Latinoamérica saqueada

Emilio Tesoro

Hace mas de cinco siglos comenzó la colonización de Latinoamérica y todavía continúa. España, primero, otras naciones europeas, después. Y de cuya continuación se encarga Norteamérica en los tiempos presentes.

Los españoles emplearon la metodología precisa que se empleaban en aquellos tiempos para salir triunfantes en su obra colonizadora. Aquellos tercios o cuadros militares que intervinieron en la invasión, podríamos decir sin rubor alguno los conformaban criminales, muchos de ellos indultados de ir "a galeras" si escogían inscribirse para venir a combatir en las Indias.

El emblema o símbolo de estas tropas de choque era el escudo de España. Entonces reinaban los Reyes Católicos que recientemente habían expulsado del país a los judíos y Árabes de cuya equivocación todavía se resiente España. Se imponían dos símbolos: la cruz y la espada. La cruz representando nefasta y perversamente a la religión católica, religión representativa de la mayoría de los españoles antes, durante y después del reinado de los Reyes Católicos. Este oscurantismo irracionalmente introducido en las mentes del pueblo español fue posteriormente el mayor obstáculo para que no disfrutaran de un régimen de libertad. La otra parte emblemática de los invasores era la espada como símbolo de dominación, poder, esclavitud y muerte.

Guerras contra los indios, muchas veces hasta su exterminio. Torturas, persecuciones, hambre y muertes forman parte de la tragedia infernal que los invasores españoles trajeron a esta "tierra de gracia". No pudiendo pasar por alto como una de las grandes violencias injustas que realizaron como fue la violación de millares de mujeres indias para satisfacer sus instintos sexuales.

Las inmensas riquezas de Latinoamérica fueron saqueadas por los españoles, secundados, tiempos después, por otros europeos. Para ser continuado este saqueo en nuestros días por Norteamérica. Las riquezas que robaron los españoles en su mayor parte fueron a parar a las arcas del tesoro español, menos las que quedaron en manos de los que comandaban aquellos tercios de militares invasores.

Las inmensas riquezas, mal obtenidas, fueron malgastadas. El Tesoro Español en aquella época, pronto se quedó exhausto, debido a los gastos extraordinarios que tenia que hacer España por estar en guerra contra algunos países europeos. España se desangraba en los campos de batalla, humanamente hablando, y se arruinaba su economía, no sirviéndole para nada, las grandes riquezas que obtuvo por la fuerza y por el engaño de las grandes poblaciones indias.

Allí estaba, siempre presente, el símbolo de la espada para imponer y para matar.

Latinoamérica está viviendo un largo periodo de su historia donde actúa criminalmente el Verdugo Vigilante de Norteamérica. No solamente no han dejado crecer nuestras economias, sino que tampoco social y políticamente nos han dejado libertad para nuestro desenvolvimiento social y cultural. El imperialismo yanqui destruyó toda iniciativa de contenido socialista que los gobiernos liberales tímidamente ensayaron a través de este siglo, no teniendo en cuenta para nada el costo de sacrificio que significaba para los latinoamericanos. Ríos de sangre, torturas sin cuento, ruinas de las economías autóctonas fue el precio de esta política norteamericana que solamente, en primer lugar, se favorecían ellos como nación y las grandes oligarquías capitalistas y militares que han gobernado y gobiernan en estos países de Latinoamérica. Centro America, Argentina, Chile, Brasil etc. etc. son testigos elocuentes de esta criminal política de saqueo seguida por Norteamérica. El hambre, la miseria, la escasez, que en el presente padece todo el continente se le debe en gran parte al coloso del Norte.

Ahora los tiempos han cambiado ,ya no precisan mandar a "sus marinos" para poner y quitar gobiernos y perpetuar las oligarquías de turno, ni para defender sus intereses en estas naciones Latinoamericanas. Después de empobrecerlas ahora se sacan de la manga: "la globalización de la economía mundial". Cómo si el atraso económico, social, político y cultural que padecemos en Latinoamérica, en gran parte debido a las grandes políticas impuestas por ellos se pudiera equilibrar o alcanzar en unos días para poder competir con ellos -y el resto del mundo industrializado- para que rijan las leyes que los organismos internacionales nos quieren imponer de la noche a la mañana sobre la globalización económica mundial. Esta nueva colonización será mucho mas fuerte y larga de la que ya hemos sufridos en otros tiempos. Esta redundará en beneficio del capitalismo mundial y las capas burguesas-capitalistas de estas naciones nuevamente invadidas.

Las multinacionales tienen las puertas abiertas en estos países latinoamericanos para hacer y deshacer a su antojo y capricho según marquen sus intereses en perjuicio de los grandes intereses de estos pueblos.

A esta dominación sin escrúpulos alguno que dirigen los destinos del mundo, a esta globalización del hambre (en el Tercer Mundo aumentará el hambre debido a la globalización) se le llama democracia.

¿Democracia de quién? ¿Democracia para qué? Distancias abismales debe de haber entre los conceptos de democracia que tenga un capitalista latinoamericano del que tenga un trabajador ganando, cuando lo gana, un sueldo de hambre y viviendo en un rancho dónde toda incomodidad tiene su asiento.