Los de Luis Fernámndez salieron a por todas
El Athletic fue dueño y señor del campo y salió a por todas, aunque no en tromba como en otras ocasiones. Los de Luis Fernández no dejaban jugar el balón a los madridistas, y se adueñaron del centro del campo. La fuerte presión en esa zona dejaba sin ideas a los jugadores de Toshack, que eran incapaces de salir con el balón jugado. El Athletic, en cambio, se acercaba con rapidez y mucho peligro al area del debutante Iker Casillas.
La primera ocasión clara fue para el Athletic. En el minuto cinco, Guerrero metió un gran pase en profundidad para Etxeberria que éste no supo aprovechar ante la salida de Casillas. Los de Luis Fernández seguían atacando y al final llegó el justo premio al ímpetu rojiblanco. Una falta cometida sobre Joseba Etxeberria a cinco metros del area, fue extraordinariamente aprovechada por Julen Guerrero que colocó el balón junto al poste izquierdo de Casillas, consiguiendo así su primer gol de la temporada.

Mcmanaman brilló en el gol del 1-1
El gol en contra espoleó al conjunto blanco, y solo cuatro minutos más tarde, el inglés Macmanaman realizó una preciosa jugada desde el centro del campo, que culminó tras hacer una pared con Raul, al sobrepasar con maestría la salida de Imanol Etxebarria. Tras este gol el partido entró en una fase de tanteo por ambos equipos. En el minuto 28 llegó una de las jugadas claves del partido, al ser expulsado Michel Salgado tras ver la segunda tarjeta amarilla por una entrada a Joseba Etxeberria.

Un error de Geremi que cuesta muy caro
Al Athletic le costó asimilar su superioridad numérica, hasta que en el minuto 40, Larrazabal se internó por la banda izquierda, y su centro lo desvió Geremi introduciendo el balón en las redes blancas y adelantando en el marcador al Athletic en un minuto de los llamados psicológicos. En la reanudación el panorama del partido cambió totalmente. El Athletic no supo aprovechar la superioridad numérica con la que contaba, e incluso el Madrid se vino arriba al ver que los rojiblancos no acertaban en su juego. Los jugadores rojiblancos cedían espacios a un Madrid que poco a poco se acercaba con más peligro al área de Imanol.

Y entró Anelka...
La entrada de Anelka suspuso un revulsivo para el ataque madridista, mientras el Athletic se mostraba demasiado conformista y no supo sentenciar un encuentro que tuvo en sus manos. Precisamanete una gran jugada del francés que posteriormente remató a placer Guti supuso el que a la postre sería el definitvo empate a dos. Tras el empate los de Luis Fernández intentaron adelantar sus lineas en busca de la victoria, pero ya era demasiado tarde, porque jugaban más con el corazón que con la cabeza.
Urrutia tuvo dos claras ocasiones para subir al marcador el tercer gol del Athletic, pero en ambas ocasiones Iker Casillas estuvo perfecto y libró a su equipo de una derrota que no hubiera sido justa, pues los hombres de Toshack fueron netamente superiores al Athletic en la segunda mitad, a pesar de jugar con uno menos.

Justo empate
Empate justo por lo tanto, pues cada equipo dominó en cada parte. Un Athletic que pudo sentenciar no supo hacerlo y el Real Madrid no desaprovechó sus ocasiones para hacerse con un valioso punto en un campo muy difícil.