Un hijo que crece -13-
Ambientación
María no estudió psicología evolutiva, ni antropología, ni análisis transaccional, ni teorías psicológicas, ni pensamiento filosófico contemporáneo. María tenía intuiciones de madre, tenía amor maternal y punto. Por eso dejó crecer a Jesús. Sabía que le había traído al mundo y que debía hacerle madurar. Sabía que el nacimiento fue el primer parto doloroso, pero que vendrían otros partos dolorosos cuando sintiera que Jesús se le escapaba de las manos porque crecía, porque se hacía hombre. Esa era la condición humana. Era lo que exigía ese Acrecer en edad, sabiduría y gracia delante de Dios y delante de los hombres@.
María, sencillamente le dejó ser El mismo. Le enseñó a decidir, a descubrir la verdad, a valerse por sí mismo a valorarse, a quererse, a aceptarse, a conocerse, a ser hombre capaz de entregar la vida por otros.
Canto: Tú estás cerca
Tú eres Madre, estás aquí,
me acompañas y me cuidas con amor.
Tú eres Madre, estás aquí,
y me ayudas como tú a decir sí.
Tú estás cerca, junto a mí
y en silencio vas orando ante el Señor.
Tú eres Madre del amor; vives cerca
de los hombres, del dolor.
1. El dolor de la pérdida
María asumió totalmente su tarea de madre.
Asumió incluso el hecho de Aperder@ a
Jesús con tal de que El creciera. Se sintió libre para hacerlo.
Tal vez nosotros no le habríamos perdido para que la historia no
dijera de nosotros que éramos distraídos. Le hubiéramos atado
con una cuerda.
María fue capaz incluso de perderle. Tan libre era en su inmensa
humildad.
Y todo esto me imagino que le costaría, supondría dolor, pero
dolor asumido, fruto del amor a Jesús.
Esta disposición interior de María de no protegerse, de ser
libre y dejar libertad a los demás, a Jesús, es lo que nos
enamora a quienes nos acercamos a ella como hijos.
Oración
* Gracias, María, por ser libre y conceder la
libertad necesaria a tu hijo para que creciera como persona.
- Ave María....
* Camina con nosotros, maría, en nuestro
proceso de crecimiento humano y espiritual.
- Ave María....
* Sigue siendo madre, a través de nuestro
cariño, de aquellos niños y jóvenes con dificultades para
crecer.
- Ave María....
* María, que comprendamos el dolor del
crecimiento, de la pérdida y del hallazgo de Jesús en nuestro
proceso de maduración.
- Ave María....
* Gracias, María, porque te sentimos pobre y
libre como un pajarillo, como madre sencilla. Que nosotros, desde
nuestra realidad, seamos así.
- Ave María....
Canto: Tú estás cerca
En las calles de la ciudad
en la gente que trabaja por su pan.
Vives, madre, en el hogar
de la gente de sencillo corazón.
Tú estás cerca, junto a mí
y en silencio vas orando ante el Señor.
Tú eres Madre del amor;
vives cerca de los hombres, del dolor.
2. Crecía en edad, sabiduría y gracia
Es decir, Jesús crecía integralmente. No era
deficiente en nada. Creció físicamente, naturalmente. Su cuerpo
fue sano. Creció en sabiduría, en inteligencia, en saber
descubrir la mano de Dios en los acontecimientos de la vida y de
la historia.
Y creció en gracia, es decir, en gratuidad. Jesús fue todo él,
don gratuito de Dios. Tan acostumbrado estuvo en su vida a dar y
a recibir gratuitamente que dio como regalo lo mejor de sí
mismo: la vida entera.
Y María estuvo a su lado enseñándole, compartiendo y también
aprendiendo a ser don gratuito, a ser gracia, a crecer en edad,
sabiduría y gracia como El.
Oración
* María educadora, enséñanos a atender todas
nuestras dimensiones personales para madurar, crecer y ser
felices.
- Ave María....
* María, que sepamos ser don gratuito, don
entregado. Que sepamos dar y recibir gratuitamente. Así
creceremos en gracia.
- Ave María....
* María, que en la construcción del Reino, en
nuestra tarea apostólica enseñemos a nuestros alumnos el don de
la gratuidad.
- Ave María....
* María, que asumamos valores, vivamos de
valores, proclamemos valores y anunciemos valores, esencialmente
los valores del Reino.
- Ave María....
* María, que tensemos nuestro espíritu para
ser madre y padre de los que no logran crecer en edad ni en
sabiduría ni en gracia.
- Ave María....
Canto: Tú estás cerca
En los niños y en la flor,
en el joven que posee una inquietud.
Vives, Madre, dando paz al anciano
que te reza en soledad.
Tú estás cerca, junto a mí
y en silencio vas orando ante el Señor.
Tú eres Madre del amor;
vives cerca de los hombres, del dolor.
3. Vida de familia
Qué importante para crecer es querer y
sentirse querido. Qué bien se crece en un clima familiar donde
haya amor. Nazaret es para nosotros fuente donde bebemos, donde
nos inspiramos para vivir el espíritu de familia.
Champagnat intuyó este medio para crecer. El era consciente de
que renunciábamos a formar una familia natural, pero no al clima
para crecer como personas normales. Por eso luchó para formar un
auténtico espíritu de familia en las comunidades y en las
mismas obras, escuelas o colegios.
Oración
* María, gracias por vivir los valores del
amor desde la naturalidad de una familia normal y presentarnos
así un modelo de vida.
- Ave María....
* María, ayúdanos a aceptarnos como somos,
diferentes y complementarios.
- Ave María.....
* María, que nos interesemos por la vida y el
trabajo de los demás.
- Ave María....
* María, que cultivemos la delicadeza, esa
finura de corazón, que sabe darse cuenta del hermano que se
halla en dificultad y lo ayuda con tacto.
- Ave María.....
* María, que sepamos perdonar y pedir perdón,
tratando de eliminar de nuestro corazón todo resentimiento.
- Ave María....
Canto: Madre de los hijos pobres
Virgen sencilla y humilde que viviste en
Nazaret, madre.
Casa de los hijos pobres que abren sus manos a ti, Madre.
Dios te ensalzó y te hizo grande
en tu misma pequeñez.
Haznos niños a nosotros para dejarnos en El, Madre.
Tú nos miras desde el cielo,
nos hablas al corazón,
con un abrazo de Madre
nos envuelves en tu amor (2)
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