“MISION VUELVAN CARAS, MODELO DE FUERZA PRODUCTIVA

 

En sus escritos y charlas, Mao Tsetung se refiere muchas veces a los grandes levantamientos de campesinos a lo largo de los siglos y miles de años de la sociedad feudal en China. Señaló que esos levantamientos lograron muchas cosas, que incluso destronaron a poderosos emperadores, sin embargo no lograron liberar a las masas populares completamente. ¨Por qué fue así y qué podemos aprender de eso para impulsar la lucha por la liberación total?

En las épocas históricas anteriores, cuando se levantaban los oprimidos, y a pesar de que luchaban y se sacrificaban heroicamente, no estaban en posición para reorganizar la sociedad de una forma radicalmente nueva sin explotación y sin opresión. ¨Por qué?

De fondo se debe a que en esos tiempos no estaban suficientemente desarrolladas las fuerzas productivas: la tierra y las herramientas, así como otras materias primas y maquinaria, al igual que el conocimiento y la capacidad de los seres humanos. No estaban suficientemente desarrolladas como para satisfacer las necesidades materiales básicas de todos, para permitir el desarrollo general--intelectual así como físico, recreación y trabajo--de todos, ni para permitir el desarrollo de la sociedad de conjunto, de una manera racional y planeada. En el pasado no existía la clase capaz de reorganizar a la sociedad de esa manera, de acuerdo a sus propios intereses.

Hoy todo eso ha cambiado. Ahora el desarrollo de las fuerzas productivas hace eso posible y hay una clase que lo puede concretar; esa clase, es la trabajadora.

 

Qué son las "Fuerzas Productivas"?


    El marxismo afirma que las fuerzas productivas, constituidas por los medios de producción (máquinas y herramientas) y los hombres, entran en contradicción con las relaciones de producción agudizando la contradicción entre las clases, y dando por lo tanto origen a que este conflicto tarde o temprano se resuelva por la vía revolucionaria. En resumidas cuentas, las fuerzas de producción que son verdaderamente las que transforman al mundo son frenadas en su progresivo desarrollo por el efecto retardante del aparato social (relaciones de producción y supraestructura ideológica).

Las fuerzas productivas de hoy requieren que miles, y en última instancia millones, de individuos colaboren para producir las cosas que la sociedad entera necesita. los trabajadores es la clase que representa el trabajo cooperativo y la labor cooperativa general que corresponde a la naturaleza altamente socializada de las fuerzas productivas. Es por eso que la revolución trabajadora se propone establecer la socialización y propiedad común de los medios de producción y organizar a las masas de una manera cooperativa para trabajar y distribuir lo que se produce, según sus necesidades.

Hoy las fuerzas productivas están altamente interconectadas a nivel internacional, y de hecho la forma más racional de utilizarlas es a nivel internacional. Por eso es que en última instancia la revolución trabajadora es una revolución internacional. Esta revolución se propone no solo abolir la división de la sociedad en clases sino también acabar con todas las desigualdades y relaciones opresivas entre pueblos y naciones, y llegar a acabar con la división de los seres humanos en naciones remplazándola con una sociedad de seres que se asocian y cooperan libremente a nivel mundial.

 Así podemos ver por qué Mao recalcó con frecuencia lo que dijo el fundador del comunismo, Carlos Marx: los trabajadores solo puede emanciparse si emancipa a la humanidad entera. Solo si se suprimen todas las formas de explotación; solo si se superan todas las "divisiones del trabajo" que ponen a unos en posiciones privilegiadas y de poder sobre otros; solo si se acaba con las divisiones entre clases; solo si se eliminan a nivel mundial todas las relaciones de opresión y desigualdad; solo logrando eso se concretarán los intereses de los trabajadores.

Los trabajadores deben ponerse y se pondrán a la cabeza de las masas oprimidas cuando se levanten contra el sistema opresivo, lo tumbará y creará un nuevo poder político. En este sentido los trabajadores actúan como otras clases históricas que han moldeado a la sociedad según sus intereses. Pero como hemos visto, los trabajadores es completamente diferente a las otras clases históricas--no le interesa ningún sistema nuevo de explotación sino la abolición de todas las formas de explotación y opresión--y por eso es que los trabajadores no solo puede movilizar a las masas oprimidas de una manera poderosísima para tumbar al viejo sistema, sino que también es capaz de seguir dirigiendo la transformación del mundo de una manera consciente y por su propia liberación.

Para llevar a cabo esta revolución histórica, para concretar sus intereses de clase y para emancipar a toda la humanidad, al proletariado tiene que dirigirlo una vanguardia  con la ideología y el programa que corresponden a los intereses más fundamentales y altos de los trabajadores. Con la dirección de tal vanguardia, basada en esta ideología, se puede desencadenar las masas oprimidas y dirigirlas de una manera consciente y organizada a luchar, tumbar y arrancar de raíz el viejo orden de explotación y opresión y crear un mundo nuevo--el mundo comunista para que como dijo Mao, la humanidad "proceda de manera consciente a su propia transformación y a la del mundo".

Paradojicamente la Misión Vuelvan Caras representa la acción liberadora del pueblo y del gobierno revolucionario para acelerar el proceso de transición hacia el Desarrollo Endógeno Bolivariano, contenido en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, a partir de la transformación cultural de las relaciones sociales y de producción, que garanticen una calidad de vida digna para todos, derrotando a la miseria y la exclusión que ha producido el modelo de desarrollo neoliberal.

Con esta Misión se pretende llevar adelante el Desarrollo Endógeno como una herramienta para erradicar la pobreza de nuestro país. La Misión busca crear Núcleos de Desarrollo Endógeno a lo largo de todo el país como una estrategia que busca romper el modelo productivo capitalista, le da poder al pueblo y democratiza la riqueza nacional. Los Núcleos de Desarrollo Endógeno (NDE) son los que llevarán adelante el desarrollo, por eso están actualmente diseminados a lo largo de todos los estados de la República, enfrentando día a día los vicios del capitalismo y sus consecuencias: la pobreza, la burocracia, la ineficiencia. Desde una perspectiva revolucionaria, los NDE permiten que el pueblo se organice y genere los bienes y servicios que necesita para vivir con dignidad.

La Revolución se encuentra en un proceso en el cual está inventando un nuevo modelo económico. En ellos se construye una forma diferente de generar riquezas incorporando a los excluidos, aprovechando el esfuerzo coordinado del Estado y de las organizaciones populares, tomando en cuenta el ambiente, valorando las potencialidades del entorno y teniendo la visión del Plan Estratégico de Desarrollo Nacional.

Las Misiones Revolucionarias representan un acierto social que bien conducido logran la progresiva consolidación del carácter popular, participativo y emergente, que son lo suficientemente eficientes y rápidas para dar solución al padecimiento de la sociedad venezolana ahora revolucionaria.

El Desarrollo Endógeno no se basa únicamente en darle respuesta a la cuestión económica. No se trata sólo de resolver el problema económico, es también producir una nueva sociedad en la que la exclusión social sea sólo un pasado lejano, en la que el pueblo se organice horizontalmente, sin relaciones de dominación, en la que se promuevan nuevos estilos de vida y de consumo, y en la que las esperanzas y sueños de los venezolanos sean una realidad.  

Colmenárez S. Simón;  Delgado Ramón E. Desarrollo Endógeno Sostenible Reingeniería Socioeconómica Impreso Tipografía y  Litografía Horizontes C.A.; 3ra edic. Barquisimeto-Venezuela 2003; Pág: 30

 

VÁZQUEZ B. Antonio, “Desarrollo Endógeno en Territorios Excluidos”. Seminario Internacional  Noviembre 2001

 

Boisier, Sergio. Crecimiento y Desarrollo Territorial Endógeno. Observaciones al caso chileno. 2001 mimeografiado Pág. 14