Piérdete en el gran universo de este
gran escritor
su sensibilidad y su gran capacidad para
describir
los sentimientos más profundos del ser
humano
y la capacidad de observación del universo
Angel Sanz Goena
Conducta Humana.
La
transformación que ha tenido el ser humano, desde los tiempos remotos, ha
dado un concepto de comportamiento y sentimiento hacia lo que él entiende
es lo correcto o, más bien, su conducta más correcta.
En toda su historia, al menos desde que tiene capacidad de inteligencia,
ha tenido una metamorfosis que, en alguno de sus campos, aún es disonante.
En todos sus estados físico, emocional, mental y espiritual ha habido
épocas diferentes. Desde su proceso espiritual, etapas de sabiduría
extrema, como la constante evolución de su estado mental hasta el
perfeccionamiento de su estado físico, va en contraposición con su estado
emocional.
En cuántas ocasiones se ha manifestado la diferencia de ricos y pobres; se
ha hablado del respeto por la Naturaleza; se han lanzado mensajes para
mejorar planteamientos hostiles y bélicos; y, sobre todo, para mejorar
nuestro comportamiento individual y colectivo.
Tantas veces como se ha pretendido modificar criterios humanistas y
espirituales, con renacimientos, cambios de actitudes sociales, ... han
sido aniquilados por el poder maquiavélico. Aunque los cambios históricos
que han ido surgiendo, de diferentes tendencias, de marcados niveles
intelectuales y espirituales, con intenciones de crear una sociedad más
solidaria y humana, ha sido un fracaso. ¿Por qué? ¿Qué incita al ser
humano a no evolucionar en su estado emocional?
El poder, la ambición, la pasión desmesurada y trivial, unida a la
ignorancia hacen del ser humano que su parte más instintiva, más primaria,
siga ocupando su pedestal. De tal forma que vive en él el hombre inferior
y no permite al Hombre Superior, con su inteligencia, intuición,
percepción y horizontes elevados, conquistar su propia procedencia. En
cuanto el hombre eleve su mirada y se deje gobernar por su estado más
elevado -consciencia-, habrá superado muchas conductas innecesarias para
estar conforme como él es. Mientras no entienda que el respeto por sí
mismo y por los demás, la conformidad con su ego, el enfrentamiento a sus
propios miedos, aceptar su inseguridad, limitación y capacidad, e intentar
crecer con la Ley de la Naturaleza y del Universo, en la medida que él
entienda, sepa y sienta, pero con el orden del respeto mutuo hacia
tendencias, culturas, religiones y razas, no habrá empezado su nivel de
evolución colectiva.
En
estos momentos en que la
confusión, la vulgaridad, el dinero, el aislamiento por la seguridad
personal vive en la sociedad actual, sin implicaciones ni compromisos
hacia un bien común de
la Humanidad, seguirá existiendo el hombre inferior, el que únicamente ve
satisfacciones y deseos terrenales y no espirituales ni universales.
Si el hombre no es capaz de intentar digerir toda la ineficacia que existe
actualmente, será pobre de alma y de inteligencia. En cambio, si se
compromete a saber vivir con él mismo y con los demás, habrá llegado la
hora de continuar por los senderos del Conocimiento, de la Sabiduría y del
Amor de la Creación. Simplemente que esté dispuesto a escucharse un poco
más dentro de sí, con todos los inconvenientes, conflictos y problemas que
tiene que ir solucionando, la armonía, el equilibrio y la serenidad de
espíritu se irá depositando cada vez más en su corazón, lo que hará
posible el inicio del progreso real del Hombre que junto a la Ciencia
hará el verdadero Ser Universal.
La voz en el silencio.
Carmen Berges
Artista Zaragozana.
El
universo de la mujer
La
mujer, por unas circunstancias u otras, es el epicentro del mundo actual
como siempre lo ha sido, pero en estos momentos mucho más aún. Es
importante y esencial el puesto de la mujer en la familia. Su esclavitud
anterior, el menosprecio hacia ella, la incomprensión, motivó a su
rebelión ante los constantes vaivenes de la sociedad cuando ella ocupa un
puesto relevante en la vida: estar en el sitio privilegiado que la
Creación le ha dado, al margen de las culturas mundiales.
Es
importante que desarrolle y potencie su capacidad de amor y disposición
maternal y familiar; así, estará en paz con ella misma y será el
equilibrio y la fuerza de todos los futuros hombres y mujeres que tienen
que hacer un mundo nuevo y mucho mejor. Están hechas, formadas y
preparadas para la estabilidad, sensatez y prudencia de la vida y de
nuestro mundo terrenal. Su sentido de la orientación como su visión real
de la vida, unido a su instinto profundo, hace que su grado evolutivo sea
muy elevado. El listón de la mujer es muy alto y el hombre debe estar a su
altura, para que el amor y la realidad cotidiana sea un flujo de una
evolución constante, aunque algo difícil por la propia madurez de la mujer
y la inmadurez del hombre. El hombre debe hacer un esfuerzo: compartir su
universo y comprenderla mejor, porque hasta la fecha ha sido más su rival
y amenaza. El hombre ha desconsiderado a la mujer, la ha mermado,
subestimado y utilizado. Ella siempre ha sido el juicio, la clarividencia
y el amor.
Actualmente, la mujer es más partícipe de
la sociedad, ha tenido más salida al exterior, se le ha reconocido
públicamente, pero, en cambio, lleva una carga superior, porque nunca
puede dejar de ser mujer y madre.
¿De dónde nacen los seres humanos? ¿Quiénes
son las que cuidan, protegen, contemplan, vigilan y su corazón late con
el de sus hijos? ¿Dónde está el sigilo en sus momentos, el silencio en
otros, y la exigencia en que su trabajo sea reconocido y compartido?
¿Quién busca la complicidad, el amor, la frescura, en los contactos de
cada día?
La mujer es un manantial de
agua cristalina de la que el Mundo bebe.
Asimismo, la mujer contempla y admira la
inteligencia del hombre cuando éste es la persona responsable, madura, que
comparte el verdadero idilio del hogar: su compromiso familiar.
Lo ideal para una mayor armonía y confianza
entre los dos sexos, sería, incluso, que la mujer intentara comprender,
profundizar y conocer las características que mueven al hombre: mecanismos
mentales, conductas emocionales, perspectivas de la vida….., porque, de
esa forma, acercarían más su lugar de encuentro.
Hombre y mujer deben aproximar sus
posiciones: sentir verdaderamente que son los artífices del crecimiento
personal y espiritual de nuestra querida Tierra. La mujer, cuando existe
indiferencia y un menosprecio a su verdadera existencia, a su esencia
maternal, sufre por la carencia de amor, sensibilidad, delicadeza y
romanticismo que su ser necesita vivir permanentemente. Se rebela con
indignación, abnegación y tristeza por el desinterés y dejadez del hombre,
ya que entiende que su estímulo y vacío en amar debe ser enriquecido
mutuamente.
Hay que reconocer la cara oculta de la
mujer, donde su astucia, despotismo y crueldad puede perturbar y
empobrecer su exquisita fragancia.
Mi gran admiración a la verdadera identidad
de la mujer, a su entidad terrenal y Universal, al sacrificio y
resignación en un crecimiento continuo, a la fuerza de su destino y a la
generosidad y mirada elevada de su corazón. Su alma vuela incesantemente
por los horizontes sagrados de la vida y su brisa llega a las mejillas del
resto de seres humanos con la fragancia del aroma de las estrellas.
El espíritu inquieto, frágil, sabio y
hermoso de la mujer va caminando por caminos pedregosos y otros menos,
pero siempre cauta ante la adversidad.
Dama universal, es cielo y tierra a la vez;
conmueve al mundo con su saber estar y sentido común.
Mujer
Palabras que llegan a su corazón despierto
con una gran necesidad de amor y de amar. Sentida y callada muchas veces,
vaga silenciosa por los caminos de la soledad.
La mujer es la verdadera estrella del
cielo.
A UN SER HUMANO
Te
escribo esta carta, para decirte lo que siente mi corazón en esta hermosa
mañana de primavera….
Siento
en estos momentos tan bella la vida, tan hermosa nuestra existencia, por
el simple hecho de vivir que, aún con todas las dificultades que tiene el
ser humano, he sentido la necesidad de escribirte esta carta que, en
definitiva, es a mí mismo a quien la escribo, y de esa forma compartimos
todo este viaje interior que estoy realizando en este preciso instante.
Te
diría que el alma del ser humano, con todo su potencial, debería ser el
instrumento que se utilizara para un desarrollo permanente como hombre, e
intentar ahuyentar de nuestros corazones todos los miedos que nos limitan.
Cada ser humano trae todo consigo, nadie es perfecto, y cada uno de
nosotros debe saber desarrollarse con lo que es.
Considero que es imprescindible saber vivir con lo que se tiene, no
esconderse de nada, y liberar el interior. Todos tenemos deseos, miedos,
inseguridades…. Todos tenemos un cierto carácter dominante, exigente,
perfeccionista…. En algunos está más acentuado con unas marcadas
necesidades de conquistas materiales (ambición, poder, etc.). En otros, en
cambio, existe más pacifismo, armonía, etc.
En
sí, hay cierta similitud entre los seres humanos.
También te diría que deberíamos agradecer constantemente lo que somos,
porque es parte de nosotros y debemos aceptarlo, convivirlo y
desarrollarlo, de tal forma que vayamos superando nuestras situaciones y
evolucionando permanentemente.
Como
verás, el significado de la vida es muy sencillo, y cuando el ser humano
alcance la conexión con su espíritu, sentirá la realeza, belleza y riqueza
de la vida, con las ganas de disfrutar de ella constantemente.
Los
seres humanos no confiamos en nosotros mismos, en nuestro poder, en
nuestro potencial, no vemos la sencillez de las cosas ni valoramos su
simplicidad, por eso buscamos la sabiduría en el misterio y en la
complejidad, porque no hemos llegado a descubrir todavía esa percepción de
los mensajes de la vida en su forma más simple y sencilla.
Termino aquí mi carta, con el único deseo que sientas lo que mi ser está
sintiendo……
EL
DESTINO
Cuántas palabras y cuántas conductas seguimos empleando los seres humanos
por conocimiento de otros, por mecanismos impuestos en nuestra mente, por
costumbres o por auto defensa, pero hay mucho de la realidad de la vida
que el ser humano desconoce y debería conocer, permitiendo a la mente que
sea el cauce entre el flujo del conocimiento y el intelecto.
Hasta ahora, damos valor exclusivamente a lo conocido, le permitimos que
sea nuestro dios, bien racional, bien metafísico, pero aún hay algo más
allá que deberíamos alcanzar y que nos dará la orientación de nuevos
horizontes para el hombre, su capacidad y la Grandeza de lo creado,
intentando tener más consciencia de nuestro Creador.
Abriendo nuestro corazón espiritual, dejando libre nuestra imaginación y
abriendo la puerta de nuestra intuición, se alcanzarían altos niveles de
Comprensión Universal y de Conocimiento, llegando más lejos de lo
estudiado, enseñado y trasmitido.
El destino es la
referencia y compromiso de cada uno de los seres que participamos en el
bello ciclo de la vida y de la muerte. Nuestro agradecimiento debería ser
inmenso, simplemente por conocer su significado, su función, su realidad,
su intensidad, sus grandes alturas en Conocimiento, su profundidad en
Sabiduría, su infinita esencia, su inmortalidad y su eternidad.
La Vida tiene su Ley y
su Orden, su universo se mueve matemáticamente y su Sabiduría llega con
precisión a los seres preparados para conocerla, desarrollarla y
enseñarla. La Vida tiene su propio funcionamiento y los Seres preparados,
en cada ciclo evolutivo, trabajan para su construcción y avance. Todos, y
cada uno a su nivel, estamos implicados en su Desarrollo.
El destino es el que
acerca o aleja a las personas, según conductas y evolución; por eso, es el
que une a todos aquellos que abren su corazón a otros o todo lo contrario.
El amor es el cauce de entendimiento entre aquellas personas que piensan
en los demás como sus hermanos; de hecho, todos hemos venido y hemos sido
creados en el mismo lugar, y debemos avanzar sin egoísmo, con comprensión
y franqueza, caminando por el sendero de la sensatez y del sentido común.
La amistad es la
grandeza de la vida y afortunados los seres humanos que la tienen, la
comprenden y enriquecen.
La comprensión y
conocimiento de la auténtica Verdad está exclusivamente en Seres muy
evolucionados, mientras que el resto la conocemos parcialmente. De ahí,
que toda información trasmitida sabiamente, amplía la comprensión de la
Verdad Única.
Para conocer la Vida,
debemos penetrar en el mundo de su Silencio, y conforme entras en él, te
das cuenta que hay muchas cosas que no tienen nombre, pero sí esencia.
Hay que saber escuchar
a la Vida, profundizar en su Conocimiento, y cuando manifiestas algo de
él, debe ser con prudencia y sensatez.
Rincón de Hadas
Carmen Berges
Artista Zaragozana.
Nuevas reflexiones
La belleza de la vida
está en sentir que cada instante que vivimos pertenece a esta maravillosa
Creación. Aquel que siente como sus células vibran, siente el paso de la
vida a través de sus entrañas.
Cuando nuestros
sentidos físicos sienten junto con nuestros sentidos internos, nuestra
vida corporal y etérea, avanzan unidos y equilibran nuestra existencia.
Cuando el ser humano
es contemplado y contempla a la vez, con sus propios ojos internos, es el
observador y observado de su trayectoria humana y espiritual.
Cuando el ser humano
llega a contemplar su existencia como una existencia infinita, inmortal,
residiendo en un instante de la Creación, convierte su proceso de vida en
un constante impulso eterno.
Cuando el ser humano
llega a comprender el valor del cuerpo humano y lo respeta como
acompañante necesario de su chispa divina, avanza por el sendero sabio de
la vida.
Cuando el ser humano
comprenda el valor del significado auténtico del amor, comprenderá que
toda nuestra visión física y espiritual es una enseñanza constante del
crecimiento Celestial.
Y cuando cada uno,
como ser vivo e independiente, sienta que es una pequeña partícula de una
inmensa Creación, que su Grandeza es que todos seamos Uno y ese Uno se
divida entre todos, para poder alcanzar unidos la verdadera Unión
definitiva en el núcleo de la Pura Energía Creadora, será el momento
auténtico del verdadero crecimiento Universal.
Angel Sanz Goena
www.colordelalma.com
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