![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
Defensa de Iris y Carlos-Blas | |||||||||||||||||||
Desvergonzada | solidaridad | Derecho | |||||||||||||||||
Carta de apoyo | difusión | Preguntas | |||||||||||||||||
D. Humanos | |||||||||||||||||||
Manifestamos nuestra inocencia Iris Aggeler Manifestamos siempre como artistas nuestra visión de la vida en lenguajes visuales, musicales, literarios, escénicos. Ser artista no es solo realizar obras creativas, es fundamentalmente, tener la curiosidad de descubrir el mundo y a sí mismo, y de descubrir un nuevo lenguaje o una nueva manera de traducirlo. A veces, como ahora nosotros, un artista se encuentra atrapado en una situación legal, y congruente con su formación expresiva, manifestará su verdad y situación. Sí, Carlos-Blas Galindo e Iris Merino Aggeler, expresamos y defendemos nuestra inocencia contra las acusaciones de robo, allanamiento y violencia que se nos han imputado. Manifestamos nuestra inconformidad, consideramos justa una labor de rechazo y desacuerdo contra lo establecido como verdad en las acusaciones de Carmen Hernández, y de la misma manera rechazamos y manifestamos nuestra desavenencia tanto con los procesos municipales de justicia, como con las situaciones que violaron nuestros derechos humanos mientras estuvimos detenidos en los separos policíacos. Muchas personas encuentran incomprensible o incluso censuran el hecho de que establecemos una defensa legal en contra de las agresiones que hemos recibido. Lo hacemos porque creemos en la ética, en la justicia y que debe siempre prevalecer el respeto a las personas, sus derechos, su integridad y reputación. Creemos que la impunidad en cualquiera de sus formas debe ser censurada y disminuida. Defendemos los valores del arte, de las obras y del sistema, y de nosotros como miembros de esta comunidad. Existe el mito (irreal) de que el artista está por sobre de la cotidianidad y no debe lidiar con abogados, contadores o cosas mundanas. Denunciamos que esto solo genera ignorancia, apatía y el atropello de los derechos artísticos, de los derechos de autor morales o patrimoniales, de la reputación y la integridad de las artes en su conjunto. Proponemos al medio cultural que revalore la necesaria relación entre derechos humanos, jurídicos, autorales y el sistema del arte, a fin de que exista mayor información, una mejor legislación, profesionales especializados en la materia, y una conciencia general de la importancia de estos asuntos. Consideramos hasta cierta medida inconscientes los hechos que se nos imputan, ya que nos parecen en parte realizados sin reflexión, prudencia ni sentido de la responsabilidad. Son al mismo tiempo la satisfacción inmediata de una pulsión, y acción contraria, un acto premeditado, ya que Carmen Hernández nos ha agredido por espacio de un año, lo que demuestra planeación y reincidencia. No parece difícil concebir que alguien plenamente consciente de sus obligaciones y de las consecuencias de su proceder lesione de tal manera nuestra reputación y nuestras obras, e incluso usurpe nuestro nombre en agresiones a nosotros dirigidas. Repudiamos esta agresión, estableciendo no agresiones a la parte que nos demanda, sino una legitima defensa que es derecho de todo ciudadano. Aclaramos por lo tanto que somos inocentes de tanto de allanamiento de morada, delito que por su falta de sustento no procedió legalmente, de violencia, que nunca ejercimos y de la que el más mínimo indicio tampoco procedió legalmente y de robo, delito por el que aún nos encontramos en averiguación y libres bajo fianza. Sí, preferimos hacer públicos los atropellos que hemos sufrido, y acudir a la solidaridad de la comunidad, como una presión pacifica solicitando que se ejerza justicia con diligencia. Nuestro proceder es ético ya que es conforme a la moral, respetamos las normas que regulan las actividades humanas, y dentro de los cauces permitidos solicitamos ser escuchados para aclarar la situación y se declare nuestra inocencia. Cierto, también amparados en estas normas morales, éticas y del derecho, solicitamos la sanción a que se haga merecedora Carmen Hernández. Creemos que la relación arte – derecho en México tiene mucho por evolucionar. Por las dificultades que esto presenta, no hemos tramitado nuestras quejas ante el Instituto Nacional del Derecho de Autor (INDA), el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) y/o la Secretaría de Educación Pública (SEP), sino ante la Procuraduría de Justicia del Estado por la vía penal. Instancia a la que acudió Carmen Hernández para privarnos de nuestra libertad. Sostenemos que el derecho tiene la virtud de hacer o exigir todo lo que la ley o autoridad establece a favor de alguien. Nosotros confiamos en que el derecho nos ponga libre de consecuencias por estas inmerecidas acusaciones, y que sancione el proceder doloso de Carmen Hernández. Cierto, derecho es una palabra muy amplia, y acudimos a ella como ciudadanos que respetan el derecho constitucional, con la antigua palabra internacional de derecho de gentes, porque gentes somos, y siendo hombres y teniendo una finalidad en el mundo, como debe de ser, apelamos al derecho natural, debido a la privación de nuestros derechos y de nuestra libertad, esperamos que el derecho penal y los derechos humanos nos auxilien, creemos, como ciudadanos de la sociedad mexicana, que existe un estado de derecho que tiene a bien custodiar las relaciones políticas y sociales, y por lo tanto prevalecerá la justicia. Defendemos nuestra historia como personas que nunca han faltado al derecho, que lo hemos respetado en nuestras actividades cotidianas, sociales, profesionales, políticas, procediendo rectamente y siempre enfrentando las cosas con honestidad. Creemos que nuestro caso no es aislado, estamos seguros que la respuesta favorable de la comunidad se debe también a que conoce que los derechos de los artistas muchas veces son vulnerados. Agradecemos infinitamente, con el corazón, la solidaridad recibida. Nos hacen ser fuertes y resistir los trajines de situaciones como la que atravesamos. Nos permiten tener confianza en el derecho y en que nuestras peticiones de justicia serán escuchadas. Hemos realizado todas las diligencias que hemos considerado necesarias. Enviamos un abrazo fraterno a todos los que firmando nuestra carta, dándonos palabras de aliento, creyendo en nuestra inocencia, o apoyándonos de cualquier manera, nos han brindado su amistad, el amor, la compañía y la atención que tanto bien hace en situaciones delicadas. |
|||||||||||||||||||
Continúa: Defensa de Carlos-Blas Galindo |