ü
Cuando la persona ganadora comete un error, dice:
ME EQUIVOQUE y aprende la lección.
v
Cuando la persona perdedora comete un error,
dice: No fue mi culpa y se la hecha a otros.
ü
Una persona ganadora sabe que la adversidad es
el mejor de los maestros.
v
Una persona perdedora se siente victima de la
adversidad.
ü
Una persona ganadora sabe que el resultado
depende de él.
v
Una persona perdedora cree que la mala suerte si
existe.
ü
Una persona ganadora trabaja muy fuerte y
genera más tiempo para sí misma.
v
Una persona perdedora está siempre muy
ocupado y no tiene tiempo ni para los suyos.
ü
Una persona ganadora enfrenta los retos uno a
uno.
v
Una persona perdedora les da vueltas y no se
atreve a intentarlo.
ü
Una persona ganadora se compromete, da su
palabra y la cumple.
v
Una persona perdedora hace promesas, no
asegura nada y cuando falla solo se justifica.
ü
Una persona ganadora dice: Soy bueno pero voy
a ser mejor.
v
Una persona perdedora dice: No soy tan malo
como lo es mucha otra gente.
ü
Una persona ganadora escucha comprende y
responde.
v
Una persona perdedora sólo espera hasta que le toque su turno para hablar.
ü
Una persona ganadora respeta a aquellos que saben
más que él y trata de aprender algo de ellos.
v
Una persona perdedora resiste a aquellos que saben
más que él y solo se fija en sus defectos.
ü
Una persona ganadora se siente responsable por
algo más que solamente su trabajo.
v Una
persona perdedora no se compromete y siempre dice: Solo hago mi trabajo.
ü
Una persona ganadora dice: Debe haber una mejor
forma de hacerlo. . .
v
Una persona perdedora dice: Esta es la manera
como siempre lo hemos hecho.
ü
Una persona ganadora es parte de la solución.
v
Una persona perdedora es parte del problema.
ü
Una persona ganadora se fija en En como se ve
la pared en su totalidad.
v
Una persona perdedora se fija En el ladrillo
que le toca colocar