La Ciencia de Hacerse Rico
Introduccion
La Ciencia de Hacerse Rico
Wallace D. Wattles
Este libro es pragmático no filosófico - un manual práctico, no un tratado
sobre teorías. Esta diseñado para el hombre y la mujer para los que su mayor
necesidad es el dinero, que quieren hacerse ricos primero, y filosofar después.
Es para aquellos que están dispuestos a tomar las conclusiones de la ciencia
como base para la acción, sin ir por todo el proceso por el cual esas
conclusiones fueron alcanzadas.
Se espera que el lector tome los principales fundamentos por fe, como tomaría
los fundamentos referentes a una ley de la electricidad si fueran expuestos por
Marconi o Edison, y tomando esos fundamentos, los pruebe verdad actuando con
ellos sin miedo o precipitaciones. Cada hombre o mujer que haga esto se hará
rico, porque la ciencia aquí aplicada es una ciencia exacta y su fracaso
imposible.
Al escribir este libro he sacrificado todas las demás consideraciones por la
simplicidad en el estilo, para que sea más entendible. El plan de acción
explicado aquí fue deducido por conclusiones filosóficas. Ha sido completamente
probado, y supera la última prueba de un experimento práctico: Funciona.
Atentamente,
Wallace D. Wattles
Capitulo 1 |
Capitulo 17
Un Sumario de la Ciencia de Hacerse Rico
Hay una sustancia pensante de la cual todas las cosas están hechas, la cual, en
su estado original, permea, penetra, y llena los espacios del universo.
Un pensamiento en esta sustancia produce la cosa que es imaginada por el
pensamiento.
Una persona puede formar cosas en su pensamiento, y por medio de esta impresión
en la sustancia sin forma causar la creación de la cosa en la que piensa.
Para lograr esto, una persona debe pasar del pensamiento competitivo al
pensamiento creativo. De otra manera no puede estar en armonía con la sustancia
sin forma, la cual es creativa y nunca competitiva en espíritu.
Una persona puede lograr la completa armonía con la sustancia sin forma
manteniendo una gratitud viva y sincera por las bendiciones que recibe. La
gratitud une la mente del hombre con la inteligencia de la sustancia, para que
los pensamientos del hombre sean recibidos por la sustancia sin forma. Una
persona puede permanecer en el plano creativo uniéndose con la sustancia creativa
a través de un profundo y continuo sentimiento de gratitud.
Una persona debe formar una clara y definitiva imagen mental de las cosas que
desea tener, hacer, o convertirse, y mantener esta imagen mental en sus
pensamientos, mientras profundamente agradece al supremo de que todos sus
deseos le son concedidos. La persona que desea ser rico debe pasar sus horas
libres contemplando su visión, y dar gracias de que en realidad se le esta
concediendo a el. No se puede sobreestimar la importancia de la imagen mental,
inquebrantable fe y devota gratitud. Este es el proceso mediante el cual la
impresión es dada a la sustancia sin forma y las fuerzas creativas puestas en
movimiento.
La energía creativa trabaja a través de los canales establecidos de crecimiento
natural, y los del orden industrial y social. Todo lo que esta incluido en su
imagen mental de seguro será traída a la persona que siga las instrucciones
dadas arriba, y cuya fe no decaiga. Lo que desee vendrá a el a través de los
canales establecidos de la sociedad y el comercio.
Para poder recibir lo suyo cuando llegue a el, una persona debe actuar de una
manera que mas que llene su espacio actual. Debe mantener en su mente el
propósito de hacerse rico a través de la realización de su imagen mental. Y
debe de hacer, cada día, todo lo que pueda hacer ese día, cuidando hacer cada
acto de una manera exitosa. Debe de dar a cada persona un valor de uso más
grande que el valor monetario que recibe, para que cada transacción genere más
vida, y debe mantener el pensamiento de progreso para que la impresión de
incremento sea comunicada a todos con los que tiene contacto.
Los hombres y mujeres que practiquen estas instrucciones de seguro se volverán
ricos, y las riquezas que reciban van a ser en proporción exacta a la
definición de su visión, la firmeza de su propósito, la fuerza de su fe, y lo
profundo de su gratitud.