Norma Álvarez, interpreta a Carmen Díaz en 'fama': "El éxito no son los autógrafos, sino poder vivir del escenario"
¿Cómo recuerda el casting?

Me acerqué por Sergio (Alcover). Él había hecho Fama en Barcelona y tuvo que volver a hacer los casting cuando se fue a estrenar en Madrid. Me dijo "¿por qué no te presentas?"
¿Lo pagó con sudor?
Los casting fueron muy duros, con muchas pruebas. Además, los días fueron muy nublados y lluviosos, los recuerdo grises. Las colas eran larguísimas. Llegabas a las ocho de la mañana y salías a las ocho de la noche. Muchísima gente, muchísima ilusión y tensión, para luego ir tachando a la mayoría.
¿Se considera bailarina?
Yo soy principalmente bailarina. He estudiado en el Conservatorio de Danza y Música de Valencia. Lo que pasa que en este mundillo tienes que hacer de todo.
¿Qué le atrae del musical?
Tiene un poco de todo, hay que ser una persona muy completa. Es lo que miraban en los casting. No sólo había que bailar, también te hacían pruebas de canto, porque aunque no seas la voz principal tienes que cantar los coros. Eso me atrajo.
¿Le gustan los musicales?
No soy muy musicalera.
Pegaría en un 'West Side Story'...
¿Sí? Pues en la obra, precisamente, mi personaje le dice en un momento al profesor "no voy a venir a clase porque tengo un casting para West Side Story " (risas). Doy perfecta para el papel de Anita.
¿Cómo es su personaje, Carmen Díaz? En los musicales, a veces, los personajes tienden a ser planos...
Precisamente no es de los más planos. Empieza muy arriba. Mientras que sus compañeros están pensando en estudiar y son más ingenuos, ella, a pesar de tener la misma edad, va un poco por delante. Yo me la imagino, porque tampoco se dan tantos datos. Tú también tienes que crear un poco tu propio personaje. Ella se maquilla, se pinta las uñas, quiere ligar... Empieza con mucha ilusión. Uno de los primeros temas que canta revoluciona todo el comedor del colegio. Sin embargo, el último es superdramático, vuelve destrozada de Hollywood...
La fama es el tema principal de la obra en un momento en el que este concepto está muy devaluado...
No es la fama que se entiende ahora, todo esto del Tomate . El éxito no es que la gente te pida autógrafos por la calle, sino poder vivir del trabajo sobre el escenario.
¿Pero se los han pedido?
Cuando salimos del teatro. Es muy gracioso. Sobre todo los niños, les hace ilusión. Te llaman por el nombre de la obra. ¡Carmen, fírmame!
Están creando futuros bailarines...
Y está bien que vean la realidad. Que hay que trabajar duro, cuidar el físico, la alimentación, ser disciplinado. No es tan fácil como llegar a un programa de televisión y que te lance. Esos programas en realidad no te preparan, en cuatro meses no puede formarse a un artista.
Y van dos años de 'Fama'...
En esta profesión es difícil tener un trabajo durante mucho tiempo. Tienes que estar agradecido.