Si el supremo creador

te da un hijo tiembla,

por el sagrado deposito que te confiere.

 

Haz que ese hijo

hasta los diez años te adore,

hasta los veinte te ame,

y hasta la muerte te respete

 

Sé para ese hijo

hasta los diez años su padre,

hasta los veinte su maestro,

y hasta la muerte su amigo.

 

Anónimo