Partido disputado en el Municipal de Vecindario ante poco mas de 200 personas que presenciaron un encuentro entre un equipo aclimatado al calor, al fuerte viento y sobretodo a la hierba artificial y otro que se le hizo una montaña jugar en esas condiciones. Tras 3 victorias consecutivas, el Zamora viajó a Vecindario a arañar como mínimo 1 punto que le mantuviese en esa zona de privilegio de la tabla, pero no pudo ser, un equipo que dominó a placer el juego, y un arbitraje que deja mucho que desear hizo que el Zamora viajase de vacío a casa. Tras unos minutos iniciales de compas, en el minuto 15 Fran aprobecha una indecisión de la zaga castellana y bate a placer a Rubén, poco después, el árbitro empieza su recital y no pita cun claro penalty sobre Aiert; el Zamora era un quiero y no puedo muchas ocasiones desperdiciadas, pero en tiempo de descuento un remate de Ricardo da en el travesaño y el balon bota no se sabe bien si dentro o fuera de la línea, lo cierto es que el árbitro concede gol, aunque el juez de línea se queda plantado. No sirvieron de nada las protestas canarias, el empate hacía justícia en el marcador. Pero las cosas del fútbol son así, en la reanudación, otra vez Fran y otra vez tras un despiste, pone el que a la postre sería el definitivo 2-1. Ocasiones tuvo el Zamora para empatar el partido, pero ese no era su día, atrás quedaba el partido contra el Sporting B, que lo que chutó entro, el árbitro contribuyó a que finalizase así el partido, no señalando una pena máxima a Aiert por derribo. Todo estaba sentenciado, el Zamora tendrá que pensar en el partido del próximo domingo en La Vaguada frente a un equipo revelación el Siero, viejo conocido del Zamora (le apeó en la temporada 98-99 de subir a 2ªB en la liguilla de ascenso) y donde juega un ex-rojiblanco y pichichi de su equipo Toño Ruiz.