DE LO INTANGIBLE A LO
TANGIBLE
DESARROLLO DE MODELOS PARA MEDIR EL CONOCIMIENTO ORGANIZACIONAL
Cristian
Carvallo González[1]
Adolfo
Arata Andreani[2]
1.
Introducción
La
medición del conocimiento es realizada a través de la generación de indicadores
para el Capital Intelectual y este último corresponde al valor creado por el
sistema que representa la Gestión del Conocimiento. Al respecto se han
desarrollado 4 modelos para la Gestión del Conocimiento y once para la medición
del Capital Intelectual[3].
La
primera interrogante surge de inmediato: ¿Es posible Gestionar el
Conocimiento?.
Einstein
dijo: "lo que puede medirse no siempre es importante, y lo que es importante a
veces no puede medirse", frase que es totalmente aplicable al tema en
desarrollo.
Encontrar
una respuesta a lo anterior es el principal objetivo de este
documento.
2.
Modelos
para la Gestión del Conocimiento
Existen cuatro modelos para
la Gestión del Conocimiento, siendo ellos:
I.
El Proceso de Creación del Conocimiento
enunciado por Nonaka & Takeuchi en 1995. Este modelo plantea la
Gestión del Conocimiento como un proceso de creación de conocimiento donde
interactuan los conocimientos tácitos[4]
y explícitos[5].
II.
El Modelo de Gestión del Conocimiento de KPMG
Consulting (Tejedor y Aguirre, 1998), nos lleva a responder otra
interrogante: ¿qué factores condicionan el aprendizaje de una organización y qué
resultados produce dicho aprendizaje?.
Para responder la pregunta
se debe producir una interacción entre elementos tales como, la estructura
organizativa, la cultura, el liderazgo, los mecanismos de aprendizaje, las
actitudes de las personas y la capacidad de trabajo en equipo entre otras.
III.
El
tercer modelo recibe el nombre de Modelo
Arthur Andersen[6] y se centra en el
reconocimiento de acelerar el flujo de información que posee valor desde los
individuos a la organización y de vuelta a los individuos, así ellos podrán
usarla para crear valor para los clientes.
IV.
El
cuarto y último modelo corresponde al Knowledge Management Assessment Tool
(KMAT).
Este modelo propone el
liderazgo, la cultura, la tecnología, la medición y los procesos como
facilitadores que favorecen la Gestión del Conocimiento.
El liderazgo es importante
para que una organización defina su negocio y el uso del conocimiento que posee
en el reforzamiento de sus competencias críticas
La cultura organizacional
refleja el comportamiento que se tienen para favorecer el aprendizaje, la
innovación y la flexibilidad frente a los cambios.
La tecnología reflejará la estructura física o equipamiento que se posee
para facilitar el flujo de conocimientos.
La medición corresponde a la metodología de medición del Capital
Intelectual.
La aplicación de cada uno de
estos modelos corresponderá a la situación específica de la empresa considerando
las competencias esenciales que posee o bien las que quiere
desarrollar.
Los modelos expuestos
presentan elementos comunes entre ellos, los que son interesantes de destacar.
El proceso del conocimiento es un proceso cíclico y
continuo en el que se debe prestar atención a las personas y la forma en que
ellos adquieren conocimiento tanto del exterior como de experiencias en la misma
empresa. Este proceso de aprendizaje implica el desarrollo de mecanismos
adecuados para obtener el máximo provecho de la creación, captación,
almacenamiento, transmisión e interpretación de estos conocimientos tanto de las
personas hacia la organización como de esta última a las personas.
Resulta interesante indicar
que una parte de la responsabilidad será de las personas, pero también tiene un
nivel de responsabilidad la organización en entregar la estructura adecuada para
el adecuado flujo de conocimientos.
Una vez conocidos los
modelos corresponde preguntarse: ¿Si
el conocimiento se puede administrar, entonces también lo puedo medir?.
Para dar respuesta a esta interrogante es que surgen los modelos de medición del
Capital Intelectual. Siendo esto último el resultado final de la Gestión del
Conocimiento.
3.
Capital
Intelectual
Como ya se ha mencionado, el
Capital Intelectual corresponde al resultado de la Gestión del Conocimiento.
Eduardo Bueno y autores como Brooking, 1996; Edvinson & Malone, 1997;
Sveiby, 1997; Drogonetti & Ross ,1998; Modelo Intelect, 1999, expresan que
el Capital Intelectual es el diferencial entre el valor de mercado y el valor
libro de una empresa. En una definición más formal se tiene que corresponde a la
combinación de activos inmateriales que permiten funcionar a la empresa y que
pese a no
estar reflejados en los estados contables tradicionales, generan o generarán
valor para la empresa en el futuro[7]. Este Capital Intelectual
es posible agruparlo en tres categorías[8]:
capital humano, capital estructural y capital relacional.
Para corroborar lo anterior
sólo basta retroceder dos décadas en la Bolsa de Valores de Chile y se observa
que en el periodo de 1984 a 1994 el promedio de la relación valor bolsa/valor
libro, para las empresas que cotizaban en la Bolsa de Valores de Santiago de
Chile aumentó de 0,37 a 2,35, esto es más de cinco veces. Luego de 1994 al año
2000 este indicador se ha mantenido[9]
fluctuante, pero siempre mayor a uno (1,25 el año 2000 y 1,5 al 1º de Junio de
2001).
Analizando por rubros se
llega a los siguientes valores, de la relación valor bolsa / valor libro, para
el periodo comprendido entre 1994 y 2000[10].
Rubro |
1994 |
2000 |
Agropecuarios y
Mineras |
1,23 |
0,67 |
Industriales |
2,32 |
1,04 |
Empresas
alimenticias |
2,83 |
0,76 |
Metalurgias
básicas |
2,92 |
0,62 |
Manufacturas
diversas |
2,45 |
1,28 |
Empresas Bancarias,
Financieras y Bolsas de Valores |
1,75 |
2,04 |
Servicios
Varios |
2,52 |
1,28 |
Las empresas del rubro
"Agropecuarios y Mineras" han disminuido desde una relación de 1,23 en 1994 a
0,67 el año 2000.
Las empresas "Industriales"
en 1994 tenían una relación Bolsa/Libro igual a 2,32, sin embargo en el año 2000
esta relación llega a 1,04, siendo notorias disminuciones en los subrrubros de
empresas alimenticias, de 2,83 a 0,76; metalurgias básicas, de 2,92 a 0,62 y
manufacturas diversas, de 2,45 a 1,28.
Sin embargo en el rubro de
"Empresas Bancarias, Financieras y Bolsas de Valores" la relación a variado
desde 1,75 en 1994 a 2,04 el 2000. Siendo este rubro comparativamente con el
anterior, más intensivo en conocimientos como fuente de ventaja competitiva en
el mercado.
Lo anterior no hace sino
demostrar una tendencia mundial.
De acuerdo al profesor Keith
Bradley, de la Open Business School del Reino Unido: "en Estados Unidos, en el
periodo de 1973 a 1993, el promedio de la relación valor de mercado/valor en
libros para las empresas cuyas acciones cotizan en bolsa aumentó de 0,82 a
1,692...”
Siguiendo la misma
referencia anterior, se tiene que en el Índice Mundial Morgan Stanley, el
promedio del valor de las empresas en las bolsas de valores mundiales es el
doble de su valor en libros y en Estados Unidos el valor de mercado de una
empresa es generalmente entre dos y nueve veces su valor contable.
Nótese que Chile siendo un
país que no va a la vanguardia en lo que respecta a la Gestión del
Conocimiento[11]
muestra la misma tendencia de Estados Unidos.
Asumir el concepto de
Capital Intelectual como se ha planteado significa un cambio de paradigma en lo
que a valoración de empresas se refiere. Esto porque el común de los inversores
explica esta diferencia existente entre el valor libro y el valor de mercado
como los beneficios futuros que tendrá la empresa. Entonces surgen una serie de
interpretaciones subjetivas que van generando las fluctuaciones que
acostumbramos ver en los índices bursátiles mundiales, principalmente de las
empresas intensivas en conocimiento.
La explicación de estos
posibles beneficios futuros que puede tener una organización se debe a algo más
que una inversión bancaria. Este nuevo intangible que no está reflejado en los
balances es el Capital Intelectual.
4.
Modelos
para la Medición del Capital Intelectual y Aplicación en Empresas
Internacionales
Existen 11 modelos de
medición del Capital Intelectual, siendo estos los
siguientes:
ü
Universidad de West
Ontario ü
Technology
Broker ü
Navigator
de Skandia ü
Nova ü
Intelect ü
Dirección Estratégica
por Competencias |
ü
Dow
Chemical ü
Drogonetty
y Roos ü
Canadian
Imperial Bank ü
Balanced
Scorecard (BSC) ü
Intellectual Assets
Monitor |
Los objetivos de estos
modelos son similares siendo principalmente el medir y gestionar el Capital
Intelectual al interior de la organizaciones. Sin embargo no todos estos modelos
especifican o plantean indicadores de medición, destacando en este aspecto los
modelos Navigator de Skandia, Intelect y Balanced Scorecard como los más
utilizados en las empresas[12].
Ejemplos de la aplicación de
estos modelos en la medición del capital intelectual se encuentran en empresas
como BBV de España, Unión Fenosa, Skandia y Celemi.
Como ejemplo se muestran los
indicadores utilizados por el BBV:
Indicadores de Capital
Humano |
Indicadores de Capital
Relacional |
Indicadores de Capital
Estructural |
Nº de Empleados en
España |
Nº de oficinas en
España |
% retribución
variable |
Nº de Empleados en el Resto
del Mundo |
Nº de oficinas en el resto
del mundo |
% personas con ret.
Variable |
% plantilla con catalogación
menor estándar |
Plantilla en puestos de
Gestión y Front Office |
% de personas en
D.O.R.(Dirección Orientada a Resultados) |
% horas de formación sobre
jornada laboral |
Plantilla en puestos de Back
Office |
Nº de equipos de
mejora |
Edad media de la
plantilla |
Índice de lealtad de los
clientes en la red comercial |
Nº de personas participantes
en equipos de mejora |
Diversidad
hombres/mujeres |
Índice de satisfacción de los
clientes en la red comercial |
Nº de personas formadas en
Calidad Total |
Rotación
Interna |
Posición
s/sector |
Bases de Datos Corporativas.
Accesos a BBV Informa |
Ingresos de jóvenes alto
potencial |
Índice de notoriedad
espontanea |
Nº de sugerencias de
mejora |
Ingresos de
especialistas |
Índice de satisfacción de
cliente interno de oficinas |
Nº de participantes medios en
cada concurso interno |
5.
Estado
de la gestión del Conocimiento en Chile
Luego del análisis
realizado, corresponde tener una visión del estado de la Gestión del
Conocimiento en Chile. Para ello se ejecutó una encuesta a Ingenieros de 12
importantes empresas e instituciones gubernamentales.
Los resultados individuales
de cada empresa son tratados en forma confidencial, pero los resultados globales
se presentan a continuación.
La conclusión general de
esta encuesta, es que la Gestión del Conocimiento en Chile es un tema, aún,
desconocido al interior de las empresas. Cerca del 80% de los encuestados
respondió que no se han implementado programas formales o si es que lo habían
hecho, no sabía si estaban relacionados con la Gestión del
Conocimiento.
Respecto a la orientación de
las empresas hacia el aprendizaje, se encuentra que el 36% de las empresas posee
una orientación, pero el restante 64% responde que nunca o en ocasiones la
empresa realiza acciones que están orientadas a aprender de la experiencia de
las personas, formalizar los procedimientos, recompensar la transmisión del
conocimiento o facilitar la experimentación como método de aprendizaje entre
otras preguntas.
6.
Resumen
y Conclusiones
La existencia de modelos
para la Gestión del Conocimiento y para la medición del Capital Intelectual
indican que el conocimiento no puede ser visto como algo intangible. El mismo
desarrollo de indicadores y la experiencia de empresas de clase mundial en la
medición de su Capital Intelectual, está demostrando que el conocimiento se ha
convertido en un elemento tangible que se puede medir y por ende
gestionar.
De los modelos expuestos
para la Gestión del Conocimiento, se tiene que cada uno de ellos cubre un área específica
relacionada con el aprendizaje organizacional. Así el Proceso de Creación de
Conocimiento de Nonaka y Takeuchi apunta a la forma como se adquiere, captura y
convierte el conocimiento desde conocimiento tácito a conocimiento explícito y
viceversa. Muestra la forma en que el conocimiento permanece en la organización
y en las personas.
KPMG es un modelo que se
centra en la forma que debe tener la estructura organizacional para una adecuada
Gestión del Conocimiento. Este modelo es complementario a los otros tres debido
a que plantea que la estructura debe cumplir ciertos requisitos para que los
conocimientos y su gestión tengan éxito.
El modelo de Arthur Andersen
da a conocer el compromiso y responsabilidad que deben tener las personas y la
organización de tal forma de generar el ambiente adecuado para el aprendizaje
organizacional.
Finalmente el modelo KMAT
destaca los facilitadores sobre los que se debe prestar importancia cuando se
quiere implementar un sistema de Gestión del Conocimiento.
Por lo anterior, es
necesario prestar atención a cada uno de estos modelos, adecuándolos a las
necesidades de cada organización al momento de implementar un sistema de Gestión
del Conocimiento.
Este es el punto de partida
para buscar la forma de hacer tangible el conocimiento. Logrando esto a través
de la medición del Capital Intelectual.
La definición del Capital
Intelectual nos lleva a corroborar que el principal activo de las empresas
corresponde a los intangibles, es decir a aquellos activos que no aparecen en
los estados financieros, ni balances, pero que en el futuro entregarán
beneficios. El hecho de que el Capital Intelectual signifique, a veces, más del
doble del valor material de la empresa, es condición suficiente para demostrar
la necesidad que tienen las empresas de prestar atención a la Gestión del
Conocimiento y la medición de su Capital Intelectual[14].
Esto evitará la subjetividad y distorsiones que generan los mercados, así como
la especulación, cuyos resultados quedan reflejados en los vaivenes que sufren
las empresas intensivas en conocimiento en las Bolsas de Valores mundiales.
Finalmente la encuesta
realizada a algunas empresas que operan en Chile, nos indica que la Gestión del Conocimiento es un
área con un alto potencial de desarrollo en nuestro país y que en el futuro
puede ser una “herramienta de defensa” frente a los vaivenes de la economía,
principalmente a aquellos generados por grandes economías vecinas como Brasil y
Argentina. Así será posible demostrar que la solidez de las empresas está basada
en el potencial del capital humano, estructural y relacional y no que dependen
de la subjetividad y especulación de grandes inversionistas internacionales.
7.
Referencias
(1). Arata, A. & Furlanetto,
L., “Organización Integrada y Liviana, Modelo de
Excelencia Empresarial”, Mc Graw - Hill, 1ª Edición, 2001.
(2).
El Diario Financiero (2000),
"Como Competir a Través de los
Conocimientos", Ediciones
Financieras, Management en Administración de la Información, Fascículo N°2.
(3).
El Diario Financiero (2000),
"Gestión de los Conocimientos", Ediciones Financieras, Management en
Administración de la Información, Fascículo N°6.
(4).
El Diario Financiero (2000),
"La innovación en las Organizaciones Basadas
en el Aprendizaje", Ediciones
Financieras, Management en Administración de la Información, Fascículo N°10.
(5).
El Diario Financiero (2001),
"Mastering Management", Ediciones Financieras, Capítulo N° 5.
(6).
El Diario Financiero (2001),
"Mastering Management", Ediciones Financieras, Capítulo N° 10.
(7).
Documento del Programa CICS
– Colombia, "De las Sociedades de la Información a las
Sociedades del Conocimiento".
(8).
Davenport,
T. H. Y Prusak, L. (1998), "Working Knowledge: How Organization Manage
What They Know", Harvard
Business School Press.
(9).
Elena Revilla Gutiérrez, P.
Pérez Santana, "De la Organización que aprende hacia la
Gestión del Conocimiento",
Depto de Ec. y Adm. de Empresas, Universidad de
Valladolid.
(10).Foix N., Christian (2000),
"Aplicación de la Administración del
Conocimiento en la Planta de Papel Santiago", Memoria para optar al título de Ing.
Civil Industrial de la UTFSM, Valparaíso, Chile.
(11).Kaplan, Robert S., Norton,
David P. (2000, 4ª Ed.), "Cuadro de Mando Integral (The Balanced
Scorecard)".
(12).P. Nayak, D. Garvin, A.
Maira y J. Bragar (1998), "Aprender a Aprender", Trend Management - Volumen 1, Edición
Especial.
(13).Sarriegi Domínguez, Jose
Mari (2000), "El conocimiento tácito: lo que los
ordenadores aún no pueden gestionar", Escuela Superior de Ingenieros de San
Sebastián, Universidad de Navarra, España.
(14).Bueno, Eduardo (2000), "De
la Sociedad de la Información a la del Conocimiento y el Aprendizaje", Universidad Autónoma de Madrid (UAM),
España.
(15).Bueno, Eduardo (2000), "Gestión del Conocimiento, Aprendizaje
y
Capital Intelectual", Universidad Autónoma de Madrid (UAM),
España.
(16).Tissen R., Andriessen D.,
Lekanne Deprez F. (2000), "El Valor del Conocimiento".
(17).Sveiby K., (2000), "Capital Intelectual. La nueva riqueza de
las empresas".
(18).Edvinson, L., Malone, M.
(2000), "El Capital
Intelectual".
(19).Arboníes Angel L. , "El
conocimiento no se puede gestionar". Otoño [on line] [09 de Abril 2001] Disponible en Internet
<URL:http://www.clusterconocimiento.com>
(20).Grau, América (2001), "Herramientas de Gestión del
Conocimiento", Otoño [on line] [07 de Junio 2001] Disponible en Internet
<URL:http:// www.gestiondelconocimiento.com/americagrau.htm>
(21).Ruggles
Rudy (1997), "Knowledge Tools: Using Technology to manage
Knowledge Better". Otoño [on line] [02 de Abril 2001] Disponible en Internet
<URL:http://www.businessinnovation.ey.com/mko/html/toolssrr.html>
(22).Koontz, H. & Weihrich,
H., (1998) "Administración una perspectiva
global", 6ª Edición, McGraw - Hill.
(23).Brooking, A., “El
Capital Intelectual, el principal activo de las empresas del tercer
milenio”, 1ª edición, Editorial Paidos, 1997.
[1] Ingeniero Civil Industrial, MBA en Gestión Empresarial de la Universidad Técnica Federico Santa María, Chile.
Key
words: Valor libro, valor de mercado,
activos intangibles, Gestión del Conocimiento, Capital Intelectual,
conocimiento, aprendizaje organizacional.
[2] Profesor Guía. Ingeniero Civil Mecánico, Universidad Técnica Federico Santa María. Diplomado en Ingeniería Industrial, Universidad Católica de Valparaíso. Perfeccionamiento en Preingeniería de Proyectos Industriales, OEA – Brasil. Doctor © en Ciencias Empresariales, Universidad de Lleida – España.
[3] Área Académica, “Modelos”. Verano [on line] [02 de Marzo de 2001] http://www.gestiondelconocimiento.com/modelos.htm
[4] Conocimiento explícito es aquel que
puede ser expresado mediante palabras y números (algoritmo o procedimiento para
luego ser programado).
[5] Conocimiento tácito es esa otra parte del conocimiento, de la capacidad de tomar decisiones, que no puede ser expresada mediante palabras y números, pero que, en ocasiones, condiciona significativamente ese proceso de toma de decisiones.
[6] Arthur
Andersen, 1999.
[7] Brooking, A., 1997 y Modelo
Intelect, 1999.
[8] Capital Humano: conocimiento
útil para la empresa que poseen las personas y equipos de la misma, así como su
capacidad para regenerarlo
Capital
Estructural: Estructura interna: modelos, cultura,
sistemas tecnológicos y administrativos, recursos de información que son patrimonio de la
empresa.
Capital Relacional: Estructura interna. Son las relaciones con los clientes, los proveedores, competidores, agentes del entorno e incluye marcas, imagen y prestigio.
[9] N. del A.: el hecho de ser un país subdesarrollado con una pequeña economía, hace que factores externos hagan fluctuar la bolsa debido a las especulaciones de los grandes inversionistas extranjeros y al comportamiento de los mercados vecinos (Argentina y Brasil principalmente).
[10] Fuente: Anuarios 1994, 1995,
1996, 1997, 1998, 1999 y 2000 Bolsa de Valores de
Santiago.
[11] Para saber el estado de la Gestión del Conocimiento en Chile remítase al punto 5 del presente documento.
[12]Mayor información al respecto en el sitio web: http://www.gestiondelconocimiento.com/modelos.htm
[13] La encuesta fue adaptada de la revista Trend Management, Volumen 2/Nº3 marzo – abril 2000.
[14] Para ello se muestran los indicadores del Capital Intelectual que ha generado el BBV como complemento a sus estados financieros.