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ALGUNOS
PLANTEAMIENTOS SOBRE LA GESTIÓN PÚBLICA LOCAL DEL DESARROLLO
REGIONAL |
Autor:
José Gpe. Vargas Hernández, M.B.A.; Ph.D. jvargas@cusur.udg.mx Centro Universitario del
Sur Universidad de Guadalajara Prol. Colón SN Cd. Guzmán,
jalisco, 49000 México Telefax: +52 341 240 44
Las
condiciones del desarrollo regional
La
descentralización de las funciones del Estado nacional es una tendencia
relacionada a los cambios en "el modo de acumulación, a la revolución
científica y tecnológica, a la reestructuración del Estado y a las
demandas por espacios de autonomía planteadas por la sociedad civil
(Marsiglia y Pintos, 2001). Por lo tanto, la reforma del Estado implica
una reingeniería de las instituciones orientada al logro de una mayor
eficiencia, y una participación más equitativa en los procesos de
desarrollo regional, de tal forma que los resultados contribuyan a lograr
tasas de mayor igualdad.
Sin embargo, la participación popular
legalizada e institucionalizada que refuerza la gobernabilidad democrática
y la descentralización política es relativamente nueva en el contexto de
los gobiernos locales en Latinoamérica. La introducción de la
descentralización política orientó la descentralización administrativa
hacia la persecución de la gobernabilidad democrática, el combate a la
corrupción institucionalizada, reducir la brecha de las inequidades,
facilitar la participación ciudadana, etc. Por lo tanto, el aliento a la
participación ciudadana mediante procesos de descentralización política y
de reordenamiento territorial, pueden crear las condiciones para impulsar
el desarrollo regional.
Lamentablemente, este tipo de
descentralización económica que introduce externalidades y mecanismos de
mercado, crea fuertes disparidades debido a las diferenciaciones
regionales y sociales en la asignación y provisión de bienes y servicios
públicos. Para abatir estas disparidades, se requiere la transferencia de
recursos desde el centro, mediante mecanismos de compensación al
desarrollo regional. Las transferencias de recursos para lograr una mejor
redistribución territorial puede efectuarse mediante fondos financieros no
condicionados a aportaciones específicas y de libre disponibilidad, así
como aquellas transferencias que si están condicionadas.
La
implementación de políticas de descentralización debe estar acompañada con
la creación de nuevos espacios para una mayor participación de la
sociedad. Así la descentralización del aparato del Estado, debe liberar el
potencial democrático representado por los movimientos locales y
regionales que operan al nivel de sociedad civil a fin de servir como
suplemento de oportunidades para la participación popular, incluyendo la
participación político-electoral proveídas por una democracia más
participativa.
Los movimientos sociales que operen al nivel
de sociedad civil necesitan estar respaldados por una voluntad política de
una eficiente administración y para que las acciones de los movimientos
populares sean efectivas, éstos requieren presentarse con un modelo de
participación popular, la cual es inherente a su propio voluntarismo. Pero
esta participación popular, de acuerdo con Castells and Borja (1988:47),
se restringe a la consulta, información y cooperación con la
administración local y no a los procesos de toma de decisiones, las cuales
siguen siendo prerrogativas de los representantes electos. Sin embargo,
habrá que determinar si se liberan de las actividades productivas de
bienes y servicios públicos a las administraciones locales, mediante
procesos de descentralización, las repercusiones en términos de beneficios
para el desarrollo regional
Desarrollo local
En vez
de ajustar el desarrollo local y nacional a las tendencias y patrones
globales, una estrategia de desarrollo nacional debe tomar en cuenta las
necesidades locales y nacionales, sus particularidades y potencialidades,
sus ámbitos económicos, políticos, sociales y culturales, como la base
para una más articulada integración en los procesos de globalización. En
este caso el desarrollo nacional que promueve el desarrollo local y
regional, debe avanzar en doble sentido. Esfuerzos para un desarrollo
estructural con una amplia cobertura de arriba hacia abajo y esfuerzos de
abajo hacia arriba que enfatizan las particularidades de las diferentes
localidades y regiones.
Van Hermelrick (2001) define el espacio
local como un sistema compuesto de "un conjunto de subsistemas en
interacción dinámica entre sí y con su medio ambiente, cuya finalidad es
la satisfacción de necesidades." El mismo autor entiende el desarrollo
local como "un proceso basado en alianzas entre actores, que se genera en
un ámbito territorial inmediato, con el fin de impulsar procesos de
cambios para el mejoramiento de su bienestar colectivo."
Los
proyectos de desarrollo local deben tener como fundamento la
reconstrucción de su propia realidad y no ser elaborados desde el
escritorio de una oficina del gobierno central, de tal forma que tome en
consideración las necesidades de desarrollo locales, los recursos y
capacidades locales existentes, las áreas prioritarias y el
involucramiento de los principales agentes económicos y actores políticos
y sociales. Estos agentes y actores son el Estado y gobierno mismo,
sociedad civil, empresas privadas, etc. Por lo tanto, no existe un modelo
único de desarrollo local sino distintas propuestas de
proyectos.
Enríquez (2001) plantea la apertura del campo del
desarrollo local en tres vertientes: la concepción metodológica de trabajo
que impulsan las organizaciones de la sociedad civil y que impulsa
acciones desde abajo para enfrentar la problemática del crecimiento
económico y desarrollo social; como resultado de los procesos de
descentralización y democratización del Estado, y como respuesta a los
requerimientos de la cooperación internacional, la promoción de la reforma
del Estado y la tendencia democratizadora. Las concepciones extremas de
los modelos autárquicos a los modelos globalizadores, con diferentes
componentes. Sin embargo, hasta ahora, el desarrollo local sufre de los
efectos recesivos de las políticas de ajuste estructural y de
estabilización económica que arrojaron un incremento masivo del desempleo,
elevación de los niveles de pobreza y desigualdad social.
Por
lo anterior, el desarrollo local tienen que ser reorientado en su objetivo
para cubrir o minimizar estas deficiencias y los impactos negativos en el
desarrollo social, impulsando y promoviendo proyectos que impliquen nuevas
formas de organización para incrementar los niveles de eficiencia pero
también la consecución de una mayor igualdad en el acceso a los recursos y
beneficios del crecimiento económico. No obstante, la promoción del
desarrollo económico local se mantiene solamente con una orientación en el
ámbito del mercado, por lo que sería importante no conceptualizarlo
subordinado siempre a la eficiencia de los agentes económicos.
Precisamente, Boisier (1988), lo local es el escenario óptimo para la
participación individual en la orientación del mercado, pero insuficiente
para la participación colectiva.
Así concebida, la posición
ideológica de los países avanzados se centra en la emergencia de un
"Tecn.-nacionalismo" (May, 1997) El rol de la estructura del conocimiento
estratégico en la economía política global está siendo ampliamente
reconocida. El futuro pertenece a las economías del conocimiento, con
implicaciones en las transferencias de tecnología y de instituciones,
mediante métodos verticales y horizontales. Los métodos horizontales
facilitan el componente tácito o personal del aprendizaje de conocimientos
del desarrollo local y general.
Los
recientes debates relacionados con la competitividad nacional en un
sistema capitalista global, se han centrado en el papel del conocimiento
estratégico en las actividades productivas y de servicios en
organizaciones domésticas y multinacionales. La teoría económica moderna
muestra que la producción y distribución socialmente óptima del
conocimiento, en donde el costo marginal de proveer conocimiento a otro
consumidor es casi cero. Sin embargo, el óptimo de Pareto no optimiza la
producción y la distribución del conocimiento, debido principalmente a los
derechos de propiedad intelectual que bloquean el acceso libre.
En
el modelo actual de desarrollo, la integración social, política e
inclusive la integración económica, quedan supeditadas a los mandatos del
mercado y el Estado a renunciado a su facultad para garantizarlas. No
obstante, la formación de redes de información y de conocimiento es uno de
los principales requisitos para esta integración económica, política y
social. La formación de nuevas formas de relación social que promuevan la
dinámica del desarrollo local en los procesos de globalización.
Si
bien muchas de las ONG's desarrollaron un importante papel en la
formulación de denuncias contra abusos de derechos humanos, en ningún
momento se atreven a denunciar las atrocidades cometidas por sus
patrocinadores, casi siempre organizaciones transnacionales. Además, para
imponer la política económica neoliberal, las ONG's proporcionan ayuda
económica para proyectos de auto-empleo, promueven proyectos locales,
apoyan capacitación y adiestramiento laboral, promocionan la libre empresa
con apoyos financieros a la microempresa y suministran servicios sociales
y asistenciales. La articulación de los proyectos de desarrollo locales y
regionales con políticas nacionales o globales constituye una tarea
prioritaria de las ONG's. Por estar más cercas de las comunidades, las
ONGs dirigen la asistencia a los que verdaderamente la
necesitan.
Para que la política social, al igual que todas las
políticas públicas, sean incluyentes y orientadas al desarrollo humano,
requieren de la democracia como plataforma para los procesos de toma de
decisiones. El desarrollo humano se manifiesta en el espacio del
desarrollo local como la expresión del capital social que resulta de la
participación de todos loas agentes económicos y actores políticos en los
diferentes procesos de decisiones. Los tomadores de decisiones y los
formuladores de las políticas públicas deben descentralizar las
operaciones de los programas para llevar los servicios lo más cercano a la
gente que tiene que ser servida. Además, deben saber como garantizar la
rendición de cuentas y buena práctica, a través de las diferentes unidades
de servicio en unidades dispersas.
La tendencia predominante de
descentralización política es la del gasto y vincularlo con las
aportaciones locales para infraestructura básica, educación y salud
principalmente. La descentralización de funciones para la provisión de
estos servicios también requiere la descentralización administrativa de la
gestión social. La confrontación de las necesidades del desarrollo local
implica inversiones en infraestructura física que no pueden ser
financiados con los ingresos fiscales anuales y que por lo tanto requieren
de financiamiento externo a través de la emisión de deuda
pública.
Desarrollo sustentable
Dunning (1997),
argumenta que los patrones cambiantes de demanda y avances tecnológicos
han impactado los costos de transacción y coordinación de la actividad de
valor agregado. Las instituciones e infraestructuras culturales sobre las
que se desarrolla tal actividad, han afectado críticamente los méritos de
los modos alternativos de la organización económica, y sobre los años, la
combinación óptima de estos modos ha sufrido un cambio marcado. De hecho,
la combinación de los modos de organización económica es determinante de
los diferentes niveles de desarrollo sustentable. Sin embargo, para que
los pueblos alcancen niveles de desarrollo autosostenible es necesario no
solamente que realicen su revolución capitalista, sino que también logren
su desarrollo democrático.
Si este desarrollo sustentable se
relaciona con las formas de organización económica, entonces las
actividades empresariales adquieren relevancia por ser la base de las
actividades económicas de los individuos consideradas en tanto que son
relaciones entre fines y recursos escasos. Las variables culturales están
siendo subestimadas como obstáculos al desarrollo, y tampoco se toma en
cuenta el estudio prioritario de las necesidades manifiestas por sobre los
deseos o preferencias de la población para la planificación del
desarrollo. Las organizaciones que se diversifican en los mercados
internacionales tienen la tendencia a ser más innovadoras y a desempeñarse
mejor que las organizaciones que no lo hacen. En parte, esto se debe a que
participan en mercados mayores, en los cuales no solamente pueden obtener
más altos retornos sobre las inversiones, sino también para proveerse de
los recursos necesarios para desarrollar nuevas y mejores
innovaciones.
El papel de las agencias estatales subnacionales como
socios de empresas y asociaciones de negocios energizan las redes de
acción económica ubicadas localmente, es una de las formas para apoyar el
crecimiento económico y el desarrollo social. Pero este desarrollo
económico y social desigual está muy lejos de un verdadero desarrollo
sustentable sólo delimitado por una cultura propia local y por una
moralidad económica. Para lograr niveles de desarrollo económico
sustentable es necesario que además de las reformas económicas se den las
reformas políticas y democráticas Abordar las discusiones sobre desarrollo
sustentable es preocuparse por los problemas del medio ambiente y por las
cuestiones sociales.
El medio ambiente comprende los elementos
ecológicos, económicos, sociales y políticos. El sistema local se inserta
en el ambiente ecológico o ecoware (Vázquez, 1993) con el que mantienen
relaciones. El ambiente económico, político y social se inserta en el
"macro sistema de referencia" y norma las funciones y relaciones externas
al sistema local que comprende las capacidades instaladas (software), los
recursos financieros (finware) y formas organizacionales (orgware). El
modo de desarrollo económico actual está siendo seriamente cuestionado
porque no es desarrollo que aliente la sustentabilidad ecológica y la
justicia social en todos los habitantes del globo.
De hecho, las
soluciones a los problemas sociales y del medio ambiente parecen que se
encuentran implícitos en las formaciones culturales de los pueblos. Así,
el desarrollo sustentable formula severos cuestionamientos a las prácticas
sociales, culturales y ambientales con respecto a las actividades
organizacionales. El desarrollo sustentable requiere de reformas
económicas y reformas institucionales.
Bebbington (2000) previene
de usar el término desarrollo sustentable para significar "buena
administración del medio ambiente". En otras palabras, logra la eficiencia
de uso del medio ambiente, o eco-eficiencia a largo plazo. El imperativo
moral del desarrollo sustentable está orientado a la obtención de la
justicia social para todos los habitantes del mundo, es decir, de una
eco-justicia entre las diferentes generaciones y al interior de cada una
de ellas.
Esta eco-justicia tiene un impacto en las
operaciones de las actividades de los negocios que tradicionalmente se han
orientado por entregar riqueza material a ciertos grupos de alto consumo
El desarrollo global sustentable requiere que aquellos que son más ricos,
adopten estilos de vida más de acuerdo con los medios ecológicos. No
obstante, es en la relación medio ambiente y desarrollo en donde se
localiza el origen del desarrollo sustentable y el desarrollo que reconoce
que tiene límites estructurales y de orígenes naturales se orienta a la
sustentabilidad.
El desarrollo sustentable es el desarrollo que
satisface las necesidades del presente sin comprometer la habilidad de las
futuras generaciones para satisfacer sus propias necesidades. Satisface
las necesidades básicas de todos y extiende a todos la oportunidad de
realizar sus aspiraciones para un mundo mejor (UNWCED, 1987:8). El
desarrollo sustentable se define como el desarrollo que satisface las
necesidades del presente sin comprometer la habilidad de futuras
generaciones para satisfacer sus propias necesidades. El desarrollo
sustentable es un valor que permite hacer una elección moral para aceptar
la equidad y la justicia social. La preocupación del desarrollo
sustentable es la satisfacción de las necesidades de todas las personas en
el mundo ahora y en el futuro, y por lo tanto, los beneficios y los costos
del desarrollo deben distribuirse entre todos.
Streeten (1992) hace
referencia a que el término "desarrollo sustentable" tiene seis diferentes
significados: 1) mantenimiento, reemplazo y crecimiento de capitales
activos, ambos físicos y humanos; 2) mantenimiento de las condiciones
físicas del medio ambiente para la constitución del bienestar; 3) la
recuperación del sistema para que le permita ajustarse a las crisis y a
los shocks; 4) evitar las cargas a las futuras generaciones de deudas
internas y externas; 5) sustentabilidad fiscal, administrativa y política.
La política tiene que ser creíble y aceptada por los ciudadanos, de tal
forma que exista suficiente consenso para llevarla a cabo; y 6) la
habilidad para manejar proyectos por la administración por los ciudadanos
de los países en desarrollo en los cuales se llevan a cabo, de tal forma
que los expertos extranjeros pueden retirarse sin poner en peligro su
éxito.
Redclift (1987) sugiere que "el desarrollo debe ser sujeto a
una redefinición, ya que es imposible que la acumulación tenga lugar
dentro del sistema económico global que hemos heredado sin costos del
medio ambiente no aceptables. Ante todo, el desarrollo plantea
cuestionamientos a los valores humanos y actitudes, así como las metas
definidas por la sociedad y criterios para determinar los costos que
tienen que hacerse y por quien.
El desarrollo sustentable, si
es que hay una alternativa al desarrollo no sustentable, implicaría un
receso dentro del modelo lineal de crecimiento y acumulación que
finalmente sirve para debilitar los sistemas de apoyo de la vida del
planeta." El desarrollo sustentable se usa para motivar las iniciativas
económicas, políticas, legales, que buscan resolver la problemática del
medio ambiente, económica y social. La sustentabilidad debe asegurarse en
las áreas económicas, sociales, políticas, culturales, científicas,
tecnológicas y del medio ambiente El desarrollo, por tanto, se encuentra
limitado a los costos ambientales aceptados. Sin embargo, el actual
desarrollo económico no es sustentable porque los costos humano y del
medio ambiente son inaceptables.
Sin embargo, el desarrollo actual
es un desarrollo económico que privatiza los beneficios y socializa los
costos. El mismo proceso de integración comercial es apoyando por el
Estado-nación que está solícito a pagar socializando los costos y riesgos
de las empresas. Las corporaciones empresariales están obligadas a dirigir
sus energías a satisfacción de todos los aspectos del desarrollo de las
generaciones actuales y futuras en el contexto industrial.
El
propio concepto de desarrollo sustentable debe estar relacionado con la
competitividad de la economía, el nivel de desarrollo social y por un
modelo de nación. Para alcanzar el desarrollo sustentable es necesario
lograr resultados en las reformas económicas y en las institucionales. La
satisfacción de las necesidades de la población está influida por el nivel
de desarrollo económico y social. Las raíces epistemológicas de un
desarrollo no sustentable pueden localizarse en la concepción lineal de
progreso de la era moderna.
Tampoco resulta fácil determinar hasta
qué grado los regímenes supranacionales y las administraciones nacionales
necesitan modificar sus agendas y prescripciones de las políticas en
virtud de la creciente movilidad de los recursos. En un extremo, la
definición por una mayor función de las instituciones del mercado para
autorregular las formas de organización económica y la asignación de los
recursos, y en el otro extremo, la concepción neoestructuralista de las
limitaciones del mercado como asignador óptimo de los recursos. Es en este
sentido que la organización económica está íntimamente relacionada con el
desarrollo sustentable de los pueblos.
La práctica de
políticas públicas y una política económica que promuevan un crecimiento
económico que provea los recursos para sostener una política social capaz
de mejorar la equidad en la distribución de los beneficios, es un
requisito necesario, aunque no suficiente para ampliar las opciones y
oportunidades al pleno desarrollo humano. Así por ejemplo, la preservación
del medio ambiente es necesaria para el futuro desarrollo humano, la cual
es una condición necesaria pero no suficiente para el desarrollo
sustentable. Planteado el desarrollo sustentaba como política de Estado no
ha producido los resultados esperados, ni los cambios en comportamientos y
actitudes requeridos.
Por tanto, en una economía capitalista, los
modos en que se organiza la actividad económica tales como los roles de
los mercados, las jerarquías, las alianzas entre empresas y los gobiernos,
se han vuelto más complejos. En las economías en desarrollo, son las
fuerzas libres del mercado las que orientan sus objetivos de crecimiento
económico y su desarrollo social, la propuesta de los países capitalistas
desarrollados, aunque no señalen como lograr el equilibrio de un
desarrollo sustentable en el logro de estos objetivos, una vez que se han
rebasado los ánimos iniciales.
Por supuesto que aquí el
concepto de desarrollo sustentable está enfocado hacia la obtención de una
racionalidad de medios-fines según el concepto Weberiano. En un sistema de
libre mercado, por ejemplo, no existe forzamiento para la producción de
acuerdos sobre cualquier cosa, de tal forma que cualquier acción puede ser
tomada, pero ajustándose a esta racionalidad en la relación medios-fines.
Mientras, el sistema socialista pregonaba que los medios de producción y
distribución debían ser propiedad y administradas por el Estado en
substitución del mercado.
Las tensiones que existen entre el
crecimiento económico y el desarrollo se fundamentan principalmente en la
concepción del desarrollo sustentable, el cual formula serios
cuestionamientos sociales, culturales y ambientales a las prácticas de las
organizaciones. Para alcanzar el desarrollo sustentable es necesario
lograr resultados positivos en las reformas económicas e institucionales.
Lamentablemente, este enfoque de desarrollo no ha producido los resultados
esperados.
En este sentido es necesario establecer nuevos
esquemas de colaboración entre la sociedad y el mercado. Los cambios
endógenos de los procesos de desarrollo económico tienen su origen en las
nuevas combinaciones de estos recursos, descrito ya por Schumpeter (1962,
1943), como una destrucción creativa como un proceso evolutivo que
"incesantemente revolucionaliza la estructura económica desde dentro,
incesantemente destruyendo la vieja estructura e incesantemente creando
una nueva".
La discusión por la búsqueda de una mayor significación
al valor del trabajo frente al capital no concluye todavía Las formas de
organización económica en las economías de mercado consisten en distintas
formas de llevar a cabo y coordinar las actividades económicas dentro y
entre las diferentes unidades de acción económica. Si el desarrollo
sustentable está íntimamente relacionado con estas formas de organización
económica, por lo tanto, las actividades empresariales desempeñan un papel
importante en este desarrollo, porque crean las bases de las actividades
económicas.
Gestión pública local del desarrollo
El
desarrollo de los proyectos y las reformas para la transformación, siempre
son modificados por las dinámicas gestadas por los actores (Giddens, 1984;
Clegg, 1990). Los costos y beneficios de la reforma económica, política y
social pueden ser compartidos por los diferentes agentes dentro de marcos
institucionales que faciliten la participación ciudadana. La reforma
económica implica reformas al sistema político, el desarrollo de las
instituciones políticas y la reforma del Estado. La participación de los
ciudadanos en la gestión pública es uno de los objetivos de los procesos
de gobernabilidad democrática. Para que la asociación y la participación
ciudadana adquiera valor como instrumento democrático debe ir acompañada
de libertad de expresión.
La flexibilidad organizacional queda
manifiesta en la flexibilización de los sistemas de producción y
acumulación que junto con la perspectiva de los costos de transacción
permiten que las organizaciones lleguen a ser más flexibles a través de la
desintegración vertical y horizontal. La fricción de la distancia se
incrementa en importancia proveyendo un fuerte incentivo para el
aglomeramiento geográfico (Appelbaum and Henderson, 1995) Esta
flexibilización se expresa en estructuras de redes que facilitan las
interrelaciones que tienen que desarrollarse en los diferentes niveles
espaciales: local, nacional, regional y global, dando paso a la emergencia
de una sociedad de redes apoyadas en la tecnología informática. La
formación e integración de un sistema de redes de participación directa en
la gestión pública local permiten la reinvención del espacio geopolítico y
otorgan a los gobiernos locales las competencias requeridas para afrontar
los retos de la globalización.
Conviene más hablar de
transformación de las funciones del Estado-nación que de su inminente
eliminación. Sin embargo, las transformaciones y mutaciones del
Estado-nación no van siempre siguiendo una misma dirección. Ya no es el
Estado-nación modelado como un actor que tiene coherencia y un destino
propio dentro de una jerarquía de poder internacional y como resultado de
una racionalidad de intereses. El espacio político del Estado-nación ya no
se identifica ni depende del ejercicio soberano sobre un territorio
nacional delimitado. El territorio se redefine para centrarse más en la
gestión pública local bajo una nueva estructura territorial
local.
Lo que la reforma del Estado está haciendo es transferir la
responsabilidad para la gestión y resolución de conflictos sociales a los
gobiernos locales, la cual se condiciona a la estructura social de las
localidades. El instrumento de la reforma del Estado y modernización
política es la descentralización del poder político de las instancias del
centro a las instancias locales. Para que la reforma del Estado se centre
en un redimensionamiento de las relaciones entre la sociedad, el mercado y
el Estado, requiere de procesos de descentralización para lograr una
gestión pública más eficiente.
La construcción territorial del
espacio de las decisiones públicas de abajo hacia arriba, que privilegia
con una mayor autonomía al gobierno local, debe considerar la
corresponsabilidad de competencias en la gestión pública. El desarrollo
local es un proceso orientado por estrategias y políticas que articula
esfuerzos y recursos de agentes económicos y actores políticos con
capacidad de acción territorial para lograr objetivos de crecimiento
económico, desarrollo social y mayores niveles de bienestar de la
población. Son actores y agentes todos los que toman decisiones que
afectan al territorio (Marsiglia y Pintos, 2001). Por lo tanto, no existe
un modelo único de desarrollo local sino distintas propuestas de
proyectos.
Los actores son las personas e instituciones que
desarrollan acciones directas en un territorio, así como también a las
"estructuras, organismos y personas que por misión o acción tienen un
lugar y un papel en los engranajes de los intercambios locales (Cachón,
1996). Tomando en consideración que el término local se asocia tanto a un
territorio físico definido, como también a un grupo en movimiento en un
espacio móvil, van Helmerick (2001) define una localidad o un sistema
localizado como "un conjunto de elementos en interacción dinámica,
localizado dentro de los límites de un espacio físico determinado,
organizados en función de un fin". Una redefinición del territorio es la
base para el nuevo espacio geopolítico que requiere la nueva gestión
pública local para involucrar a los diferentes actores y agentes en la
promoción del desarrollo de la sociedad.
Este conjunto de elementos
se refiere a las personas que viven habitualmente y a las unidades
económicas establecidas en un territorio. Marsiglia y Pintos (2001)
conceptualizan el territorio local/regional como "una dimensión económica,
una dimensión identitaria e histórica, una comunidad de intereses y como
espacio con un potencial endógeno para potenciar el desarrollo. La
reinvención del espacio geopolítico del gobierno local implica una nueva
estructura territorial en la cual la gestión pública municipal se
manifiesta como el escenario en que los diferentes actores y agentes
interactúan en proyectos de colaboración conjunta para la solución de sus
propios problemas.
La creación de un sistema democrático en el
ámbito del gobierno local y municipal, permitirá la participación estrecha
de la ciudadanía en los asuntos de la gestión pública y permitirá el
fortalecimiento de la identidad comunitaria. La reinvención política del
gobierno local tiene su expresión en el fortalecimiento espacial de las
competencias del municipio en materia de desarrollo. Las tres relaciones
más importantes en la reforma del Estado, son aquéllas de regulación que
se dan entre los agentes privados y del gobierno, las relaciones de
vigilancia y supervisión que se dan entre los políticos y los burócratas y
las relaciones de responsabilidad y rendición de cuentas (accountability)
que se dan entre los ciudadanos y los políticos
La evidencia
sugiere que la conexión positiva entre el crecimiento y los ingresos de
los pobres no han cambiado mucho durante el período de la globalización,
que anteriormente. El análisis entre las variables pobreza y desigualdad
con el gasto social en Latinoamérica, muestran una correlación negativa y
una baja eficiencia de la gestión pública en el área social en las últimas
dos décadas, ya que se ha dado prioridad al equilibrio
macroeconómico.
Esta gestión pública, al decir de Molina
(2001) debe descansar en cinco variables que profundiza los retos
consecuencia de una participación ciudadana y de procesos de
descentralización: la ciudadanía efectiva, desarrollo económico local,
gestión territorial, sociedad de la información y desarrollo sostenible.
Sin embargo, este gasto social en la región latinoamericana se elevó casi
al 25% durante la década, pero los retornos sobre las inversiones son muy
bajas, debido a factores diversos tales como la corrupción.
El
gobierno local está involucrándose cada vez más en un fuerte y persistente
apego al concepto de autosuficiencia y autonomía. El gobierno local ha
sido relegado a una política de descentralización que limita la reforma
del Estado y a ser los ejecutores de políticas y decisiones que se toman
en otros niveles del centro del Estado. La reconstrucción territorial que
privilegia al gobierno local en la determinación autónoma de espacios de
decisión pública de abajo hacia arriba, tiene que promover la
corresponsabilidad de las competencias en la gestión pública en los
diferentes niveles de gobierno y en la concertación de proyectos conjuntos
de desarrollo entre los sectores público y privado. Esto entre la mayor
parte de los líderes de los grupos representados en los consejos (Leach et
al, 1994), a pesar de que no todas las decisiones pueden ser
descentralizadas a las instancias de poder local.
La
participación política de la ciudadanía en los gobiernos locales no debe
reducirse exclusivamente a la elección de representantes. Pueden asumir la
responsabilidad de la institucionalización de una política social y de
servicios públicos que estén menos centralizados. Pueden participar en
decisiones de gestión pública local, tales como el gasto público e
inversiones, así como en la obtención de fondos e ingresos
presupuestales.
Para superar parte de estos problemas, una nueva
territorialización es conveniente a efecto de que mediante el la formación
de asociaciones que mancomunen los recursos y esfuerzos de varios
municipios, se formalicen propuestas concretas de desarrollo mediante la
creación de instrumentos de apoyo a la gestión municipal acorde al
desarrollo regional. La gestión pública local requiere de una delimitación
de la estructura territorial para aprovechar las ventajas de las
negociaciones y estrategias del asociacionismo.
Estas nuevas formas
de asociacionismo de municipios para la producción y entrega de servicios
públicos, trascienden la división política misma para en contar soluciones
conjuntas a problemas similares en forma más efectiva y mediante la
generación de economías de escala, dadas las limitaciones espaciales, de
capacidades y de recursos. Los municipios orientan su desarrollo económico
en función de las estrategias del mercado, por lo que la satisfacción de
los requerimientos y demandas de los agentes económicos tiene como
finalidad incrementar la competitividad
En la descentralización
administrativa, la gestión administrativa de decisiones políticas
territoriales implican su adopción en los niveles locales inferiores. La
gestión pública local requiere de un nuevo diseño y una nueva reingeniería
de la estructura territorial, para aprovechar las ventajas de la
participación social local. La participación en la gestión administrativa
se extiende a las organizaciones políticas y sociales.
La
participación ciudadana en los procesos de descentralización política son
muy limitados. La descentralización política permite a los gobiernos
locales estimular la participación ciudadana para un mejor sistema
redistributivo, más equitativo, con mayor diferenciación y eficiencia en
la provisión de bienes y servicios públicos. La participación ciudadana
debe ser alentada por los gobiernos locales en los procesos de gestión
pública, tales como en las decisiones presupuéstales de gasto e ingresos,
sobre todo en aquellas decisiones que afectan el uso eficiente de sus
propios recursos y el aprovisionamiento de bienes y servicios
públicos
Una política de descentralización exitosa debe crear
estructuras de auto-gobierno regional al mismo tiempo que permitir el
desarrollo de actores sociales capaces de auto-administrarse y de
desarrollar una identidad, lo cual implica la necesidad de "construir" la
región en términos sociales (Boisier, 1987: 143; Schönwälder, 1997:763).
La falta de flexibilidad del Estado nación para reaccionar a los
acelerados cambios de la globalización económica y la inercia de sus
pesadas estructuras que no responden a las actuales demandas de la
ciudadanía, hace necesario fortalecer a las regiones.
La
región se define en general como" un área de territorio sobre la que puede
identificarse una marcada unidad de problemas humanos y caracteres físicos
con una fuerte tendencia hacia tal unificación. Es decir, con el
predominio de ciertos factores tanto comunes como complementarios, que
generan una suerte de identidad" siguiendo a Boisier (1988). Una nueva
delimitación del espacio territorial del gobierno local es un
requerimiento para promover una gestión pública orientada a lograr la
participación social de los principales actores y agentes en la solución
directa de sus problemas.
Notas, fuentes y recursos |
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Referencias
bibliograficas
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