EL EX JEFE DE LA BONAERENSE, ADOLFO VITELLI

AMIA: un comisario señala al poder político

Clarin, Jueves 13 de marzo de 2003

El ex jefe de la Policía de Buenos Aires, Adolfo Vitelli, admitió ayer haber obedecido órdenes directas de la secretaría de Seguridad de la provincia para tomar dos medidas en 1996: echar de la policía al ex comisario Juan José Ribelli, uno de los principales acusados en el juicio AMIA, y mantener en la fuerza al comisario Alejandro Burguete, también acusado en la causa. Burguete, que sigue en actividad en la Bonaerense pese a estar procesado por asociación ilícita y falsedad ideológica había declarado contra Ribelli a quien hizo responsable de varios delitos.

Vitelli dijo que obedeció en forma "vertical" un pedido de Eduardo De Lázzari y Federico Domínguez, entonces secretario y subsecretario de Seguridad del gobernador Eduardo Duhalde, y dejó así al descubierto una operación política destinada a perjudicar a Ribelli planeada por altas autoridades del gobierno bonaerense de entonces. Arrancarle esa especie de confesión a Vitelli no fue fácil: lo logró la tenacidad, el rigor y cierto tono inquietante que el juez Miguel Pons suele usar cuando dice a los testigos: "Le pido que esfuerce su memoria"

Vitelli intentó ayer evitar cumplir el pedido del juez, a lo largo de una precaria declaración. Finalmente Pons lo acorraló y le preguntó, casi exasperado, si le habían pedido que exonerara a Ribelli. Tras una larga pausa, Vitelli murmuró "Sí, fue pedido". El ex jefe policial había admitido antes que los mismos funcionarios, De Lázzari y Rodríguez, le pidieron el sobreseimiento de Burguete.