PEDIRAN QUE SE CUMPLAN LOS TRATADOS BILATERALES DE INMIGRACION

España: se vienen los juicios de los argentinos sin papeles

El disparador fue el fallo de una jueza en favor de dos inmigrantes uruguayos.

Miles de argentinos entablarán demandas ante la justicia española y presentarán recursos al gobierno de José María Aznar para lograr que se les reconozca el derecho a tener permisos legales de residencia y trabajo. Así lo aseguraron a Clarín algunos abogados especializados en el tema y dirigentes de las asociaciones argentinas en España, lo mismo que varios compatriotas "sin papeles".

Estas presentaciones se basarán en el argumento de que España debe aplicar los tratados y convenios bilaterales que firmó con Argentina y que reconocen a los ciudadanos de ambos países la libertad de emigrar y residir. Este principio de reciprocidad lo aplica Argentina para beneficio de miles de españoles, pero España rechaza todo intento de normalizar la dramática situación de los inmigrantes de nuestro país.

Las demandas tienen un precedente clave. Una jueza de Alicante acaba de reconocer el derecho de dos ciudadanos uruguayos a tener permiso de residencia y trabajo aplicando un convenio de 1870 que garantiza a los nacionales de Uruguay y España a ejercer libremente su trabajo en ambos territorios (ver Abrieron la...).

"Ahora se avecina una avalancha de juicios de argentinos para reclamar una regularización. La sentencia de la jueza de Alicante ratifica lo que las organizaciones argentinas en España venimos solicitando hace mucho tiempo. O sea que exista reconocimiento de los derechos que tenemos los argentinos a vivir y trabajar legalmente en España, así como los españoles tienen en nuestro país. El principio de reciprocidad no se aplica", explicó a Clarín, Enrique Borcell, presidente de la Casa Argentina en Madrid.

Para el abogado Carlos Slepoy, "lo correcto es que el gobierno español otorgue de inmediato a los argentinos en situación irregular, los permisos de residencia y trabajo a que tienen derecho por los convenios firmados con Argentina. El nuevo fallo abre la puerta a demandas y recursos administrativos".

En Canarias, por ejemplo, viven varias familias argentinAs en una angustiante situación de ilegalidad. "Ahora, por suerte, trabajo en la construcción y mi mujer también consiguió empleo. Pero no quieren darnos los papeles", explicó Roberto, quien hace más de dos años que no consigue legalizar su situación ni la de su familia. "Hemos leído lo de la jueza en Alicante y con otros amigos argentinos vamos a consultar a abogados para iniciar las demandas".

En un café cercano a la Gran Vía, donde se reúnen varios argentinos que viven en pensiones cercanas, se hacen las mismas preguntas y están dispuestos a iniciar las demandas ante la justicia española. "Aquí no se puede tramitar ni un papel. Todo hay que hacerlo en la Argentina. Algunos tenemos empresarios que nos quieren contratar pero nos exigen que volvamos para iniciar trámites larguísimos sin ninguna garantía de que te den los visados y permisos. ¿Y qué empresario espera más de un año? Es una locura. Además, no podemos ir a ver a nuestras familias por miedo a que nos impidan entrar a España", señaló Alberto, un rosarino recién llegado de trabajar en las islas Baleares.

Juan Carlos Algañaraz, Clarin, Sábado 6 de diciembre de 2003

Abrieron la esperanza

La jueza de Alicante Teresa Serra aceptó la demanda de dos ciudadanos uruguayos, quienes reclamaban permisos de trabajo y residencia, y falló en contra de la administración española. Los beneficiados son Damian Drews (27 años, diseñador gráfico) y Angélica Rodríguez (41, con formación empresaria), quienes se ampararon en un tratado bilateral del siglo XIX.
Desde ahora, los uruguayos que presenten una oferta de trabajo podrán pedir la legalización de su situación en España, lo que les era negado por las leyes de extranjería que obligan a realizar esos trámites en los países de origen.
Drews había sido despedido de su último empleo por no tener papeles, cuando llegó una inspección del gobierno. "Me dijeron que cuando tuviera los permisos me iban a volver a tomar", señaló al diario El País, de Madrid.