Mariano José de Larra: “Vuelva usted mañana”

Comentario de Texto

 

 

 

 

 

Para las proposiciones que acerca de varios establecimientos y empresas utilísimas pensaba hacer, había sido preciso buscar un traductor; por los mismos pasos que el genealogista nos hizo pasar el traductor; de mañana en mañana nos llevó hasta el fin del mes. Averiguamos que necesitaba dinero diariamente para comer, con la mayor urgencia; sin embargo, nunca encontraba momento oportuno para trabajar. El escribiente hizo después otro tanto con las copias, sobre llenarlas de mentiras, porque un escribiente que sepa escribir no le hay en este país.

No paró aquí; un sastre tardó veinte días en hacerle un frac, que le había mandado llevarle en veinticuatro horas; el zapatero le obligó con su tardanza a comprar botas hechas; la planchadora necesitó quince días para plancharle una camisola; y el sombrerero a quien le había enviado su sombrero a variar el ala, le tuvo dos días con la cabeza al aire y sin salir de casa.

Sus conocidos y amigos no le asistían a una sola cita, ni avisaban cuando faltaban, ni respondían a sus esquelas. ¡Qué formalidad y qué exactitud!

- ¿Qué os parece de esta tierra, monsieur Sans-délai? -le dije al llegar a estas pruebas.

- Me parece que son hombres singulares...

- Pues así son todos. No comerán por no llevar la comida a la boca.

 

 

 

 

(1.    Localización.)

El texto propuesto para el comentario es un fragmento de “Vuelva usted mañana”, uno de los más conocidos artículos de costumbres que escribió Mariano José de Larra. La obra periodística de Larra, y particularmente sus artículos de costumbres, se sitúan dentro del llamado costumbrismo crítico del Romanticismo, que se caracteriza, frente al costumbrismo tradicional, por el análisis crítico de tipos, actitudes y costumbres de la sociedad de la época.

(2.    Punto de vista, personajes.)

“Vuelva usted mañana”  comienza con un preámbulo en el que el autor reflexiona brevemente sobre el tema del que va a tratar: la pereza. A este preámbulo le sigue, como es habitual en los artículos de costumbres, una anécdota supuestamente verídica en la que el autor participa como personaje. En el caso de “Vuelva usted mañana”, Larra ejerce a la vez como narrador y coprotagonista de la anécdota.

El otro protagonista es Monsieur Sans-délai, un francés que ha venido a España para reclamar unas propiedades, presentar unas proposiciones de negocios y visitar Madrid. Cuando Monsieur Sans-délai dice que pretende resolver sus asuntos en quince días, Larra, conocedor del carácter de los españoles, le advierte que va a necesitar quince meses.

El pronóstico de Larra empieza a cumplirse de inmediato. En los sucesivos episodios del artículo, la pereza e ineptitud de una amplia galería de personajes impedirá la realización de todos los proyectos de Monsieur Sans-délai, el cual terminará dando la razón a Larra sobre el modo de ser de los españoles.

(3.    Contenido y estructura.)

El fragmento a comentar contiene varios de estos episodios y las opiniones de los protagonistas ante ellos: incomprensión en Monsieur Sans-délai y corroboración de sus propias ideas en Larra, que anticipa ya la conclusión: la pereza forma parte del carácter de los españoles y es una de las causas del atraso del país.

Atendiendo a lo anterior, podemos distinguir dos partes en el texto:

·        La narración de los episodios en los tres primeros párrafos. En cada uno de ellos diversos personajes secundarios frustran las expectativas del extranjero. De hecho, la narración de las acciones tiene como finalidad primordial efectuar un retrato de una amplia galería de personajes, que componen un mosaico representativo de la sociedad española y cuya característica común es la pereza.

·        El diálogo en el que Monsieur Sans-délai y Larra expresan sus opiniones sobre los hechos.

 

 

Primera parte

 

Segunda parte

 

Narración

de los episodios

â

Retrato de

 

Diálogo:

reacciones de los protagonistas

â

Párrafo 1

traductor, escribiente

 

Monsieur Sans-délai: incomprensión del carácter de los españoles.

Párrafo 2

sastre, zapatero, planchadora, sombrerero

Sociedad

española

 

Párrafo 3

amigos y conocidos

 

Larra: corroboración de su tesis: la pereza define el carácter español.

 

(4.    Estilo.)

En la primera parte, como ya hemos observado, se relatan una serie de episodios sobre los que se extraerán conclusiones en la segunda. Cada párrafo se ocupa de sucesos distintos, centrados en una serie de personajes secundarios de cuyas acciones (o mejor dicho, omisiones) se desprende claramente que tienen como común denominador una extrema pereza, subrayada frecuentemente con hipérboles.

Así, en el primer párrafo, el traductor y el escribiente retrasan la presentación de sus proposiciones de negocio. El primero les hace seguir “los mismos pasos” que el genealogista, personaje del episodio anterior que necesitó tres semanas para hacer un informe genealógico equivocado. La frase siguiente retrata hiperbólicamente el carácter del personaje; ni siquiera los apuros económicos alteran su indolencia:

 

Averiguamos que necesitaba dinero diariamente para comer, con la mayor urgencia; sin embargo, nunca encontraba momento oportuno para trabajar.

 

El mismo mal aqueja al escribiente. Larra, de paso, aprovecha para arremeter contra la ineptitud de los escribientes mediante una paradoja (“un escribiente que sepa escribir no le hay en este país”). Su ineptitud es tal que llena las copias “de mentiras”, es decir, ni siquiera es capaz de copiar fielmente. Hay que observar, por otra parte, que este episodio aquí iniciado no termina hasta más adelante: después de un sinfín de retrasos y trámites burocráticos, sus propuestas son rechazadas, pero todavía Sans-délai atribuirá el fracaso a una intriga; Larra le hará ver que “La pereza es la verdadera intriga. Es más fácil negar las cosas que enterarse de ellas.”

El segundo párrafo, en efecto, abandona el episodio anterior y describe la desidia de una serie de personajes, los cuales cumplen tan mal con su oficio que provocan a Monsieur Sans-délai toda clase de molestias. La marcada desproporción entre la simplicidad de la tarea que les encomienda y el tiempo que tardan en realizarla es también una hipérbole con la que se muestra cómo la pereza reina en todos los oficios.

 

sastre          

veinte días

hacer un frac

zapatero

tarda tanto que debe comprar botas hechas

planchadora

quince días

planchar una camisola

sombrerero

dos días

variar el ala del sombrero

 

Y, en el tercer párrafo, la pereza ya no sólo afecta al trabajo, sino incluso al ocio y a las relaciones sociales: los amigos de Sans-délai faltan a las citas sin avisar, no responden a sus mensajes… Una exclamación irónica es todo lo que merece, para Larra, un estado de cosas que conoce perfectamente: “¡Qué formalidad y qué exactitud!”

El diálogo de la segunda parte muestra, como ya dijimos, las distintas opiniones de los protagonistas sobre el modo de ser de los españoles. A Larra le parece que las experiencias por las que han pasado son suficientes para demostrar ya su tesis, y quiere saber si el extranjero comparte ya su opinión.

 

- ¿Qué os parece de esta tierra, monsieur Sans-délai? -le dije al llegar a estas pruebas.

 

El francés, sin embargo, no se encuentra todavía en condiciones de comprender la conducta de los habitantes del país. Desde su mismo nombre (Monsieur Sans-délai, o sea Señor Sin-tardanza), Larra lo ha ido presentando a lo largo del artículo como hombre activo y emprendedor, creando una antítesis entre su modo de ser y el carácter de todos los españoles con los que tropieza. Monsieur Sans-délai carece además de prejuicios negativos acerca de España, por lo que el hecho de que termine dándole la razón desde su perspectiva neutral proporcionará una mayor objetividad a la tesis de Larra.

Pero, por el momento, Monsieur Sans-délai se limita a aceptar que los españoles son distintos a sus compatriotas, sin comprender en qué consiste su peculiaridad. Necesitará pasar seis meses en el país para aceptar la opinión que Larra tiene ya formada, opinión que, anticipando las conclusiones del artículo, expresa con otra hipérbole cómica.

 

- Pues así son todos. No comerán por no llevar la comida a la boca.

(5.    Conclusión.)

El texto comentado, en definitiva, es una buena muestra de la disposición argumentativa de los artículos de costumbres de Larra, que parten siempre de una anécdota para analizar los males de la España de la época. En el caso del fragmento comentado, la anécdota sirve para retratar (con frecuentes hipérboles cómicas que caricaturizan a los personajes y amenizan el relato) el modo de ser y las costumbres de una serie de personajes que representan al conjunto de la sociedad. Y la observación de tales personajes no tiene como objetivo trazar los cuadros pintorescos del costumbrismo tradicional, sino conducir a unas conclusiones críticas que Larra expresa ya en el fragmento: la pereza define el modo de ser de los españoles y reina en todas las clases sociales.