Si consultamos una enciclopedia leeremos que es una ruta de peregrinación surgida en la edad media, no está mal para comenzar.

Un historiador nos diría que el Camino de Santiago no fue únicamente una vía de peregrinación religiosa ya que permitió la vinculación entre los reinos cristianos de la península Ibérica y los países europeos.

Sociológicamente hablando la ruta jacobea ejerció igualmente una gran influencia en la vida económica y social de los reinos cristianos de la península Ibérica.

En lo referido al arte el Camino desempeñó un papel primordial. Gracias a esta ruta se generalizó en tierras hispánicas un arte de carácter internacional, el románico, que se recibió sobre todo en su versión francesa, a la vez que el románico europeo conoció elementos musulmanes que se transmitieron desde la península Ibérica. Posteriormente el Camino se convertirá en una vía de recepción del arte gótico.

Incluso, en los últimos tiempos, podríamos añadir dos conceptos más ya que el Camino se ha convertido en el primer itinerario de peregrinación turístico, yo diría que a nivel mundial. Por si fuera poco también habría que añadir la variante de ruta deportiva que muchas personas utilizan.

Podríamos decir que el Camino de Santiago es un itinerario vivo, con espacios de peregrinación que renuevan a los peregrinos. El deambular y convivir de peregrinos transmite el origen religioso e histórico de la ruta pero, sobre todo, una forma de transformación y renovación interna. Por todo ello podemos decir que el Camino de Santiago es un itinerario de fe, arte y sentimiento; una aventura en dos ámbitos, el físico y el espiritual.
Pero Camino de Santiago es, sobre todo, peregrinos y gente del Camino, personas que hacen Camino, andándolo, recorriéndolo, ayudando y entregándose a los demás. Por eso, Camino de Santiago son, ante todo:

Bart, Santiago Zubiri, Tomas y Björn, Maribel Roncal, Carmen, Felisa la de los higos, Ángel Espinosa, José Ignacio, José María, Resti, Man y Bernd, las Hermanas Carvajalas de León, Felipe, Pepe, Andrés, Jato, Mª Paz, Carlos y Luis, Valeriano, Demetrio, Marina, Txomin, Juanjo, Jon, Celio, Ana Eloisa, Oscar, Paco, Merche, Ana, José Manuel, José María, Mª Carmen, Marimar, Mikel, Santiago, Amparo, Joaquín, Fernando, Jorge, Lupe, Eneko, Amparo Blanco, Antonio Pinho, Javier y María, Ángel Luis Barreda, Emilio Ayestarán, Pablo, Mikeldi, Lorea, José María Maldonado, Aitor, Jacinto, Javi y Elena, Lino y Daniel, José, Elena Carrascal, Nagore y Millán, Blas, Jesús, Francesc y Jordi, Salvador, Inma y Mikel Perles, Carlos Mencos, Josu, Javier, Ana, todos y cada uno de los hospitaleros y hospitaleras del Camino, los miembros de las Asociaciones de Amigos del Camino de Santiago, y éste, vuestro humilde servidor, Ángel González.