Cre@ción


Éste es un espacio para regocijarnos en el placer de las letras, los sonidos, las metáforas, las palabras y las miles de locuras que nos hacen sentir la mismita vida de otra manera. Aquí podemos hacernos amorosamente visibles con rollitos creativos como poesía, canciones, relatos, cuentos y todo lo que tenga que ver con la siempre creativa sensibilidad


MARÍA ES UN PUÑADO DE LETRAS

Josep Sacks

A María le traigo este puñado de letras para decirle que mi ropa mis lentes mis libros mis discos mis ojos mi piel y el último compacto de Joni Mitchel están totalmente impregnados de ella.

A María le traigo este puñado de letras para decirle que el sabor olor tacto y las imágenes y la música incrustadas en el cora, se sienten más más curado bien suave suevecito y ¡ay qué bonito!, cuando a ella la siento la palpo la miro la oigo danzar y te lo juro, la saboreo toda toditita siempre queriendo tanto a la queriditanta María María María...

A María le traigo este puñado de letras para decirle que la vida los sueños el amor la palabra y esos rollitos intelectualeros que veces no sirven para nada, están allí entre su risa sus manos su voz su voz su voz.

A María le traigo este puñado de letras para decirle que a menudo, pero muy a menudo, le sueño le hablo le cuento le llamo le quiero le amo mucho mucho demasiado, pues ella aunque no lo quiera es una especie de quincena amorosa que me llena este corazón/bolsillo de locas, pero muy locas mariposas que revolotean adentro mío mío mío muy mío.

A María le traigo este puñado de letras para decirle que el Universo Mundo Planeta Tierra está en su cuerpo que es punto de llegada/partida para poder andar correr saltar bailar del gusto de verle caminar tan rápido dando brinquitos aquí acá hasta acá pegadita siempre a mis brazos que abrazan a ese Punto Planeta Universo Tierra que es María.

A María le taigo este puñado de letras para decirle que ella me hace escribir este puñado de letras que hablan de mi de ti de lo que estamos hechos los compas compas de amores, sabores imágenes y sonidos que nos nos juntan nos conjugan nos comparten nos hacen mirarnos con la ternura de un niño que mira un aparador repleto de dulces .

A María, para reinventarla en cada chispazo de luz que inventa y reinventa mi mundo, le traigo este pequeño, pequeñito puñado de palabra para decirle María María María...

Capítulo I, En orden aleatorio.

Foto: El chango (UIA, León)


Título: Fatalidad

La poesía en el centro, como en el centro el tiempo,

es fuego puro, oxigeno lunar que en círculos nos condena a señalar lo absurdo,

a escribir lo último, a decir lo nuestro,

sin rodeos ni cantos, hasta hundirnos.  

-El Pequeño Solín


Si al hablar, manchamos, si al callar, opacámos, ¿Cómo cantar sin cubrir y como cavilar sin orcurecer?  . El Pequeño Solín

BUTANO BAJO PRESIÓN

Por Francisco Loza" <joyonegro@hotmail.com> 

*No se deje al alcance de los niños* *Mantengase en un lugar seco y alejado de las llamas* *Altamente flameable*


Siento que te perdí por abrir celocías

Mientras el aire refrescaba todo ese gas que nos estaba intoxicando

Querias prender fuego

Previniendo una perdida total de nuestro lugar

puse esta alarma de autoexplusión.

Querias llenar la tinade liquido inflamable desangrando tu maligno manjar

Ahora creo que no te evaporaste sino que escapaste poco a poco por la valvula de otra piel

Mi carne irritada es mas sensible pero no es fácil hacer fuego a pedernal

cuando el aire es ventisca sobre leña humeda de abandonos

Parese que te perdi por abrir selocías

Han visto salir el humo de nuestro lugar cuando te dejé por fin en llamas

Cuando sali a buscar combustible para alimentarnos


Imagen difusa

Por El Pequeño Solín

La ciudad deshecha, perfumada por la destrucción, se levanta en la falda de una noche ciega, aturdida, noche en donde cantan, del mar al desierto, todos los silencios humanos, todos los fuegos y torbellinos, que besando las manos transaparentes de la miseria, nos recuerdan uno a uno los plantetas que giran en nuestras venas.  

La ciuda deshecha, contaminada por el miedo, acribillada por su negrura, incrustada en el contra flujo del tiempo y del espacio, se arremolina intoxicando esperanzas e inciendiando cinismos, mientras la transitamos.  

La ciudad deshecha, tatuada por la vitalidad y la sinrazon, oscilando entre la fragmentación y el laberinto, se erige carne viva en el jardin del cuerpo, sí, como una flor maldita que crece hacia abajo                                              hasta inundar de realidad la imaginación