Una licenciatura en Arte
El Espacio Cultural LibertarioCRA
Por primera vez hemos visto, expuesto por alguien muy próximo a El Libertario, un trabajo como tesis para optar a una licenciatura que culminase sus estudios. La bachiller Mercedes O. Medina, de la Escuela de Arte, en vez de investigar sobre cualquiera de los diversos artistas venezolanos o universales, ha presentado una tesis: "Espacio Cultural Libertario, un acercamiento a la expresión juvenil urbana en Venezuela durante las décadas 1980-1990". No queremos desvirtuar nada de su exposición, nos limitamos a exponer algunos (no todos) de los conceptos que dicha tesis contiene, sin retoques ni añadiduras.
Si otros tuviesen voces, la historia seria otra. Si, es la historia cimentada por quienes dominan, la que todos conocen, ¿Y la otra? Más bien, qué es de las otras. Siempre se ha sabido de los otros protagonistas, y a estas alturas del milenio agonizante aún más de la insurrección de los "sin voces" en sus luchas incesantes, y a quienes han tratado de cesar. Son muchas las historias contadas y por contar.
En el campo temporal correspondiente a las décadas ochenta y noventa comienza a germinar en el país un tipo de expresiones urbanas juveniles, quienes han tenido como centro la ciudad, y cuyos antecedentes se encuentran en el movimiento anarquista mundial. Esta es la del ECL, conformado por varios grupos destinados a actividades comunicacionales. Su origen se remonta a las organizaciones anarquistas de Europa y América Latina. El pensamiento anarquista ha sido propulsor de la libertad en todos los terrenos de la sociedad (político, u económico, social, etc.), haciendo hincapié en las relaciones humanas y en la personalidad del individuo.
En su introducción al pensamiento complejo, E. Morin, hace una reflexión en relación con el principio de complejidad, mediante el cual no pretende brindar una "verdad" o una respuesta acabada, porque el hombre en si es un cumulo de preocupaciones e interrogantes, difícilmente aprehensible mediante una ley o teoría determinada.
Cuando llegamos a la vida el mundo está ahí, te integras, eres uno más en ese mundo:
"de ahí que, en la acción de conquista, no sea posible presentar el mundo como problema, sino por el contrario, como algo dado, como algo estático, al cual los hombres se deben ajustar". (Freire, Pedagogía del Oprimido).
Y Mercedes, nos dice: Este papel de las instituciones, introyectar una serie de valores que el individuo acate y reproduzca de manera acrítica, sin analizar ni cuestionar. Cuando el hombre supera la "falsa conciencia", logra que el sistema le impone o le hace ver, esa percepción y cosmovisión que le son inculcadas; cuando analiza su realidad, se puede hablar de conciencia crítica o acción proxística. La praxis es la práctica de la conciencia crítica.
Un "estado puro" quiere decir que el hombre no se acomoda únicamente a un mundo dado, sino que puede experimentar en el mismo mundo aunque lo contradiga; pues sin las contradicciones, no hay marcha de las sociedades. Uno de los aportes de la acción cultural radica en la creatividad, como el ámbito de la problematización, la utopía, la búsqueda de posibilidades y posturas frente al mundo, la transformación. La acción cultural creadora plantea como reto precisamente la creación y la libertad, porque ellas permiten la autorrealización del hombre, mediante el camino que él elija o construya.
Cuando los medios hablan de "integración", "tiempo libre", "libertad de expresión", y otros términos, son categorías. utilizadas para supuestos fines específicos, que se encaminan hacia otro: el de afianzar y reproducir al sistema. El caso de muchos países, entre ellos Venezuela, impera el capitalismo, y por lo tanto los medios están al servicio de éste La industria cultural, como la compleja red massmediática, es el punto de apoyo del capitalismo, cuya misión es reproducir los valores que el sistema requiere, y para ello los medios trabajan en pro del consumo masivo y de la alienación. "Los medios de comunicación funcionan como verdaderos estimuladores y condicionadores, al transmitir un cúmulo de propagandas y servirle de vehículo para la venta de mercancías. Son los suministradores de la ideología, creadores de la psique humana de todo un sistema de procedimiento de representaciones y de valores que tienden a preservar y sostener al sistema capitalista.
El discurso es la base de las ideologías y especialmente de todo el sistema dominante. En las sociedades capitalistas los medios se encargan de llevar los mensajes a todos los rincones mediante sus distintos canales (televisión, radio, prensa, informática, etc), son los que expanden el mensaje del poder dominante hacia las masas. Para que el sistema pueda mantenerse deben los medios alienar a la población.
El hombre se aliena cuando no problematiza, cuando no comprende la relación de dominación donde está inmerso y a la vez participando, y es en esta situación cuando el hombre se despersonaliza, inicia su autodestrucción como ser humano, ya que vive, disfruta y asume una realidad ficticia. Los medios no pretenden lograr la libertad de expresión, ni tampoco concientizar, permitir el acceso, la participación y la educación, sino dirigir la vida humana y por ende el rumbo de la sociedad. Los medios manipulan a favor del orden, lo establecido y de su propio beneficio. Los medios son las armas más eficaces de control y reproducción de la cultura institucional y dominante
En el capítulo 3º Anarquismo y libertad, nos dirá: La anarquía, se configura sin otra adjetivación que el humanismo, la libertad y la dignidad del hombre, como anhelo insurgente de la intimidad de su naturaleza vital. Se suele emplear el término anarquía como sinónimo de desorden, en realidad significa ausencia de Estado, a favor de un orden promovido desde las bases, más no impuesto, porque en lo contrario se traduce en la represión de unos hombres sobre otros. Este pensamiento se erige sobre fundamentos filosóficos: ética, dignidad, justicia., igualdad, libertad, todos ellos encausados, hacia un sólo fin: la autorrealización de los hombres. El gobierno no es otra cosa que el dominio de unos hombres sobre otros, y para la existencia de un nuevo orden no necesario.
La libertad sólo se entiende como "libertad solidaria". Sólo somos libres en la medida en que todos los que nos rodean también sean libres, porque mi libertad para ser tal, necesita ser reconocida y respetada por otros seres libres. Mientras siga habiendo esclavos, explotadores y oprimidos, yo seré un opresor o un oprimido.
La libertad no se logra individualmente para transformar las relaciones dominantes de poder, ella requiere de la presencia de factores necesarios: diálogo, acuerdo, comprensión, solidaridad, respeto. Por eso los anarquistas cuestionan la concepción de libre albedrío, porque ellos no proponen una sociedad sin principios, ya que no seria una sociedad como tal, sino un conjunto de personas haciendo lo que quieren, donde no hay derechos ni respeto. Los anarquistas abogan por una sociedad justa, donde los derechos humanos sean privilegios de todos; donde sean combatido el autoritarismo, la violencia, la discriminación e injusticia. De allí la propuesta de la desaparición del Estado. Los anarquistas creen que mientras exista una organización tradicional regida por el "Ogro filantrópico", no existirá ningún tipo de derecho, especialmente el de la libertad.
La libertad se relaciona con las necesidades humanas. El hombre no es un ser que pueda vivir exclusivamente para las necesidades materiales: comer, dormir, beber... El anarquismo trasciende su concepción al ver al hombre como un ser complejo, con distintas facultades que necesita explorar y develar. El anarquismo no pretende ninguna verdad, sino que el individuo descubra, contradiga, exprese y sobre todo sea él mismo. Rebeldía es insumisión, centrarse en la realidad, en buscarse, tomar conciencia, cuestionar los valores dominantes, ser inconforme. El espíritu de sumisión anula al hombre en tanto sujeto-protagonista de historia y devenir, ciega libertad, hay una rebeldía profunda frente a todo lo que suponga una imposición, contra toda autoridad que pretenda erigirse dueña y señora de los demás.
El anarquismo postula un nuevo Orden, sin la presencia de autoritarismos que no se consideran necesarios en las relaciones humanas, un orden basado en el entendimiento y consentimiento comunitario, en la comunicación abierta y horizontal. Por eso el camino y meta para el cambio es la autogestión.
La autogestión tiene su origen en el principio de la igualdad, en la idea de la no existencia de "dominantes" y "dominados". Para los anarquistas no hay otra vía para el cambio que no sea la autogestión, porque ésta conduce a otro factor, la autonomía.
La autogestión, para los teóricos anarquistas, fue una propuesta que nació en el seno sindicalista, la cual debía extenderse a la sociedad. "Una sociedad en la que el uso racional y consciente de los recursos permitirían producir bienes y riquezas para todos".
Mucho más podría escudriñarse entre las páginas de esta tesis de Mercedes O. Medina, pero el espacio marca el fin, digno trabajo para ser conocido por todos.