Un ex integrante de la sociedad Argentina Universal y Humana y ex instructor de esa agrupación en Casilda aseguró que "un grupo" de gente que concurría a los cursos y pertenece a "Amigos de la Naturaleza" 'se voló' y construyó el búnker en un campo de esta localidad. Además dio pistas sobre el carácter secreto de la organización.
"Yo escuché todo lo que se está diciendo en los medios de prensa y quiero hacer algunas aclaraciones. Por ejemplo, hay algunas personas que han hecho los cursos de energía y no tiene nada que ver con el búnker. Pero también es cierto que otro grupo se voló" y llevó adelante el proyecto, dijo el informante, que solicitó, mantener su identidad en reserva y actualmente es profesor en escuelas secundarias locales. "Hace dos años, en el tercer nivel, abandoné todo", relató el instructor en técnicas de transmisión de la energía - dentro de la organización existen cuatro niveles -, aunque se negó a identificar el nombre de las personas que dictan los cursos superiores. "Esa información no la puedo dar porque cuando llegas a un cierto nivel de compromiso con esta organización tácitamente aceptás una serie de condiciones, y una de ellas es la de no revelar el nombre de quienes te instruyen". No Obstante, indicó que los cursos superiores se dictan en Córdoba y cuestan alrededor de 50 pesos cada uno.
En defensa de la organización a la que perteneció, el docente casildense señaló que "la técnica de transmisión de la energía proveniente de Oriente y es muy similar a la acupuntura pero sin usar agujas, porque no cualquiera puede hacer esto último." Y agregó que "lo que nosotros hacemos es estimular ciertos puntos en el cuerpo con nuestras manos para lograr el bienestar físico en las personas. Nada tiene que ver esto con el fin del mundo ¿no les parece?
Alumna defraudada
Poco después de abandonar la enseñanza de estas prácticas, el entonces instructor tuvo como alumna a una antropóloga local, hoy de 50 años, quien fue expulsada de las clases. "En el primer nivel nos enseñaban a relajarnos, a cargarnos de energía para estar mejor y algunas otras cosas bastante sonsas, que no llegaron a cubrir las expectativas que tenía. Pero no alcancé a terminarlo, me tuve que ir, mejor dicho, sutilmente me hicieron ir porque yo tomaba a risa algunas cosas que sucedían allí".
La profesional- que, como casi todos los que estuvieron o están vinculados a estas prácticas, pidió que no trascendiera su nombre- señaló que "los cursos los dictaban un par de muchachos de Casilda y los alumnos éramos unas 20 ó 30 personas,
"Son responsables de originar los rumores que causan miedo a la gente" todas de la ciudad, pero en ese momento no se hablaba nada acerca del búnker". "En una oportunidad estuvo Jorge Blanco - dueño del campo donde se levantó la extraña cosntrucción-dando una charla, pero nada más", aseguró.
"Nada más que cuatro"
En tanto, otro de los asistentes a los cursos, también docente en escuelas secundarias locales - que como el resto de los involucrados sólo acepta hablar a condición de que no se difunda su nombre -, afirmó que "las personas de Casilda que integran Amigos de la Naturaleza y se han adherido a la idea de construir un búnker son nada más que cuatro", mientras que el resto "solo trabajan en energía". Y reveló que dos de estas personas "tienen la tarea de recolectar agua de lluvia, para lo cual han construido un gran embudo" (ver aparte)
No tan inocentes
Desde la óptica de la Iglesia, el padre Ariel Barbero, de Arequito, sindicó a "los grupos que trabajan con energía (como amigos de la Naturaleza) de ser los responsables de originar estos rumores infundados y provocar temor" sobre catástrofes, y aconsejó a los cristianos "no dejarse llevar por estas ideas que comienzan siendo inocentes reuniones y luego se van transformando en otra cosa más peligrosa"
El cura aclaró que "los cursos de energía universal tiene mucho que ver con estas cuestiones. En los primeros niveles aparecen como algo inocente, como algo inocuo, como algo que no contradice ninguna postura religiosa, pero a medida que uno va adentrándose en estos cursos, responden a una doctrina sincretista", en relación a los sistemas filosóficos que tratan de conciliar doctrinas diferentes.
En este sentido, el sacerdote advirtió que "este tema es muy peligroso porque, si bien no se trata de una sectas como tal, de a poco va llevando a adherirse a estas creencias" de tipo apocalíptico.
Barbero destacó que "hay gente que lo está haciendo de muy buena fe, pero yo les recomendaría a todos los católicos que nos adhiramos a nuestra fe".