- ¡¡¡Otra vez aquí!!!, Ya estoy cansado de esta oficina...- Dijo Trunks bastante enojado y molesto, eran las 9 am y él estaba trabajando, mientras tranquilamente podría estar durmiendo. La puerta de su oficina presidencial se abrió, y su madre apareció y lo miró enojada:

- ¿Otra vez estas quejándote?, te escuché desde afuera!!

- Lo siento madre... es que me aburro... soy muy joven para ser presidente.- Se excusó él.

- Tienes 21 años y no llevas ni una semana aquí... quizás tengas razón, hijo, pero esta es la tradición familiar y debes respetar las decisiones mías y de tu abuelo.

- Lo se, madre...

- Bueno... me voy a mi oficina, pero recuerda que hoy tienes una entrevista con tu nueva asistente que yo misma elegí.

- ¿Y por qué no la elegí yo?

- Porque tu no sabes elegir aun... y la que habías elegido era una incompetente... por eso tuve que tomar cartas en el asunto.

- Con ese pretexto nunca sabré elegir...

- Cuando te acostumbres lo podrás hacer, pero ahora será mejor que lo haga yo... Bueno, cambiando de tema, ella se llama Lola Bonny y tiene 24 años, esta graduada en la Universidad Superior de la Capital del Oeste y es muy capaz en su trabajo. Quiero que la trates bien y no hagas que su estadía aquí sea desagradable...

- Como tu digas, madre... la trataré bien...

- Eso espero... nos vemos, hijo...

Bulma se fue y Trunks siguió mirando la ventana con cara de aburrimiento. A las 11 am, Shuaisa (su secretaria) tocó a la puerta:

- Con permiso, señor...

- ¿Qué sucede, Shuaisa?

- Ha llegado la señora Lola Bonny, su nueva asistente...

- Hazla pasar, por favor...

- Si, señor...

Trunks mientras espera que ella pase, se queda pensando: "¿Señora?, Es muy joven y ya esta casada... desperdició su juventud mas que yo...". De pronto, la puerta se abre, y entra una HERMOSA mujer de cabellos azules, ojos verdes muy profundos, escultural cuerpo e infernales curvas. Trunks se saca los lentes para verla mejor, y se le cae toda la saliva al ver semejante obra de arte.

- Mucho gusto, jefe... Me llamo Lola Bonny. Su madre me ha hablado muy bien de usted.

- A mi también...- Dijo mirándole todo su cuerpo. De pronto reaccionó y se dió cuenta de que debía trabajar antes que nada.- Por favor tome asiento.- Lola se sentó enfrente de él y lo miró fijamente. Él se quedo unos segundos callado y finalmente habló:- Hablemos de su trabajo aquí... ¿Tiene experiencias en otras empresas?...

*******************************

Ellos hablaron durante largo rato del trabajo, y Trunks estuvo muy conforme con su nueva asistente, era muy capaz de su trabajo y sabia que su madre había elegido bien.

- Bueno...la veré mañana a las 9 am para empezar a trabajar.. Déjeme mostrarle su nueva oficina... - Trunks se paró y la guió a Lola a una puerta que se encontraba cerca de su escritorio. Al entrar ambos, se encontraron con una oficina bastante bonita y cómoda.

- ¡Me encanta esta oficina!- Dijo Lola muy emocionada.

- Me alegro mucho... Bueno, la dejare para que se acomode...

- Gracias, jefe... ah! Y una cosa mas... si es que me permite...

Trunks se quedó mirándola durante un rato, extrañado, hasta que contestó.- ¿Si?, ¿Qué sucede?

- Es que.... seria mucho pedir el hecho de que no me hable de "usted"?

- Oh... bueno....

- Sino no importa! Es que no estoy muy acostumbrada a tanta formalidad...

- No hay problema... ahora te hablare así, esta bien?

- Claro que si, jefe....

- Bueno... si tu quieres tampoco me hables de "usted".

- Nooooo, de ninguna manera! Usted es mi jefe y debo tratarlo con respeto!!

- Esta bien, como tu quieras...

- Así esta mejor, jefe...

- Que bueno...

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Lola Bonny se adaptó rápidamente al ambiente de la Capsule Corp. Trunks estaba mas que conforme con su trabajo, y la verdad era que sin ella el no podría mantener tan bien la empresa. Su asistente era una maravilla, y eso lo hacia muy feliz.

Una día, a la salida, Trunks se iba en su limosina cuando ve a Lola en una esquina como esperando a alguien. Como esto le llamó mucho la atención, le hizo parar al chofer a su lado. Al parar, bajó su ventanilla y le habló a Lola.

- ¿Qué haces aquí? Ya son las 9 pm... hoy terminamos mas tarde...

- Es que estoy esperando a mi esposo... dijo que vendría a buscarme hoy, pero ya se tardó...

- Si quieres yo puedo llevarte...- Le dijo Trunks.

- No podría pedirle tanto, jefe...

- No es ninguna molestia...

- Le agradezco, pero lo seguiré esperando, para que no se preocupe.

- Bueno... no te obligare...

- Gracias por entenderme, jefe.

- De nada, Lola... nos vemos mañana...

- Así será, adiós jefe Trunks!

- Adiós...- La limosina de Trunks se marché y él se quedó muy pensativo. Ya en su casa, Trunks fue a su cuarto y se recostó en la cama.

"Vaya! Lola esta casada... que lastima, es tan joven y bella... pero tiene un esposo!! Debo dejar de hacerme ilusiones con ella...". Sus pensamientos fueron interrumpidos por el teléfono. Rápidamente lo atendió.

- ¿Hola?

- Hola, Trunks...

- ¡¡Goten!! Que sorpresa...

- Pues si... con tanto trabajo me tienes abandonado, amigo...

- Lo sé... pero sabes que no es porque yo lo deseo así...

- Ya sé, pero no puedes trabajar tanto... necesitas distraerte... Vayamos a la nueva discoteca que abrieron en Satan City, quieres?

- No... estoy exhausto... mañana mejor, si?

- Trunks... pareces un viejo... pero esta bien... aceptare tu condición, mañana vamos, lo prometes?

- Lo prometo, Goten...

- De acuerdo! Nos vemos entonces... si te aburres yo estaré en la discoteca de todos modos, de acuerdo?

- Perfecto... hasta mañana...

- Adiós, Trunks...

Trunks tiró el teléfono a un lado, y miró fijo hacia el techo. "Ya no puedo seguir viviendo así... soy joven, y debo divertirme... pero desde que empecé a trabajar no he tenido ganas ni de respirar". Trunks siguió mirando al techo, hasta que sin pensarlo se levantó de la cama y se fue al baño. Se dio una ducha rápida y después se vistió de manera informal (Se puso unos jeans no muy justos ni muy grandes en tono oscuro, una camisa negra y un abrigo gris) y salió de su habitación. Caminando por el pasillo se cruzo con su madre:

- ¿Dónde vas, Trunks?

- Saldré por ahí... no te preocupes...

- ¿Y la empre...?- Bulma no pudo terminar de preguntar, pues Trunks ya se había ido.

El saiyan viajo con su auto último modelo por toda la ciudad dando vueltas pro todos lados, mientras pensaba: "No se donde estoy yendo... no se por que salí de casa... pero no tengo ganas de ir hasta Satan City...", justo en ese instante pasó por una especie de bar bastante moderno. Trunks se quedó un rato mirando un poco, hasta que se decidió a entrar en el.

Al estacionar el auto entro al bar, y vio que había mucha gente, música tranquila y muchas parejas en las distintas mesas. "Creo que no encajo mucho aquí... es que estoy solo...", pensó. Se acercó hacia la barra del bar y se sentó en una silla alta. Cuando iba a pedir algo una mano le tocó el hombro, y el se dio vuelta al instante, ya que no esperaba encontrarse a nadie.

- ¿¿¿LOLA???, ¿Qué haces aquí?- Dijo Trunks extremadamente sorprendido al ver a su asistente vestida con un vestido azul oscuro bastante corto y bastante escotado, con un pequeño abrigo encima.

- Pues me divierto...

- ¿Y tu esposo?

- Se fue de la ciudad... por eso lo esperaba hoy... estará de viaje de negocios por una semana, así que vine aquí a buscar "compañía"...- Trunks abrió los ojos enormes al escuchar a Lola, no podía creerlo, para él, ella era una esposa fiel y dedicada, pero parecía ser que se había equivocado.

- ¿Si?... Bueno... que sorpresa...

- ¿Y usted qué hace aquí, jefe?

- Estaba aburrido en mi casa...

- ¿Aburrido? Jajajaajaj!!! Pues lo habría dicho antes, jefe!- Lola se acercó al que atendía y le dijo: - Tráigame dos cervezas...

- ¿Lola?, ¿Qué haces?- Dijo Trunks sorprendido.

- Yo invito, jefe... imagino que desde que es el presidente ya no se divierte muy seguido...

- Pues...

- Vamos! Yo me ocupare de entretenerlo hoy, si?

- De acuerdo...

Así, Trunks y Lola tomaron un poco, pero no demasiado como para estar borrachos, solo estaban "alegres".

- Jefe... ¿Quiere venir a mi casa?

- No lo sé... la verdad es que tengo sueño...

- Vamos... no quiero quedarme sola en casa hoy...

- Bueno, vamos...

- Así se habla, jefe!- Trunks y Lola se marcharon. Él recogió su auto y lo convirtió en cápsula. Fueron caminando a la casa de ella que se encontraba a tan solo dos manzanas. Era en un edificio bastante lujoso. Subieron por el ascensor varios pisos, hasta llegar al décimo, donde ella vivía. Al abrir la puerta, Trunks se sintió confundido de si entrar o no. Ella lo notó y le dijo:

- No tenga miedo, jefe... no le haré nada malo...

- Es que... aun no puedo creerlo...

- ¿Qué cosa?

- Es... no se como decirlo...

- ¿Esta preocupado por mi esposo?

- Pues...

- Ya sé, jefe... si, le soy infiel, y él a mí... así que todo estará bien, si?

- No lo sé, Lola...

- Vamos.... entre de una vez... se ve cansado y esta un poco borracho, así que no lo dejaré ir así...- Lola lo arrastró a su casa, cuando el entró, ella cerró la puerta con seguro y llave, y tomó la mano de su jefe.

- ¿Le gusta mi casa?- Trunks miró el apartamento, era bastante grande y muy bien decorado.

- Si... es bonito...

- Que bueno que le gusta, jefe. Ahora venga conmigo.- Lola lo tomó de la mano y lo llevó hasta el sofá que se encontraba en la sala. Ella había prendido una pequeña lámpara, por lo cual no estaba del todo claro el lugar. Sentó a Trunks a su lado en el enorme sofá y tocó su espalda. La acarició y presionó un poco.

- Jefe... alguna vez le han dado un masaje?

- ¿Eh?

- Un masaje... nunca le han dado uno?

- No...

- Vaya! no puedo creerlo... yo voy todas las semanas, y créame que no puedo vivir sin ello...

- Ah... y?

- Bueno...- Dijo Lola mientras acariciaba la espalda de su jefe. - Yo podría... aunque no soy profesional... si usted quiere... yo...

- ¿Un masaje?

- ¡¡Si!!, ¿Quiere uno?

- Eh... no lo se... no estoy seguro...- Dijo él ligeramente sonrojado.

- Oh... vamos, jefe!!! no lo voy a lastimar... solo le daré placer...

- ¡¡¡¿¿¿EH???!!!

- Placer con los masajes... son muy placenteros...

- Bueno... esta bien. ¿Qué debo hacer?

- Solo sígame, jefe...- Lola volvió a guiarlo por su casa, hasta llegar al cuarto de ella. Había una cama matrimonial y la habitación estaba decorada con varias cosas. Trunks se sentó al borde de la cama y Lola se subió a ella y se colocó justo detrás de su jefe. Puso sus manos en sus hombros y empezó con los masajes.

- ¿Le gusta, jefe?

- A decir verdad... si, me gusta mucho...

- Que bueno...- Lola lo hizo con mas intensidad, y Trunks inevitablemente empezó a respirar mas fuerte. La manera en la que ella lo tocaba lo estaba haciendo imaginar centenares de cosas indebidas, cosas que jamas se había imaginado. Lola había despertado toda su imaginación. Ella también empezó a fantasear, y escuchar la suave respiración de Trunks la hizo ir mas allá. Lo recostó en la cama boca abajo y ella se arrodilló sobre él, así empezó a tocar toda su espalda, levantándole la camisa que Trunks tenia puesta y acariciando su espalda debajo de ella. Él se levantó y se sacó la camisa. Ella observó su cuerpo tan bonito y sensual, y no puedo contenerse, acerco sus labios al pecho de él y empezó a besarlo. Trunks acarició su rostro mientras Lola lamía su pecho, pero ella lo detuvo y lo miró directo a los ojos.

- Jefe... no se preocupe... yo me encargo, usted no tiene que hacer nada... por lo menos por ahora...- Ella le guiñó el ojo y siguió lamiéndolo. Trunks comenzó a excitarse muchisimo, ya casi no lo soportaba y su erección cada vez era mas grande.

- Lola... no sigas... yo... yo...

- ¿Ya no lo soporta, jefe?

- No... no aguanto...

- Justo lo que quería... - Lola despojó a Trunks de sus pantalones y su ropa interior. Ella lo recostó bien en su cama y separó sus piernas, para estar mas cómoda ella. Acto seguido se introdujo su pene en la boca. Lo chupaba lentamente, pero de una manera extremadamente intensa. Trunks pegaba gritos todo el tiempo, no podía dejar de gemir y jadear.

- Oh... Lola... detente... no quiero cometer una locura... por favor... - Lola, en vez de dejarlo, lo hizo más rápido. Trunks estaba al limite de lo que su cuerpo podía soportar. Como Lola no quería quedarse sin nada, dejo de hacer lo que estaba haciendo y se sacó toda la ropa con una velocidad única. Trunks quedó boquiabierto al ver ese cuerpo perfecto enfrente de él. Ella se sentó en su miembro y comenzó a moverse de una manera salvaje. Saltaba y saltaba, se agachaba sobre su pecho y mordía los pezones del saiyan. Apretaba su entrepierna contra la de él. Trunks ya no lo soportaba. Él puso sus manos en la cintura de ella, y las condujo hacia sus pechos, los que empezó a exprimir fuertemente. Lola puso sus manos sobre las de Trunks y las retiró.

- ... Aun no, jefe... aun no...- Dijo sin dejar de lado sus movimientos.

- Lola... Lola...- Trunks estaba casi inconsciente.

- Jefe... Jefe!!! Ahora si!!!- Lola salió de encima de él y Trunks se recostó sobre ella, abrió sus piernas y la penetró. Jamas en sus otras experiencias había sido tan rudo y salvaje con una mujer, él era de los que eran muy delicados y amables, pero Lola lo estaba transformando en otra persona, él se estaba liberando y desquitando con cada empujón contra ella. Cerraba los ojos y la escuchaba gritar sin dejar de moverse rápidamente. Trunks la volteó y la penetró por detrás. Lola cerraba los ojos y le gritaba:

- OHhhh, Jefe!! Siga por favor!! No se detenga!!! Lo hace de maravilla!!! Siga!! Mas fuerte!!! Maltráteme!!!

Trunks la escuchó y volvió a cambiar de posición. Se puso contra la pared aun en la cama y la sentó sobre su miembro, penetrándola por detrás de nuevo. Ella empujaba contra él y él contra ella. Ya habían pasado demasiado tiempo unidos como para aguantarlo por mas tiempo.

- No lo soporto, Lola...

- Yo tampoco... termine por favor, jefe...

- ....... OH! Lolaa!!!

- ¡¡¡¡¡JEFE!!!!!

Trunks y Lola se separaron. Lola se tiró sobre la cama y se dió vuelta, sentándose justo enfrente de Trunks. El aun permanecía en el mismo sitio sin moverse. Todavía no conseguía recuperar el aire.

- Lola... yo..

- Gracias, jefe...

- ¿Por qué me agradeces?

- Por esta grandiosa noche... es mejor que mi esposo, a pesar de ser tan joven... se nota en usted la experiencia...

- Pero no tanto como en ti, Lola...

- Soy mayor que usted, jefe...

- Lo se...- Trunks se acerco a ella y la besó apasionadamente. Después de eso se vistió y se marchó, tomándose un taxi.

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Al día siguiente, Trunks fue a la oficina como si nada, hasta que Lola apareció.

- Hola, jefe...

- Hola, Lola...

- Solo quería decirle algo...

- ¿Qué cosa?

- Que me encantaría repetir lo de ayer..

- A mi también...

- ¿Le parece hoy a las 11 pm en mi casa? Mi esposo llega la semana que viene...

- Me parece bien... nos veremos entonces...

- Perfecto...- Lola fue a su oficina, y Trunks levantó el teléfono. Marcó un número y hablo.

- Hola, Goten...

- ¿Qué haces, Trunks?

- Solo quería avisarte que hoy en la noche no podré salir...

- ¿Por qué?

- Tengo una... reunión de negocios...

Otra vez este fic carece de sentido alguno, creo que el anterior ("Ardiente tormenta pasional", sino lo has leído, ¿Qué esperas?) tenia mas trama... este no tiene ningún sentido.

¡¡¡Nos vemos!!!