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Don Diego Mesa de
León (1837 - 1915).
Fue uno de los profesores que más huella
dejó en la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, en las generaciones
que pasaron por sus manos.
Alma del colegio de San Agustín, que existió
con gran fama en aquella ciudad, su recuerdo se conserva aún como
modelo de orden y organización.
En el mencionado Colegio se forjaron
hombres y mujeres que dieron gran prestigio a Canarias.
Desempeñó Don Diego muchos cargos públicos, entre ellos los de
Diputado Provincial, Director de Establecimientos Benéficos, Presidente
del Gabinete Literario y Presidente de la Filarmónica.
Fue también
Alcalde accidental.
Tanto sus alumnos como la ciudad en su conjunto le mostraron siempre una
enorme respeto y admiración.
El Colegio de San Agustín fue conocido
por muchos años como el Colegio de Don Diego y adquirió gran
importancia bajo su mando.
El número de alumnos pasaba de cien, cantidad extraordinaria para la
época en que desarrollaba sus actividades y donde Don Diego impuso su
personalidad, tanto por su energía paternal como por el cuidado que
ponía en la preparación de sus alumnos.
Por sus méritos fue propuesto para la Encomienda de Alfonso XII, pero
murió antes de que le fuese concedida, el 25 de julio de 1915
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