El caso de la joven cordobesa detenida en EE.UU.
Deportan a Natalia Muesa desde Miami
La esperan dentro de pocos días; estuvo arrestada dos meses

CORDOBA.- La joven argentina Natalia Muesa, de 26 años, detenida en los Estados Unidos el 19 de septiembre último acusada de falsificación de documento público, sería deportada a nuestro país en los próximos días.
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La madre de la joven, Emilia de Muesa, señaló que su hija ya fue trasladada desde la cárcel de mujeres de West Palm Beach, donde se encontraba alojada, al centro de detención de inmigrantes en Miami, y quedó a un paso de la deportación.
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La familia, que vive en esta ciudad, espera la llegada de Natalia para el fin de semana próximo o los primeros días de la siguiente.
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"Ella está en la ciudad de Miami, adonde fue trasladada desde la cárcel de Palm Beach. El consulado la mandó a hacer el pasaporte y está en la oficina de Migraciones", reveló la mujer, en declaraciones a Radio Universidad.
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Otro traslado
En tanto, el esposo de Natalia, Marcelo Saldaño, arrestado en el aeropuerto internacional de Palm Beach mientras realizaba tareas de limpieza junto a otros argentinos, sólo sería trasladado mañana a Miami.
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Saldaño y Muesa llegaron el 13 de febrero último a los Estados Unidos y encontraron trabajo en una empresa de limpieza, pero cuando se les venció el permiso de residencia apelaron a papeles falsos provistos por un gestor. En esa situación fueron detenidos el joven y otros compañeros durante una redada del FBI y el servicio de Migraciones en la terminal aérea.
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Muesa, en cambio, quedó apresada luego de comparecer espontáneamente ante la jueza federal del condado, Linea Johnson, el 19 de septiembre último.
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El 20 de noviembre, Natalia recibió la notificación del juez de la Corte Federal de West Palm Beach indicándole que los dos meses de arresto que cumplió resultan suficientes para completar su pena por falsificación de documento público (green card y de seguro social).
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En realidad, a Natalia le correspondería una pena de hasta seis meses de prisión, pero el juez resolvió que la pena ya había sido cumplida con el tiempo que llevaba de detención, y logró llegar a la instancia de deportación gracias a una negociación entre la defensa y la fiscalía.

La Nacion, 10 de diciembre de 2002