ARTICULO
DE CYBERPRESSE
Sobre
el último capítulo tv serie
Traducido por Clara
Varela
El
impacto de Omertá en el medio televisivo quebequés es más
que conocido. El sólido guión de Luc Dionne ha
elevado
la calidad de las teleseries aquí... ¡y esperamos además
que también en su entorno! Después de haberse
inmiscuido
en el universo de los mafiosos montrealeses, durante tres temporadas, esta
vez ha decidido flirtear con
los
moteros. Los criminales organizados que han tratado de enviar al periodista
Michel Auger al cielo el año
pasado.
A esos a los que identificamos invariablemente como brutos ávidos
de dinero, de polvo blanco, y que no viven
más
que para los ajustes de cuentas.
Pero
si Luc Dionne ha aceptado transgredir de nuevo la ley del silencio, fue
para mostrar una historia más humana
que
brutal, donde las relaciones amorosas y familiares le ganan, sorprendentemente,
el terreno a las relaciones de
negocios.
¿Mostrar que incluso los moteros tienen corazón? ¡todo
un reto! En el Ultimo Capitulo, su teleserie de
seis
horas que se presentará, al mismo tiempo en Radio-Canadá
y la CBC en el mes de marzo de 2002, los moteros
parecen
llevar una buena vida. Algunos han recogido abundantemente el fruto de
su labor viviendo en castillos
dignos
de las portadas de revistas de decoración. De hecho fue la casa
de Bob Durrelle, uno de los personajes
principales,
la que tiene por encargo abrir un capitulo de Triple Sixers en Toronto,
único territorio que la poderosa
organización
no ha invadido en Canadá. “Muestro a los moteros bajo otro punto
de vista, explica Luc Dionne. Y lo
hago
sin tratar de juzgar sus vidas. En una teleserie sobre la F1, por ejemplo,
¿por qué iba a filmar escenas de
carreras,
puesto que los canales de televisión llegan perfectamente cada dos
semanas instalando sus cámaras por
todas
partes en las pistas? Tiendo a mostrar cosas interesantes en la pantalla.
Los moteros están casados, tienen
hijos.
Llevan dos vidas. Eso me fascina. ¿Cómo consiguen conjugarlas?”
“¿¿Ha
visto ya los moteros en esas casas? Pregunta Claudio Luca, productor de
la teleserie de 9,5 millones de
dólares.
No se les ve en la televisión más que cuando pasan corriendo,
asistiendo a los funerales o cuando son
arrestados.
Hay moteros ricos. Algunos se aprovechan bien de los millones recoletados
por su organización, sino no
harían
ese trabajo.”
En
El Ultimo Capítulo, Roy Dupuis encarna a Ross Desbiens, un rico
motero al que le gustaría alejarse de una
vez
de ese medio tan turbulento. “Interpreto al boss de una pandilla, explica
el actor. Un intocable. Es el mejor amigo
de
Bob (Michael Ironside). Un tipo brillante que ama la vida, que está
enamorado de su novia, que no a matado a
nadie
y que no tiene expediente judicial. Ni siquiera tiene enemigos auténticos,
puesto que no es un motero con
una
gran ambición. Es digno de confianza. Es el típico caso de
individuo recuperable. Ha hecho dinero y ahora
quiere
salir.”
Regresa
de nuevo ante las cámaras al lado de Marina Orsini, su dulce mitad
en Les filles de Caleb. Pero no
esperen
ustedes encontrarla en sus brazos... ¡lo siento señoras!
La actriz interpreta sin embargo a la esposa de
Bob
Durrelle. “Karen, mi personaje, está en una etapa de su vida en
la que desearía otra cosa. No desea seguir
viviendo
en el miedo. Ver a su hijo de 14 años tratar de seguir las huellas
de su padre la perturba. Está prisionera en
una
torre de marfil y nota que pierde el control de su vida. Desgraciadamente,
no se sale tan fácilmente de ese medio
una
vez que se entró en él”.
“El
Ultimo Capítulo es el primer proyecto que he aceptado desde que
acabó Nikita, afirma Roy Dupuis. Leí el guión
de
golpe... pero al principio rechacé el papel que me ofrecían.
Tras Nikita, me estuve interrogando. Algunos sucesos
me
hicieron reflexionar durante seis meses. Dije que no a muchas cosas. Pero
el guión de Luc Dionne se me quedó en
la
cabeza durante una semana. Volví a llamar para saber si todavía
estaba en pie. Quizás fue un signo de que debía
aceptarlo.”
Doblemente, ya que rueda
al mismo tiempo en Un
homme et son péché. Los dos rodajes se
entrecruzan durante tres
semanas. El de Ultimo Capítulo se acaba el 19 de noviembre.
Aunque la
historia se desarrolla principalmente
en Ontario, la mayor parte de las escenas se han realizado en
Québec. “Mi historia
está basada en la emoción, sino hubiera hecho un documental,
dice Luc Dionne.
Los moteros tienen un código
de vestimenta, una jerarquía más estructurada todavía
que el ejército,
una forma particular de
hablar y de comunicarse, pero todo eso no es más que el telón
de fondo. En
una buena dramaturgia la
historia es secundaria. Nos agarramos de entrada a los personajes. No nos
acordamos de lo que Séraphin
Poudrier hizo en Les Belles Histories des pays d’en Aut. Pero nos
acordamos del hombre”.