PARTE I - SÉPTIMA DENTELLADA
Observación
Adiestramiento
de los sentidos
Rastreo
Un
periódico de arena
Lectura
de una pista
Animales
domésticos
Observa
"Esta es la Ley
de la Selva. Tan vieja y verdadera como el firmamento. El lobo que la observa
prospera; el que la viola deberá morir...
El chacal podrá
seguir al tigre, pero tú, Lobato, cuando te crezcan las patillas, recuerda que
el lobo es cazador y avanza y consigue su propia comida”. -Rudyard
Kipling.
ESTO SIGNIFICA QUE
el chacal es una bestia traicionera que no caza, no consigue su propia comida,
que ronda por donde el tigre anda cazando y toma lo que éste deja cuando ha
terminado de comer. El chacal es exactamente como el hombre inútil que nunca se
busca su propio sustento, sino que lo anda mendigando y vive del trabajo de los
demás.
El Lobo es
diferente. Caza para comer, como el hombre que se sustenta y se abre paso en la
vida sin querer que los demás lo hagan por él. Así vosotros, mis queridos
Lobatos, estáis aprendiendo a hacer lo mismo.
Cuando el Lobo caza
animales para comer. olfatea para saber dónde encontrarlos.
Un hombre, que no
tiene el mismo buen olfato, caza los animales rastreándolos: para un Scout el
rastreo es el medio usual, no solamente para cazar, sino también para conseguir
informaciones.
El rastreo es una
cosa muy buena: mas para ser un buen rastreador se necesita mucha práctica y
buen entrenamiento. En la India toma siete años el adiestrar un buen
rastreador.
Así, pues, me temo
que vosotros tendréis que esperar hasta que seáis Scouts para aprender un
verdadero rastreo; pero hay muchas cosas que podéis hacer siendo Lobatos y que
os ayudarán en gran nianera después.
Adiestramiento de los
sentidos
Antes que un Scout
pueda considerarse como un buen rastreador. deberá ser capaz de notar hasta los
pormenores más insignificantes que lo ayuden a obtener su objetivo. Deberá no
solamente ver todo, sino también usar su inteligencia de tal manera, que deduzca
el significado de los objetos que observa.
Como Lobatos,
vosotros deberéis aprender a serviros de vuestros ojos y oídos; de vuestro
olfato y vuestras manos y vuestro cerebro. He aquí una lista completa; con ella
tendréis bastante en qué trabajar. Ahora voy a enseñaros cómo hacer el trabajo,
no solamente cuando estéis en la Manada, sino durante todo el día, hasta que
adquiráis el hábito de notar todo.
Usad vuestros ojos Cuando yo
tenía la edad de un Lobato, me fijaba en el número de la placa de cada
policía con quien me encontraba, y recordaba después dónde lo había visto.
Más tarde conseguía que un amigo mío saliera de paseo conmigo a los puntos
donde los policías que había visto se encontraban de servicio (el policía
que está de punto deberá permanecer siempre en aquel lugar para ordenar el
tránsito o algo por el estilo, mientras el policía que está de ronda
deberá vigilar el área que le está encomendada).
En cuanto
avistábamos un policía, a una distancia considerable, me ponía la mano en
los ojos a modo de visera y fijaba mi vista en aquella dirección, diciendo
pausadamente los números y letras de la división a que pertenecía. Cuando
pasábamos cerca de él, mi compañero se quedaba maravillado de lo magnífico
de mi vista y de lo correctamente que se lo había
deletreado. |
 Un rastreador
árabe |
Estatuas y monumentos
No es mala
costumbre el llegar a conocer todas las estatuas que hay en la ciudad en que
vivís. Yo llevaba conmigo una libreta de apuntes donde dibujaba las diferentes
estatuas que veía. Muy pocas son las personas que se fijan si hay o no estas
estatuas. Es porque ellas no usan sus ojos como los usa un buen Scout o un buen
Lobato.
Si un Scout de
Mánchester fuese interrogado sobre el lugar donde existe una estatua de San
Jorge y el Dragón, contestaría probablemente que en lo alto de la estatua de
Reina Victoria, en Picadilly, hay una pequeña estatua del Santo.
Houdini, el gran
ilusionista, hacía muchas de sus estratagemas valiéndose de su poder de
observación y de su memoria. Aprendió a hacer esto desde niño observando los
escaparates de las tiendas por algunos segundos. y después, volviéndoles la
espalda, describía a sus compañeros los diferentes objetos que se exhibían en el
aparador. Es ésta una magnífica práctica para Lobatos. Ensayadla.
Nidos de aves "Observar
y reconocer tres aves no domésticas..."
Es preciso
que os fijéis en las cosas pequeñas, y que tengáis los ojos bien abiertos
si queréis observar las costumbres de las aves y sus nidos.
La buena y
mala manera de suspender un nido artificial. El nido inferior está
correctamente colocado. |
 |
 |
Los nidos artificiales se fijan sólidamente a los árboles o a
un másil.

|
Por supuesto, los
Scouts y los Lobatos buscan los nidos de las aves, no para robar a éstos sus
huevos, sino para observar cómo fabrican sus nidos, los huevos de las diferentes
especies de aves, cómo alimentan y cómo cuidan a sus polluelos. Vosotros podéis
hacer esto rastreando y observando.
Solamente los
malvados gustan de robar nidos y huevos. Los Scouts y los Lobatos hacen cuanto
pueden para proteger los nidos. Se puede dar con los nidos espiando entre los
árboles, pero el mejor modo es observando a las aves cuando van y vienen. De
hecho, con la mayor parte de las aves salvajes, es éste el único modo de hallar
sus nidos. En algunos casos es muy difícil dar con ellos.
Por ejemplo, al
avefría y a un pájaro más común, la alondra, los veréis levantarse del piso y
volar cantando hacia el cielo; pero si vais al lugar de donde se levantaron, no
encontraréis allí su nido. Estos pájaros corren sobre el suelo algunos metros
antes de levantar el vuelo, y cuando regresan, tampoco aterrizan en su nido,
sino a cierta distancia de él. La alondra, a semejanza de otras aves, construye
su nido en el suelo.
Hay aves que
edifican sus nidos en los agujeros de los árboles, o también en los sitios más
variados, como en el cuello de una bomba, o en un cántaro. El pájaro carpintero
construye su nido en el agujero de un árbol.

Los Lobatos, como los lobos,
conocen la manera correcta de rastrear
Rastreo
La primavera es la
época más interesante del año para estudiar la naturaleza en las aves y en las
flores. Las golondrinas y otras aves llegan en esa época de tierras lejanas, del
otro lado del océano, a pasar el verano en nuestras tierras. Para el muchacho
ordinario, que no sabe hacer uso de sus ojos y de su oído, no hay ni la mitad
del atractivo que encuentra el Lobato cuando anda en el bosque o entre los
setos.
Los que tienen buen
oído descubrirán pájaros como el cenzontle, y el Chiff-Chaff, ese diminuto e
inquieto pajarillo que tiene un chillido muy agudo y que requiere, para seguirlo
en su alegre volar de rama, muy buena vista.
Descubrir un nido
de tordos producirá gran satisfacción; en él se hallará a la mamá con sus ojos
brillantes echada sobre sus huevos. Fácilmente se logra amansarla si uno es
bueno con ella, y le demuestra que no se trata de hacerle ningún daño.
Es conveniente que
tengáis un cuaderno y anotéis en él las aves que habéis encontrado, la fecha en
que las visteis y oísteis por vez primera. Al siguiente año, podéis comparar
vuestras notas con las del año anterior, o con las de algún compañero.
Apuntad el día en
que por primera vez escuchasteis un cuclillo, o aquel en que visteis la primera
golondrina del año, o la primera alondra.
Además, podéis
dibujar las siluetas de las aves, de sus huevos; así será más interesante aún,
vuestro libro de notas.
También es bueno
hacer una lista de los nidos que hayáis descubierto. Los cachorros de los lobos,
en Terranova, aprenden a cuidarse solos en la selva, observando a las aves y a
otros animales día con día, para conocer sus hábitos, tal como lo hace un
Lobato.
El propósito del
niño, al observar las aves, es saber más acerca de ellas, y comunicar agradable
interés a sus propios trabajos, mientras que los lobos lo hacen para poderlos
cazar mejor y comérselos
Cuando los lobos
jóvenes descubren una parvada de avefrías comiendo en el suelo, se arrastran
para acercarse a ellas, pensando que sus cuernos grises se confundirán con la
yerba y que se asemejarán a troncos viejos. Esta caza está llena de emoción, aun
cuando no caen en poder de los lobos sino unas cuantas aves y no de las mejores.
Cuando los patos van a los charcos o estanques, lo lobos aprenden a coger estas
aves tontas, despertando su curiosidad.

Los lobos rondando
Se esconden entre
la yerba, cerca del agua, mientras, uno va y juega rodándose sobre la playa
hasta que los patos lo ven y comienzan a alargar el cuello, asombrados de
aquella cosa extraña que no habían visto antes.
Tímidos y salvajes,
por naturaleza, los patos tienen que echar una mirada a todas aquellas cosas
nuevas que se les presentan.
Ahora, graznando
todos al mismo tiempo, la parvada de patos nada sobre el agua virando juntos o
apartándose hasta que por fin nadan en dirección de la playa, todos con el
cuello muy tieso para ver mejor lo que sucede.
Se acercan cada vez
más hasta que. de repente, un movimiento de la yerba los hace a todos huir
zambulléndose y graznando con un clamor loco.
Pero siempre se
quedan algunos con los lobos, en pago de su curiosidad.
Los lobos usan la barba para palpar su camino
Un verdadero Scout
no solamente se fía de su vista; tiene que usarla tanto de noche como de día,
pero no puede, por supuesto. ver lo mismo en la oscuridad que en la luz; por
tanto, usa otros de sus sentidos: su oído, su olfato o su tacto.
En una ocasión tuve
que guiar una gran partida de soldados durante la noche, en medio de un bosque
oscuro, para atacar al enemigo. Yo había estado allí el día anterior, por lo
cual pude encontrar las huellas de mis pies y seguirlas con el tacto según
avanzábamos,
Todo Scout tiene
que trabajar en la oscuridad, por lo que yo aconsejo a los Lobatos que aprendan
a hacerlo.
Una buena práctica
es levantarse muy de mañana, cuando todavía está oscuro, tomar su baño de tina o
de esponja, lavarse los dientes, hacer su ejercicio, ponerse su ropa y peinarse.
sin encender las luces. Pronto os acostumbraréis a hacerlo con facilidad.
También puede hacer
práctica de caminar con los ojos vendados. Así se aprecia lo útiles que son los
otros sentidos.
Pueden los Lobatos
escuchar y oir; esto les ayudará a conocer la dirección. Oir la campana de la
iglesia vecina, o un silbato que parte de la estación de ferrocarriles, o el
grito de un ave en el campo; todas estas cosas los ayudarán a conocer la
dirección cuando no pueden verla.
También pueden
guiarse por el olfato: saber cuándo pasan frente a un establo, cuándo frente a
una tienda de comestibles, cuándo frente a un patio de hacienda; todos estos
indicios les servirán para guiarse.
El lobo tiene muy buen olfato
Había un viejo guía
árabe en Egipto que estaba totalmente ciego, y sin embargo, conocía muy bien el
camino, aun en el desierto, por el olor de la arena. De cuando en cuando tomaba
un puño de arena y la olía para saber si iba por buen camino, y conocía el olor
de los campamentos en cuanto llegaba a ellos.
En una ocasión, sus
compañeros pensaron jugarle una broma: se proveyeron de un costal de arena en el
último campamento, y cuando llegaron al próximo, le dieron un puñado de ella
diciéndole que lo acaban de recoger. El ciego la olió, puso cara de asombro:
la olió de nuevo, y entonces dijo que estaba sumamente apenado: que seguramente
había cometido un error y los había conducido al campamento de donde habían
salido.
Estuvo hecho una
lástima hasta que le dijeron, riendo, la broma que le habían jugado.
Cuando estábamos en
guerra con los zulúes, hace muchos años, me despertó durante la noche, en el
campamento, un olor especial que había en el aire. Era el olor de un
nativo.
En seguida desperté
a mis compañeros, pero ellos no podian olerlo porque estaban fumando y los
fumadores, generalmente, no tienen el olfato tan bueno como los que no fuman. De
hecho, el fumador no solamente arruina el olfato, sino que el fumar le es un
estorbo para correr pues le impide respirar bien, y con frecuencia le arruina la
vista y la digestión: así, pues, un verdadero Scout no fuma.
Pues bien, yo
seguía sintiendo que el enemigo estaba muy cerca de nosotros y, por tanto,
permanecíamos despiertos. Muy pronto pudimos oir cómo se arrastraban por el
suelo para sorprendemos y cogernos dormidos; pero los sorprendidos por una
descarga nuestra fueron ellos, descarga que los hizo poner pies en
polvorosa.
Ya veis lo útil que
puede ser para vosotros el sentido del olfato. He aquí otro caso que aconteció
en Francia. Un hombre, llevando un paquete. se presentó en casa de un rico
banquero. Como el banquero estaba ausente, su madre recibió el bulto. El
portador declaró que el contenido era de gran valor y pidió se le otorgara
recibo escrito.
Mientras la dama se
inclinaba sobre la mesa para escribir, el hombre le dio una puñalada por la
espalda. Su hermana corrió en su ayuda. y el hombre le dio a ella también otra
puñalada y escapó.
Las damas, que
solamente estaban heridas, asentaron que el hombre había visitado el banco con
anterioridad, con el nombre de Jamet. Jamet fue buscado por todas partes por la
policía, sin éxito.
Sin embargo, el
jefe del Departamento de Detectives recogió el paquete que había sido dejado por
el hombre que solamente contenía una guía vieja de ferrocarril, Mas también
encontró una cosa importante: la guía dejaba escapar un olor muy peculiar a
curtiduría. Hizo la policía investigaciones en las curtidurías de Gentil en los
suburbios de París, y se descubrió que un hombre de alta posición en una de
ellas había estado hacía poco en la casa de un banquero parisiense. Fue
conducido ante las damas, las que lo reconocieron inmediatamente, y no tuvo más
remedio que confesar. Ved cuánto vale notar ciertos pormenores y signos,
juntarlos, y conocer su significado.
Un lobo tiene buenos oídos
En la guerra
Sudafricana, estando yo en un campamento al pie de una montaña, lejos, arriba en
los riscos, oí el grito de alarma de un mandril.
Había centenares de
hombres en el campamento: pero creo que muchos de ellos no oyeron el grito, y si
lo oyeron no le dieron importancia. Pero para un Scout significaba mucho: ¿por
qué de repente se había de alarmar un mono allá arriba en las rocas, y había de
lanzar una llamada de alarma a sus amigos?
Saqué mis gemelos e
inspeccioné con ellos cuidadosamente la montaiia. Pronto descubrí las cabezas de
dos o tres hombres entre las rocas. Como tenían buen cuidado de conservar sus
cuerpos escondidos, advertí que se trataba de espías boeros que nos observaban.
Así, pues, secretamente envié dos grupos de hombres que subieran por el lado
opuesto de la montaña y llegaran por detrás para capturarlos.
Así lo hicieron,
resultando justas mis sospechas: eran Scouts del enemigo que espiaban nuestros
movimientos y que con los suyos habían alarmado a los monos.
Un periódico de arena
Salgamos a dar un
paseo por el campo y veréis qué nos dice. ¡Hola! ¿Qué es esto? El Señorito
Gorrión ha andado en el suelo. ¿Cómo lo sabéis? Pues bien, los pájaros pequeños
que viven en los árboles, generalmente brincan con las dos puntas juntas. Las
aves más grandes o aquellas que viven al ras del suelo, tales como faisanes,
gallinas y pavos reales, caminan generalmente moviendo primero una pata y luego
la otra.
¿Qué es
esto?
 |
Las gallinas
caminan moviendo primero una pata, luego la
otra. |
El Señorito Gorrión
se ha detenido para emprender batalla con un pedazo de pan que se ha robado. En
seguida se ha ido dando brincos llevándoselo en el pico. pues era bastante
grande el pedazo de pan a juzgar por la huella que dejó, y como nada de él ha
quedado sobre la arena y no se lo puede haber comido todo, seguramente se lo ha
llevado consigo.
¡Sí, ved! Allí hay
migajas de pan sobre el piso y algunas huellas que llegan hasta ese
lugar.
Pero ¿qué es lo que
vemos cruzando la huella del gorrión? Nada menos que la del Hermano Conejo que
ha venido a dar un paseo.
Y más lejos, donde
se encuentra el pedazo de pan, se acaban de pronto las huellas del gorrión; éste
ha volado.
¿Sería que lo
espantó el Hermano Conejo? No; sus huellas se hallan sobre las que dejó el
Hermano Conejo, lo que demuestra que él pasó por allí algún tiempo después de
haberlo hecho el Hermano Conejo.
Además de que, si
el pan hubiera sido dejado allí antes de que hubiera venido el Hermano Conejo,
le habría dado un mordisco. ¿No pensáis vosotros lo mismo?
Mas, ¿por qué el
Señorito Gorrión suspendería el paseo, abandonaría su pan y volaría?
Ah! Ya lo veo; hay
algunas otras huellas. ¿Quién es el que camina con tanto cuidado que las huellas
de sus patas traseras casi coinciden con sus delanteras, y que en vez de dejar
las cuatro huellas de sus patas en la arena, sólo deja dos? ¡Ah! ¡Es la Señora
Gata! Ella ha venido también de caza, pues sus huellas se juntan cada vez más
conforme se acerca al Señorito Gorrión, y los movimientos nerviosos de su cola
han barrido aquí y allí la arena.
Las aves que
viven en el agua andan sobre sus grandes patas planas, con los
pulgares hacia adentro, como la vieja Mamá Pata Plana o como el
Pato Amarillo |
 |
¿Pero cuál es el
significado de este cambio tan rápido? Ahora brinca apoyando sus largas patas
traseras, cae, da media vuelta a la derecha para dar un nuevo salto y caminar de
prisa hacia la izquierda. Todo esto Porque el viejo perro Pifas va tras de ella.
Allá se ven las huellas que ha dejado en su carrera, impresas profundamente en
la arena. al arrojar ésta hacia atrás en sus violentos saltos conforme corre
detrás de la gata.
¡Y lo enojado que
se ha puesto el señor Giles, su dueño! Allí se puede ver dónde detuvo su paseo
para llamar a Pifas. ¡Oh! Sí; aquí le arrojó su bastón a Pifas y el pobre perro
lo regresó humildemente a su amo (Como vosotros veis, las huellas del señor
Giles no van hacia donde cayó el bastón y en cambio las del perro sí van allí y
regresan hasta donde se detienen las del señor Giles: además, el bastón ya no
está sobre la arena).
El señor Giles ha
regresado a su casa marcando huellas profundas con su bastón en la arena, con
Pifas corriendo tras él; la Señora Gata se ha retirado con la cola en alto; el
Señorito Gorrión está chirriando a un lado de la chimenea y el Hermano Conejo
está sano y salvo en su seca madriguera.
Así terminan las
noticias del día.

El Viejo Pifas, el perro,
corretea a la Señora Gata.

El Señor Giles está muy
enojado con Pifas.

El pobre Pifas regresa
humlllándose a su amo, trayendo el bastón entre los dientes.
Lectura de una pista
Zadig era un
magnífico Scout persa. Un día, uno de los mejores caballos del rey se escapó y
no lo podían encontrar. Zadig andaba paseando por el bosque cuando algunos de
los sirvientes reales se le acercaron a preguntarle sobre el caballo
desaparecido, y él contestó:
-¿Me preguntáis por
un caballo de raza. tordillo, de metro y medio de altura, con una cola de un
metro de largo, que lleva freno con copas de oro, herraduras de plata y que,
además, es cojo de la pata izquierda delantera?
-Sí, ¿dónde
está?
-No sé. yo no lo he
visto.
Le arrestaron
inmediatamente creyendo que se lo había robado. Por la tarde encontraron al
caballo y lo llevaron a la cuadra real entonces volvieron a interrogar a Zadig,
quien explicó de esta manera.
-En una vereda del
bosque vi unas huellas de herradura de caballo que mostraban que éste iba al
trote cuando pasó por allí; la pata izquierda delantera daba pasos más cortos
que la otra, de lo cual deduje que era cojo; las huellas eran pequeñas, lo que
indica que el caballo es de raza y costoso. Había polvo en los arbustos de ambos
lados de la vereda, sacudido de cuando en cuando por la cola del caballo a uno y
otro lado: la vereda tenía dos metros de ancho, por lo tanto, la cola del
caballo debía tener un metro de largo.
"En un lugar había
un árbol encorvado sobre la vereda que tenía justamente metro y medio de altura.
Al pasar debajo de él el caballo lo había tocado con su lomo dejando en él dos o
tres de sus cerdas; por ellas puede ver que era tordillo y de metro y medio de
altura."
"Al caminar, había
dado con una de sus pezuñas contra una piedra, dejando una astilla de plata en
el lugar. y de igual manera se había detenido más adelante a comer un poco de
pasto junto a una piedra, contra la que se había frotado, dejando algunos granos
de oro, lo que demostraba que llevaba freno con tazas de oro".
De esta manera leen
los Scouts sus informes; pero esto significa que llevan los ojos abiertos y no
permiten que ningún signo, por pequeño que sea, se les escape. Sin embargo,
pasará mucho tiempo antes de que vosotros podáis hacer lo mismo.
Animales domésticos
Os ayudará para el
estudio y conocimiento de los animales y de las aves el tener alguno
domesticado, aunque sea muy pequeño, para comenzar, tal como una rata blanca o
un conejillo de Indias. Pero antes, por supuesto. cosultadlo con vuestras mamás.
Uno de los artículos de la Ley Scout dice: "El Scout ve en la Naturaleza la obra
de Dios: protege a los animales y a las plantas"; por tanto hay que prepararos
para que cuando seáis buenos con los animales que vosotros encontréis. Si tenéis
un animal doméstico, podéis hacer mucho por él; por ejemplo, darle de comer con
puntualidad (a vosotros os gusta que os den de comer a la hora. ¿no es verdad?):
lo conservaréis limpio: también conservaréis limpio el lugar que le tengáis
destinado, y así sucesivamente.

Así como a vosotros, a este
perro le gusta comer también con puntualidad.
Juegos y Prácticas
He aquí algunos
juegos y prácticas para aguzar los sentidos.
EN
EL ESTANQUE.
Los Lobatos forman un círculo alrededor del Viejo
Lobo inmediatamente después de una línea pintada con tiza. Cuando el Viejo
Lobo da la orden: "al estanque". todos brincan hacia dentro. A la orden:
"afuera", todos saltan para fuera. Si cuando se hallan dentro, la orden de
"adentro" se da, ninguno debe moverse de su sitio, así como tampoco debe
moverse si cuando están fuera se da la orden de "afuera". Ordenes tales
como "en el estanque" y "en la orilla", no deberán ser atendidas, pues son
solamente trampas para coger a los descuidados. El Lobato que tenga el
menor número de errores es el que gana.
FULANO DICE
Los Lobatos forman un círculo y el
Viejo Lobo da varias órdenes; pero ninguna deberá ser obedecida si no
principia con la frase Fulano Dice. Los Lobatos pierden una vida por cada
error que cometen.
TOCAR FIERRO.
Durante cualquier juego el Viejo
Lobo dice: "tocar fierro, tocar madera, tocar alguna cosa amarilla", etc.,
y, en seguida, todos los Lobatos corren a hacer lo que se les ha ordenado.
El último en hacerlo pierde un punto.
¿QUÉ
ES? (GUSTO)
Todos los Lobatos que participan en este juego tiene los ojos
vendados; a cada uno se la da a gustar cierto número de sabores bien
conocidos. El Lobato que reconoce el mayor número de éstos, gana. He aquí
un número de cosas con sabores penetrantes: queso pimienta. cebolla,
etc.
¿QUÉ
ES? (OLFATO)
Se coloca cierto número de bolsas de papel en fila, distantes unas
de otras sesenta centímetros; cada una de ellas contiene un artículo
diferente de olor penetrante, tales como café, tabaco, cebollas, queso,
hojas de rosas y cáscaras de naranja. Se dan cinco segundos a cada Lobato
para que las huela. Cuando las ha olido todas escribe en un papel lo que
cada una contiene en el orden en que se las han presentado o dice en
secreto al Viejo Lobo.
¿QUÉ
ES? (TACTO)
Todos los Lobatos que participan en este juego tienen los ojos
vendados y se les da a tocar un cierto número de sacos de papel que
contengan objetos tales como arroz, trozos de azúcar y té,
etc. El Lobato que nombra correctamente el mayor número de objetos,
gana.
¿QUÉ
ES? (OÍDO).
Los Lobatos que
tengan parte en este juego deberán estar con los ojos vendados. El Viejo
Lobo hace cierto número de ruidos tales como poner aire a una llanta de
bicicleta, cerrar una puerta, arrastrar una silla sobre el suelo. El
Lobato que adivina el mayor número, gana.
ACECHAR.
Un Lobato se sienta, con los ojos
vendados, en el centro de un círculo. A una señal convenida del Viejo
Lobo, un Lobato de los del círculo se acerca cautelosamente y toca al que
está en el centro. Si tiene buen éxito, substituye al que está allí. Si el
Lobato que está en el centro lo oye y lo señala antes de ser tocado tiene
éste que regresar a su lugar en el círculo.
DIBUJAR UNA CARA.
Los jugadores se formarán en un
círculo. El Viejo Lobo dibuja una cara en el aire: Primero señala el
contorno (un círculo en el sentido de las manecillas de un reloj; después
el ojo derecho; luego el izquierdo; en seguida. la nariz, hacia el índice
de la mano izquierda. Los Lobatos tratan de hacer lo mismo en el orden
dicho y de igual manera.
TRAMPAS DE OBSERVACIONES.
Llevad a la Manada a dar
un paseo por la ciudad o por el campo, fijando de antemano determinado
número de puntos para ciertos objetos que podrán ver en el camino. Por
ejemplo:
Un
caballo cojo...................... una
urraca............................ una parvada de siete
aves....... una piedra en forma de huevo... un
roble................................ un vestido
rojo....................... una
estatua........................... |
8
puntos; 3 puntos; 3 puntos; 3 puntos; 1 punto; 1
punto; 1 punto; |
Y así
sucesivamente.
Cada
muchacho, al ver un objeto de los que han sido marcados, lo anuncia al
Viejo Lobo en secreto y éste le marca los puntos junto a su nombre.
Al final del
paseo se suman los puntos y se ve quién ha
ganado.
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