NO TE ESCONDAS
O tendrás que
vivir en un agujero
Ya te he contado
cómo los avestruces caminan muy orgullosos y sintiéndose superiores a otras
aves. Pero como dijo la Sra. Oryx, lo único que logran es verse ridículas y eso
exactamente es lo que las otras aves piensan de ellas.
Por eso, cuando el
jefe avestruz dijo que sería el rey de los pájaros, éstos respondieron que nadie
podía proclamarse su rey. El rey debía ser elegido y acordaron que el ave que
pudiera volar más alto sería el rey. Así que empezaron a tener competencias de
vuelo y el avestruz, que quería ser rey, no podía volar más alto de lo que podía
saltar, y eso no es mucho. Nuestro feo amigo, el Sr. Buitre se elevó al cielo
sintiéndose seguro de que nadie podría subir tan alto como él, y se fue arriba,
por encima de los alondras y de otros pájaros que vuelan alto.
Y cuando no pudo
ver a otros pájaros gritó "Hurra, he volado lo más alto".
No es cierto, gritó
la vocecita de un pajarito africano llamado "Ting-Ticky".
El buitre no
conocía a Ting-Ticky y éste se había colgado de una pluma debajo de su ala
cuando emprendió el vuelo y así fue llevado cuando el buitre ascendió. Ahora que
el buitre había alcanzado las alturas, Ting-Ticky salió y voló sobre él diciendo
"soy el rey de los pájaros". "No lo creas" grito el buitre elevándose más, sin
darse cuenta que Ting-Ticky se había posado en su espalda. Cuando llegó más alto
y dejó de ascender, salió Ting-Ticky de nuevo y voló uno o dos pies más arriba
de él gritando: "soy el rey de los pájaros".
Esto sucedió 2 ó 3
veces hasta que el buitre se cansó tanto que no pudo elevarse más y se
rindió.
Así Ting-Ticky
proclamó que él había roto el récord de volar alto y debía ser "El Rey de los
Pájaros".
Pero el buitre
estaba tan enojado con él que decidió matarlo. Ting-Ticky se enteró e hizo su
palacio en una madriguera de conejo.
No se puede regir
mucho desde una madriguera, Ting-Ticky aprendió pronto que su presunción de
haber ganado el récord del alto vuelo no tuvo mucho efecto en los otros pájaros,
porque ellos sabían que no había volado con su esfuerzo sino que había subido
como ese avión, "Mercurio" que va encima de otro avión para ser elevado al aire.
Así que se rieron de sus bravatas y cuando trataba de dar órdenes desde su
agujero, se burlaban de él.
Como rey fue un
fracaso.
Yo he conocido a
varios Ting-Tickies entre muchachos, no entre Scouts POR SUPUESTO: muchachos que
fanfarroneaban o hablaban mucho de lo buenos que eran en el cricket, corriendo o
nadando. Eran lo máximo según su opinión. Y todo estaba bien hasta que alguien
los ponía a prueba y los ponía en evidencia como fanfarrones. Se hubieran
alegrado de tener un agujero de conejo como refugio de las risas y bromas de los
compañeros a los que trataron de engañar.
Nunca presumas de
tus poderes maravillosos. Si los tienes no necesitas decirlo, otros se darán
cuenta por sí mismos.