Universidad Yacambú
Dirección de Estudios Virtuales
Planificación (Sección B)
Prof. Leonor Dillon
Elaborado por: Maricel
Bruce D'Viazzo
Trabajo Nº 2
Los Nuevos Aportes a
Las Estrategias Innovadoras.
La mayoría ya tenemos claro que se ha de innovar, que la
innovación ya no es un valor añadido sino que se ha convertido en el único
camino hacia la competitividad. Esta afirmación tomada del artículo
En los nuevos tiempos hay que tomar en cuenta otros aspectos del
negocio a fin de ganar terreno: Su capacidad de generar valor a sus accionista,
la participación de los empleados en los beneficios, oportunidades de
desarrolla profesional y personal, entre otros.
No es lo mismo ser parte de empresas que con el paso de los años
no registran cambio alguno, y si lo han registrado es de manera negativa, que
estar involucrados en organizaciones que mejoran día tras día, brindando
mejores productos y servicios a los consumidores, y haciendo participes a sus
propietarios, directivos y empleados de niveles de vida más ricos no sólo en
materia económica, sino además en crecimiento y desarrollo personal.
Tampoco es lo mismo para un cliente probar
suerte con los productos y servicios que una organización le brinda, que
adquirir bienes y servicios de empresas confiables, que otorgan alto valor a
los niveles de satisfacción, ofreciendo cada día una más variada gama de
productos y servicios.
Nada de ello es producto de la casualidad. Las
cosas ocurren porque se planifica y realizan acciones concretas para su
obtención, o sea hay una causalidad. Es muy fácil hablar de planificación,
organización, dirección y control. Pero otra muy distinta es llevarlo a la
práctica y mejorarlos de manera continua.
Es la hora en que los inversionistas se
preguntan en que empresa vale la pena realmente colocar sus ahorros y su
confianza, es también el momento en que los obreros se preguntan si vale la
pena dejar parte de sus vidas y proyectos personales en empresas que no le
permiten ningún crecimiento personal ni económico. Es el momento en que los
consumidores piensan si deben seguir adquiriendo productos de escaso valor,
mala calidad, precio elevado y un servicio al cliente atroz.
Es el momento de innovar… pero no
la innovación vista solo desde la óptica de introducir cambios en los
productos, se refiere a la innovación de los conceptos empresariales. De
acuerdo con Gary Hamel, las
mejores compañías del mundo están haciendo casos como:
Objetivos
escandalosamente ambiciosos de que no se pueden alcanzar sin innovación
conceptual.
Trabajar a partir del
cliente.
Una meritocracia de
innovación, en la cual las grandes ideas triunfan, vengan de donde vengan.
Una definición bastante
elástica y en evolución de los servicios que se ofrecen.
Rápida experimentación
y prototipos que permiten poner a prueba y definir nuevas ideas con una
velocidad que deja a los competidores tradicionales sin resuello.
Recordar que en un
mundo que cambia rápidamente, aferrarse a una sola tecnología o a un concepto
particular del negocio asfixia la innovación y al final acaba con la compañía.
Ahora
bien, innovar no es un privilegio reservado a las grandes corporaciones.
Cualquier empresa, por pequeña que sea debería platearse el reto de abandonar
sus viejos esquemas organizativos a fin de mejorar sus utilidades. Si bien es cierto esta no es una decisión del todo fácil. Innovar tiene
un cierto riesgo y este será creciente en función de lo disruptiva que sea la
innovación. Si simplemente se están buscando pequeñas mejoras respecto a lo
existente, los riesgos serán menores. Si se está intentando reinventar un
sector, los riesgos serán mayores pero también los resultados obtenidos serán
mucho menores. De esta manera observamos que suele haber un equilibrio entre
riesgos y resultados obtenidos.
Pero
también deberá considerarse que la innovación puede conducir al éxito, por lo
que existen diversas alternativas que podrían ponerse en práctica, que no
impliquen una gran inversión de recursos. Estrategias que incentiven la
participación de los niveles operativos en las discusiones sobre el futuro del
negocio, pueden traer resultados muy positivos y el aporte de nuevas ideas.
El reto de nuestra empresa:
Siempre se ha percibido
al sector público como un “elefante blanco”, es decir, una estructura tan
rígida he ineficiente, por lo que aquellos que tenemos la osadía de aspirar
abandonar ese sector laboral en busca de un horizonte distinto, somos
despreciados y etiquetados: Empleado Público.
Tal apreciación tiene, en muchos casos, razones
bien fundadas. La administración pública es el sector que ha perdido su
credibilidad debido a su incapacidad de dar respuesta a los problemas de los
ciudadanos, oportuna y efectivamente.
Pero, en la organización donde laboro, una
fundación adscrita a un importante ministerio, se están realizando esfuerzos
por mejorar la gestión, cambiando la misión y la visión de la institución y
haciendo uso de de recursos de TIC.
La fundación tiene como misión el manejo de los
recursos de la banca multilateral para la inversión en obras de interés social,
a través de convenios con los municipios. Diez años de gestión han permitido
evaluar el impacto de esas inversiones y su efectividad. Los programas se han
cumplido pero aun costo bastante alto con relación a los beneficios, si lo
vemos en función de que los recursos de la banca forman parte de la pesada
carga de la deuda externa del país. En función de esto, la fundación se ha
planteado nuevos retos, ha asumido compromisos que van más allá del ámbito
municipal, asumiendo la ejecución de obras que antes eran ejecutadas por el
ministerio con evidente eficiencia. Esto ha dado pié a una reevaluación de
nuestra gestión y de las capacidades de la empresa, en función de dar respuesta
efectiva a las comunidades y ampliar los
beneficios con obras de mayor impacto.
Pero la tarea no ha sido fácil, el principal
enemigo es la resistencia al cambio. Quien motoriza el cambio en la
organización es la alta gerencia, lo que representa una fortaleza, pero en
algunos niveles de la gerencia media, aun no están convencidos, por lo que esto
afecta de manera innegable a los niveles operativos. Se realizan reuniones con
las autoridades en las que se enfatizan nuestros logros y se exaltan nuestras
capacidades. Se ha realizado una importante inversión en capacitación y se
incentiva la personal a participar garantizándose el respeto del tiempo para el
estudio a fin de aprovechar las oportunidades. Se ha ampliado el programa de
becas, otorgando ese derecho a cualquier trabajador independientemente de la
posición que ocupe dentro del organigrama. Se ha desarrollado la plataforma
tecnológica con la adquisición de nuevos software y hardware que permitan una
mejor comunicación interdepartamental y con proveedores externos.
Pero aun no hay confianza suficiente para dar
el gran salto. Seguimos adelante tratando de privilegiar el trabajo en equipo y
la participación a fin de romper viejos paradigmas y poder alcanzar las metas
que nos permitan obtener recursos para nuestra autogestión, ya que no contamos
con asignación presupuestaria lo que hace difícil la subsistencia de la
institución en el largo plazo.
Enlaces Consultados:
http://www.gestiopolis.com/recursos/documentos/fulldocs/ger/GestioneInnovacion.pdf
http://www.infocomercial.com/articulos/barticulos.php?tipo_art=unico&id_articulo=9400&cod_sitio=3
http://www.cegesti.org/exitoempresarial/publications/pub172001_1_6.pdf
http://www.cdirectiva.com/arc/ARC%203.pdf
http://www.gestiopolis.com/recursos/documentos/fulldocs/ger1/estkailefco.htm