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¡Proletarios de todos los
países, uníos! ESTA COMENZANDO EL SELLAMIENTO DE LA UNIDAD
DEL PARTIDO SOBRE TOMA DE POSICIÓN Esta reunión es
importante por la trascendencia que tiene en el futuro partidario,
especialmente demuestra que está comenzando el sellamiento
de la unidad del Partido. Al c. X le dijimos lo
habíamos llamado para tratar algunas cuestiones relacionadas a la lucha
interna; confirmó la información que teníamos sobre su posición en contra de
¡Luchar por un Acuerdo de Paz y Sentar Bases para el II Congreso! Y nos dijo
sus razones eran el creer era una "patraña" de la reacción, el
imperialismo y el grupillo negro que tenía una línea oportunista de derecha y
estaba fuera del Partido, idea difundida en la "Declaración" del
7/X/93 y otras reuniones realizadas del Comité Central. Informó que a ellos
les dijeron que el Presidente Gonzalo los había "forjado para todo"
y que el c. Feliciano encabezaba y dirigía "justa y correctamente"
el Partido; que los problemas que tenían era producto de una
"inflexión" superable, más, que se les decía que pronto el
Presidente Gonzalo iba a estar con ellos otra vez. También dijo que al llegar
a la Luminosa Trinchera de Combate Canto Grande encontró que se debatía si
terminar o proseguir, que se hablaba de guerra cruenta y guerra incruenta y
ya no de guerra justa o guerra injusta; y lo más grave es que se decía que
había dos partidos. Terminó su informe
diciendo que había visto el vídeo de la entrevista a la c. Nancy, del cual
opinó "esa será su opinión", y le pareció extraño porqué a ella la
entrevistan y no al Presidente Gonzalo. 1) Le planteamos un informe luego del
cual debía decidir y definir. El informe comprendió: El camino seguido y
porqué lo consideramos correcto. En síntesis, la Nueva
Gran Decisión y Definición es justa y correcta porque se desprende de una
Nueva Gran Estrategia marxista-leninista-maoísta, pensamiento Gonzalo para
que el Partido pase a desenvolverse en una IV Etapa, en las nuevas
condiciones de la lucha de clases internacional y nacional, teniendo en
cuenta los cambios producidos en la lucha de clases nacional, del Partido y
de la guerra derivados del giro estratégico que implicó la detención del
Presidente Gonzalo y la Dirección Central: por problema principal de
dirección proletaria decisiva, desde el 12/IX/92 ya no era factible la
conquista del Poder; por tanto, la perspectiva en las actuales condiciones ya
no era el desarrollo sino a lo sumo su mantenimiento con riesgo de derrota o
por acción del enemigo o por desintegración lenta de sus fuerzas, redundando
tal situación en el debilitamiento del camino del pueblo, no por condiciones
objetivas, pues la opresión y explotación proseguirán y el pueblo jamás
dejará de luchar, sino principalmente por factor subjetivo: el Partido vivió el más duro golpe con la
detención del Presidente Gonzalo, Jefatura del Partido y la Revolución y la
camarada Miriam, miembros restantes del Comité Permanente; giro estratégico
cuya raíz era que la dirección que quedó no era capaz de resolver los nuevos
y complejos problemas; en síntesis, el Partido tenía un problema principal,
dirección proletaria, y resolverlo demandaría buen tiempo, lo que en
contraparte viabilizaba el camino burocrático, pues había obtenido el Estado
peruano un gran éxito en su tarea de aniquilar la guerra popular con la
detención de septiembre, abriendo paso con ésta a obtener avances en su tarea
de reimpulsar el capitalismo burocrático y logros en la reestructuración
estatal, derivando de esta situación concreta una Nueva Gran Decisión y
Definición. Esa era la solución correcta y sigue siendo: terminar la guerra
popular iniciada el 80 mediante un Acuerdo de Paz a fin de preservar al
Partido, sus dirigentes, cuadros, militantes, combatientes y masas, porque
con Partido y masas toda clase de milagros pueden ser hechos; para que el
Partido conduzca un repliegue político y militar y pase de tiempos de guerra
cruenta a guerra incruenta bregando por ser eje de la revolución peruana y
gozne de la revolución proletaria mundial en repliegue político general,
cuestiones que deben ser vistas en un futuro II Congreso. Todo ese análisis
concreto de la situación concreta nos llevó a la solución concreta y
difundimos dos cartas dirigidas al Presidente de la República solicitando
conversaciones que lleven a un Acuerdo de Paz del cual derivará poner término
a la guerra popular iniciada el 80. Pero ¿qué ocurrió con el Partido?
Producida la detención del Presidente Gonzalo y la Dirección Central, la
derecha se desbocó y una línea revisionista se estructuró y pasó a aplicar
los cuatro cambios, empezando por usurpar la dirección del Comité Central por
un bloque de caudillos, puestistas y anarquistas
convirtiendo la guerra popular en una guerra militarista y llevando al
Partido a su destrucción. Línea y bloque encabezados por el c. Feliciano
quien ha devenido un caudillo militarista burgués, un usurpador; la c. Nancy
puesta como mascarón de proa, quien en los hechos
estuvo dirigiendo burocráticamente como puestista,
y otros anarquistas impenitentes destructores del Partido. Línea que con las
cartas desenfrenó imputando sin fundamento alguno capitulación, traición y
violación de principios a un supuesto grupillo negro que en colusión con el
imperialismo y la reacción habían montado una supuesta "patraña";
levantando al Partido contra la Jefatura del Presidente Gonzalo y la
Dirección Central, en contra de terminar y por proseguir sin ver la realidad,
sin fundamentos sólidos ni objetivos claros, y llevando la guerra a la
derrota y poniendo en juego la vida del Partido. Línea revisionista y Bloque Escisionista que siguen llevando la guerra a la derrota y
al Partido a su destrucción, siendo en consecuencia, a tres años del giro
estratégico y dos años de la petición de conversaciones del Presidente
Gonzalo y la c. Miriam, necesario defender la vida del Partido, defensa que
se concreta en, ojo, ¡Defender la unidad del Partido! y ¡Arrasar la línea
revisionista! En reunión de octubre el Presidente Gonzalo antepuso:
¡Enarbolando el Pensamiento Gonzalo como arma ideológica estratégica,
específica y principal! 2) Cómo había que aplicar ese camino. El cómo había sido
concretado en "Lineamientos o bases para Acuerdo", planteados desde
julio 93 especificado a las variaciones del desenvolvimiento de las
conversaciones, y que hoy debía ser especificado teniendo en cuenta la
situación concreta de mayor debilitamiento y de iniciativa socavada por la
oposición del Bloque Escisionista y su línea
revisionista. No considerar que nosotros desde el comienzo de las peticiones
éramos la parte débil y que teniendo el Partido en contra se agravó nuestra
situación sería otra necedad más, por eso insistimos en que estos
lineamientos o bases deben ser especificados hoy. 3) Nuestra posición. Esta desde el comienzo
fue terminar la guerra popular iniciada el 80 mediante un Acuerdo de Paz y
esta fue difundida a través de las cartas desde octubre 93, y la cuestión
consistía en que el Partido se definiera si estaba a favor o en contra.
Nosotros estuvimos dispuestos hasta que nos expulsaran, pero era nuestra
obligación plantear una solución a la compleja y nueva situación, una
solución marxista-leninista-maoísta, pensamiento Gonzalo a nuestro modo de
pensar justa y correcta. Nosotros hemos salido
no como Permanente sino como Presidente Gonzalo y c. Miriam y dijimos que el
Partido debía definir, que lo correcto era que el Partido asumiera la Nueva
Gran Estrategia, la Nueva Línea Política General, la nueva Política General,
la Táctica y todo lo de ella derivado; que al hacerlo aplicara tal política
como decisiva, la guerra popular como principal y la lucha de masas como
base, que usara pues todos los medios con que cuenta el Partido para
conseguir un Acuerdo de Paz del cual derivara terminar la guerra iniciada el
80, tomando las conversaciones como central. Acuerdo que no iba a caer de
cielo sino que había que luchar por obtenerlo, luchar por especificarlo y
luchar por aplicarlo en caso de lograrlo. Así, la cuestión era
que el Partido asumiera oficial, pública y directamente las conversaciones,
nombrara sus delegados y, con las garantías del caso se entiende, solicitara
entrevistarse si lo creía conveniente con el Presidente Gonzalo y la c.
Miriam a fin de asesorarlos; es muy importante reparar que planteamos que el
Partido directamente trate con el gobierno... además especificamos que había
cuatro bases objetivas para lograr un Acuerdo de Paz y la principal era que
el Partido asumiera, lo escribimos en el documento "¡Luchar. !" del
14/XI/93, siendo la táctica a aplicar el centrar en que el Partido asuma y se
pronuncie porque cuando más tiempo demorara en hacerlo más difíciles las
condiciones para el trato; dijimos que los comités debían cercar al Comité
Central hasta imponerle la Nueva Gran Estrategia; que era importante ganar a
SPP y el Comité de Familiares. Pero no solamente fijamos la Nueva Gran
Estrategia y Táctica, sino que convocamos a formar parte de la Nueva Fracción
Roja que bregue por las tareas demandadas por la nueva etapa del Partido. Dejamos bien claro que
en ningún momento hemos dicho "que se sujeten", sino que era
nuestra posición y que el Partido debía definir y asumir si la consideraba
correcta o hacer otra propuesta o tirarse abiertamente en contra, pero ¿con
qué salieron? En contra de terminar mediante un Acuerdo y cubrieron su
posición con el velo de "patraña", porque "el Presidente
Gonzalo jamás va a capitular y pedir conversaciones, es violación de
principios" ¿Dónde está la prueba de sus imputaciones? Afirmar no es probar; y
empezaron a negar el pensamiento Gonzalo usando Gonzalo contra Gonzalo,
creyendo al Presidente Gonzalo muerto o considerando su pensamiento
congelado, montando ellos la más negra y monstruosa patraña jamás hecha
contra el Partido, desenfrenando aquí su línea revisionista desbocada desde
la primera conmoción, infamando la línea proletaria, traficando con la
Jefatura del Presidente Gonzalo y atacando a probados y más antiguos
dirigentes, quienes a pesar de sus derroteros derechistas apoyaron la Nueva
Gran Decisión y Definición, tildándolos supuestamente de traidores y coludidos con la reacción y el imperialismo, siendo la
Salas la única traidora por endebles ideológica y política y el c. R. un
colaboracionista desvergonzado, condenado y suspendido; peor aún, en febrero
94 escindieron al acordar en su usurpación que se habían puesto al margen del
Partido todos los que luchaban por un Acuerdo de Paz y Sentar Bases para el
II Congreso, cobarde forma de expulsión sin haber librado la lucha que
correspondía contra esa supuesta línea oportunista de derecha. SOBRE LA AUTOCRITICA PUBLICA DE LA C.
NANCY. La tercera conmoción se
está presentando de otra forma a la prevista; por acción de la izquierda
hemos llevado a que algunos que estuvieron en esa línea negra sé autocritiquen, planteamos también que la autocrítica de
la c. Nancy es una autocrítica pública que sirve a derrocar al Bloque Escisionista, así, una de sus principales cabezas rompió
y salió, ha sumido el resarcir en parte el daño causado al Partido y al
pueblo, porque la autocrítica pública no es todo; lo principal es servir a la
IV etapa demostrando en la práctica su giro. Otros deben seguir su ejemplo y
agachar la cabeza ante el Partido y el pueblo. Analizando el derrotero de los
dos años desde octubre 93, creemos que esta tercera etapa de las
conversaciones en la forma de hacer cambiar a quienes estuvieron en contra y
pasen a engrosar las filas de los que apoyan, abre la posibilidad de lograr
un Acuerdo de Paz, pero la cuestión principal es y seguirá siendo que el
Partido asuma y se pronuncie aún ahora y se especifique el cómo. Esto
evidentemente es un triunfo de la línea proletaria contra la línea
revisionista, un avance en aplastar y derrocar, logrado por el justo y
correcto manejo de la lucha de dos líneas. Así pues, la tercera
conmoción se ha dado de esta forma: Ha golpeado fuertemente a quienes están
aún en contra, principalmente a las cabezas del bloque Escisionista
y para quienes apoyaron al Presidente Gonzalo y la Dirección Central es una
remoción; hay nuevos reagrupamientos y crece el nuevo torrente rojo que
defiende la vida del Partido, defensa cuyo meollo es defender la unidad del
Partido. La izquierda se ha fortalecido. Con este informe
apelamos a su espíritu de Partido y lo llamamos a defender la vida del
Partido que está en juego y tomó posición en forma clara, firme y decidida.
El c. Stalin dijo: "Ser hombres de filas"
me pregunto ¿qué permitió romper con esa línea negra? Ese es un salto dado
por tres cosas: 1) posición de clase: uno puede no conocer muchas cosas,
puede no comprender otras, pero el problema no es de entendederas ¿así no se
comienza a ser comunista? ¿no hemos comenzado más
por sentir que por conocer o comprender? Sí, así se comienza, sintiendo por
los de abajo, por los oprimidos, por el pueblo. No quiere decir que no
encierre comprensión, también la hay, por ejemplo la comprensión de servir a
los de abajo. Así, la posición de clase es la que nos pone de un lado. 2) La
segunda nota que permite esos cambios es el espíritu de Partido, porque ese
sentimiento y posición de clase nos lleva a desenvolver luchas y actuamos
activamente en la lucha de clases y, a su vez, esta actuación nos lleva al
Partido dentro del cual como arcilla nos va moldeando; los comunistas somos
de madera especial, somos fibra de espíritu fuerte y esas condiciones con las
que llegamos al Partido se van forjando, desarrollando, potenciando en la
acción y en la lucha interna del Partido. El ser comunista nos hace tener
espíritu de Partido y esa es una llama ardiente que puede a veces abatirse
por vientos contrarios pero no desaparece jamás, en algunos puede convertirse
en rescoldos, pero con el viento de la lucha de clases y de la lucha interna
del Partido se aviva nuevamente. El espíritu de Partido es la comprensión
cabal de las grandes verdades del marxismo, una de esas es la que el
Presidente Mao enseña: "la rebelión se
justifica" y es la que hemos usado para establecer la gran ley de la
lucha de clases; y 3) El desinterés absoluto: la clase con toda su grandeza
no lo tiene porque está deformada por la opresión, por la propiedad privada,
pero el comunista es la parte consciente del proletariado y asume en forma
consciente el interés, los objetivos y la meta de la clase, por eso puede
tener desinterés absoluto, no es que la clase no quiera ni que los comunistas
seamos mejores, sino que la opresión no les permite ver. De modo que si uno
es comunista tiene posición de clase, espíritu de Partido y es capaz de
actuar con desinterés absoluto, no brega por ningún interés personal sino por
los intereses del Partido y puede adoptar esos cambios. Así, tres cosas nos
permiten dar los saltos que la realidad nos exige, muévase esta trinidad en
los camaradas que hoy no ven y téngase confianza en el Partido y confianza en
las masas, combátase lo erróneo, déseles razones y dejen que la lucha de
clases sople, que agite el viento y que cada uno defina y el comunista
mostrará su condición de comunista; creo en síntesis que estas tres cosas
permiten dar salto. Entonces, la línea ¿no tiene nada que ver? Sí, sino que
lo interno define y precisamente son estas tres cosas las que nos permiten
coger la línea correcta, sin ellas no la cogeremos, es como el sol, brilla
para todos pero si estás en una caverna no lo ves; así es el marxismo, brilla
para todos pero sólo algunos lo cogen ¿quiénes? quienes tienen esa trilogía,
esos son del terreno fértil, por eso muévase lo que un comunista tiene de
comunista: posición de clase, espíritu de Partido y desinterés absoluto ¿qué
tenemos de eso? Movamos eso y eso será lo que permita abrir paso a las
dificultades que se tenga para coger la línea, porque asumir la Nueva Gran
Estrategia también implica lucha en la propia cabeza. La toma de posición, el
cambio, él definirse por la línea proletaria y romper con la línea
revisionista implica tomar conciencia del daño causado al Partido y al pueblo
y la decisión de resarcirlo. Es bueno, es ejemplo, he ahí lo que es ser
hombre de filas, que los hechos prueben lo que se es, véase el fondo; aquí
contendemos sólo cuatro comunistas pero en una lucha decisiva por la
ideología, por imponer la ideología marxista-leninista-maoísta, pensamiento
Gonzalo en el Partido. Así, veamos siempre que el comunista es un hombre de
filas que con esta trilogía combate denodada, firme y resueltamente por su
Partido, por su ideología, por el Comunismo; y si estuvo en el error sabrá autocriticarse, corregirse y resarcir el daño causado. LA LUCHA EN QUE ESTAMOS HOY. La lucha en que estamos
hoy es la más dura, la más grave y la más difícil enfrentada por el Partido
desde su fundación, pues la línea revisionista que se ha estructurado es la
más peligrosa y amenaza la vida del Partido, el Partido está en mayor riesgo
que el vivido en los setenta, lucha en la que estuvo también en juego la
existencia del Partido y duró tres años; pero compáresele, no puede
compararse, ahí sólo estábamos rompiendo con una camarilla de oportunistas
para reconstituir el Partido, y éramos un puñadito; esta lucha en cambio es
más trascendente porque es siniestra, nefasta línea revisionista busca la
escisión del Partido ¿en qué circunstancias? En que después de un largo
camino de Partido, entramos a la guerra popular y llegamos a un momento duro y
difícil: decidir y definir el término de la acción armada para preservar el
Partido y conjurar la derrota de la guerra. Recordemos, cuando decidimos
iniciar, decidirlo también fue duro pero tenía la perspectiva del triunfo, de
la conquista del Poder, hoy en cambio, la Nueva Gran Decisión y Definición
implica repliegue, y el Partido ha sufrido la pérdida de sus más altos
dirigentes, hasta la propia Jefatura, lo que también significa que la
izquierda ya debilitada quedó descabezada. Para el Comité Permanente era
claro que no había ninguno que de inmediato ni en perspectiva siquiera
mediata pudiera establecer, mantener y materializar rumbo, definir camino,
por tanto el Partido tenía problema de dirección; y no es que no hubiera
dirigentes ni se trata del número sino de sí era o no una dirección
proletaria, decisiva para el desarrollo y triunfo de la guerra hacia la
conquista del poder. Situación de la cual proseguir sin dirección proletaria
derivaría riesgo de derrota y destrucción, y la guerra no debía ser derrotada,
había que defender la invencibilidad de la guerra
popular y el Partido no debía ser destruido y la guerra no debe ser
derrotada, porque con Partido y masas toda clase de milagros serán hechos.
Decisión. Decisión compleja, hasta dolorosa, sabíamos lo que el Presidente Mao enseña, quien tiene fusiles tiene poder; a nosotros,
fue la guerra popular la que elevó inmensamente el prestigio del Partido y
fuimos polo de atracción de los hijos de nuestro pueblo, mujeres, jóvenes,
clases oprimidas y hasta internacionalmente nuestra palabra cobró peso
respaldada por la acción armada; terminar la guerra popular era lo que los
mismos hechos expresaban, la propia realidad era que o terminaba por derrota
o por Acuerdo, y la mejor forma de terminarla para el Partido, la clase y el
pueblo era terminarla por Acuerdo: marxista-leninista-maoísta es quien sabe
ver los hechos y sacar las leyes que lo rigen para manejarlos, lo contrario
es dejar que los hechos te manejen y eso no es proletario, no es de
comunistas. Decisión pues dura pero necesaria y sí nos duele, cuesta, la
perspectiva inmediata, real de ayer no es la de hoy, duele porque no somos
apáticos ni carentes de sentimiento, nos duele que la emancipación de nuestro
pueblo se posponga otra vez y por buen tiempo, pero sabemos amarrarnos el
alma, empuñarnos el corazón y llevar la procesión por dentro, como sabiamente
condensa el pueblo su experiencia, pero manteniendo en alto el optimismo
histórico de clase, de los comunistas; nosotros no veremos ya la conquista
pero el Partido lo logrará, de eso estamos seguros y lo que hoy haga nos
servirá a ese glorioso futuro; lo hecho no ha sido en vano, deja hermosas
lecciones teñidas de rojo y constituye un gran paso en la escala de victorias
y fracasos hasta el triunfo de la clase, pues estamos condenados a triunfar. Bien, dimos el paso,
nos atrevimos, han transcurrido dos años desde que difundimos nuestra
posición y por responsabilidad de una línea revisionista y un Bloque Escisionista que se estructuró y usurpó la dirección del
Partido aprovechándose de las circunstancias, por su responsabilidad, el
Partido hoy está en riesgo de ser destruido, la vida del Partido está en
juego, lo advertimos hace tres años y buscamos conjurarlo, y ellos actuaron
sistemáticamente en contra; nuestro Partido puede ser destruido y hasta
desaparecer, está en riesgo que ese contingente probado en las más difíciles
circunstancias, templado en la guerra popular se pierda, que toda esa rica
experiencia partidaria adquirida se volatilice, vuele, se esfume, no debemos
permitirlo, todo eso le ha costado a este Partido, le ha costado a nuestro
pueblo, a todos aquellos que con su sangre enrojecieron el camino; por eso
nuestro Partido no debe ser destruido. Que los dirigentes de hoy no veamos la
conquista no es el problema, el papel de los dirigentes de hoy pasa a ser el
dirigir el repliegue, no es dejar de luchar, es luchar en nuevas y más
complejas condiciones, es forjar a otros, nutrirlos de tan rica experiencia,
enseñar lo aprendido, sacar lecciones positivas y negativas; también en el
repliegue hay tierra fértil, sembrar para que otra vez, cualquiera que sea el
tiempo que pase la revolución avance y cumpla sus metas, forjar a otros y
ellos lo harán, nutrámoslos y el plazo será menor, más corto. Nosotros debemos
defender la vida del Partido, defender la unidad del Partido, no consentir
nos pase lo que le ocurrió al MIR, hacer todo aquello que sea necesario por
defender la unidad del Partido, y si en esta lucha esa siniestra línea escisionista burguesa, esa línea revisionista estrellara
al Partido, pues los comunistas tenemos la obligación de volver a levantar lo
destruido; el pueblo ¿cómo es? no se echa a morir cuando hay un terremoto,
pasada la conmoción se pone de inmediato a sacar de los escombros lo que
pueda recuperar y vuelve a levantar su casa, un comunista con mayor razón,
así quedaran granitos de arena dispersos o peñascos estrellados los juntará y
reconstruirá una roca fuerte, acerada, recuérdese el poema de la casa de
hierro de Lu Sin. Tenemos una rica
experiencia de Partido, más, tenemos ya una Nueva Gran Estrategia por la cual
debemos combatir y ésta ha de imponerse; ya hay rumbo y hemos llamado a
conformar la fracción que la lleve adelante, así que tiempo más, tiempo menos
se impondrá, y el Partido volverá a se lo que fue y escalará más grandes
alturas porque rematará el camino que nosotros iniciamos. Es cierto, las
condiciones son adversas, complejas, difíciles, tanto a nivel internacional
como nacional y a esto se suma el riesgo de la destrucción del Partido, por
eso debemos empeñar nuestras vidas en que el Partido se una y se mantenga
unido, esto depende de nosotros, está en nuestras manos, preservemos el
Partido porque, insistimos, con Partido y masas todos los milagros serán hechos,
así estaremos en mejores condiciones para enfrentar y manejar los tiempos
difíciles del repliegue. Por todo esto decimos
que es la lucha más dura que el Partido haya vivido en toda su historia hasta
hoy, claro que en el futuro habrá otras quizás más duras que la actual, pero
hoy ésta es la más grave porque ha puesto en juego la vida del Partido y
puede llevarlo a su destrucción, y el Partido no debe ser destruido. EL PARTIDO ES UNA UNIDAD. El Partido es una
unidad con dos aspectos en lucha constante, no hay Partido monolítico porque
la contradicción rige en todo, también dentro del Partido; el Partido, como
todo Partido Comunista, es una contradicción, por eso decimos que el Partido
es uno y lo que hoy pasa es que estamos viviendo un momento agudo de la
contradicción dentro del Partido, la lucha entre los dos aspectos se ha
agudizado hasta poner en juego la vida del Partido. El Partido vive la lucha
más dura de su historia, es una lucha antagónica, pero es una lucha dentro
del mismo Partido y la contradicción es terminar o proseguir. Entonces debe
quedar claro, el Partido es uno pero se encuentra en lucha entre la línea
proletaria y la línea revisionista. Luego, en cuanto a la dirección, la dirección
es una, la dirección es la dirección encabezada por el Presidente
Gonzalo y la Dirección Central, esa es la dirección proletaria decisiva
probada como justa y correcta en la reconstitución y la dirección de la
guerra desde el inicio hasta su desarrollo y hoy en la nueva etapa, para lo
cual ha fijado ya el rumbo a seguir. Sin embargo, la dirección ha sido
usurpada por un Bloque Escisionista de caudillos, puestistas y anarquistas que desenvuelven una línea
revisionista, encabezados por el camarada Feliciano que está llevando la
guerra a la derrota y el Partido a su destrucción y ¿por qué es así? El
Presidente Mao dijo la burguesía está dentro del
Partido y hay que cuidarse del revisionismo en el propio Comité Central; en
el Comité Central hay fuerzas diversas que representan las clases y estas
luchan y la cuestión es que la clase tome el Poder en el Partido; el Comité
Central es el vórtice de la tormenta, el corazón de la tempestad porque ahí
se condensa la lucha de clases, ahí la lucha de dos líneas se libra con más
dureza que en todo el Partido en su conjunto, ahí contienden las clases por
imponer la ideología del proletariado para que el Partido tenga el rumbo
correcto y dirija la lucha de las masas hasta la meta; ahí se define todo, si
uno ve esta lucha se está librando más fuerte en el seno del propio Comité
Central. Hoy el c. Feliciano ha
devenido un usurpador y es un caudillo militarista burgués, ha negado la
Jefatura del Partido, está en contra de lo que representa Jefatura:
Pensamiento, camino, línea y rumbo correctos, los cuales se condensan en
dirección proletaria y se concretan indesligables
en una persona, más, la Jefatura no es un cargo orgánico, es una autoridad
probada y reconocida; y una Jefatura no se improvisa, demanda tiempo y condiciones;
ha negado, pues, al Presidente Gonzalo, lo ha desconocido, esto es lo real,
por más que trafiquen con la Jefatura del Presidente Gonzalo; pero no sólo él
sino sus secuaces, los que persisten en ese Bloque Escisionista
y esos ya no dirigen el Partido, son falsos dirigentes, son asaltantes, han
abandonado la ideología del proletariado por la ideología burguesa, y han
comenzado los cuatro cambios por el cambio de dirección amparándose en las
armas que el Partido conquistó. Por eso la lucha es más dura en el Comité
Central y hay que librarla hasta que no quede piedra sobre piedra, arrasar
esa nefasta línea revisionista y demoler ese Bloque Escisionista,
demolerlo y hacerlo polvo para que todo el Partido se una bajo la dirección y
la línea marxista-leninista-maoísta, pensamiento Gonzalo del Presidente
Gonzalo; que agachen la cabeza y se autocritiquen
es lo que deben hacer si algo les queda de comunistas, si algo tienen de
posición de clase, espíritu de Partido y desinterés absoluto. La Lucha que estamos
librando es, a fin de cuentas, o por transformar todo lo malo en perspectiva
o se destruye todo; o se une y se preserva el Partido o será ruptura por
décadas, así es de clara la cuestión, es necio no comprenderlo así. La
posición de la izquierda es bregar por que el Partido se una, que a lo más se
depure pero que siga para que se desenvuelva como eje y gozne. No nos
conviene que haya ruptura, piénsese lo que pasa en el mundo, se niega el
Partido, se busca desaparecer el marxismo, negar la meta y esto por parte del
imperialismo y la reacción a los que se suma el revisionismo, a eso sirve esa
nefasta línea, desde dos frentes nos atacan: fuera buscan desaparecernos y
dentro destruirnos ¿Acaso el término de la guerra iniciada el 80 ha de costar
el fin del Partido? ¡No! Hoy tenemos mucha más experiencia que ayer, no es la
situación del 70, hoy sabemos manejar mejor la lucha de dos líneas, el
Partido tiene experiencia en lucha de dos líneas y la hemos aplicado para
unir, logrando saltos en cada lucha, el proceso es unidad-lucha-unidad mayor
para más altas tareas, apliquemos esto hoy. La lucha actual
encierra dos graves problemas: derrota de la guerra y destrucción del
Partido, en la guerra se trata de defender el principio de invencibilidad de la guerra popular; la guerra que ha
costado al Partido y al pueblo, las deudas de sangre son ingentes sí, y hay
pérdidas individuales, algunos camaradas tienen más de una, y las hay de
próximos y muy queridos, pero si contamos la sangre que ha derramado nuestro
querido pueblo, ésta mucho mayor y bien invertida está, su sangre tirita con
la del Partido, se ha cumplido nuestra palabra; también dijimos que hay que
escribir la historia en el lomo de los cerros y la hemos escrito: ahí está en
los ojos y el corazón de las masas, la han visto y sentido, es una realidad
innegable hecha por el pueblo, por los de abajo dirigidos por un Partido
Comunista y con un heroico Ejército Guerrillero Popular, un ejército de nuevo
tipo ha construido esta guerra, un nuevo poder el que así con todas sus
limitaciones y deficiencias fue lo nuevo; todo eso ha logrado el Partido y
sabe manejarlos. De aquí a poco empezarán a decir que no fue guerra popular
sino un grupo de fanáticos equivocados, ya hemos oído voces que han dicho
necias "no debimos entonces iniciar" o "tanto me
prometieron", mañana serán "los errores del pensamiento
Gonzalo" o la negación de la ideología universal: el maoísmo, para
echarse abajo todo lo hecho y para negar lo que el futuro demanda sobre todo,
por eso hay que defender la guerra popular, los hechos hacen la realidad no
las palabras, los hechos son hitos que jamás nadie podrá borrar; el pueblo,
la clase han sido testigos de la más grande epopeya de la historia de la
lucha de clases y del Partido, los logros son muchos, están especificados en
"¡Luchar...!" y somos nosotros, quienes la hemos preparado,
iniciado, desarrollado, dirigido, hecho, y quienes después de nosotros sigan,
los comunistas de este Partido, los que tenemos que defenderla. El principio de la invencibilidad de la guerra popular queda, la lucha por
terminar la guerra iniciada el 80 mediante un Acuerdo de Paz encierra que
nosotros mismos la terminamos, y eso es la salvaguarda del principio, lo que
terminamos es ésta guerra popular, la iniciada el 80, y la terminamos porque
la circunstancia histórica concreta no permite proseguirla y la razón
principal es problema de dirección proletaria. La terminamos, sí, sin embargo
la experiencia vivida queda, la guerra popular queda, el principio de la invencibilidad queda, así como en nuestro pueblo, en
América está estampada como camino justo y correcto porque es la teoría
militar más alta del proletariado creada por el Presidente Mao y especificada en nuestro caso como guerra popular
marxista-leninista-maoísta, pensamiento Gonzalo. Así pues la guerra no debe
ser derrotada, la terminamos para conjurar la derrota y preservar el
principio. Pero ¿qué quiere el
Bloque Escisionista? Llevar la guerra a su derrota
porque la prosiguen sin ver la realidad, sin fundamentos políticos ni
militares sólidos, sin objetivos claros, conducirla con una línea
revisionista trastocando su carácter, convirtiéndola en guerra militarista y
esto es socavar el principio. Por eso estamos en contra. Lo otro, es que el
Partido no debe ser destruido, porque con Partido y masas todos los milagros,
grandes milagros serán hechos, reeditados y desarrollados; aquí nuestra brega
es por el Partido no sea destruido. En esta dura, compleja y riesgosa
lucha... está abriéndose una buena perspectiva, la lucha es aguda, pero en
ella el Partido está probando que sabe luchar, sabe manejar la lucha de dos
líneas, una lucha si bien conducida está, fortalece, el no desarrollar la
lucha corroe el Partido porque la fortaleza se toma por dentro. En esta
pequeña pero trascendente reunión, los comunistas estamos definiéndonos por
la vida del Partido contra su destrucción, por su desenvolvimiento y
desarrollo en las nuevas condiciones, empeñémonos en esto pero preparémonos
para lo peor, lo cual implica bregar por lo mejor; y si el Partido fuese
destruido, piénsese, las masas son inagotables y en su lucha de clases
constante generarán comunistas, así que los comunistas seguirán creciendo,
desarrollándose, uniéndose y llegarán a la meta; nosotros debemos hacer todo
aquello que podamos hacer para defender la vida del Partido, por su unidad,
porque la defensa de su vida se concreta en defender su unidad. No
desesperar, si la obcecación necia prosigue, no descansar hasta arrasar y demoler,
piénsese ya tenemos rumbo: una Nueva Gran Estrategia, sabemos que debemos
marchar a un II Congreso cuya agenda aún no ha sido fijada, tenemos una
segunda reconstitución, no será igual pero ya hemos vivido una y esa
experiencia deja lección, el Partido será más poderoso, esa convicción hay
que tener, un evento sancionará lo avanzado y proseguirá su camino en el
comienzo del tercer milenio, milenio del comunismo, siglo que se viene pues
éste ya terminó y ha sido extraordinario, ha sentado bases y nuestro Partido
ahí ha cumplido su papel. Con nosotros ha
terminado una primera grandiosa e imborrable etapa, somos los últimos
abanderados de este siglo y nos levantamos cuando había que mantener y
defender la bandera, el Partido Comunista del Perú fue el último Partido
marxista-leninista-maoísta, pensamiento Gonzalo en guerra popular en este
siglo y buen tiempo el único también en armas en esa brega, somos el Partido
con mayor experiencia viva, no tenemos derecho a que se la olvide o se la
destruya sino a enseñarla, a retransmitirla, a defenderla porque la
experiencia del Partido se ha acumulado en forma gigantesca, porque es un
inmenso tesoro y esa mina está viva, y lo que esa línea haya podido dilapidar
es un poquito, así que ese tesoro queda, es tesoro de la clase, del Partido y
tiene la obligación de retransmitirla a otros pueblos o a la clase de otros
países; son además tesoros ideológicos que quedan, nadie los puede arrebatar
si se defienden como corresponde. Véase, hoy se tilda de oportunismo a la línea
proletaria, pronto saldrán los supuestos errores del pensamiento Gonzalo o
del Partido se equivocó al iniciar o cómo no se previó lo que hoy nos ha
pasado, mañana negarán que hubo guerra popular, que no fue sino un grupo de
dementes y harán su propia historia tergiversada buscando desaparecer todo lo
hecho, por eso debemos nosotros mismos defenderla, hacer el balance y sacar
lecciones positivas y negativas; son 15 años de guerra popular así estos
últimos tres los dirija esa línea revisionista, convertida en guerra
militarista burguesa, así la lleve a su derrota o por acción de las fuerzas
contrarias o por lenta desintegración de sus propias fuerzas, esa será
también parte de ella como aspecto negativo de la experiencia de la guerra
popular en este país. El problema del Partido
es que está atravesando por una difícil situación transitoria y de esta lucha
depende que otra vez despliegue sus alas, y lo hará a nivel más alto y
servirá de ejemplo a comunistas de aquí y de otros países. Estamos asumiendo
ese papel, para nadie es fácil llegar a tal decisión y definición pero
estamos convencidos que es la necesidad, nos hemos atrevido a pensar, a
decir, a actuar, nadie podrá decir que le falta vigor a nuestra voluntad, eso
jamás porque la clase es la última clase de la historia y superior a todas
las demás porque es la única revolucionaria, no hay nadie que se le compare,
y el pueblo es inmenso en el mundo, está y seguirá creciendo, hoy somos 5.600
millones de habitantes, allá por el 40 del próximo siglo serán 13 mil
millones y el poder de la masa pesa y la mayoría de esos serán parte del
pueblo, el poder de la masa pesa y hace más sabia a la clase. El Partido está
sentando bases de su condición de eje del pueblo peruano y gozne de la
Revolución Proletaria Mundial; creo que esta es la lucha más importante hasta
hoy, pero somos expertos en la lucha de dos líneas, pues hemos demostrado
manejar la lucha de clases en su forma más alta: guerra popular, y quien
maneja la lucha de clases maneja la lucha interna, que no es sino lucha de
clases en el Partido para que se imponga la línea proletaria. Decíamos que tiene
dolor pero también ferviente optimismo, somos hijos de la lucha, Marx nos enseñó que la felicidad es la lucha, nosotros
somos las almas más indómitas que ha visto el siglo, somos voluntad
transformadora, el siglo XX ha demostrado el poder de la clase como
transformación, la clase organizada en Partido y dirigiendo revoluciones ha
hecho transformaciones como nunca se vio, hoy ya no hay socialismo pero
mañana lo habrá, nadie jamás podrá impedirlo porque es el rumbo de la
historia, pretenderlo es como si un niño se pusiera a contener una lloclla; tener optimismo es demostrar que se asume el
interés de la clase. La revolución vive un repliegue político general estratégico,
la revolución peruana también atraviesa un repliegue político y militar, pero
estos no implican dejar de luchar sino luchar en nuevas circunstancias
seguros de la meta y en función de ella, no porque mucho se tuerza el río
vuelve a su fuente, todos los ríos van al mar y si algunos ríos de poca
superficie se secan, quedan sus aguas en el fondo. Nuestro empeño hoy día
es uno, que el Partido no se destruya, que no desaparezca con el término de
la guerra sino que prosiga su acción en nuevas circunstancias, el Partido no
se va a dividir pero se va a depurar sí, y algunos serán evacuados, es
erróneo decir que los que se van en estos momentos duros, difíciles, en
tiempos de prueba (de la condición de comunista o revolucionario) sirvan al
campo contrario, hay que entenderlos, combatirlos y neutralizarlos, no
condenarlos, estarán demostrando que su fibra no fue suficientemente fuerte e
insuficiente su madurez política o deficiente forja, más bien no perder
vínculo con ellos; tómese la experiencia del Partido, al iniciar algunos se
resistieron, pero al ver el avance de la guerra volvieron, hasta los
expulsados el 79 se mantuvieron en la lucha hasta ser reincorporados, militar
y entregar su vida por la causa del comunismo; así, si mañana volvieran,
decirles que lo que hicieron estuvo mal, tratar su situación y exigirles
cumplan su papel, siendo vigilantes no desconfiados. No todos tienen la misma
firmeza, la parte más cuajada, más pura, esa se mantendrá y será el nervio
mismo que dé la Nueva Fracción Roja, la que actuará en la Nueva Etapa del
Partido cual ave Fénix, no desesperar, combatir a fondo, desarraigar,
combatir no es destruir, la lucha es para unir, por más antagónica que sea es
lucha de clases para transformar el alma, lo que se ataca es la enfermedad
para salvar al paciente, y si algunos enfermos se repliegan y no soportan la
lucha ni se quieren transformar es por lo dicho, falta fibra, pero esos serán
como enfermos que se retiran a un sanatorio de reposo, entiéndaseles, no
ponerles una cruz, piénsese con objetividad, el Partido no estando ya en
armas no tendrá ni el peso ni el prestigio que tuvo antes, sin la perspectiva
de la conquista del Poder inmediata ni mediata muchos se retirarán; hemos
dicho que estamos dispuestos a quedar hasta el 10%, pero sí aseguro, seremos
muchas veces más de los que quedamos el 70, piénsese, la clase, el pueblo
sigue pariendo comunistas, así que a qué desesperar si unos se van, además si
ésta lucha es bien llevada va a fortalecer, lucha con principios eso sí,
librada como lucha de ideas. También es más dura
esta lucha que libramos, se complejiza más porque
la clase lucha en condiciones internacionales más complejas, hasta adversas,
es que yo sí creo en tragedias, en dramas, pero de la clase y el pueblo
porque no logran aún emanciparse, sin embargo no cejan en su lucha, hoy casi
no hay Partidos Comunistas, marxistas-leninistas-maoístas son menos aún, el
problema es la falta de Partidos Comunistas que garanticen el rumbo, a eso me
refiero; hasta el siglo pasado fue la tragedia o el drama de los individuos,
y hace siglos acabó la tragedia de los dioses, ya no se hacen paradigmas de
héroes individuales, más bien se sienten los personales de una clase que se
hunde. Este siglo es trágico, dramático, nadie podrá decir que es un siglo
alegre, pero es extraordinario porque ha generado una revolución proletaria
mundial, ha puesto bases para el comunismo, ha abierto ya el camino en la
tierra, esto es lo que hay que entender, pese a las restauraciones, pese al
repliegue, hay esto, y con estos avances grandiosos se lograrán nuevos y más
altos saltos futuros. Al comenzar la acción armada decíamos que la
perspectiva necesaria del proletariado era extinguirse como clase para que
hubiera comunismo, y de modo similar, el cumplimiento de nuestra meta se
lograría dando todo lo que podíamos ser capaces de dar, extinguiendo nuestro
individuo, siendo molidos como personas en beneficio del interés de la clase
y eso es también lo que está expresándose hoy, no se trata de un interés
personal sino del interés de la clase, y si lo comprendemos así hasta el
dolor comprensible se disipa; dijimos que la Nueva Gran Decisión y Definición
era mucho más dura que la de ayer, pero con la trilogía enunciada somos
capaces de asumirla, y si erramos un tiempo causando daño al Partido y al
pueblo, podemos cambiar y poner por delante el interés del proletariado, autocriticarse del error, deslindar y demostrar en los
hechos con acciones meritorias el salto dado. Estos son momentos de
entresijos históricos, mucho de lo viejo cae y parece que no hubiera logros,
que lo nuevo surgido se desmorona también y que sólo hubiera escombros, pero
de esos derrumbes lo bueno va a florecer dando más fuertes, más acerados
comunistas, Partidos, revoluciones; por eso dijimos damos un presente de
posibilidad incierta por un futuro real y cierto; cuando uno comprende el
presente y ve las dificultades, fracasos o derrotas y recuerda el camino
recorrido no invertido en vano sino rico en lecciones y ve sobre todo el
brillante porvenir de la clase, entonces el alma se templa y el corazón otra
vez se acera y marcha con ímpetu; todo lo hecho queda, las personas pasamos
pero queda la ideología desarrollándose, queda la rica experiencia positiva y
negativa, queda un Marx, un Lenin,
un Presidente Mao, todo queda y la nueva era
prosigue aunque hoy con dificultades, fracasos y derrotas; extraigamos todo
lo positivo del pasado y con todo eso afrontaremos el presente y serviremos
al brillante porvenir, que nosotros no veamos el triunfo no es la cuestión,
sino que el Partido, la clase llegue hasta la meta. Así pues, que el
camarada haya dado el giro hacia la línea correcta es motivo de alegría en
estos momentos difíciles, que la camarada Nancy lo haya dado y lo esté
refrendando en hechos como la entrevista que preparamos es también alegría,
no todo es dolor. Esto que estamos haciendo son piedras milirares,
ya sabemos construir Partido así que lo volveremos a hacer, más alto y mejor;
desde los setenta vengo sosteniendo que el problema no es caer sino volverse
a levantar cuantas veces sea necesario, el 67 el Partido se hizo trizas
porque no había línea, de esa reventazón salieron cuatro grupos, nosotros
fuimos una de esas partes, de ahí viene la fracción, la reconstitución, el
inicio, el Partido militarizado, el Ejército Guerrillero Popular y el Nuevo
Poder, hoy otra vez en situación difícil, pues el Partido no debe ser
destruido, no debe reventar, explotar, y si ayer no hubo línea ya hoy no es
así, tenemos marxismo-leninismo-maoísmo, tenemos pensamiento Gonzalo, tenemos
rumbo: la Nueva Gran Estrategia, la Nueva Línea Política General, etc., gran
experiencia acrecentada, militancia más forjada y dirigentes probados, somos
incluso hasta más viejos que ayer pero la juventud que tenemos es la fuerza
nueva de nuestro marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento Gonzalo; no olvidar
hemos sido levadura en las masas, somos lo nuevo, lo nuevo nunca va a
desaparecer y seremos siempre los comunistas, el Partido polo de atracción de
la juventud; la destrucción del Partido no debe ocurrir, empeñarnos en que no
se produzca, está en nuestras manos, que cada uno pruebe su condición de
comunista, la línea está establecida para todo el Partido, todos son los
llamados a asumirla, también los que están en la línea contraria están en el
Partido, son comunistas que transitoriamente yerran, por eso librar la lucha
a fondo para hacerles ver y sentir por su Partido. Hemos planteado que la
lucha por la defensa del Partido se concreta en defender la unidad del
Partido, téngase esto muy en cuenta. Destaquemos una
cuestión, la militancia, los cuadros y los dirigentes son los que están
librando la lucha, pero principalmente es la militancia, pues basta ver la
condición de los dirigentes en el aislamiento, y esa militancia con su poca
experiencia ha sumido la línea y la lucha por imponerla, con todos los
errores que puedan estar cometiendo han cogido la línea establecida, toman la
experiencia del Partido en manejo de la lucha de dos líneas; cada militante
tiene su derrotero y cuando se está en lucha salta a la luz y se llega a
momentos de enconamiento, pero no es para poner cruces, es para conocer los
puntos fuertes o débiles, para ver de qué se adolece y porqué hoy se les
presenta tal problema, la lucha contra la línea escisionista
burguesa es una lucha antagónica, pero podemos manejarla de tal modo que el
antagonismo no llegue a ruptura, el 79 el Partido no se rompió, se depuró; y
la cuestión está en fortalecer la izquierda para lograrlo, que la izquierda
asuma su papel, que coja la lucha para unir. Pero también cada línea
tiene su proceso y su especificación está pendiente sistematizarla para
definirla en todos los aspectos, pero definir línea es cosa seria, no
precipitarse, lo que sí ya está claro y podemos decir es que lo que le ha
pasado al Partido es que la izquierda se debilitó con la caída de importantes
dirigentes (ya el Permanente había perdido el segundo miembro del Partido: la
camarada Norah, miembro de la Fracción Roja, dirigente histórica de la
reconstitución y segundo miembro del permanente histórico de la guerra
popular), y con la caída de septiembre 92 la izquierda debilitada quedó
descabezada, así fue como quedó el Partido, no verlo era porque se potenció
el poder personal. Sobre esa base objetiva había margen para que esa línea
derechista en gestación detectada en el III Pleno se expresara y el empirismo
se potenciara, también que los izquierdistas arreciaran, pero había que ver
los hechos y analizarlos para definir; así en noviembre 93 dijimos hay
posibilidad de línea contraria de derecha o de línea ultraizquierdista
también contraria, eran posibilidades. En enero 94 dijimos lo que pasa en la
dirección del Partido afuera es que hay una izquierda muy débil, incapaz de
imponerse, revela debilidad derechista cediendo a la presión del izquierdismo
o de la derecha que tampoco se impone totalmente, si no ya se hubieran tirado
clara y abiertamente contra nosotros, eso es lo que calificamos de amalgama,
no había un salir ni a favor ni en contra abiertamente. Después de las cartas
pensamos que al Partido se le presentaban dos posibilidades, a favor o en
contra, jamás imaginamos saldrían con esa farsa "patraña" para
ocultar su oposición, usando lo que dijimos y fue válido para esas
circunstancias para tirarlo contra lo dicho hoy en nuevas condiciones; a
fines de octubre 93 nos dieron esa llamada declaración del 7 de octubre y la
criticamos partiendo de que no era del Partido, primero porque ¿en qué tiempo
se reunió, debatió y acordó, si las cartas fueron difundidas el 10 y 9 de
octubre? Claro el Comité Permanente tiene facultades para definir problemas
serios del conjunto del Partido, pero no para tanto pues camaradas, además
mientras nosotros estuvimos al frente nunca lo aplicamos ni actuamos jamás
como la c. Nancy ha actuado por su cuenta sin reunión alguna, con una simple
coordinación de minutos con el que debía resolver el problema, se le encarga
y lo hace sin consulta ni debate alguno, concluyendo proseguir; no creo que
Partido alguno haya jamás actuado así, nosotros no, ni el PCCH, el PCCH es
otra cosa, un Comité Central pequeño pero encabezado por el propio Presidente
Mao, con la inmensa autoridad que tenía, recuérdese
la reunión de Tsunyi, ahí el Presidente Mao tampoco decidió solo, con los pocos dirigentes que
había llamó a los cuadros. Hasta por la forma, porque no son nuestros usos,
ni qué decir del contenido, pues ahí nada dice del boicot, más bien llama a
botar por el no, trafica con parte de lo dicho por nosotros en DINCOTE
(Mensaje de septiembre 92), por eso concluimos eso no es del Partido, a lo
sumo sería de una posición aislada, absolutamente ciega, superficial, etc.,
que usurpa el nombre del Comité Central, como dice la Crítica ¿y? ¿no fue así? Sí pues, no era del Partido, porque el Partido
había sido usurpado por el bloque; el Partido pues no se había pronunciado
¿se consultó acaso con los dirigentes regionales o los cuadros del Partido?
Tampoco, ahí pues no definían nada. Habíamos analizado
también cual era la situación de la izquierda en la dirección, quienes, por
ejemplo el c. X dijimos es izquierda pero su punto débil es la política,
recuérdese las opiniones que vertía en las reuniones del Comité Central, como
herejías en el Vaticano, pero se le explicaba, se le daba razones y a todos
nos consta cuánto se esforzaba por encarnar la política, yo sí le he dicho
que su fuerte era el aspecto militar y también cuál es su parte débil, nunca
dije Ud. Sólo sirve para lo militar porque no
desligo política de militar; y ¿qué ha pasado, pues? La izquierda debilitada
cae en el influjo de otros. Y afirmo, izquierda eran A y B, y si a las cosas
vamos, muy buen manejo militar, en jerarquía y firmeza mejores que otros
¿porqué los marginaron? Porque ellos no hubieran consentido tan necia
calificación de la caída y los emplazaban a responder, así pues concluimos,
hay que diferenciar que una es la situación donde dirige la izquierda y otra
donde domina, ojo, no dirige la derecha, acogota, pone la rodilla en la
garganta a la izquierda, no la deja que opine, le tapa la boca. Posteriormente, recién
en noviembre 94 concluimos, analizando sus hechos y sus documentos, los pocos
que difundieron, que ésa era una nueva línea oportunista de derecha de
esencia revisionista, cuya médula es una línea militar burguesa, etc., todo
lo que está en "¡Unirse..!", criticamos a Yanamayo
por su documento de abril 19 cuya esencia era contra el pensamiento Gonzalo;
ahí tomándose atribuciones que no les correspondían definían de línea ultraizquierdista a lo que evidentemente a nuestro juicio
era oportunismo, derecha, como lo demostramos, pero ¿qué pasó pues? Los
camaradas de Yanamayo se sintieron ofendidos
¿maoístas que no aplican al Presidente Mao? No,
endurecieron el cuero cabelludo; pero además de esos yerros, opinaban que la
línea era sólo para los detenidos y salieron con eso de "Partido de
afuera y Partido de dentro", el Partido es uno fuera o dentro, y la
línea es para que todo el Partido la asuma, y quien está convencido de su
corrección organiza la lucha para imponerla, pues también erraron al decir
"todos los que están por el Acuerdo de Paz son de izquierda", tapando
derechismos e izquierdismos de los que apoyan para que en el fondo consentir
que la derecha mande y se vista de izquierda, poniendo al pensamiento Gonzalo
de escudo vacío para hacer vendibles sus baratijas, y ¿qué lucha de dos
líneas habían desenvuelto para imponer la línea proletaria? Ahí había fondo,
mariscales en contienda, grupos diversos, conchaves,
apañar a unos como a la c. R. A quien se le tiene reverencias por su
declaración habiendo llegado a pérdida de perspectiva, bueno, les dijimos
también que en la forma en que deslindaban con el bloque no aclaraban nada a
las bases sobre sus derroteros derechistas, no decían que el bloque
aprovechaba de sus errores pasados para imputarles capitulación, traición, etc, es que se sintieron dolidos y respondieron con la
idea de que nos han declarado al margen del Partido ahora ellos no son del
Partido o "Feliciano es traidor", ¿ya no es camarada? Y ¿a qué esa
calificación?, eso no dice la línea, en ningún momento dijimos eso, más, al
c. Se le dijo expresamente como consta en el informe "¡Unirse...!"
no sacar nombres aún, es que ahí refleja su contienda personal ¿hasta cuándo?
¿y quién defiende la línea? Además, les hemos dicho
póngase en lugar de ellos, si alguno de ustedes hubiera estado en esa
situación hoy sería diferente. Esa es una actitud derechista que encierra una
idea derechista, opuesta a la posición proletaria de librar la lucha de dos
líneas y a la táctica de cercar al Comité Central para imponer la Nueva Gran
Estrategia y lograr que el Partido asuma y se pronuncie ¿a qué viene el
calificativo de traidor? Esa idea parte de contienda antigua entre el c. .. y el c. Feliciano, oculta
el criterio de que quienes están en contra ya no son del Partido, insistimos,
no son dos Partidos, es uno en lucha de dos líneas y la contradicción es
terminar o proseguir. Esa es una pose pequeño burguesa y al fin y al cabo
palabra que no corresponde a la realidad y no resuelve nada; con mucha
facilidad, superficialidad y precipitación la usan quienes revelan desespero
e impotencia de argumentos; como hemos dicho, no era el momento de sacar
nombres, un año después recién lo estamos haciendo desde la autocrítica
pública de la c. Nancy y únicamente para tres cabezas del Bloque Escisionista, lo que debe repararse es que aún son
camaradas y el camarada Feliciano debe agachar la cabeza, autocriticarse
y definirse por la línea si aún algo le queda de posición de clase, espíritu
de Partido y desinterés absoluto, y así también los demás. ¿Porqué
el c. En vez de caer en ponerse a la cola de la necesidad periodística no se
sujetó a la línea y la aplicó? En síntesis, centra
en contienda personal y cae en el juego del contrario, socava la línea y
sabotea la táctica. Debe deslindarse con esto. También es erróneo que en esa
misma filmación que se nos ha informado, algunos hayan dicho "con
sujeción..." ¿sólo por eso? ¿no por
convencimiento? O la hipócrita posición de decir solamente "hable con el
delegado", y el colmo del derechismo es el desplante de la arrogancia
burguesa "esos que hacen acciones o ése Feliciano...", todas estas
cuestiones prueban que la izquierda ahí consentía que la derecha mande ¿cómo
es hoy? Y sobre el Acuerdo de Paz, es necesidad insoslayable; no quiere decir
que indefectiblemente se vaya a lograr, los hombres actúan dentro de las
leyes y pueden hacer cumplir o entrabar los procesos, actúan no como entes
aislados sino como parte de una clase y en lucha de clases. Dijimos que
obtenerlo demandaba lucha y en eso estamos, ya dos años bregamos para que se
cumpla la base principal de las cuatro que hacen factible el Acuerdo, la
cuestión principal sigue siendo que el Partido asuma, porque es el principal
opositor a causa de la línea revisionista y el Bloque Escisionista
usurpador que se sustenta en las armas que el Partido les dio y acciones de
guerra militarista burguesa imposibles de conquistar el Poder. Delante de los cc. Que han venido hemos sacado derrotero de los
dirigentes, de los del bloque y de quienes apoyan, porque la militancia debe
conocer y no dejarse sorprender, véase siempre si el dirigente aplica o no la
línea, siempre hemos criticado servilismo en el Partido. Aquí quiero recordar
algunas cuestiones que sobre la c. Nancy dijimos, es "araña que
teje" y los hechos probaron que no erramos, el 77 la dije: "usted aplica
la política de A rey muerto rey puesto" no me creyó y se resintió, ¿pero
qué ha hecho hoy? Tejió, lo puso al c. Feliciano delante y el c. le respondió
poniéndola de mascarón de proa y lo aceptó; ha sido
la que ha estado haciendo y deshaciendo en el Partido, ni una chacra se
manejó así ¿reveló a los cc.
sus dificultades, su derrotero? No, yo también le
dije que mientras yo dirigiera el Partido ella no sería jamás del buró porque
sus afanes de mandar y de poder personal no son buenos, pero en el Congreso,
en el Comité Permanente fue propuesta por un miembro, el otro apoyó y mayoría
define, pero yo estuve en contra, pude influenciar y cambiar la propuesta
fundamentando mi posición en el Comité Central, pero dije que los hechos
prueben a las gentes, que se demuestre en la práctica y los demás vean lo que
no ven hoy, y aquí estamos. Lo que yo siempre he dicho es que ella no tenía
condiciones para encabezar, por eso nunca se le puso como cabeza de aparato
alguno, pero se sentía pospuesta y lo que es más, resentida, dice en su
primera autocrítica escrita "el Presidente me dijo que no tenía
condiciones para nada". Léase el documento del 93
"¡Luchar...!" Ahí dice no se niega el espíritu de Partido, se trata
de si es una dirección capaz, dirección proletaria es decisiva, etc.; la c.
Norah le criticó de creerse la presidenta del Partido ¿lo recuerda? Y cada
vez que había que promover dirigentes al buró se sentía pospuesta por no
seleccionada, similar el c... ¿cierto o falso? y ¿cuántas veces fue
sancionada por el Comité Central? Pero se autocriticaba
y avanzaba. Algo del Derrotero del C. Feliciano El c. Feliciano tiene
un derrotero derechista, fue criticado y tuvo que autocriticarse
muchas veces en el Comité Central. Su constante desde el CAO (Centro de Autoeducación Obrera), en los años setenta, fue su
admiración al guevarismo no al maoísmo y esto lo
arrastró como lastre, errantismo, no construir,
apartarse de las masas, autoritarismo, aceptaba lo llamaran "el men". Tuvo problemas cuando la selección de los miembros
del buró y del Permanente el 80, sintiéndose rebasado y por camaradas
mujeres, manifestando en forma encubierta su disconformidad y afán personal.
Estuvo en la última oposición al inicio poniendo a una camarada como mascarón de proa, y también participó en el golpe de mano
de los dolidos por la crítica hecha que los derrotó e incapaces de abrir
lucha y sentar posición, se coludieron terminada la
sesión para armar su golpe de mocos y babas desbaratado a los minutos de
armarlo. En los ochenta fue
duramente criticado por estrechez política, carencia de sentido estratégico y
feudo, despreocupación del conjunto del Partido y ver solamente su parte.
Incumplió el Plan Nacional de Fuga el 82 en el centro. Siempre tardaba en
llegar a las reuniones del Comité Central e impotente político y militar sin
proponer nada expresaba "no resuelven los problemas de mi comité",
despreocupándose de la política internacional, cultor del derechismo, de
acción por acción, también fue combatido por ser pregón de "quienes
dirigen son quienes están en los hechos" para negar Jefatura. Fue blanco en el
Congreso por no construir bases de apoyo y soslayar las ciudades como
complemento en el camino de cercar las ciudades desde el campo, así por
chocar con la ideología: con maoísmo y con pensamiento Gonzalo. Y en el III
Pleno, tratando el comité que dirigía es que acordamos aplicar el pensamiento
Gonzalo para resolver los problemas nuevos; se le criticó el no persistir en
recuperar la sierra, el corrimiento de las bases hacia ceja de selva, en el
fondo desviar el sentido estratégico del comité; también se le llamó la
atención por los golpes excesivos a las mesnadas, sin diferenciación de
cabezas negras o los golpes indiscriminados absolutamente contrarios a la política
partidaria, así como no preocuparse de la acción armada ni la construcción en
las ciudades de la región. Es todo ese fondo
derechista el que se le potenció, y en las conmociones del 92 y 93
desenvolvió una línea escisionista burguesa y un
bloque escisionista, siendo la principal cabeza y
habiendo devenido caudillo militarista burgués, un usurpador que está
entrando a ser un impenitente revisionista. También vimos derrotero
de otros, nos es útil, le sirve al Partido, no es desdorar dirigentes, es
aprender de propios errores y vigilancia, control de abajo y de arriba. El
derrotero derechista del c. Feliciano nunca llegó a los niveles del
derechismo del c. ... pero también se autocriticaba,
se corregía y avanzaba, además nunca antes estuvo en la situación que está
hoy. El derrotero no es para
tomar medidas ¿Qué ganaríamos con expulsar a los cc. que han estado en esa línea
y bloque? Estaríamos actuando como el revisionismo y daríamos el triste
espectáculo de expulsarnos unos a otros, diferenciarse en los métodos de
lucha también. Los dirigentes de un Partido deben ver en primer lugar por el
Partido, pero ver también por la situación e sus militantes, tómese en cuenta
lo que dijera Lenin, la revolución no se hace con
ángeles del cielo, el material con que vamos a trabajar en esta nueva etapa
es con el mismo que hoy está en la pelea, es ese mismo aún con todos sus
errores y tienen derecho a corregirse, y esto no es benevolencia, comprender
el error cometido y corregirse, este es el rumbo que tienen y todos
obligación de definirse, pero tampoco es que quien coge ya es de izquierda,
tomar bandera de la línea correcta y corregir errores derechistas o
izquierdistas, resarcir con acciones meritorias daño causado y que sea un
evento futuro el que defina la situación de cada uno, su servicio a la IV
etapa del Partido. Hemos llamado a que
cada uno asuma su condición de comunista, cuadro o dirigente y lo demuestre,
que tome posición, se autocritique y responda pues
de su derrotero y haga acciones meritorias en la IV etapa del Partido;
aplíquese a todo el Partido la misma norma y diferenciar, pues no es lo mismo
dirigente que cuadro o militante, ni antiguo que nuevo, ni dirigente central
que de otro nivel, el problema es que el Partido es uno y que ahí dentro se
libra la lucha de dos líneas; no expulsar, insisto, esto va a proseguir,
dijimos dos o tres años y repito, si la manejamos bien desmontaremos la antagonización e impuesta la línea entonces recién
después entrar a campaña de rectificación, pero ahora lo principal es la
línea y la lucha de dos líneas para imponerla, así sentamos bases para la
reconstitución futura del Partido. Hay que estar
preparados, puede presentarse que el Partido defina en contra de la línea y
siga tapándose con "patraña" o que abiertamente esté en contra y
acuerde nuestra expulsión, la de todos los que estamos por la Nueva Gran
Estrategia, en ese caso persistir en que todo el Partido asuma la línea, desarrollar la
lucha hasta arrasar esa línea revisionista y demoler el Bloque Escisionista aislándolo al máximo. Piénsese, puede darse
que incluso algunos digan, bueno, es el Presidente Gonzalo, me sujeto pero me
aparto o me sujeto pero ¿cómo voy a operar? Y entre confusión y no sepan qué
hacer, se desesperen, se ofusquen y ninguno dé la cara; me refiero no a que
se entreguen sino a que no asuman la responsabilidad de tratar directamente con el gobierno, usando la
guerra para terminar la guerra iniciada en 1980. Obtener el Acuerdo sigue
siendo pues la cuestión, para lo cual será necesario especificar los
lineamientos que esbozamos en julio 93, según las condiciones actuales. El
Partido debe asumir oficial, pública y directamente; nosotros los prisioneros
de guerra sí podemos asesorar a los delegados que nombre el Partido, claro está
pidiendo todas las garantías necesarias. Por ello sería totalmente incorrecto
e inconveniente que el Partido simplemente se pronunciara diciendo: "El
Comité Central se sujeta y delega al Presidente Gonzalo y la c.
Miriam...", otra posibilidad es que unos persistan en proseguir y
rechacen la línea aún sabiendo es el Partido que la está llevando adelante,
no serían sino grupitos pequeños que quedarían en armas; tómese la
experiencia de la revolución española, quedaron hasta los años cincuenta unos
cuantos en armas; no decirles banda ni bandolerismo, ése es el término que el
imperialismo usa reemplazando los anteriores de narcoterrorismo, etc., para
calificar a los revolucionarios; esos grupitos no serían pues tampoco gentes
al servicio de narcos sino gentes equivocadas con
posiciones militaristas burguesas o pequeñas burguesas sin perspectiva alguna
de triunfo, desfasados de la realidad; pero ya no podrían traficar con el
nombre del Partido, sin embargo no es bueno esto ni para el pueblo. Por eso
esforzarse por que el Partido se una, por que el Partido asuma el término de
la guerra, que sea todo uno solo, pero si unos no están.... de acuerdo que
queden los menos, poquitos, no maldecirlos,
analizar la realidad, esos no serían sino grupitos no proletarios, no nos
conviene pero debemos entenderlo si se diera. Rechazar que el Partido se esté
convirtiendo en guardaespaldas de narcos como nos
imputan, algunos pueden estar traficando con
el nombre del Partido, pero una golondrina no hace verano. Guiarse por librar la
lucha y preservar el contingente para desarrollarlo; esto no es benevolencia,
una vez más, conocer las circunstancias en que están, el contingente del
Partido debe merecernos especial atención, la lucha es para curar la
enfermedad y salvar al paciente, preocuparse por que quede lo más probado, lo
más firme, llamarlos a que corrijan y arrojen esa negra bandera, que claven
la bandera roja, que prueben su cambio con acciones meritorias en la nueva
etapa del Partido; los cuadros son el oro del Partido, la militancia es la
base viva del Partido y los dirigentes son la experiencia viva del Partido. ESTA COMENZANDO EL SELLAMIENTO DE LA
UNIDAD DEL PARTIDO. SIGNIFICADO E IMPORTANCIA DE LA REUNION. Esta reunión tiene
importancia y sentido histórico porque así seamos cuatro cc.
en la celda, aquí esta comenzando el sellamiento de la unidad del Partido. La c. Nancy parte
fundamental de ese bloque ya salió, el c. presente al tomar posición por la
línea, siendo de un comité de importancia del Partido, parte fundamental de
la lucha, es un militante no de hoy día, persiste en su brega revolucionaria
de ayer desarrollada como combatiente comunista hace casi una década, tiene
hasta cuentas que lleva en el alma, pero asume la defensa del Partido; esto
demuestra que el sellamiento de la unidad del
Partido ha comenzado, lo cual prueba que el Partido no está dividido, que el
Partido es uno, y sus militantes si erraron aún gravemente son capaces de
corregirse. La lucha es ardua, dura, la tarea no es fácil, que salgan
públicamente a plantear su cambio no es fácil, es difícil; con conocimiento
de causa digo estamos asumiendo la tarea más difícil, riesgosa y peligrosa
del Partido en su largo trajín histórico y en un momento sumamente duro,
cuando la vida del Partido está en juego. Así que la victoria que debemos
lograr es mucho más difícil que la que se comenzó con la guerra, porque
buscamos que se mantenga la vida del organismo que dirige la revolución. La
izquierda no ha sido derrotada, de la derrota responde la derecha, pero si
con la lucha de dos líneas conjuramos la derrota y destrucción tampoco la
línea contraria cargaría con ella. Cumplamos nuestra
tarea; Lenin dijo, mirar de frente la amarga
verdad, si no se ve se entra en la lógica fraccional y se pierden los mejores
cuadros. Ser grandes y buenos timoneles, coger la línea y empeñar la
condición de comunista en que el Partido prosiga y aplique la Nueva Gran
Estrategia, ya sea en las mejores o peores condiciones. El Partido va a
proseguir así quedara un puñadito, éste sería más claro, con voluntad
irrefrenable, ir con los ojos abiertos, derrumbar muros, ser ariete, para eso
ver las dificultades para vencerlas, si queremos garantías absolutas nada
haremos, aprestarse a lo más difícil, a la peor condición, pero bregar por
que sea la mejor; tener confianza en el Partido y confianza en las masas, eso
nos enseña nuestra ideología invencible, jamás nadie ha derrotado ni
derrotará nuestra ideología. Por las circunstancias
y las condiciones la reunión es buena e importante, a todos nos fortalece la
posición que ha tomado el camarada, con palabras claras y sencillas que
expresan voluntad firme, muy expresiva su forma de intervenir, prueba que las
aguas vuelven a su caudal, es que el nuevo torrente rojo sigue en marcha y
desarrolla. Coger si se está en la oscuridad el pequeño rayo de luz que se
filtra y salir por ahí. Después de muchos años, la reunión ha sido también un
buen reencuentro de comunistas, siempre sirviendo al Partido, al
marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento Gonzalo y al pueblo de todo corazón y
con desinterés absoluto. PRESIDENTE GONZALO. Penal Militar Base Naval
Callao, 22/IX/95 *Documento pendiente de
corrección
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