1. Capital Intelectual de la Empresa
El
capital intelectual es el conjunto de activos intangibles, más importantes
de las empresas basados en el conocimiento, entendiéndose por conocimiento
al nuevo agente productor de capitales económicos y
organizacionales.
Los elementos principales de la base del
capital intelectual, se los puede expresar de la siguiente
manera:
Capital Intelectual = Capital Humano + Capital
de la Economía de Mercado + Capital Estructural
El primero de los tres componentes modulares del
capital intelectual es el Capital Humano, que comprende la competencia,
conocimiento, valores y potencial innovador de los individuos dentro de la
organización.
Al segundo se lo puede llamar Capital de la
Economía de Mercado, que incluye los canales de distribución y
mercadotecnia de una empresa, su red de socios por alianzas estratégicas y
la lealtad y capacidad de generación de ideas de sus clientes y
proveedores.
El Capital Estructural es la infraestructura
innovadora de la empresa, el medio por el cual los Capitales Humanos y el
Capital de la Economía de Mercado se apalancan y finalmente se convierten
en capital financiero y utilidad. El capital estructural incluye la
capacidad de cambio, el liderazgo de los gerentes, aprendizaje y trabajo
de equipo de la organización, sus estrategias, visión, cultura, sistemas
informáticos, bases de datos, patentes e innumerables cuestiones
intangibles que son las fuentes verdaderas del potencial del valor y de la
ventaja comparativa.
Anteriormente los activos que aparecen en los
balances generales, sus informes de perdidas y ganancias, y otras
herramientas de la civilización administrativa de la era industrial, eran
el área básica a la cual se enfocaban los gerentes de las empresas. Con el
advenimiento de innovadoras formas de negociación, nuevos mercados y la
rapidez en los que se desarrollan, estamos obligados a innovar
permanentemente nuestras estrategias de negociación, aplacar el valor
potencial oculto, adoptar una actitud emprendedora, globalizar nuestros
negocios en un mundo sin fronteras físicas, modernizar nuestra
infraestructura y sistemas computacionales y de telecomunicación, para
sobrevivir y estar al nivel competitivo que actualmente se
requiere.
El total de los activos de las empresas se la puede
comparar con un iceberg. Del 100% existente, solo se puede visualizar un
10%, que comprende al Capital Financiero, el 90% restante que se encuentra
oculto, es el Capital Intelectual de la Empresa.

Figura No. 1: Capital Total de la
Empresa
2. Estrategias de Gerenciación y Explotación del
Capital Intelectual
La revolución de la supercarretera de la
información, la comunicación vía satélite e inalámbrica, las tecnologías
de la computación han cambiado las reglas de los mercados internacionales
y estructura de las organizaciones, traspasando las barreras políticas
dentro y entre las compañías, permitiendo que pequeñas empresas y países
compitan con los más grandes, reescriban las reglas de la competencia
administrativa organizacional y logren una reestructuración estratégica,
creen industrias totalmente nuevas, reinventen el funcionamiento de una
industria ya existente y establezcan la norma mundial de negocios de facto
para una industria en desarrollo.
Las compañías con las creencias
de mantener ventajas competitivas de largo plazo en sus respectivos
negocios, encausan erróneamente sus energías intelectuales y financieras
en la construcción de fortalezas competitivas impracticables. Por el
contrario, la innovación continua es el mecanismo de la empresa por la
cual se mantienen a la cabeza de los negocios en sus respectivas áreas. La
hipercompetencia global de esta época no ha respetado ningún campo, y las
innovaciones constantes se han vuelto una necesidad competitiva.
El
valor potencial oculto de las empresas es el Capital Intelectual no
explotado que toda empresa posee. Los esfuerzos creativos y exitosos para
aplacar y descubrir el valor potencial oculto necesitan de un verdadero
esfuerzo intelectual y gran habilidad para estudiar sus propios recursos
con el suficiente ingenio e intuición estratégica para descubrir nuevas
fuentes de valor, que produzcan beneficios para las empresas. La misión
del gerente es descubrir estas fuentes potenciales sean estos recursos
humanos, procesos de fabricación ineficientes e inclusive tecnología
existente subutilizada, ya sea que el valor oculto radique dentro o fuera
de la organización, el punto fundamental es que existen muchos.
La
velocidad con que las organizaciones logren producir nuevos campos de
negocio, es una herramienta esencial que les da un valor agregado para que
puedan ser superiores a sus competidores. El primero en explotar el campo
de negocio descubierto, tiene mas puntos a favor que sus semejantes. Las
recompensas son extraordinarias, entre las que se pueden nombrar las
siguientes:
* La posibilidad de establecer normas industriales de
facto al ser los primeros en colocar en los mercados ofertas innovadoras y
la capacidad de mantenerse a la vanguardia al incorporar avances
tecnológicos en productos y servicios más rápido que su competencia.
*
La habilidad de responder con mayor velocidad a las oportunidades de
mercado y reducir radicalmente el riesgo comercial al introducir nuevas
ofertas, para obtener y asegurar los canales de distribución mas
atractivos y estratégicos.
* El cambio de mentalidad del personal,
otorgándoles poder de decisión, rompiendo las barreras intelectuales,
ideologías y organizacionales de las empresas, ya que los problemas se
resuelven más rápido, mejorando la productividad y obteniendo resultados
concretos.
Las barreras organizacionales de las empresas se
presentan en tres diferentes variedades, las barreras horizontales, que
con mucha frecuencia evitan la colaboración entre diferentes departamentos
y especialistas; las barreras verticales o jerárquicas, que separan a los
ejecutivos de alto nivel de los empleados sin cargo; y las barreras de la
empresa misma, que separan a toda la compañía de los otros participantes
claves en este sistema comercial como son clientes, proveedores y
competidores.
Las empresas encontrarán un mejor mecanismo para
conducir sus negocios y políticas internas, al solucionando el problema de
las barreras horizontales y verticales, utilizando nuevas tecnologías que
brindan la infraestructura y la posibilidad de liberar la información y
derribar las jerarquías, con la capacidad del ejecutivo de manejar y
canalizar este aspecto.
Por otro lado, las alianzas
estratégicas entre compañías, se han convertido en una forma de vida para
las organizaciones grandes y pequeñas, y el mejoramiento de las políticas
de negociación e interrelación con sus clientes y proveedores, han
permitido eliminar las barreras externas de las empresas.
Al
superar este tipo de barreras, se reflejan los resultados positivos en
todas las estrategias de comercialización, distribución, fabricación,
producción, alianzas, y lo más importante, en las estrategias para
adquirir y propagar el valor-conocimiento a través de la
organización.
El statuo quo que mantenían las grandes
organizaciones como IBM y AT&A debido al tamaño de su infraestructura,
la estabilidad y la experiencia industrial, ya no es suficiente para
mantenerse en el mundo comercial actual, la inestabilidad de predicción de
la hipercompetencia global ha devaluado por completo los valores y
virtudes empresariales que existían. Para sobrevivir en los tiempos
actuales, se necesita una mentalidad de cambio y una actitud emprendedora,
con ideas nuevas y políticas insólitas de gerenciación y comercialización.
Según este tipo de condiciones, lo que cuenta es el deseo y capacidad de
aceptar riesgos, obtener retroalimentación de la vida real y la necesidad
de acción inmediata; en otras palabras la capacidad de ser
emprendedores.
Las circunstancias competitivas del mundo moderno,
netamente globalizado han permitido el desarrollo de una mentalidad
empresarial con una visión internacional, los negocios ahora se realizan
alrededor del mundo, la distancia geográfica es relativa debido al avance
de los medios de comunicación. Si los gerentes desean conseguir nuevas
oportunidades de negocio, deben buscar en nuevos mercados no explotados,
que generalmente no se encuentran en los límites enclaustrados y
económicamente estancados de sus propias regiones, en la actualidad los
negocios se desarrollan en un mundo interrelacionado e
integral.
Una de las fuentes de riqueza de nuestra época es el
valor-conocimiento, es probable que los activos intelectuales de la mayor
parte de las compañías valgan más que el valor material asentado en los
libros de contabilidad, las empresas exitosas son aquellas que
constantemente crean, adquieren y transfieren el nuevo conocimiento, lo
difunden en toda la organización y lo incorporan a sus nuevas tecnologías
y productos. El aprendizaje organizacional se convierte en esencial,
debido a la dificultad, rapidez y complejidad del ambiente
hipercompetitivo de esta época.
El modelo de aprendizaje
organizativo integra tres elementos claves:
* La creación de
problemas a través de la innovación y el pensamiento creativo.
* La
resolución de problemas
* La transferencia del conocimiento desde el
individuo a la organización.
El aprendizaje organizativo resultante
depende del funcionamiento de estos tres elementos claves, el desarrollo y
coordinación es función del gerente del siglo XXI, para que la ejecución
de este proceso se traduzca en ganancias, y también en su
competitividad.
El grupo Skandia, una de las empresa de
servicios financieros más grandes del mundo, es la primera compañía en
explotar su Capital Intelectual. En 1991 contrató a Leif Edvinsson como el
primer Director del Capital Intelectual y después agregó a Tove Husell
como Controlador del Capital Intelectual. Ahora cuenta con un equipo
dedicado solo al crecimiento y desarrollo de la base del Capital
Intelectual de Skandia. Esta organización ha publicado algunos artículos
como “Skandia AFS: Balanced Annual Reporton Intellectual Capital”;
“Visualizing Intellectual Capital in Skandia”, tanto así que ahora los
trabajos del Capital Intelectual de Skandia pertenecen a Harward Business
School.
Podemos nombrar otras empresas como Microsoft, Netscape con
sus negocios de facto; Dell Computers, Ikea (Suecia), con su innovadora
política de comercialización; Honda, con el convencimiento que la
competencia intelectual solo da forma y mejora el producto final; Toyota,
el pionero de la competencia basada en el tiempo; Andersen Consulting y su
transferencia del conocimiento justo a tiempo; CNN y su velocidad en
recoger, procesar y vender su capital intelectual de noticias; Bell
Atlantic, Xerox, Toshiba, etc.
Varias firmas de servicios
profesionales ya tienen definido roles de Gerencia del Conocimiento:
McKinsey, Anderser Consulting, Ernst & Young, Price Waterhouse, A.T.
Kearney, Hewelett Packard y Buckman Laboratories entre otros. Aunque pocas
firmas han calculado el costo de la gerencia del conocimiento. Compañías
como Robert Buckman de Buckman Laboratories estiman que su firma gasta el
7% de sus ingresos en la Gerencia del Conocimiento, McKinsey esperan
llegar a la meta de invertir el 10% de sus ingresos en desarrollo y
gerencia de su capital intelectual. Cómo expresa en dos palabras Matthew
J. Kiernan en su libro “The eleven commandments of 21st century
management”, “INNOVAR O MORIR!”.
Notas, fuentes y recursos |
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