Una
argentina murió en Israel por los cohetes disparados
por Hezbollah
Tenía
37 años y residía desde 2003 en la ciudad
de Nahariya, en el norte del país, junto a su esposo.
Un misil alcanzó su edificio cuando estaba tomando
un café en el balcón de su departamento.
Una
argentina que desde hace tres años vivía en
la ciudad de Nahariya, en el norte de Israel, falleció
hoy cuando un cohete Katiuska disparado por militantes de
la guerrilla proiraní de Hezbollah impacto contra
el edificio en el que vivía.
La
información, publicada por el portal de noticias
prensajudía.com, fue confirmada a Clarín.com
por fuentes de la Asociación Mutual Israelita Argentina
(AMIA).
Según
el portal, Mónica Saidman, de 47 años, estaba
tomando un café en el balcón de su departamento
cuando un misil impactó contra el edificio y le causó
la muerte de forma inmediata.
La
mujer, madre de tres hijas, residía en Israel junto
a su esposo, Darío Saidman, quien se dedica a fabricar
muebles de cocina. Presuntamente, la argentina habría
desoído las instrucciones dadas por la Comandancia
de la Retaguardia del Ejército para que la población
se refugiara en lugares seguros.
Fuentes
cercanas a la familia citadas por el portal describieron
a Mónica como "una persona muy dinámica"
que estaba "muy contenta de vivir en Israel".
Dos de sus hijas están actualmente en Argentina,
estudiando en la Universidad, mientras que la otra vivie
en Israel.
Se
estima que en Nahariya residen alrededor de 200 argentinos.
Clarin, JUE 13.07.2006