Mariana

En términos generales los movimientos políticos dentro y fuera de Venezuela han renunciado a las ideologías. Sin embargo el chavismo se reivindica a sí mismo como una revolución que es movida por ideas que se asocian con intereses populares, con participación, profundizar la democracia y otros discursos por el estilo. La izquierda amorfa, el "socialismo" del MAS, el Partido Comunista, izquierdistas de la vieja guardia, se unen en el chavismo a manifestaciones antigringas, apoyo más que disimulado a la guerrilla colombiana y loas a Fidel, por lo que pareciera que estamos frente a un gobierno izquierdoso.

Pero la cosa no parece tan clara, porque es un movimiento muy militarizado y si algo no es izquierdoso es un militar latinoamericano. A su vez, la defensa de la OPEP y de su estrategia de mercado lo hace muy liberal, también es tradicionalmente capitalista cuando defiende a banqueros corruptos y protege a los inversores foráneos de la electricidad, y no se duda en ocasionar un desastre ecológico en todas las formas de vida, incluyendo la humana, con un tendido eléctrico transnacional, se monopolizan las instituciones, se niega la participación popular más allá de agitar banderitas en los desfiles, se coarta la libertad sindical y hay una permanente agresión y descalificación, todavía no abiertamente represiva, contra quienes opinan distinto a las cúpulas del poder.

Buscando aclarar esta confusión, la autora de este artículo, que no es politóloga, buscó un libro para coger luces y encontró en un manual muy popular, que publica FCE, llamado "Introducción a las doctrinas político-económicas", de Walter Montenegro, publicado por primera vez en 1956. Allí, del capítulo dedicado al Fascismo, tomó notas características extraídas de textos del mismo líder italiano Benito Mussolini, que están entre comillas en lo que sigue.

"La inmutable, benéfica y provechosa desigualdad de clases": Esto es algo que el Comandante no ha dejado de apuntar en sus discursos, que demagógicamente promueven el enfrentamiento entre clases, pero no para disolver las desigualdades sino solamente para provocar el enfrentamiento.

"La predestinación de los mejores a manejar los asuntos de la colectividad": Desde antes de su intento de golpe de Estado, podemos apreciar que el comandante y su gente se han considerado una élite autodesignada, destinada al manejo de los asuntos de todos y que todavía lamenta haber tenido que ganar por elecciones. Basta recordar que cuando acusaron a Grüber Odremán por la desaparición de 23 mil millones, no dijo que fuera verdad o mentira sino que era una ofensa al uniforme, señalando que el vestuario militar distingue a los elegidos, a quienes nadie puede atreverse a criticar porque dominan por derecho propio (¡Debe ser por este culto irracional a la indumentaria castrense que el Ministro de Defensa aclaró hace poco que los generales no usan pantaletas!).

"La absoluta e indiscutible supremacía del Estado, encarnado en las élites, sobre el individuo": Las continuas invocaciones a la Patria, identificada con el Estado, y la progresiva eliminación o descalificación de lo no estatal, que pasa a ser lo "anti-patriótico", señalan que tal idea está en la mente de nuestros dirigentes. Recordemos que a los alcaldes les dijo que eran como un equipo de beisbol donde Chávez era el manager. Como decía Mussolini, todo en el Estado, nada fuera del Estado, nada contra el Estado.

"Los principios inviolables de la disciplina, la autoridad y la jerarquía": Eso está clarísimo porque resulta de la ingerencia de los militares en todos los ámbitos de la vida civil y hoy cualquiera de esos jefezuelos de cepa castrense se siente un "Chávez-light". Basta mencionar el conflicto que ocurrió en la Cancillería cuando el vice-canciller era un militar de más baja graduación que un Jefe de Sección y por tanto no podía darle órdenes, aunque fuese su subalterno en el Ministerio. El conflicto sólo se resolvió cuando el Presidente designó a un uniformado con má rango para vice-ministro. ¿No es ridículo?

"La misión de sacrificio y heroísmo de las élites": Esto lo repite Chávez cada discurso, que no duerme por los niños de la calle, que va a vender La Casona, que él es un soldado más en la marcha de la revolución, que no busca beneficio sino la gesta heroica de llevar adelante los ideales de Bolívar, etc. Lo dice pero no lo hace, porque a estas alturas ya va poniendo en peligro los records de turismo presidencial de C.A. Pérez.

"La actitud de renunciamiento al bienestar por vivir peligrosamente": Basta recordar todos los supuestos atentados que sufrió Chávez, que Fidel le dice que se cuide porque es insustituible, pero el comandante se niega y arriesga su vida mezclándose valientemente con la gente. (No fue tan valiente cuando le tocó pelear de verdad el 4F, pero en fin...).

"La supeditación de los valores materiales a los del espíritu": Esto se ve en la justificación de traer médicos cubanos porque los de aquí quieren cobrar el salario que les corresponde, la prohibición de hacer huelgas porque esas pretensiones materiales van contra la revolución, molestan al presidente y nos hacen pasar vergüenza delante de los árabes, que los maestros no pueden hacer huelga porque se deben a los niños (aunque les deban a los del mercado), y la insuperable capacidad gubernamental de distribuir miseria.

"El fascismo es una concepción religiosa en la cual aparece el hombre en relación con una ley superior, con una voluntad que trasciende lo individual y lo hace miembro de una sociedad espiritual": Si escuchamos las continuaciones invocaciones a Dios por parte de Chávez, un dios que no es católico, ni protestante, ni está claro quién es, y que Bolívar es casi una deidad a la que Chávez deja una silla vacía en las comidas para que su espíritu venga a sentarse, y el bolivarianismo es concebido como una religión, entonces suena como que el chavismo va camino de convertirse en religión y Chávez competirá con José Gregorio Hernández, encarnando ese espíritu superior ante el que todos debemos doblegarnos.

"El máximo de libertad coincide con el máximo de fuerza del Estado": De acuerdo a las declaraciones de todos los chavistas, estamos en vías a ampliar nuestras libertades, pero resulta que lo que vemos es un Estado cada vez más poderoso. En el fascismo estas dos cosas, que parecen contradictorias, son lo mismo.

Si los fascistas son aquella minoría predestinada cuya misión es regir el destino de la nación, el Estado es el instrumento político, institucional y administrativo para cumplir ese destino. El uso que hace Chávez del Estado y, particularmente de sus dineros y recursos, sin planes, sin dar cuenta a nadie, sin saber dónde están esos 8 mil millones de dólares que nadie sabe cuándo y dónde desaparecieron el año 2000, muestra que ésta es la forma en que el chavismo concibe la función del Estado.

El fascismo surgió como un movimiento oportunista y circunstancial, sin ideología definida, cuya doctrina fue concebida y modelada desde arriba. Esto sucede con Chávez que llegó al poder, hizo una constitución, pero después fue dando forma a su proyecto y ahora esa constitución no le sirve y por eso la viola a cada momento. Por eso mismo, no se puede discutir quienes son los mejores porque, formulada la ideología desde arriba, los mejores son lógicamente los que ya están allí, que llegaron allí por un designio de la naturaleza, de Dios o del ánima de Bolívar, ya que son los más aptos en la lucha por la supervivencia. Si en algún momento fueron derrotados, lo fueron "por ahora".

"Toda fuerza es fuerza moral, porque siempre es una expresión de voluntad y su eficacia no puede ser otra que la de obtener el apoyo de un hombre y persuadirlo a ponerse de acuerdo con esa fuerza": Es la justificación del predestinado, que sólo puede someterse a esa fuerza moral, tal como Chávez ha dicho claramente que sucede con él.

Tras esa lectura, aclaro un poco las ideas. Todo parece señalar que padecemos un chavismo que transita la ruta para convertirse en un fascismo del siglo XXI. Y Ud. amigo lector - como corresponde a quien se interesa en el anarquismo - no tiene porque creerme a ciegas ya que la obra de Montenegro se consigue en las bibliotecas, o muy económica en cualquier librería o remate de textos usados, y allí puede encontrar más coincidencias que las aquí citadas. ¡Pobres los viejos izquierdistas convertidos al chavismo, vivir marxistas para morir fascistas! Mejor es vivir siempre empujando por abrir la puerta de la libertad con igualdad y en solidaridad, como hacemos desde el anarquismo.