Era la madrugada del día siguiente, algunos rayos del sol se filtraban a través de las cortinas semiabiertas de la habitación de Bulma. Esta al sentirlos comenzó a despertar, así que se volvió buscando a Vegeta, pero éste ya no estaba.

Bulma: Se habrá ido ya?

Luego de bañarse y arreglarse Bulma bajó a la sala. Trunks se encontraba en un sofá leyendo una revista.

Bulma: Buenos días Trunks.

Trunks: Buenos días mamá.

Bulma: Oye hijo, has visto a tu padre?

Trunks: Salió muy temprano, dijo que debía ir a entrenar o algo así.

Bulma: Vaya que este hombre se toma las cosas en serio.

Mientras tanto, Kakarotto (ejem, es decir), Goku y Vegeta se encontraban en camino hacia donde entrenarían. Mientras volaban, Vegeta se encontraba muy pensativo.

Goku: Oye Vegeta, te pasa algo?

Vegeta: Porqué lo preguntas Kakarotto, acaso debería pasarme algo?!!

Goku: No, es sólo que… estabas muy pensativo y…

Vegeta: Entonces si notaste que estaba pensativo porque demonios me interrumpiste?!

Goku: Lo siento Vegeta… es que (en ese momento llegaron al sitio en el que entrenarían) Mira Vegeta, ya llegamos!!

Vegeta observó el lugar a medida que aterrizaban. A decir verdad era un sitio totalmente extraño, había un contraste total entre lo vivo y lo inanimado. En un sitio sólo habían montañas de roca, y una especie de desierto, pero justo al lado había una especie de oasis, un bosque lleno de árboles, plantas verdes, e incluso una pequeña cascada que salía de una roca.

Vegeta: (colocó sus cosas en el suelo) Bien Kakarotto, estás listo para entrenar?

Goku: Si claro, sólo podríamos comer algo antes? Me muero de hambre, y Milk me preparó bastante comida.

Vegeta: (casi se muere ante esta actitud, pero sonrió para si mismo mientras pensaba) No serás tú el día que dejes de hacer ese tipo de cosas…

Goku: (con la boca llena de comida) Oye Vegeta, no quieres comer algo?

Vegeta: eh?… (se sorprendió un poco ante esto, pero de pronto recordó que no había comido nada desde la noche anterior) si claro. Y Kakarotto, hazme un favor, no hables con la boca llena, se ve mal.

Goku: (con la boca llena) Lo siento, Upps!!

Luego de comer, se dispusieron a entrenar, y así pasaron todo el santo día, hasta que llegó la noche, y con ella, la hora de cenar. Así que ambos Sayans tendieron sus tiendas de campaña en la parte boscosa, encendieron una fogata para calentar la comida, y se dispusieron a comer.

La luz de la fogata bañaba suavemente los cuerpos perfectos de ambos sayans. Sus trajes estaban rasgados debido al duro entrenamiento.

Vegeta observó a Goku mientras comía. Las flamas le daban un tinte bronceado que le quedaba muy bien. Aparte de eso, podía observarse partes de su bien construido torso a través de las rasgaduras de su traje. Sus brazos musculosos y fuertes, y en si todo lo que en su cuerpo era contrastante con su indulgente mirada, la que hacía que Vegeta sintiera que debía confesar sus sentimientos.

Luego de cenar, ambos Sayans se tendieron en el suelo, Goku observaba hacia el cielo.

Goku: Oye Vegeta, tu abuelito te contaba historias acerca de las estrellas cuando eras niño?

Vegeta: eh? Mi abuelito?

Goku: Si, el papá de tu papá.

Vegeta: (se sentó en ese momento mientras Goku se hacía a un lado) KAKAROTTO, ERES UN IDIOTA!!! POR SUPUESTO QUE SE QUÉ DEMONIOS ES UN ABUELO!!! (tranquilizándose volvió a recostarse en el pasto mientras meditaba por unos segundos) ...es simplemente que nunca lo conocí.

Goku: (volviendo a recostarse también) Es una lástima. Sabes? mi abuelito solía contarme historias acerca de las estrellas. Me decía que cuando alguien moría, se iba hacia una estrella, y desde ahí nos cuidaba.

Vegeta: Pero que patrañas!

Goku: (observando a Vegeta) A ti que te contaba tu papá?

Vegeta: (frunció el ceño; extrañamente y por primera vez en su vida quiso compartir estas experiencias) Bueno… mi padre solía contarme acerca de las grandes batallas de los sayans en el Universo, y solía decirme que… algún día llegaría a ser el Rey de toda la Galaxia…

Goku: Te puedo preguntar algo?

Vegeta: Ya lo hiciste, pero si puedes…

Goku: (no comprendió lo que Vegeta había dicho, pero de todos modos preguntó) Porqué después de todo el tiempo que llevamos de conocernos, tu sigues llamándome Kakarotto, en lugar de llamarme Goku, como todos los demás.

Vegeta: (se volvió hacia Goku) Acaso te molesta que te llame Kakarotto?

Goku: No, es sólo que es extraño, me gustaría que alguna vez me llamaras por mi nombre.

Vegeta: Bueno, lo intentaré.

Goku: Dime algo Vegeta, aun te gustaría ser el Rey de la Galaxia?

Vegeta: … para serte sincero, no lo se (dijo mirando al cielo de nuevo). Goku… (sonrió) hmm, alguna vez has sentido algo que crees que está mal sólo porque si?

Goku: (sentándose) Bueno, una vez me comí un pastel que Milk había hecho especialmente para Gohan…

Vegeta: (levantándose también) UGH!!! No me refiero a eso. Digamos, nunca has querido hacer algo… prohibido?... No! Mejor ni me lo digas.

Goku: Pero porqué? Acaso me crees incapaz de hacer algo prohibido?

Vegeta: Simplemente olvídalo quieres?

Goku: Eres injusto. Te crees superior a mi.

Vegeta: Lo soy…(sonrió maléficamente)

Goku: No es cierto.

Entonces Goku, dejándose llevar por un impulso, se lanzó hacia Vegeta, tumbándolo en el suelo y quedando sobre él, muy cerca de su rostro, e inmovilizándolo. Vegeta no supo como reaccionar, simplemente se limitó a observar los ojos de Ka… (ejem) Goku mientras sentía que los latidos de su corazón se aceleraban.