NADA

 

 

 Como la vida es nada en tu filosofa

 brindemos por el cierto no ser de nuestros cuerpos.

 

 Brindemos por la nada de tus sensuales labios

 que son ceros sensuales en tus azules besos;

 como todo lo azul, quimérica mentira

 de los blancos océanos y de los blancos cielos.

 

 Brindemos por la nada del material reclamo

 que se hunde y se levanta en tu carnal deseo;

 como toda la carne, relámpago, chispazo,

 en la verdad mentira sin fin del Universo.

 

 Brindemos por la nada, bien nada de tu alma,

 que corre su mentira en un potro sin freno;

 como toda la nada, bien nada, ni siquiera

 se asoma de repente en un breve destello.

 

 Brindemos por nosotros, por ellos, por ninguno;

 por esta siempre nada de nuestros nunca cuerpos;

 por todos, por lo menos; por tantos y tan nada;

 por esas sombras huecas de vivos que son muertos.

 

 Si del no ser vinimos y hacia el no ser marchamos,

 nada entre nada y nada, y cero entre cero y cero,

 y si entre nada y nada no puede existir nada.

 

Julia de Burgos – Puerto Rico