COMO LA GOTA DE AGUA

 

 

Como la gota de agua
que horada la piedra,
o el árbol frondoso
donde trepa la hiedra,
horadó lento el amor
la coraza de hierro
que vestías impune.
Trepó sigiloso tus ramas
se enredó en tus venas,
llenó de tibieza tu alma;
encontraste sus ojos
en la noche plena,
y la amaste como se ama
con pasión y locura.
Bebiste su aliento 
sintiéndola cerca,
llenaste tus manos
acariciándola entera.
Testigo la noche
de ese amor y entrega
y cuando ya te ibas
sin que ella te viera,
dijiste quedito
quién te tuviera!
Fuiste a tu lecho
queriendo dormir
buscaste sus besos
palpaste su cuerpo,
gemiste su nombre
y sin poderte contener
dejáste las sábanas
corriste a su lado
y en un abrazo ardiente
se amaron otra vez.
La noche se iba
llegaba la aurora,
temías dejarla
la querías muy cerca
dormida en tu pecho,
respirando tu nombre
bebiendo tu aroma,
mordiendo tu boca
rompiendo corazas,
amándote otra vez.

 

 

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