I

     Después de todo,
hoy desearía
tenerte cerca.
     Si así fuera,
yo te contaría
todas mis penas,
que con tu presencia,
se transformarían
en grandes maravillas,
y dejarían de golpear
mi alma partida.
 

II

     Un pedacito
de mi corazón
está reservado
para tu amor.
     No tardes mucho
y ven a buscarlo,
que está sufriendo
desde hace tiempo.
 

III

     A menudo te recuerdo
sin que tú puedas saberlo,
y pienso cómo sería
mi vida con tu alegría.

IV

     Otro día más
ha puesto su fin,
yo pensando en ti,
tú sin pensar en mí.

V

     Si no estás conmigo,
si no estás aquí,
si no estás oyendo
a mi corazón diciendo
que aunque pase tiempo
te seguirá queriendo.
 

VI

     Mis ilusiones terminadas
al no sentir tu llegada,
y aunque un tiempo la esperé
al final no la encontré.
     Y me quedé esperando,
contenta por intentarlo,
pensando que alguna vez
yo aquí te pudiera ver.
 

VII

     Una vez más
sin que tú lo sepas,
dedico mi tiempo
a escribir estas letras.
     Letras que son
órdenes de un corazón,
que está tan triste
como la luna sin el sol.
 

VIII

     Cada vez te vas más lejos,
y te alejas más de mí,
cada vez te siento menos
y sigo queriéndote a ti.
     Cuanto más te miro y miro
ya no puedo ni podré,
pensar que estés conmigo
y yo sin ti moriré.
 

IX

     Mi corazón está triste
sin que tú puedas saberlo,
él sabe que existes
y tú no puedes verlo.
 

X

     Estando cerca de mí
yo podría ser feliz,
y sabiendo que no lo estás,
me tendré que conformar.
     No te diste cuenta
que de verdad te quería,
y un día yo perdí
lo único que tenía.
 

XI

Tu AMOR:

     La fuerza que me da vida,
la razón de mi soledad,
el sentir de mis pensamientos,
y el dolor del corazón.
     El vivir de mi alegría,
el cantar de mi canción,
el agua que necesito,
y el porqué de mi razón.
     El impulso del alma rota,
la alegría de mi dolor,
la luz que día a día,
hace sentirme mejor.
     La belleza de las nubes,
el camino desde el sol,
la senda hacia las estrellas
y el regreso a un corazón.
 
 

XII

   A veces en esta vida
no es tan fácil demostrar
que al querer a una persona
te entren ganas de llorar.
     Cuando miro a las estrellas
siento un profundo deseo
y viéndote tan lejano
siento que por dentro muero.
     Mientras tanto por mi cara
poco a poco van cayendo
lágrimas enamoradas
que brillan como luceros.
 

XIII

 En lo que llevo de vida
 no he podido encontrar
 la persona que me quiera,
que me quiera de verdad.
     Al pensar en la alegría
que me puedes producir,
estando siempre a mi lado
yo podría ser feliz.
     Tu bondad es tan inmensa,
tu belleza sin igual,
tu cariño es deseado
porque tú eres especial.
 
 

XIV

     Vida, te quiero pedir,
que por pedir quisiera
tenerle cerca de mí
y que él me comprendiera.
     Pienso en él a cada hora,
pienso en él todos los días,
sólo deseo que sepa
que mi alma está partida.
     Días largos esperando,
derrochando mi tristeza
deseando cara a cara
la hora de su llegada.
 

XV

     Viéndote como te veo,
tan cercano y tan lejano,
me conformo con soñar
que te encuentras a mi lado.
     Deseo tenerte cerca,
que me puedas alegrar
y que yo con tu presencia
abandone mi tristeza.
     Con tu ausencia yo me muero
cada día un poco más,
y no logro que este infierno
me abandone de verdad.
 

XVI

     Vivir sin ti no es vivir,
es ir muriendo día a día,
es perder las esperanzas
que me quedan de la vida.
      Te quiero más que a nada
aunque tú no puedes verlo,
pues me falta atrevimiento
para que puedas saberlo.
       ¿Cómo podré yo contarte
todos estos sentimientos?
¿Tendré yo que avergonzarme
de lo que te estoy diciendo?