prueba,
solamente en la carrera, es decir, en llevar el mensaje lo más aprisa posible,
sin pensar en el mensaje mismo.
Vosotros debéis
pensar de manera inversa; o sea, aprender el mensaje y después correr a
llevarlo.
Poned atención
especial en las frases que forman el mensaje, repitiéndooslo a vosotros mismos y
repitiéndoselo al que lo envía. Aseguraos de que lo habéis tomado correctamente
y de que lo entendéis, antes de partir a llevarlo: y después seguid repitiéndolo
durante el trayecto, para que tengáis la seguridad de que lo entregáis
correctamente.
Si no lo hacéis
así, con seguridad enredaréis el mensaje de tal manera que, aun cuando lleguéis
primero, de nada os servirá, ya que tendréis que regresar a obtener de nuevo el
mensaje.
Esto mismo se
requiere al transmitir un mensaje. Debéis aseguraros de que lo habéis recibido
correctamente de la persona que lo trasmitió, antes de trasmitirlo vosotros a la
siguiente persona.
Si uno o dos de
vosotros, en cadena de transmisión procedéis sin cuidado. el mensaje dará la
vuelta muy alterado.

>Brújula
"Utilizar una brújula
para demostrar el conocimiento de los ocho puntos principales."
Cuando os envíen
con un mensaje probablemente os dirán que caminéis en cierta dirección. por
ejemplo: "Hacia el Norte", o "Hacia el Este", pues éstas son las formas de
dirigir a los marineros, a los soldados y a los Scouts; por tanto. tratad de
conocer bien la brújula. Esta tiene una carátula semejante a la del reloj, pero
con una sola aguja que apunta siempre hacia el Norte. Si os colocáis viendo en
la dirección en que apunta la aguja veréis al norte, y si dais media vuelta y os
colocáis exactamente en la posición opuesta. veréis el Sur. El Sur es
exactamente opuesto al Norte: el Este queda a vuestra derecha y el Oeste a
vuestra izquierda. Estos son los cuatro puntos principales de la brújula: Norte,
Sur, Este, Oeste.
Suponiendo que no
contáis con una brújula, podréis conocer las diferentes direcciones por medio
del sol, o de las estrellas. El sol es el mejor; sale por el Este y se mete por
el Oeste.

He aquí los puntos de la
brújula que debéis conocer.
Si os levantáis
temprano, veréis por dónde sale el sol y así determinaréis por dónde queda el
Este. Al mediodía el sol se inclina hacia el Sur.
Entre los cuatro
puntos principales de la brújula hay otros cuatro fáciles de recordar también:
el Noreste, el Sureste, el Suroeste y el Noroeste.
Pulcritud
"...y satisfacer a
Akela de que hace lo mejor por conservar limpio y en orden su cuarto de dormir y
el Local de la Manada"
Otra de las pruebas
de Segunda Estrella es satisfacer a vuestro Akeia de que hacéis cuanto podéis
para conservar pulcra la Cueva de vuestra Manada y por evitar el desorden en las
excursiones y campamentos ¿Verdad que esto es de importancia? A la mayoría de la
gente parece no importarle dónde se tiran los desperdicios: colillas de cigarro,
boletos de tranvía, cáscaras de naranja y pedazos de papel, se encuentran
tirados por dondequiera.
Cuando los Scouts y
los Lobatos crezcan, ya no habrá más gente que tire estas cosas dondequiera.
Vosotros, Scouts y Lobatos, os tomaréis el trabajo de tirarlas en los botes
especiales que existen para eso, o las llevaréis a casa y allí las arrojaréis en
el bote de los desperdicios.
Las calles, con los
desperdicios tirados dondequiera, no solamente se ven sucias, sino que resultan
peligrosas debido a las cáscaras de plátano y de naranja que son causa de que
las personas resbalen y se rompan brazos y piernas.
Resultan también
peligrosas, porque las frutas, al podrirse, ayudan a los gérmenes a
desarrollarse y éstos, una vez en el aire, constituyen un positivo veneno. Supe
el otro día de un Lobato que no podía encontrar una Buena Acción que ejecutar y
viendo una cáscara de plátano colocada en lugar apropiado, es decir, dentro de
un bote de desperdicios, la sacó de allí y la puso sobre la acera para dar
oportunidad a otro Lobato que pasara, de hacer su Buena Acción.
Los Lobatos que
viven en el campo no tienen oportunidad de recoger papeles y otros desperdicios
en las calles; pero pueden hacer trabajos tan útiles como extirpar de raíz las
yerbas que crecen en los terrenos adyacentes a sus casas y a lo largo de los
caminos. Esto no solamente Contribuye a que esos terrenos se vean limpios, sino
que constituye una bendición para los agricultores, pues muchas de esas yerbas,
especialmente los cardos y el zuzón, producen tal cantidad de semillas, que
éstas son llevadas por el viento a los jardines y campos cercanos donde
fructifican en forma inconveniente.
Por tal motivo, un
Lobato que destruye una de estas plantas, evita el crecimiento de miles de
otras, en los campos vecinos.
Es, pues, un
trabajo muy satisfactorio salir de paseo todos los días llevando consigo una
escarda o cuando menos un bastón para destruir algunos cielitos de estos
enemigos.
A las puertas de un
parque en Escocia han colocado este letrero:
"Favor de
recordar que: Las cáscaras de plátano o desperdicios de comida, Las
cáscaras de naranja y envolturas de chocolates, Las botellas vacias y
los trapos, Las envolturas de películas y las bolas de papel, Las
colillas y los fósforos, Las cartulinas y los papeles, Las latas y
otras cosas por el estilo, Echan a perder lugares como éste, Y hacen
que las personas decentes se abstengan de concurrir a
ellos". |
Por eso es por lo
que los Lobatos tienen mucho cuidado en no dejar desperdicios tirados donde
quiera.
Nunca hay que tirar
papeles en la calle o en el campamento, hay que guardarlos en los bolsillos
hasta que puedan tirarse en un bote de basura o en el fuego. Ved con orgullo la
Cueva de vuestra Manada, y cada uno de vosotros ponga cuanto esté de su parte
para conservarla limpia y pulcra, de tal manera que cuando tengáis visitas,
éstas se den cuenta de la clase de Manada que sois vosotros por la pulcritud de
vuestra Cueva.
Juegos:
MENSAJE EN SECRETO.
Cada Seisena se coloca de pie detrás de su Seisenero a
una distancia de dos metros entre Lobato y Lobato. El Seisenero recibe un
mensaje de Akela, el cual debe trasmitir a su Seisena en secreto
comenzando por el primer Lobato, el cual lo repite al que tiene detrás y
así sucesivamente. La Seisena que transmite el mensaje más aprisa y
correctamente, es la que gana.
ROSA DE LOS
VIENTOS.
Trazad un círculo sobre el piso y señalad en él los ocho puntos
de la brújula, indicando el Norte con la flor de lis. Colocad en cada
punto a un Lobato y a uno fuera del círculo. Akela nombra dos puntos y los
Lobatos estacionados en ellos cambian de lugar entre sí, procurando llegar
a su lugar antes de que el que está afuera se los
gane.
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