EVE
Eres
algo tan fuerte que dueles
porque me niego a
sentirte.
Rehusó mirarte,
sin embargo, en un
instante de mi lucha
me topo con tus dulces
ojos
y tierna sonrisa
que provocan en mí lo que
se te antoja.
Mi corazón late con tal
fuerza
que el pecho se me hace demasiado pequeño para retenerlo
Mi rostro refleja mil colores
aunque no logres notarlo
y mis manos tiemblan a tal grado
que no puedo ni escribir.
Y me siento una tonta
tratando de luchar contra lo que no logro controlar
las terribles ganas de volverte a mirar
y el anhelo en mi ser
de poderte amar.
