UNIVERSIDAD YACAMBU

DOCTORADO EN GERENCIA

FASE III

 

MEMORIA 2

 

MODELO DE GESTIÓN DEL CONOCIMIENTO APLICADO A LA INVESTIGACIÓN UNIVERSITARIA

 

 

Facilitadores: Dr. Víctor Córdova y Dr. Elio Esqueda

Autor: Blanca Torrealba

 

 

MARCO TEÓRICO

 

Antecedentes de la Investigación

 

            Entre los trabajos de investigación detectados hasta éste momento y que tienen relación con el estudio que se pretende realizar se encuentran

            Andueza (2004), en su investigación relacionada con un  Modelo Teórico para la Gestión Organizacional del Proceso de Investigación en la Educación Superior Venezolana. Tesis de Grado para optar al título de Doctor en Ciencias de la Educación de la Universidad Santa María. El propósito del estudio es generar un Modelo Teórico para la Gestión Organizacional del proceso de investigación en la Universidad Nacional Experimental Simón Rodríguez Núcleo Araure, al tener como base una serie de fundamentos teóricos pertenecientes a autores como: Padrón (1998), Bolívar (1999), Roger (1984), Frech y otros(1996), López (2002), Yarce(2002), UNESCO (1998) y otros.   La investigación  versa en un modelo cualitativo que  permite al investigador producir datos descriptivos de la realidad en estudio y vincular los resultados obtenidos con la fundamentanción de la realidad ontológica sustentada por un basamento epistemológico que conducen a la clasificación del problema en su ubicación temporal-espacial.

Pérez (2000), en el estudio referente a la Universidad Politécnica Frente al Conocimiento y la Investigación: Caso Vicerrectorado Académico Barquisimeto. Analiza la cultura de participación de los docentes del Vicerrectorado de Barquisimeto de la Universidad Nacional Experimental Politécnica “Antonio José de Sucre” (UNEXPO) en la función investigación, con la finalidad de diseñar un Modelo de Investigación que permita conceptuar a la investigación como un valor; de tal manera, que los docentes puedan entender y participar adecuadamente en los procesos y relaciones docencia-investigación-extensión. Se plantea como investigación tipo proyecto factible, iniciada con un estudio de campo de naturaleza descriptiva dentro del paradigma de investigación cuantitativa, combinando con investigación cualitativa fenomenológica. La muestra se selecciona aleatoriamente en forma estratificada y corresponde a setenta y dos (72) sujetos, miembros del personal docente del Vicerrectorado de Barquisimeto. El proceso se efectuó en dos fases: en la primera, se aplicó un cuestionario a fin de conocer las opiniones de los sujetos sobre la función de investigación. Estas opiniones se procesaron estadísticamente (factorial y discriminante)  y se elaboró un modelo previo de investigación, el cual se somete a la validación por informantes claves en la segunda fase de la metodología del trabajo, de donde se diseña el modelo final. Los resultados destacan que el docente universitario, conceptualiza a la  investigación con un valor y como una actividad universitaria pero siempre apoyada en la investigación como valor. El Modelo de Investigación formulado se soporta en la “valoración universitaria de la investigación”, estableciéndose relaciones apropiadas con los demás factores identificados en el estudio.

                                                   

 

 

 

 

 

 

BASES TEÓRICAS

 

El Conocimiento

Las organizaciones modernas en la actualidad requieren operar y considerar el conocimiento como el más valioso insumo que posee, y que necesita ser gestionado.

Para hablar de la gestión del conocimiento es importante aclarar antes ¿qué es el conocimiento?, ¿cómo se genera? y ¿cuáles son sus limitaciones?

Definir conocimiento con precisión es muy difícil; es un concepto sobre el cual han trabajado los más grandes pensadores de la historia, sin que se haya  llegado a consenso claro.

La noción de conocimiento parece una sola, pero al tratar de definirla se presentan una serie de expresiones relacionadas con el conocimiento que multiplican tal noción, por lo que es conveniente delimitar su campo semántico.

Mientras que para Grant(1996), conocimiento es lo que se sabe; en el diccionario Larousse se define como “la acción de conocer”, y el verbo conocer es definido como “tener la idea o la noción de una persona o cosa”, empleando como sinónimo el verbo “saber”.

Aunque el verbo “conocer” es empleado para una aplicación equivalente al verbo” saber”, es más común su aplicación para denotar familiaridad con lo conocido. “Conocer” indica un contacto consciente con el objeto conocido a través de la experiencia y de la percepción, en oposición a “saber”, que es un conocimiento por conceptos e ideas, por lo que cuando se habla del conocimiento humano la forma tradicional de concebirlo es considerarlo como verdadero, fundamentado o justificado en razones coherentes, producto de las experiencias vividas por los sujetos,  asemejándose esta concepción a la aplicación de “saber”. Se conocen cosas, se sabe verdades o proposiciones verdaderas.

Nonaka y Takeuchi (1999) establecen como definición que el conocimiento “es un proceso humano dinámico de justificación de la creencia personal en busca de la verdad”. Aclaran también que “la información es un flujo de mensajes y el conocimiento es creado por ese flujo de mensajes, anclado en las creencias y el compromiso de su poseedor...” (p.63)

Probst, Raub y Romhardt (2001), establecen    como    conocimiento    al

“conjunto de cogniciones y habilidades con los cuales los individuos suelen solucionar problemas. Comprende tanto la teoría como la práctica, las reglas cotidianas al igual que las instrucciones para la acción. El conocimiento se basa en datos e información pero, a diferencia de estos, siempre está ligado a las personas. Forma parte integral de los individuos y representa las creencias de éstos acerca de las relaciones causales”. (p. 24).

Por su parte, Davenport y Prusak(1998), define el conocimiento como una mezcla fluida de experiencia estructurada, valores, información contextual e internacionalización experta que proporciona un marco para la evaluación de nuevas experiencias e información. Se origina y aplica en la mente de los conocedores y, con frecuencia no solo queda arraigado en documentos o bases de datos, sino también en las rutinas, procesos, prácticas y normas institucionales (P.5).

De las definiciones de conocimiento presentadas, se puede decir que éstas van desde las clásicas y fundamentadas como”una creencia cierta y justificada” a otras mas recientes y pragmáticas como”una mezcla de experiencias, valores, información y”saber hacer” que sirve como marco para la incorporación de nuevas experiencias e información, y es útil para la acción”

Asimismo, se deducen claras similitudes, entre ellas:

1. El conocimiento es un proceso propio e intrínseco de los seres humanos, es decir, es intangible y se desarrolla en la psiquis individualmente, por ello se habla de: conjunto de cogniciones y habilidades, estructura de ideas y capacidades.

2. Existe una clara diferencia entre conocimiento e información.

3. El conocimiento es un proceso dinámico, asociado a la experiencia y creencias de las personas, por lo tanto puede cambiar en el transcurso del tiempo.

4. El conocimiento es utilizado para la comprensión de una realidad determinada, que será interpretada por los sujetos de conformidad con sus experiencias y creencias, para la toma de decisiones en la solución de un problema.

Así pues, partiendo de la expuesta por Davenport y Prusak, en esta investigación la definición de conocimiento no es más que la combinación de información, contexto y experiencia, que además encierra creencias, perspectivas, juicios y hasta metodologías que son particulares y desarrolladas por cada individuo con su praxis. Hasta aquí sería un logro individual y no conformaría en si mismo un elemento que forme parte del acervo de conocimiento de la organización en la cual interactúa el individuo.

Ahora bien, para lograr gestionar el conocimiento es necesario también conocer cómo éste se produce, lo cual permitirá precisar qué tipo de conocimiento se va a gestionar y por ende las acciones necesarias para alcanzar dicho objetivo.

 

Generación del Conocimiento en las Organizaciones

 

En el presente estudio, la autora asume que el conocimiento se genera a partir de una construcción individual  y única del sujeto en su relación con el entorno

En el caso de creación de conocimiento de las entidades se entenderá como el “proceso que amplifica organizativamente el conocimiento creado por los individuos y que cristaliza como una porción de la red de conocimiento de la organización” (Nonaka y Takeuchi, 1995: 58).

            Así pues, para lograr entender como las organizaciones crean su propio conocimiento es necesario comenzar por explicar como los individuos construyen el suyo, debido que a partir del conocimiento que ellos construyan es que la organización buscará las maneras de generarlo y convertirlo en una memoria de conocimiento organizacional.

Son muchos los autores que han escrito sobre como el individuo   construye el conocimiento, considerando para ello las diferentes corrientes pedagógicas.

            Una de ellas es el constructivismo mas que una teoría de aprendizaje es un enfoque epistémico, que tiene sus raíces en la epistemología de a tradición interpretativa que se centra en la importancia del significado construido por las personas en su intento de dar sentido al mundo.

            Al respecto Driver y Oldham (1997) expresan que el sentido que se da a cualquier hecho es visto como algo dependiente, no solo de la situación en sí mismo, sino también de los propósitos y de los procesos de construcción activa del significado por parte de la persona.

            Para Delval (1997) el constructivismo debe considerarse como una posición epistemológica referente a como se origina y se modifica el conocimiento. Cada sujeto tiene que construir sus propios conocimientos y no los puede recibir construidos de otros

La construcción del conocimiento es una tarea que tiene lugar en el interior del sujeto y solo puede ser realizado por él mismo, aunque este proceso puede ser facilitado por otros a través de la mediación. Se parte del hecho de que la realidad existe, pero toda referencia a ella es a través de la mediación que le permite, al sujeto que conoce, construirla.

            La manera de construcción del conocimiento, depende específicamente de la forma como el individuo construye su conocimiento, el cual requiere transformarse en conocimiento valioso para toda la organización.

            Ahora bien, para la creación de conocimiento organizativo, Nonaka y Takeuchi (1995), presentaron un modelo que muestra dos dimensiones en ese proceso de creación de conocimiento: dimensión epistemológica, en el cual se distinguen dos tipos de conocimiento, el conocimiento tácito y el conocimiento explícito; y dimensión ontológica en el cual se distinguen cuatro agentes creadores de conocimiento; el individuo, el grupo, la localización y el nivel interorganizativo. Según varios autores el nuevo conocimiento se inicia siempre en el individuo pero ese conocimiento individual se transforma en conocimiento organizativo valioso para toda la organización. El conocimiento individualmente  parte de una construcción propia, única e idiosincrásica. Por su parte el conocimiento organizativo está sujeto a normas e intercambio de significados

Este modelo de creación de conocimiento que se logra a través de la relación sinérgica entre conocimiento tácito y explícito en la organización, y mediante el diseño de procesos sociales que crean nuevo conocimiento al convertir el conocimiento tácito en conocimiento explícito. Su planteamiento para la creación y conversión del conocimiento se esquematiza a través de un espiral de contenido ontoepistemológico, ya que consideran estos autores que el conocimiento es dinámico y continuo, se transforma según las experiencias, creencias y valores de los individuos y que emerge producto de la interacción social.

El conocimiento explícito puede ser expresado, formalizado y compartido en forma de datos, informaciones, especificaciones o manuales de  procedimiento. Puede ser fácilmente transmitido verbalmente, almacenado y codificado en documentos. Al ubicarnos en el contexto de esta investigación, nos damos cuenta que el proceso de investigación que se lleva en la universidad se sostiene en este tipo de conocimiento, a través de procesos de transmisión escrita como revistas y oral en los eventos de investigación que eventualmente se realizan, como jornadas, encuentros de saberes, entre otros.

Esta cantidad de conocimiento acumulado, carece de importancia, si no se entrelaza con el conocimiento tácito, el cual es subjetivo y en él se apoyan los procesos de discernimiento y las intuiciones de las personas, producto de haber estado inmersa en una actividad determinada durante un largo período. Es difícil de formalizar o comunicar a otros. El conocimiento tácito proporciona a las personas habilidades y destrezas de carácter más o menos técnico o de carácter cognitivo.

Los dos tipos de conocimiento son complementarios, el tácito es limitado para las organizaciones pues forma parte de la práctica personal, por su parte el explícito no aparece en forma espontánea y tiene que ser fomentado para poder realmente hablar de movilización del conocimiento. Para lograr un continuo proceso de revitalización e innovación en las organizaciones es necesario que éstas se especialicen en procesos asociados a la conversión del conocimiento.

 

Procesos de Conversión de Conocimiento

 

Nonaka y Takeuchi, (1995), definen este  proceso de creación de conocimiento de las entidades como un “proceso que amplifica organizativamente el conocimiento creado por los individuos y que cristaliza como una porción de la red de conocimiento de la organización” (p.58)

Para estos autores, este proceso  se lleva a cabo a través de un modelo de generación de conocimiento mediante dos espirales de contenido epistemológico y ontológico. Este modelo constituye la comprensión de los procesos de adquisición y generación de conocimientos por parte de las organizaciones.

Es un proceso de interacción entre conocimiento tácito y explícito que tiene naturaleza dinámica y continua. Se constituye en una espiral permanente de transformación ontológica interna de conocimiento, desarrollada siguiendo cuatro fases que puede verse de forma gráfica en la siguiente figura:

1. Socialización: Este proceso está orientado a la conversión de conocimiento tácito en conocimiento tácito, lo cual se logra mediante el impulso o diseño de experiencias compartidas y en aprender junto con otros, simpatizando y enfatizando con otros, en procesos de comunicación personal, emocional y relacional. La socialización implica para las organizaciones, la creación de entornos apropiados para difundir y desarrollar experiencias compartidas entre sus miembros, establecer compromisos basados en la confianza y el intercambio de conocimientos propios de un contexto organizacional. Ejemplos: la formación de aprendices, las tutorías, la formación de grupos de expertos o de investigación.

2. Externalización: Es el proceso de convertir conocimiento tácito en conocimiento explícito, mediante el uso de analogías o modelos, se activa por el diálogo y la reflexión colectiva. El tipo de conocimiento característico de la externalización es un conocimiento conceptual, que está inmerso en muchos de los procesos conversacionales de diálogo, discusión y reflexión de los miembros de una organización o comunidad, a través de estos procesos los individuos comparten y cuestionan sus propios modelos mentales y percepciones para orientar posibles acciones futuras.

La creatividad juega un papel importante en esta conversión, ya que los individuos definen las organizaciones que desean; definen acciones para transformar las realidades existentes y para explorar otras nuevas. Ejemplos: Grupos focales para evaluación y diseño de productos, grupos de investigación, grupos gerenciales para definir visión y misión de una organización, grupos de discusión o de reflexión temática.

3. Combinación: Es un proceso de crear conocimiento explícito al reunir conocimiento explícito proveniente de cierto número de fuentes. Es un proceso de sistematización de conceptos con el que se genera un sistema de conocimiento, en el caso de la UNESR las líneas de investigación. Los puntos clave son la comunicación (reuniones, conversaciones, memorandos, manuales) para la captura del conocimiento  (interno o externo), la difusión y la sistematización para producir nuevo conocimiento explícito. Ejemplos: conocer sobre: el nivel de satisfacción de los clientes, el rendimiento de los empleados, preferencia de usuarios de un servicio, exposición de temas según posiciones de varios autores.

4. Internalización: Es un proceso de incorporación del conocimiento explícito en conocimiento tácito, muy relacionada con el “aprender haciendo”, el entrenamiento y los ejercicios. Requiere que el individuo identifique el conocimiento relevante para sí mismo. Es de gran ayuda que el conocimiento se verbalice o diagrame en documentos, manuales o historias orales. La documentación ayuda a los individuos a interiorizar lo que han experimentado, enriqueciendo su conocimiento tácito. Además, los documentos facilitan la transferencia de conocimiento explícito a otras personas, permitiendo que experimenten indirectamente las vivencias de los otros. La internalización del conocimiento debe ser continuamente reforzada para utilizar, emplear y sacar rendimiento del conocimiento formalizado a través de la experimentación (real o simulada) para construir ambientes laborales capaces de aprender de sus experiencias.

La idea común que subyace en este modelo es la existencia de etapas o fases diferenciadas para la creación y acumulación de nuevo conocimiento así como la afirmación de que el aprendizaje colectivo no proviene exclusivamente del sumatorio de las dotaciones de conocimiento individuales de todos y cada uno de los miembros de la organización (Spender, 1996; Nonaka y Takeuchi, 1995: 58) por cuanto existe la necesidad de compartir estos conocimientos con el resto de los partícipes en la misma e integrarlos en el conjunto de las tareas, de las funciones y de las actividades de la empresa.

Ubicados en el contexto de la función de investigación de la UNESR y considerando que la actividad clave y esencial de la gestión basada en el conocimiento, es la creación, adquisición y difusión de conocimiento y donde además prevalece la innovación sobre la rutina, nos podemos dar cuenta que ésta requiere una revisión exhaustiva. Esta afirmación se fundamenta en que la acción central dentro de esta gestión, será el compartir conocimiento tácito y explícito, entre los profesores; producto de las investigaciones que realizan los docentes de esta casa de estudios. Igualmente, se debe considerar el contexto organizacional donde interactúan los docentes para crear las condiciones que faciliten e impulsen la generación de conocimientos en este personal y convertir a la universidad en un verdadero centro de conocimiento donde, además, de crear también se comparta y transfiera conocimiento producto de las investigaciones realizadas y de esta manera lograr que en la universidad se favorezca el aprendizaje colectivo. Para ello, se deben develar los significados dados por los actores a los procesos institucionales asociados a la función de investigación, a fin de emprender una acción sinérgica entre la manera como se gestiona el conocimiento actualmente y cómo debería gestionarse.

 

Gestión del Conocimiento en las Organizaciones

 

Definido lo que es el conocimiento y descrito el proceso de generación del mismo, cabe preguntarse ¿Cómo se gestiona el conocimiento?. En primer lugar se debe definir ¿Qué es la Gestión del Conocimiento? Para ubicarnos en este contexto gerencial.

La gestión del conocimiento involucra dos aspectos relevantes. Por una parte la idea de gestión indica de algún modo, la organización, la planificación, la dirección y el control de procesos para conformar o disponer de ciertos objetivos. De otro lado, al hablar de conocimiento se pone de manifiesto que una organización, como cualquier ser humano, está sometida a una dinámica en la que del exterior y del interior mismo, capta o percibe información, la reconoce, la organiza, la almacena, la analiza, la evalúa y emite una respuesta al exterior, basada en dicha información y englobada en el total de información almacenada procurando un resultado.

El concepto de la Gestión del Conocimiento ha sido interpretado, y analizado desde diversos enfoques y en este sentido existen muchas definiciones de éste, sin embargo lo que pretende este trabajo es asimilar el concepto de la Gestión del Conocimiento desde un punto de vista diferente a los ya estudiados.

Malhota, (1997) considera que “La gestión del conocimiento es la combinación de sinergias entre datos, información, sistemas de información y la capacidad creativa e innovadora de seres humanos”. (p.55)

Davenport y Prusak (1998) lo definen como: " el proceso sistemático de encontrar, relacionar, organizar, destilar y presentar la información de una manera que mejore la comprensión de un área específica de interés para los miembros de la organización." (p.61). Igualmente, el mismo autor señala que la gestión del conocimiento debería preocuparse por explotar y desarrollar los activos de conocimiento que posee la organización a fin de que ésta pueda llevar a cabo su misión estratégica. Obviamente, tanto el conocimiento explícito como el tácito deberán ser gestionados. La distinción entre estos dos tipos de conocimiento no debe, sin embargo, entorpecer el objetivo de la organización: la gestión de aquel conocimiento que asegure su viabilidad y supervivencia.

Koulopoulos, y Frappaolo, (2000), la consideran como “el apalancamiento de la sabiduría colectiva para aumentar la capacidad de respuesta y la innovación”. (p.28)

Steig(1999), la considera como un proceso sistemático de búsqueda, selección, organización, difusión de información, cuyo objeto es aportar a los profesionales de la compañía, los conocimientos necesarios para desarrollar eficazmente su labor." (p. 62).

Definiciones como las de Steib y Davenport son semejantes porque ellas pueden hacer, y de hecho lo hacen, referencias a la gestión de la información.

De las definiciones anteriores, se extrae que la gestión del conocimiento:

a) Es una acción que asume una organización a través de la combinación de varios procesos.

b) Está referido al conocimiento tácito y explícito de un colectivo dentro de un contexto organizacional determinado.

c) Se orienta a mejorar el desempeño organizacional, creando valor agregado y mejorando la capacidad de respuesta.

d) Es un proceso social y tecnológico, dentro del enfoque sistémico donde recursos humanos desempeñan un rol fundamental.

En base a ello, la autora asume la gestión del conocimiento producto de la función de investigación de la UNESR como “El método de gestión que involucra a todos los miembros de la organización, y a través del cual se puede crear, almacenar, compartir y difundir el conocimiento generado, producto de las investigaciones realizadas “.

Es evidente entonces, que para gestionar el conocimiento, es necesario abordar dos dimensiones, ellas son: a) el conocimiento a ser gestionado, su complejidad y características y b) las funciones organizacionales requeridas para gestionarlo.

Relacionando esto último con la clasificación propuesta por Nonaka y Takeuchi (Ob. cit.), sobre conocimiento tácito y explícito, es importante tener en cuenta que se presentan dificultades diferentes según el tipo de conocimiento a gestionar en la organización. El conocimiento explícito puede gestionarse con la ayuda de herramientas electrónicas, mientras que para el conocimiento tácito la mejor forma es hacerlo frente a frente, con procedimientos que involucran la interacción colectiva de seres humanos. El conocimiento explícito, debido a su naturaleza, se capta e intercambia a través de toda la organización, mientras que el tácito puede representar potencialmente un gran valor para la organización y por su propia naturaleza, es mucho más difícil de captar y difundir. Por ello, las organizaciones han encaminado sus inversiones en tecnología de información al conocimiento explícito mayormente.

El conocimiento tácito es el más valioso para impulsar la creatividad y la innovación de una organización, y por ende para la creación y mantenimiento de una ventaja competitiva diferenciadora, razón por la cual la gestión del conocimiento tiene como uno de sus objetivos esenciales aumentar el nivel de conocimiento tácito.

 

Aspectos esenciales en la Gestión del Conocimiento

Con el interés de operacionalizar la gestión del conocimiento, algunos de los autores indagados presentan en forma descriptiva cada una de las fases o procesos que deben tenerse en cuenta para gestionar adecuadamente el conocimiento.

Al respecto Koulopoulos y Frappaolo (Ob. Cit.), presentan lo que denominan “aplicaciones de la gerencia del conocimiento”, en la que contemplan -basándose en el modelo de generación del conocimiento propuesto por Nonaka y Takeuchi (Ob. Cit.)- cinco (5) fases o aplicaciones determinantes e interrelacionadas entre sí, siendo ellas las siguientes:

1. Intermediación: Esta aplicación se orienta a establecer conexiones para el traspaso del conocimiento tácito, creando una cultura que impulse compartir el conocimiento mediante la definición de políticas, estrategias y procesos medulares.

2. Exteriorización: Busca asegurar que se comparta el conocimiento velando por la captura, clasificación y almacenaje del conocimiento requerido.

3. Interiorización: Se refiere a la acción individual de extraer conocimiento de bancos de conocimiento para darle aplicación pertinente, estructurando y clasificando el conocimiento requerido.

4. Cognición: Se busca impulsar la creación de nuevo conocimiento y la aplicación del mismo según la experiencia, para obtener los resultados deseados, mediante el establecimiento de políticas de incentivos y el impulso a la investigación.

5. Medición: Consiste en analizar y evaluar como se ha logrado compartir el conocimiento.

En este enfoque se entrelazan procesos organizacionales e individuales, considerando los primeros como la plataforma requerida para el impulso de los segundos, por lo que se podría ubicar el enfoque de este planteamiento dentro de la corriente funcionalista-sistémica, al considerar lo determinante de la cultura (políticas estratégicas) en la conducta organizacional y por el énfasis en la medición de resultados mediante indicadores precisos.

Probst, Raub y Romhardt (Ob. Cit.), presentan un sistema administrativo para la gestión del conocimiento. En el mismo se enfatiza que, tan importante actividad debe plantearse desde un nivel estratégico, que le permita a la organización gestionar coherente y eficientemente el conocimiento dentro de las organizaciones, cualquiera sea su finalidad. En su planteamiento, observan ocho (8) procesos administrativos interrelacionados estrechamente para el logro de los objetivos del conocimiento de la organización, que se resume a continuación:

1. Determinación de objetivos de conocimiento: En ella se definen los objetivos estratégicos, normativos y operativos que regirán la gestión del conocimiento.

2. Identificación del conocimiento: Se orienta a ubicar el conocimiento requerido dentro y fuera de la organización.

3. Adquisición del conocimiento: Se interesa en la compra de nueva tecnología, contratación del recurso humano necesario y de consultoría, según las necesidades organizacionales.

4. Desarrollo del conocimiento: Se orienta a la generación de nuevas habilidades, nuevos servicios, mejores ideas y procesos eficaces para impulsar el conocimiento demandado por la organización.

5. Compartición y distribución del conocimiento: En este proceso se pretende hacer el conocimiento disponible para quien lo requiera y distribuirlo oportuna y eficazmente.

6. Utilización del conocimiento: En este proceso se pretende lograr resultados concretos por el uso de nuevo conocimiento, mediante la conformación de grupos de trabajo y sistemas de incentivos.

7. Retención del conocimiento: Se orienta a seleccionar, almacenar y actualizar el conocimiento estratégico requerido.

8. Evaluación del conocimiento: En este proceso se pretende medir si se han cumplido los objetivos de conocimiento estratégicamente establecidos.

Al igual que el planteamiento anterior, se puede ubicar esta propuesta dentro de la corriente funcionalista-sistémica, al plantear la determinante necesidad de considerar los requerimientos organizacionales y estratégicos, así como la secuencia de procesos interrelacionados que culminan con la generación de resultados precisos y evaluados empleando para ello indicadores de gestión que permitan tomar decisiones para la reorientación de acciones futuras.

Por su parte Revilla y Santana (2000), presentan un conjunto de componentes y de acciones orientadas a la gestión del conocimiento, partiendo de la premisa que la organización y su entorno deben ser considerados un sistema único y abierto, en constante interrelación, por lo que las organizaciones, cualquiera que sea su finalidad, deben instrumentar políticas acordes que impulsen en sus miembros la adquisición, generación y almacenamiento de conocimientos para lograr mejoras organizativas. A diferencia de los anteriores, estas autoras enfatizan en el aprendizaje organizacional, como elemento esencial a desarrollar en las organizaciones que desean gestionar el conocimiento y se centra a nivel individual, en los procesos cognitivos de los miembros de la organización, como esencia para la generación de nuevos conocimientos, los cuales según ellas, pueden ser condicionados con las acciones que se puedan asumir a nivel organizacional, por lo que podría considerarse su planteamiento dentro de un enfoque conductista y sistémico. En su propuesta identifican tres (3) elementos vitales, ellos son:

Instrumentos de apoyo:

Son aquellos que determinan la eficiencia del aprendizaje individual y organizativo y deben estar siempre presentes, por lo que todas las acciones en materia de gestión de conocimiento, deben tener como núcleo vital estos aspectos: el individuo y la organización.

Para que ocurra el aprendizaje individual y se genere y comparta conocimiento, deben existir en lo personal cuatro (4) elementos o acciones que evidencian el proceso:

1. La creatividad: Considerada como característica personal, previa al proceso de aprendizaje y es la que permite la generación de ideas y realizaciones novedosas. Esta se da en tres (3) fases: la observación, la interpretación y la innovación. Igualmente se considera importante la motivación del individuo para la generación de nuevas ideas.

2. La gestión del reto: Está referida a la relación que debe tenerse siempre presente entre la complejidad de las tareas asignadas y la capacidad de reto o de logro de las personas (sus cualificaciones) para así lograr niveles de aprendizaje adecuados y evitar  frustraciones.

3. La resolución de problemas: Se refiere a la disposición del (los) individuo (s) para compartir información y trabajar en la solución de problemas específicos y en conjunto.

4. El comportamiento defensivo: Actitud que se presenta ante situaciones nuevas que requieren cambiar nuestros conocimientos o desaprender .

Muchas veces son las mismas estructuras organizacionales las que frenan el aprendizaje de sus miembros y por ende de nuevas aplicaciones, ya que afianzan rutinas defensivas, que impiden que los individuos actúen de acuerdo a cómo piensan.

A nivel organizacional también son cuatro (4) las acciones a considerar, ellas son:

1. La codificación: Su objetivo es almacenar y hacer el conocimiento explícito y fácil de entender, a la vez que se le hace accesible y aplicable a todos lo que lo necesitan, apoyados en tecnología de información.

2. La transferencia del conocimiento: Esta acción tiene como finalidad impulsar el acercamiento de los miembros de la organización hacia la discusión de nuevas ideas y posibles aplicaciones, así como la distribución y difusión del conocimiento por toda lo organización.

3. La vigilancia del entorno: La organización tiene que mantener constante observación sobre los cambios de su entorno inmediato, requiriendo de información oportuna y confiable, para dar respuesta a las nuevas demandas y evitar que una carencia de datos le impidan respuestas o soluciones novedosas. Esta observación constante le permitirá desarrollar la flexibilidad y la investigación.

4. La visión compartida: Las organizaciones deben generar acciones de reflexión y conversaciones coherentes y constantes, que le permita a todos sus miembros orientar sus acciones a los objetivos deseados, los cuales fundamentalmente buscan una mayor competitividad.

Los Facilitadores:

Son elementos propios de la organización que deben estar presentes para que los instrumentos de apoyo individuales y organizaciones puedan dar las respuestas y resultados esperados, siendo de ellos la responsabilidad de la Dirección si realmente se desea gestionar el conocimiento. Ellos son:

1. La cultura: expresada a través de las creencias, normas, valores, políticas etc., que a su vez determinan actitudes y formas de pensar de sus miembros. Para gestionar el conocimiento, resulta esencial crear un clima de confianza y seguridad que incentive la innovación, la experimentación y motive al personal a desarrollar su capacidad de aprendizaje.

2. El Liderazgo: En un ambiente de gestión de conocimiento se requiere de un liderazgo transformacional, que sepa guiar y orientar al personal para el planteamiento de nuevas ideas y búsqueda de respuestas, que brinde soporte y apoyo en el aprendizaje.

3. La tecnología: La organización debe garantizar la plataforma tecnológica que le permita la codificación, almacenamiento y distribución oportuna del conocimiento requerido para su discusión y aplicación

4. El sistema de medición: Las empresas orientadas a la gestión del conocimiento, deben incorporar a su evaluación de rendimiento organizacional no solo indicadores financieros, sino por el contrario, deben estar conscientes de su capacidad de aprendizaje, y monitorear constantemente los resultados y beneficios de las nuevas aplicaciones a nivel individual y organizacional.

5. La política de recursos humanos: siendo que el conocimiento reside en las personas, y que el núcleo de un programa de gestión de conocimiento se considera al individuo, es necesario y vital que las políticas de recursos humanos estén en consonancia con una cultura de aprendizaje constante, que fomente la creatividad y la iniciativa, mediante sistemas apropiados de recompensas, entre otros.

El diseño organizativo:

Este aspecto da soporte a los dos anteriores y es igualmente responsabilidad de la dirección velar por una estructura flexible, más descentralizada y más autónoma para la toma de decisiones, así como también que considere una mayor participación en la planificación.

Estas tres propuestas  dejan claro que la tríada de la transformación organizacional y pieza clave para compartir el conocimiento con efectividad son: las personas, procesos y tecnología, lo cual está en armonía con lo planteado por Morin, (2001) al referirse a la multidimensionalidad del conocimiento.

La presente investigación se refiere a uno de esos aspectos: las personas, específicamente la comunidad docente, y su interacción para gestionar el conocimiento generado producto de las investigaciones que ellos realizan.

 

El Aprendizaje Organizacional como Indicador de Logro

 

De acuerdo con Simón, (1991), todo el conocimiento es inicialmente creado o adquirido por individuos. El aprendizaje individual es prerrequisito para el aprendizaje organizacional.

            El concepto de organización que aprende -aprendizaje organizativo- se está empleando cada vez más en la literatura como aproximación a la adquisición y desarrollo de conocimiento. Senge (1990) definió las organizaciones de aprendizaje como lugares donde las personas expanden continuamente su capacidad de crear los resultados que realmente desean, donde se alimentan patrones de pensamientos nuevos y expansivos, donde se da libertad a las aspiraciones colectivas, y donde la gente está continuamente aprendiendo cómo aprender conjuntamente.

Garvin (1993) define organización de aprendizaje como aquélla que es experta en crear, adquirir y transferir cocimiento y en modificar su comportamiento para reflejar nuevos conocimientos y visiones.

Romme y Dillen (1997), por su parte, prestan especial atención al proceso de la información y su efecto sobre el proceso de aprendizaje, concluyendo que la adquisición, distribución, interpretación y almacenamiento de la información son de máxima relevancia para que los procesos de aprendizaje tengan éxito.

  Argyris y Schön (1978) la definen como cualquier cambio que afecte en alguna medida la teoría de acción de la organización con resultados relativamente persistentes. Sólo si la teoría de acción de la organización es modificada en alguno de sus componentes, se puede hablar de que la organización ha aprendido. (p.73)

 

El aprendizaje organizacional es el resultado de un proceso continuo de creación de valores organizacionales tendientes al logro de una visión compartida en el reparto y acceso del conocimiento. A partir del aprendizaje individual y de los procesos de captación, estructuración y transmisión de conocimiento, puede llegarse a hablar de aprendizaje organizacional. Mediante un uso adecuado de las habilidades del personal; la creación de un ambiente competitivo, que incentive a las personas a que aprendan cada vez más; la generación de un ambiente favorable para compartir y distribuir la información entre todos los miembros de la organización para que ellos puedan utilizarla y convertirla en conocimiento individual y posteriormente en conocimiento organizativo; se desarrollan las capacidades de la organización para enfrentar problemas cada vez más complejos.

 

De la definición de Argyris y Schön, se puede entender por aprendizaje organizacional, como el proceso mediante el cual se detectan las disfunciones por medio del estudio de las relaciones existentes entre la acción y el resultado, es decir se transforma la experiencia en conocimiento, entre la organización y el entorno o entre la organización y la memoria organizacional, reestructurando los modelos mentales y la teoría de acción y compartiendo la base de conocimiento organizacional, lo que permite el desarrollo de nuevas habilidades y conocimientos, incrementándose así la capacidad organizacional para llevar a cabo acciones eficaces mejorando el desempeño organizacional. Precisamente, lo que se percibe en esta investigación es que la UNESR, a través de un modelo de gestión de conocimiento se beneficie el aprendizaje de la organización.

Esta actividad comprende la adquisición, la difusión y la utilización de dicho conocimiento. Así la organización que aprende debe facilitar la transformación y el aprendizaje continuo a todos los miembros y a la organización en sí.

 

Función de Investigación

 

Para Bonilla, (2004) la función de investigación en la Educación Superior constituye un proceso de generación, validación, difusión, transferencia y aplicación de conocimientos (p.88).  Se puede inferir de  esta definición que las  estrategias derivadas de la gestión del conocimiento, pudieran potenciar éstos procesos para lograr administrar los conocimientos con mayores niveles de eficiencia.

            En las instituciones de educación superior, la investigación se realiza de diferentes formas, pero la mayor parte de lo que se produce no se registra, no se publica, ni se difunde. Además de que la mayor cantidad de éstas no tienen una pertinencia social, participación social ni un alto impacto en la sociedad.

            Con los nuevos indicadores propuestos por el CNU-OPSU(2005) para evaluar la investigación, se consideran los criterios como la participación social, pertinencia social y relevancia, rendición de cuentas entre otras. De estos criterios es importante profundizar en la participación social, pertinencia social y relevancia.

La autora de esta investigación  define participación social como un  proceso de participación de organismos sociales de desarrollo comunitario en las deliberaciones sobre los temas de investigación a realizar la universidad que se vinculan con la satisfacción de necesidades a la sociedad; en cuanto a pertinencia social considera la definición aportada por Cruces (2004) para que la investigación sea socialmente útil hay que mejorar los niveles de calidad  ambiental y de vida de los ciudadanos, la cual debe responder a las necesidades del entorno regional y nacional del país y la relevancia de cada investigación, la cual debe tener un impacto en la sociedad. Tomando en cuenta criterios la investigación que se realice hoy en la universidad debe vincularse con el contexto social, productivo, ambiental, cultural e histórico del país. La investigación que se realice debe tener un alto contenido de pertinencia social, participación social y relevancia de tal manera que por encima de cualquier consideración individual como ha ocurrido hasta ahora no se dejen fuera los problemas que confronta el país.

Por otra parte, se requieren considerar otros criterios como: infraestructura tecnológica, financiamiento de la investigación, gestión de la investigación, impacto de la investigación, formas de comunicación e interrelación a nivel de intra e inter institucional.       

El modelo teórico de gestión de conocimiento a construir debe contemplar que las investigaciones realizadas tengan una pertinencia social, participación social y relevancia. Ante esto la universidad debe contar con un mecanismo institucional que le permita al investigador conocer sobre las necesidades o áreas de investigación que requiera el país, investigaciones que den respuestas a necesidades sociales. Por otra parte, el modelo debe permitir que tanto los conocimientos existentes producto de las investigaciones realizadas por los docentes como los nuevos deben comunicarse a todos los profesores de la universidad y deben ser compartidos e integrados en la función de investigación, para que de esta manera la universidad se beneficie de un aprendizaje organizativo.

 

Conceptualización de Modelo

 

            La conceptualización de modelo se usa y reconforma con intención de resaltar explicaciones de la realidad, en cualquier modelo prevalece una teoría que lo sustenta y una acción que se concreta con una realidad verificable. En este orden de ideas, Yuren (2002), expresa:            

            Los modelos básicos se construyen  a base de conceptos y relaciones, siendo formal por el nivel en el que se da, la derivación de conclusiones mediante reglas lógicas que se verifican mediante la observación y la experimentación. Para ello, se requiere de modelos operativos que establezcan planteamientos comprobados que estructurados formen un sistema que de cómo resultado una teoría, siendo ésta la estructura abstracta que representa la realidad. Estos modelos contenidos en una teoría forman un conjunto de relaciones y conceptos siendo también modelos formales. Estos pueden ser verbales, gráficos, matemáticos y materiales. (p.61)

 

            Por lo antes expuesto, un modelo es una construcción teórico-hipotética que puede hacerse praxis al representar a un sector de la realidad, que es susceptible de estudio y verificación; lo que implica que además de representar la teoría, debe evidenciar las condiciones en que se produce un fenómeno, estableciendo una conexión de lo abstracto con lo concreto.

            En el caso de esta investigación, se busca encontrar la estructura de un conjunto de elementos y sus relaciones a razón de la gerencia del conocimiento en la función de investigación aplicado a la UNESR, que beneficie el aprendizaje en la organización.

 

 

Referencias Bibliográficas

 

Andueza, M.(2004). Modelo Teórico para la Gestión Organizacional del Proceso de Investigación en la Educación Superior Venezolana. Tesis de Grado para Optar al Título de Doctor en Ciencias de la Educación. Universidad Santa María

 

Argyris, Ch. y Schön, D. (1978). Organization Learning. A Theory of action perspective. Massachusetts: Addison Wesly Co.

 

Bonilla L.(2004). Investigación,  Universidades, Postgrado y Sociedad. [Documento en línea] Artículo. Disponible: http://www.monografias.com/trabajos17/investigación-postgrados/investigación-postgrados.shtml#investig. [Consulta: 2005, Agosto 12].

 

Cruces, J. (2004). Informe de Gestión en la Dirección del CDCHT. Período mayo 2000 – julio 2004.  Boletín Electrónico de CDCHT de la UNESR.. Noviembre 2004. Año 2 Nº 8 [Documento en línea] Artículo. Disponible. http://www.unesr.edu.ve/Publicaciones/vinculo/doc/informe.pdf  [Consulta: 2006, Agosto 12].

>CNU-OPSU(2005). Informe de la Comisión Interinstitucional para la Evaluación de las Normas CNU relativas al financiamiento del área de investigación

Davenport, T.; Prusak, L. (1998), “Working Knowledge: How Organizations Manage What They Know”, Harvard Business School Press.

Delval J. (1997). Tesis sobre el constructivismo. En M. Rodrigo y J Arnay (Comps) La construcción del conocimiento escolar. Barcelona, España:Paidós

Driver, R. y Oldham, V. (1997). Un enfoque constructivista del desarrollo curricular en ciencias. En Porlán., García, J. y Cañal, P. (comps). Constructivismo y enseñanza de las ciencias. (4ª ed). Sevilla, España: Diada Editora

Garvin, D. (1993). Building a Learning Organization, Harvard Business Review. USA.

Koulopoulos,T., y Frappaolo, C. (2000) Lo fundamental y lo más efectivo acerca de la Gerencia del Conocimiento. Colombia: Mc Graw Hill Interamericana, S.A.

 

Malhotra, Y. (2000) ). Para qué se gestiona el conocimiento? [Documento en línea] Artículo. Disponible: www.virtuallibraryonknowledgemanagmen  [Consulta: 2006, Diciembre 12].

 

Morin, E. (2001) Los siete saberes necesarios para la educación del futuro.  Buenos Aires: Ediciones Nueva Visión

 

Nonaka, I. and Takeuchi, H. (1995). The Knowledge-Creating Company, New York Oxford. Oxford University Press

 

Pérez, S. (2000). La Universidad Politécnica Frente al Conocimiento y la Investigación: Caso Vicerrectorado Barquisimeto. Barquisimeto: Tesis Doctoral USM

 

Probst, G., Raub, S., y Romhardt, K. (2001) Administre el conocimiento. Los

pilares para el éxito. México: Pearson Educación de México, S.A.

 

Revilla, E. y Santana, P. (2000) De la organización que aprende hacia la  Gestión del Conocimiento. [Documento en línea] Artículo. Disponible:

www.icee.uipeg.es/Acede98/acede/mesa02/  [Consulta: 2007, Enero 15].

 

Romme, G.; Dillen, R. (1997) “Mapping the Landscape of Organizational

         Learning”, European Management Journal, 15 (1), pp. 68-78.

 

Senge, P. M. (1990) “The Leader’s New Work: Building Learning Organizations, Sloan Management Review, Fall, pp. 7-23.

 

Simon, H. (1991), Bounded rationality and organizational learning , Organization Science, Nº 2, pp.125-134

 

Steig, N. (1999). Gestión del Conocimiento: algo más que información. Training Development Digest 58-59, mayo 1999

 

Yuren, M. (2002). Leyes, Teorías y Modelos. México: Trillas