|
Rafael Romero
Quesada (Las Palmas de Gran Canaria1886; 1925 ).
Perdió a su padre muy joven y tuvo que trabajar de
contable en una casa inglesa, cosa que le dio ocasión para componer sus
mejores poesías irónicas, impregnadas de una fuerte melancolía.
Después de usar los seudónimos de "Felipe
Centeno" y "Gil Arribato", consagró definitivamente el
de "Alonso Quesada".
Su pesimismo, reflejo de su vida, está realmente
impreso en sus mejores páginas. Culmina su espíritu trágico en
"La Umbría" que refleja toda la tristeza infinita del
aislamiento canario llevando a los extremos con que muchas veces se
encuentra en nuestra literatura.
Su temperamento nervioso, impresionable, su inteligencia y
su imaginación y el espíritu analítico que impregna toda su obra, es
el cuadro general que se puede hacer de su misma literatura, claro
reflejo de su personalidad.
La obra fundamental de Alonso Quesada es "El lino de
los sueños", conservadora de una línea muy clara dentro de la
literatura castellana, aún canta las tierras calcinadas y secas de
nuestro sur. Su constante quejarse de la vida misma y de la humanidad
egoísta a la cual solo perdona a través del abanico de su ironía,
tiene se centro en esta visión de "tierra quemada".
Romero y Tomás Morales presentaron en sus obra visiones
completamente opuestas: el primero lleno de tonos grises y el otro, de
la claridad del Atlántico y del brillo inmenso de su fantasía.
|