La
energía vital del Universo a través de las manos permite curar todo tipo de
enfermedades, estrés, ansiedad, desbloqueo de chakras.Actúa tanto a nivel físico como
mental y espiritual, y mejora los resultados de cualquier tratamiento médico.
El Reiki nació en el Tibet hace
más de 3.000 años. Es un arte de sanación muy fácil de aprender; lo único que
necesitas son las manos para transferir energía.
No se encuentra en la mente,
sino en el corazón. La lectura puede ayudarnos a entenderlo intelectualmente,
pero el verdadero maestro es la experiencia.
¿Para qué sirve?
Reduce el estrés y relaja
tensiones y emociones. Actúa sobre cualquier enfermedad y sus causas, a nivel
físico, mental y emocional. Mejora los resultados de cualquier tratamiento
médico. Ayuda al crecimiento espiritual de la persona.
Quien estudia a fondo y trabaja con
asiduidad para mejorar el cuerpo y la mente a fin de convertirse en mejor
persona recibe el nombre de "hombre de gran espíritu". Las personas
que utilizan ese gran espíritu para un fin social, esto es, para enseñar lo
correcto a mucha gente y hacer el bien colectivo se llaman
"Maestros". El doctor USUI enseñó el gran Camino del Reiki a
incontables personas y sanó a otras muchas que se lo pidieron.
El Doctor Usui nació el 15 de
agosto de 1.865, en el pueblo de Yago. Fué un estudiante forzado y con talento.
De adulto viajó a varios países occidentales y a China. Aunque pasó momentos
difíciles, no renunció y se preparó con dedicación. Así llegó al sistema de
sanación Reiki y decidió compartirlo con la gente. Era una persona
entrañable, sencilla y humilde. Nunca se vanagloriaba de nada y siempre
estaba sonriente.
Después de su muerte el Reiki
sigue extendiéndose por todo el mundo ayudando a muchos a tener una buena salud física y a desarrollar
habilidades interiores para lograr una mayor felicidad.