Un hecho nada menor y que
a mi juicio marco el comienzo sistemático de la relación comercial entre los pobladores de la zona de Anna y Enguera y los de la zona de Saetabis -
[1]
,fue
la presencia de la calzada romana que conocemos con el nombre de Vía Augusta
y que tenía su paso en una zona próxima a Xàtiva (Saetabi) y a Torre Lloris
(Turres Saetabi). A ambos lados de esta importante vía de comunicación se
estableció la red comercial que diese salida a los productos que venían de
la costa o que tenían origen en la misma Saetabis. No podemos afirmar que a
la zona de Anna llegaran las huellas de la Romanización, en sentido
estricto de presencia de la lengua y construcción de edificios civiles
que dejaran patente un asentamiento organizado; pero a pesar de lo
anterior, si que hay evidencias que esta relación comercial posibilitó
cierto grado de osmosis en los usos y costumbres, esto y la situación
geográfica, lejos de la costa pero próxima a la vía Augusta permitió el
establecimiento de colonos en villas formando parte de las Centuriaciones.-
[2]
, establecidas como pago a los soldados que
combatieron en las campañas militares ,posiblemente ,de Lusitania.
Este tipo de
asentamiento tuvo lugar con mas asiduidad en la época del bajo imperio
romano en el que existe una tendencia a refugiarse en zonas elevadas del
territorio como forma de combatir cierto estado de aparente inseguridad que
se dio en esa época y que posibilitó, el establecimiento de unos núcleos de
población entorno a ellos.
Estas unidades de reparto
del territorio, como ya he mencionado, tomaban como base la centuria que
suponía una superficie equivalente a la de un cuadrado de aproximadamente
711m de lado; es decir, aproximadamente el valor de 20 actus-
[3]
o 50 hectáreas. A
su vez este cuadrado se dividía en 100 heredades con las parcelas
dispuestas sobre dos ejes centrales. Entre los términos de Anna y Enguera
existe una partida llamada de las “Turmas” que está emplazada entre las
casas de Guillén, el “Pelao” Toñuna; que cumple con las características
antes señaladas y donde se han encontrado evidentes restos arqueológicos de
presencia humana (Ibero-romana) de los siglos I al III. Un poco mas al sur
y próximo al lago de la albufera y a la vereda de subida a la sierra se
encuentra la Partida del Charral donde se repiten nuevamente este tipo de
parcelaciones. Según los cálculos de José Miguel Jiménez Piqueras, las
Turmas del Pelao, abarcan una superficie aproximada de 184Ha. lo que
proyecta una centuriación de 15 parcelas de 12 Ha-
[4]
.
Situadas sobre un eje central de 711 metros de abscisa y otros tantos de
ordenada. La misma proyección la establece sobre la Turma del Charral, lo
que presenta un asentamiento humano entorno a 30 familias en un
territorio inferior a 9 Km2.
La palabra Turma dentro
de la organización militar romana servia para identificar la organización
en unidades 300 jinetes, alae equitum, que procedentes de las provincias
conquistadas constituían una minoría de elite y servían de refuerzo a las
legiones. Estas formaciones de jinetes se componían en 10 turmas , túrmae,
de 30 jinetes cada una ,generalmente de la misma nacionalidad, que
finalizada la campaña eran disueltas compensándolas con el sueldo o un
terreno donde establecerse, que es lo que previsiblemente debió de ocurrir,
un terreno no demasiado alejado del núcleo de comercio de Saetabis y muy
cercano a la vía de comunicación que representaba la Vía Augusta, sin
problemas de propiedad ni de relación con el sustrato poblacional de origen,
acostumbrado ya en esa época al contacto con los que venían de la Costera,
con abundante agua y con una cultura del vino, aceite y trigo ya establecida
desde la época de los iberos.
De esta importante vía de
comunicación conocemos que tuvo al menos un ramificación hacia Enguera,
que debió de ser utilizada como alternativa en épocas de conflicto e
inseguridad en el transito de personas y bienes con dirección a la zona de
Mogente , Ad Statuas, donde según algunos autores convergería con el
ramal de la vía Augusta que llegaba a las proximidades de Fuente la
Higuera por el valle. Esta vía, comprometía una bifurcación hacia el
interior en busca de la zona de Cofrentes, lo que avalaría la presencia
entre Anna y Enguera de las Turmas que he señalado.
La existencia de esta vía secundaria ha sido
investigada por Ricardo Gascó Vañó y Ana María Morales Juan, en la
conclusión a un interesante trabajo de campo sobre la Vía Augusta se
presenta como hipótesis de trabajo, ciertamente bien fundamentada, la
ubicación de algunas de las posiciones clásicas del itinerario de Antonio.
Ad Aras:
Para ubicar esta posición, se basaron en los vasos primero y segundo de
Vicarello que sitúa Saetabis a 22 mp -
[5]
,
lo que les llevó en dirección a Cerdá por la comarcal 322 siguiendo el
antiguo trazado de la N-432 a través de la Alcudia de Crespins hasta
completar las mile pasum. Esta posición les situó sobre el kilómetro 17/18
de la hoja Canals nº794, que se ubica en el entorno de la necrópolis Ibérica
del Corral de Saus, quedando justo al norte de la vía, en la ladera oeste
del barranco de la Balsa Seca, sobre cuyo puente, en la vía, se cumplen la
distancia recogida en los Vasos de Vicarello. Al parecer, en este lugar se
excavaron tumbas en esa época con trabajos en piedra, tanto en Antonino como
en Vicarello hay bastantes Ad Aras.
En una
interesante recopilación, Gonzalo Arias marca en el recorrido hasta Cádiz tres mansiones con esta referencia:
•Ad
Aras: ( A8, VV1,2,3). Situada entre El Garabato, la Carlota-
Cordoba-
•Ad
Aras: (VV2,4). Linares – Jaén
•Ad
Aras: (VV1,2). Cuya localización para este autor difiere
ligeramente de lo expuesto anteriormente ya que la sitúa entre los términos
de Caudete y Fuente la Higuera
A pesar de
estas diferencias de posición, lo que no es descabellado inferir es que
todas ellas signifiquen o marquen la existencia de necrópolis. Ad Turres: En
referencia a esta localización afirman lo siguiente, basándose en los
vasos tercero y cuarto de Vicarello: “... ATTVRRES Y
TVRRESSAETAB. La distancia la misma, 25 mp. Ad Aras es, aparentemente,
sustituida por esta otra mansio. Obviamente el artífice gaditano
tenía delante el itinerario Antonino o algo similar y se "bailo" al
copiar... o existía una buena razón, posiblemente comercial, para que los
portadores de los vasos, EVIDENTEMENTE VARIOS VIAJEROS DIFERENTES,
realizasen RECORRIDOS LIGERAMENTE DIFERENTES a los señalados en el
itinerario de Antonino.
La Ad Turres del
itinerario Antonino no debe de estar muy lejos de esta zona, así que
deberían de ser la misma... y lo son. Pero como sería un poco ilógico ubicar
una mansio, Ad Aras, a 22 mp y otra, Ad Turres, a 25 mp sobre la misma
vía... es evidente que debe haber otra vía.”
Para Gonzalo
Arias la “mansió“ de Atturres y Turres Saetab son la misma y la ubica en el
termino de Fuente
la Higuera a unos
tres Km en dirección S.O en el lugar que se conoce como “Casa Real “
Saetabis era en la época, un importante enclave, por lo que
comercial y militarmente seria absurdo no buscar una vía que supusiera
el mantenimiento de las comunicaciones en caso de conflicto y que además
permitiese la penetración hacia las tierras del interior. Este nudo o
bifurcación de la vía lo sitúan los autores en la zona del termino de la
Llosa / Puerto de Carcer,
y
desde allí, la calzada original tendería a buscar la “partida” del Plano,
en Anna y Enguera, en dirección a Cofrentes, situando las Centuriaciones
que hemos referenciado a la derecha en dirección de la marcha. La
existencia de esta vía alternativa y paralela al trazado que de la Vía
Augusta hacen algunos autores por el llano en dirección a Mogente, nos
permite abordar el problema desde la perspectiva del caminante, que tiene
con esta variante el acceso seguro a posiciones diferentes de la misma vía.
Esta divergencia entre el itinerario Antonio y los
Vasos de Vicarello la explican ,los investigadores señalados ,
posiblemente por algún motivo comercial que conducían a los portadores de
los vasos de Vicarello a plazas fuera de la ruta principal del itinerario
Antonino, para, después, volver a retomar esta.
No obstante,
creo necesario hacer notar mi certeza de que aunque es posible que llegaran
a coincidir ambas rutas en el tiempo , la calzada interior fue anterior a
cualquier trazado por el valle, y ello se desprende de la observación sobre
el terreno de las tendencias que las notas y los restos de la vía encontrada en la finca del Escudero nos marcan y que
apartan la ruta del llano de Mogente para alcanzar en la zona de Fuente
la Higuera la Atturres de Gonzalo Arias.
Ad Statuas: Se
encontraría según esta investigación en la zona del plano y en dirección a
Enguera y desde allí en dirección a la carretera de Navalón. En algún punto
de este territorio se localizaba, como he mencionado, un nudo de caminos
que marcaba el inicio de una ruta hacia Cofrentes y otro que unía esta
vía alternativa con la vía Augusta , que procedía del entorno de Saetabis
“... La concordancia con los Vasos de Vicarello se establece cuando
realizamos la medición de las mile pasum indicadas desde Saetabis y, al
llegar a Mogente, tomamos la carretera de Navalón y seguimos contando sobre
ella.”
Precisamente en esta carretera y a la altura del
Teularet, cruzando la carretera de Navalón a Mogente, nos encontramos el
acceso a la finca del Escudero, si caminamos un centenar de pasos sobre
esta pista forestal, localizaremos sin ninguna dificultad, unos ochocientos
o novecientos metros de los restos de la antigua calzada romana, en un
sorprendente buen estado de conservación y que resulta visible en su
totalidad en los repechos del camino.
La estructura y la amplitud de esta vía 3,5m, nos
lleva a reforzar la hipótesis antes expuesta de la existencia de una vía
alternativa, que fue utilizada en épocas de conflicto y que enlazaba con
el trazado que venia de Saetabis por el Valle. Otra mirada al problema,
nos lleva a plantearnos la hipótesis de que la Vía Augusta, en su
trazado original por la zona de la Costera, siempre evito ,por razones
obvias de seguridad, el valle por lo que una vez situados en la zona del
Puerto de Carcer fue tomando altura con dirección al Plano de Anna y
Enguera para continuar su progreso en dirección al paraje de la Redonda
y la zona de Balsa Blanca, ganando en este itinerario progresivamente
altura y seguridad.
