“Los que ponen la muerte en el futuro, ¡que cojan para siempre la
maleta!”
Falleció Rafael Morales, comunista, referente del periodismo canario
M. L. González
Rebelión
A Rafael Morales
In memoriam
A través del cristal se veían claveles rojos, y letras juntas haciendo
palabras, de esas que duran siempre: compañera, hijos, amigos. Había pétalos
de flores en el suelo, que guiaban hasta el pequeño cuarto de cuya puerta,
de repente, salieron imágenes guardadas sin saber. La última es del mes de
enero y en ella están Rafael, junto a Lourdes, tomando las calles para
gritar los crímenes del sionismo israelí en la Franja de Gaza.
La primera es de hace más de veinte años; Rafael se sentaba en la mesa de
enfrente y su gesto, si bien serio, nunca se mostraba hosco. Pasaron años
antes de poder ver su sonrisa; quizás porque escribía de cosas que no le
gustaban: de la OTAN, de la ocupación del Sáhara Occidental por Marruecos,
del bloqueo estadounidense a Cuba, de la emigración forzada de las gentes de
África, de la barbarie del imperialismo; de los gobiernos, arte y parte, de
todo ello.
Rafael no claudicó y por eso fue un periodista incómodo, que es lo mismo que
decir que fue un buen periodista.
Repasando la poesía de su tierra, la poesía de Canarias, aparecen unos
versos en los que está Rafael, dejándonos una maleta, con cuatro fotos y un
libro de Galdós. Una maleta llena de coherencia y valentía; de convicción
revolucionaria.
Son éstos (*):
Yo tengo preparada la maleta,
una maleta grande, de madera:
la que mi abuelo se llevó a La Habana,
mi padre a Venezuela.
La tengo preparada: cuatro fotos,
una escudilla blanca, una batea,
un libro de Galdós y una camisa
casi nueva.
La tengo ya cerrada y rodeándola
un hilo de pitera (...pero...)
Pensándolo mejor, voy a sacar de la vieja maleta
el libro, la escudilla, la camisa,
la batea,voy a pintar y a barnizar de nuevo
su gastada madera,
voy a quitarle el hilo y a ponerle
la cerradura nueva.
Y con ella vacía me acercaré a la Isleta,
y al primer forastero de la muerte
que llegue a pisar tierra
se la regalo, para siempre suya,
y que la use y nunca la devuelva.
¡No quiero más maletas en la historia de la insular miseria!
Ellos, ellos,que cojan ellos la maleta.
Los invasores de la paz canaria
que cojan la maleta.
Los que venden la tierra que no es suya
que cojan la maleta.
Los que ponen la muerte en el futuro
que cojan la maleta¡
Que cojan la maleta,
que cojan para siempre la maleta!
(*) Extracto del poema “La Maleta”, del poeta canario Pedro Lezcano