Arqueo Aegyptos

En El Interior De La Pirámide

La Pirámide De Sejemjet


Situación: Saqqara
Construida por: Sejemjet
Altura original: 70 metros?
Lado: 119 metros

restos del recinto de Sejemjet

La pirámide de Sejemjet se halla cerca de la pirámide de Unas, y fue excavada por un joven arqueólogo egipcio, Zakaria Goneim. Es muy poco lo que de ella queda, por no decir nada, sin embargo, se sabe bastante sobre como pudo haber sido, si es que fue terminada alguna vez. La obra se le atribuye a Imhotep, dado el parecido de los elementos del complejo con el recinto de la pirámide de Djeser.

Su orientación es Norte-Sur y ya en las excavaciones, se pudo apreciar que la fachada del perímetro era idéntica a la pared que Djeser había hecho construir para rodear su complejo funerario. La superficie de la pirámide es muy desigual. La roca no fue alisada y ello causó que los canteros tuviesen que nivelar el terreno con bloques de piedra, los cuales alcanzan la altura de diez metros de alto. Así pues, la pirámide fue construida en distintas fases. La primera fase era un rectángulo. 
Entrada a la cámara funeraria

En su orientación sur tenía su lado más ancho, estando el más estrecho orientado hacia el norte. Las dimensiones de la pirámide eran similares a las de Djeser. Construida con bloques de caliza blanca de Tura, las paredes  del complejo alcanzaban una altura de casi diez metros de altura, poseía una única puerta de entrada y una calzada con centros para centinelas, como la del complejo de su antecesor, probablemente su padre, Djeser.

Debido a que la pirámide está incompleta es difícil calcular los peldaños que se quisieron levantar. Se especula que siete, pero no puede probarse. El método de construcción constaba de una capa de aumento con las piedras inclinadas hacia dentro, teniendo una inclinación de 15 grados.  Según el egiptólogo Mark Lehner, si sus peldaños fuesen siete, la pirámide de Sejemjet sería más grande que la de Djeser, alcanzando una altura de 70 metros.

En la pared norte de la pirámide se encontró una entrada, que conducía a un pasillo que comunicaba con la sala del sarcófago. Pero el pasillo se hallaba seccionado por un eje vertical que era un sistema de seguridad. Dicho sistema, es similar al de otras moradas halladas  y que han sido datadas en la misma dinastía. Había varios huesos de animales, espolones y un papiro fechado en la XXVI Dinastía, durante el reinado de Ahmose II (Amasis). También fueron hallados setecientos recipientes de piedra y un escondrijo de tesoros que contenían objetos de oro. 

anillos de oro

Esta "cámara" del tesoro, contenía 21 pulseras, pequeñas cáscaras de mejillón, corales de fayenza cubiertos con hojas de oro y conchas de ostras. Es la ornamenta de oro más antigua hallada en Egipto. El resto del ajuar funerario nos es desconocido, pero seguramente algún merodeador nocturno llevó buena cuenta de ello en la antigüedad.

Concha de ostra, fabricada en oro

Unos 47 metros antes de llegar a la Cámara del Sarcófago, hay un paso en forma de "U" que conduce al este, y que se une a una serie de anexos, probablemente para almacenar objetos rituales. En el pasillo, se hallaron recipientes de arcilla que contenían el nombre de Sejemjet. Descendiendo, alcanzamos otro pasillo que lo cruza transversalmente que nos lleva hasta la cámara del sarcófago,  bajo la pirámide. Su alineación es justo el eje vertical de la pirámide. Las paredes orientadas hacia Norte-Sur no se terminaron de pulir. Un sarcófago de alabastro pulido y cortado de una sola pieza son el único testigo del tránsito de Sejemjet hacia el Más Allá. Esta es una pieza curiosa, puesto que los únicos sarcófagos de alabastro, tallados de la misma forma corresponden a Hetepheres I y a Seti I, de la IV y XIX Dinastía respectivamente. 

Cámara funeraria con el sarcófago

La historia del sarcófago es curiosa, pues la tapa estaba sellada, y sobre él se hallaron unos restos de lo que se dijo en su día un ramo de flores. Se creía que la momia aguardaba en su interior para desvelar no solo la imagen de Sejemjet, sino la historia de su reinado. Pero el sarcófago estaba vacío, y la gran cantidad de prensa y televisión que allí se congregó, tuvo que conformarse con la bella imagen del sarcófago de alabastro. Esto provocó  a los defensores de la teoría de que las pirámides no fueron moradas para la eternidad, y la polémica duró  en el tiempo. Muchos egiptólogos piensan incluso que ésta pirámide no es sino el cenotafio de Sejemjet, y que su verdadera morada de eternidad está aguardando a ser descubierta, oculta en las arenas del desierto.

Junto a la entrada de la pirámide, se hallaron unas galerías inacabadas que bien pudieron haber sido para construir anexos similares a los que contiene el recinto funerario de Djeser.

En el exterior, pero dentro del recinto, situada al sur se halló una morada simbólica, una superestructura de bloques de piedra caliza. Es una mastaba que tiene una entrada en el lado oeste, como la de Djeser. En su interior, se halló un sarcófago de pequeñas dimensiones que había albergado el cuerpo de un niño de unos dos años de edad, huesos de animales y recipientes de piedra.

El joven arqueólogo egipcio, Zacaria Goneim no terminó sus excavaciones. Fue acusado de tráfico de objetos, dio conferencias por los Estados Unidos, escribió un libro sobre su descubrimiento y finalmente se suicidó en el Nilo.

Egiptólogos como Philipe Lauer han sugerido que tal vez Sejemjet muriese durante una expedición militar, y que su cuerpo no fue recuperado. Así vendría a explicarse el por qué el sarcófago estaba vacío, aún siendo sellado.

 

© 2005, Amenofhis III (Luis Gonzalez Gonzalez) amenofhis_29@hotmail.com