Llegamos en la noche del viernes. Despues de merendar
y tomarnos una cervecita, nos dió sueño. Mis intenciones
al llegar era nadar, aunque fuera con agua fria, pero el sueño me
tumbó y nos dormimos casi inmediatamente.
Al amanecer, nos preparamos para salir a caminar un rato antes del
desayuno.
Caminando rumbo al tianguis de artesanías.
Vista panorámica de Cuernavaca.
Gabriel observando una avioneta aterrizando.
Graciela entrando en una tienda de artesanías.
Gabriel y Ñoñito esperando en la banqueta.
David posando con flores artificiales.
¡Noten qué colorido!
Tambien hay legumbres de adorno.
Mario compró una artesanía representativa...