Gente
enferma
Por
Rodrigo Ramallo
En
cualquier ciudad de la Argentina podemos observar diariamente a personas
solitarias que deambulan por calle y, como todos sabemos, la soledad
enferma.
Una ciudad, cualquiera que sea, ya no es un conjunto de personas,
de individuos o de seres humanos, sino que se ha transformado en un
conjunto de "ciudades" que habitan una "gran ciudad".
Hay muchos que afirman que las grandes ciudades se asemejan a una
"gran soledad". De ser así, cada habitante es una
"pequeña soledad". Ahora, ¿cómo se
combate la soledad?: con compañía. Por lo tanto, ¿cómo
se combate la soledad de cada uno de nosotros, de cada "ciudad"?:
compartiendo nuestra soledad con otra semejante. Esto no solo hace
referencia a nivel de pareja sino también a nivel amistad,
solidaridad o hermandad, palabras que al final de cuentas, van de
la mano.
Hay una imagen que, personalmente, quedó en mi memoria: un
niño "malabarista" pidiéndole algunas monedas
a un automovilista que, obviamente, se encontraba en su vehículo
detrás de su ventanilla. Al observar dicha situación
sentí que, tal vez, en el fondo de su corazón, ese niño
se habría preguntado: "¿siempre estarás
de aquel lado con tu soledad y yo siempre de éste con la mía?",
"¿tú siempre me estarás dando y yo pidiendo?",
¿cómo hacer para que los dos estemos del mismo lado,
para que mi soledad ayude a la tuya y viceversa?".
La resolución al problema es más sencilla de la que
muchos piensan: simplemente bajar la ventanilla. Tal vez, en un principio
cueste pero habrá que hacerlo algún día porque
el aire dura una cierta cantidad de tiempo dentro del auto y si no
tomamos alguna iniciativa, tarde o temprano, terminaremos afixiados.
La verdad es que no sé que más decir; a lo mejor, las
siguientes conclusiones lo digan todo:
"La ciudad es injusta".
"Si vivimos encerrados (en nosotros mismos), no tendremos un
buen final".
"La solución es bastante mas simple de los que muchos
creen".
... ¡Ah!, me olvidaba: " qué enferma que está,
no la "gran ciudad" o la metrópolis, sino las "pequeñas
ciudades", es decir, nosotros mismos".