LOS
OBISPOS ARGENTINOS HABLAN SOBRE “LA PASIÓN” Con motivo del estreno en Buenos Aires, el jueves 25 de marzo, de la película dirigida por Mel Gibson, la agencia AICA consultó a algunos miembros del Episcopado que ya apreciaron el filme. UNA PELÍCULA
CON UN CLARO SENTIDO RELIGIOSO A su juicio, “son muy intensos los momentos de la vida de Jesús reflejados en esta película”, que logra dejar claro “un gesto religioso: que hay mucha adversidad en el sufrimiento de Jesucristo, no solo en la parte física, que impresiona, sino también en la espiritual: la soledad; sufrir la injusticia como tuvo que enfrentarla, el abandono de los suyos”. No obstante, se refleja muy bien el acompañamiento de su madre, de María Magdalena, del Cirineo, y la actitud de oración constante con el Padre Celestial. La película de Gibson es “una expresión muy plástica, muy fuerte, de todo ese sufrimiento. Hay algunas cosas que creo que van a impresionar”, adelantó monseñor Maulión, quien a pesar de ello reconoce que “creo que la película queda corta en realidad con respecto a todo lo que tuvo que haber sufrido el Señor”. La obra
refleja, “con toda la impresión de lo humano, todo lo que el
texto sagrado muestra de los últimos instantes, o sea, el último
mediodía de la vida de Jesús. Es una película con un
claro sentido religioso. Cualquier otra interpretación que se hace,
que incluso se está haciendo, me parece a mí que no tiene asidero.
La interpretación de la responsabilidad de la muerte del Señor
es qué nos pasa con el amor de Jesucristo, que esa persona no murió
en contra de nadie sino que murió dando la vida por todos, por los
que son judíos y por los que no son judíos. Y esta actitud,
en un camino de reconciliación y de búsqueda de Dios, es el
mensaje más fuerte de esta película”. El prelado se preguntó “¿por qué hay tantas interpretaciones? Yo no sé cuáles son las razones de las interpretaciones. Yo fui a ver la película de una manera desapasionada y la estuve ‘sintiendo’. A mí la película me hizo mucho bien”. Por
último, dijo que la recomendaría por el contenido, más
que por los valores cinematográficos. “Hay dos escenas que son
impresionantes, pero yo creo que tampoco se puede hacer una especie de búsqueda
de dificultades donde no las hay. No estoy a favor de la violencia pero hay
una manera de tratar la violencia de este tema. Repito, yo creo que la película
se queda corta en relación con lo que de hecho tuvo que sufrir el Señor.” |
|||||||||||||
|
|||||||||||||
UNA
OBRA DE ARTE CINEMATOGRÁFICA También
“me encantó la figura de la Virgen. María ha expresado
una dignidad y un señorío extraordinario de la mujer que sabe
del misterio y lo acompaña y que está de pie ante su Hijo, a
pesar del dolor. Realmente es una cosa muy bien lograda”.
Ningún mensaje ideológico
“LA
PASIÓN” NO TIENE NINGÚN RASGO DE ANTISEMITISMO En
tal sentido afirmó que “hay una escena, al final, donde sale
una luz de la piedra que se corre, que expresa en imagen, la esperanza que
surge consolidada en ese acto supremo de amor de dar la vida. “Creo -añadió- que no hay que tener miedo, en esta época de facilismo, a ver lo cruenta que fue la muerte de Jesús, cuando queda muy claro que es para la redención de todos nuestros pecados. Ya queda muy claro ahí que los culpables de la muerte de Jesús somos todos nosotros, representados en distintos personajes que aparecen siempre eclipsados por la imagen de Jesús. Y eso es muy lindo, porque ningún personaje aparece en sí mismo, sino en función de la historia de la redención, para apoyarlo o acompañarlo, como María o Pedro, o para bombardear el proyecto de salvación, como los soldados romanos”. Destacó que “está muy bien cuando el pueblo se da vuelta y aparece la imagen del Domingo de Ramos y la del viernes Santo. En el cambio de imágenes es donde se ve la lógica de la entrega de la vida de Jesús, en las enseñanzas suyas, ya sea el Sermón de la Montaña, la Ultima Cena o el lavatorio de los pies. “En lo personal -concluyó-, ver ‘La Pasión’ fue como un pequeño retiro espiritual”. |
|||||||||||||
|
|||||||||||||
UNA
OPORTUNIDAD DE QUE SE REVALORICE EL EVANGELIO “La Pasión” puede “hacer pensar a la gente, que se revalorice el Evangelio, la figura y el mensaje de Jesús. Evidentemente, en este caso y por la manera en que se representa, es una oferta impactante, de eso no hay ninguna duda. Es realista, profunda, pero a su vez está ligada al mensaje de Jesús, a los grandes temas de su predicación de una manera muy hermosa. El tema del amor a los enemigos, de las bienaventuranzas, de la Ultima Cena, de la Eucaristía, de la intimidad con los apóstoles, de la relación con su Madre, aparecen muy bien. No solamente es el tema de la cruda Pasión”. El pastor mendocino reconoció que “se diferencia mucho” del resto de las películas del género. “Pero aceptemos que hay diferencia de estilos artísticos y literarios, para no creer que uno es válido y otro no. He leído los distintos comentarios y me di cuenta de que si la gente dice que una es válida y la otra no, hacemos una oposición innecesaria. Así como hubo muchos cuadros e imágenes de Jesús, esta es una película sobre El, que alguien quiso mostrar desde los Evangelios, desde la historia, con el asesoramiento que Mel Gibson buscó. Evidentemente, tiene una visión artística ligada al Caravaggio, como él mismo reconoce. Y por ello tiene sus tonos, sus acentos, sus impresiones. Pero no es que unas obras valgan y otras no. Un arte que en su pluriformidad nos ofrece la persona de Jesús, merece un respeto y un aprovechamiento muy intenso”. Luego dijo que “tenemos mucha sangre en el cine, mucha violencia, muchos sentimientos drásticos. Si esto nos ayuda a ver efectivamente que Jesús cargó sobre sí la violencia del mundo para redimirlo, hace mucho bien. Hay mucha violencia en el cine en general. Por lo tanto, si en esta película Jesús carga sobre sí los insultos, los azotes, el rechazo, como dice el Evangelio, no es que lo haya inventado Mel Gibson”. No
es antisemita Creo que es una buena oportunidad de pensar en la pasión de Jesús. Es un buen ejercicio. Si la gente, viendo esto, vuelve a la pasión como está escrita en la Biblia, magnífico. Que después se deje tocar por el Espíritu Santo, no por Mel Gibson.
UNA
NOTABLE REALIZACIÓN QUE MUESTRA A UN JESÚS CREÍBLE “Antes
de la exhibición de La Pasión de Cristo, programada para el
Miércoles de Ceniza, el 25 de febrero 2004, ha habido durante un año
bastante discusión y controversia por todas partes sobre la película.
Esto basado en temores acerca de cómo se realizó la película,
así como también en la susceptibilidad en torno a la historia
entre cristianos y judíos, y el diálogo actual entre el judaísmo
y las iglesias, especialmente en Estados Unidos. Parte de la discusión,
sobre todo en un alto nivel, entre teólogos, biblistas y líderes
religiosos, se basaba en reportes sobre borradores iniciales de la película.
“Una de las dificultades con las que se enfrentan las películas sobre la vida de Jesús, sobre todo de parte de estudiosos y teólogos no versados en las técnicas y convenciones de la narración cinematográfica, es que los filmes a veces tienden a ser criticados y juzgados como si fueran el Evangelio. Sus expectativas se ubican en ese nivel por lo que están más cerca de la condena que de la comprensión del filme. Éste es un peligro con el que también se encuentra La Pasión. Es necesario repetir que ésta es una película y que por tanto el guión es una 'versión' de las historias del Evangelio sin exigir que el filme sea el Evangelio. “Este uso de los cuatro evangelios significa que hay perspectivas diferentes en cada uno sobre los judíos de ese tiempo. El Evangelio de san Mateo presupone un conocimiento detallado de las escrituras judías y ve en Jesús a quien viene a cumplir la profecía. De este evangelio provienen las escenas más 'apocalípticas' de su muerte. Marcos y Lucas, en cambio, miran más desde fuera de la cultura judía. Lucas escribe para los lectores conocedores del griego y las maneras romanas de narración. El Evangelio de san Juan, escrito al final del Siglo I, se hace eco de las raíces de la Cristiandad en el Judaísmo pero reconoce la brecha que comienza a insinuarse. “Mientras que el Jesús del cine es normalmente de figura ligera y delgada, Jim Caviezel es un hombre grande y fuerte, algo robusto, un carpintero creíble y un hombre sólido. Esto hace que el Jesús de la película sea más real que lo usual. “Si bien la película de Mel Gibson quiere sumergir a su público en la experiencia de la Pasión, la secuencia final es la de la piedra sobre el sepulcro. La piedra rueda y la tumba queda abierta, se ve como caen las telas que cubren las heridas del cuerpo de Jesús y la cámara lo toma de perfil, sentando en la tumba como un preludio a su naciente vida. Éstas son las imágenes con que el público deja la sala. La resurrección, presentada brevemente, es el clímax de la Pasión. “Las escenas de la Eucaristía en la Última Cena insertadas en la crucifixión son una de las fortalezas teológicas de la película. Mientras Jesús ofrece el pan que es su cuerpo, nosotros vemos el cuerpo dolorosamente quebrado y dado por nosotros. Cuando él ofrece el vino como su sangre, nosotros estamos demasiado conscientes del desangramiento, la sangre que vertió por nosotros. Jesús les dice a sus discípulos que no hay mayor amor que dar la vida por los amigos, y vemos eso en plenitud. Él les dice que celebren la Eucaristía para que su pasión y muerte esté presente en medio de ellos. “De
esta manera, el guión destaca ambos aspectos de la Eucaristía,
la celebración de la comida, la comunión, y el sacrificio de
Jesús. Gacetilla enviada por AICA BAIRES, VIERNES 19 DE MARZO DE 2004 |
|||||||||||||
|