Todo comenzó con un trozo de madera de cedro, puesto en manos  de un buen artesano, y termino en una hermosa imagen de Nuestro Señor Resucitado.

 

 

 

Gracias al apoyo de nuestro hermanos de la Real Hermandad de Cristo Resucitado y Santa Maria de la Esperanza y del Consuelo de Zaragoza España que desinteresadamente, y sin conocernos personalmente, confiaron en nosotros para la realización de este sueño, el tener una imagen de tamaño real de Jesus Resucitado