ðHwww.oocities.org/es/toldorock/festi02.htmwww.oocities.org/es/toldorock/festi02.htmdelayedx¢ÔJÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÈ èoÀåOKtext/htmlpá0`ÔÀåÿÿÿÿb‰.HThu, 29 May 2003 18:13:43 GMT&Mozilla/4.5 (compatible; HTTrack 3.0x; Windows 98)en, *¡ÔJÀå QUÉ ES FESTIMAD

Por fin tuvimos oportunidad de ver a Rammstein en un gran escenario en Madrid, desplegando toda su magia, volver a constatar el innegable crecimiento de Sôber, bailar hasta la madrugada o disfrutar de los delirios funki-discotequeros de Jamiroquai... pero además la edición de este año merece ser recordada por algunos de nosotros por  el esfuerzo que demandamos el pasado año porque la organización de Festimad mostrara mayores cotas de profesionalidad, entrega y respeto por el publico asistente a su festival. 

Justo es reconocer (por fin este año!!) que se cumplieron todos los horarios-casi perfectamente- y  actuasen las bandas ofertadas en cartel (salvo el caso de Flavor Flav, dj de Public Enemy al que muchos fueron a ver y que no pudo actuar por no poder salir de Estados Unidos y el caso de Alient A Farm, que sufrieron un accidente de trafico días antes y debieron suspender su actuación en El Soto). Hay que destacar, favorablemente, la cantidad y calidad de sonido ofertado que fue sobresaliente en cada escenario. 

El respeto por el público vino dado, también, por las notables condiciones de acampada e higiene  que han sido sensiblemente mejores a las de pasadas ediciones. La programación ofertada sin claras conexiones entre un día y otro favorecieron la venta individual de entradas sobre los abonos, cifrándose, según fuentes de la organización, la asistencia al festival de entre 15.00 y 16.00 personas cada una de las noches. Debemos estar haciéndonos viejos  o  es que estamos un poco cansados de asumir un roll que no hemos pedido, porque este año incluso disculpamos el caos en el que se convirtieron las ruedas de prensa de los artistas más conocidos (falta de espacio, problemas de sonido...) 

El triunfo de cualquier festival o producción individualizada da y lo quita el público y este creemos que salió satisfecho de El Soto viendo sus caritas, aunque otros muchos ni siquiera se acercaran por la decepción sufrida el pasado año (voto de castigo). Paradójicamente cuando hoy manifestamos las buenas sensaciones recogidas y el notable esfuerzo realizado por la organización por fin han conseguido, Creation y sus socios, demostrar solvencia y agilidad el Festival corre el riesgo de no celebrarse el próximo año sino recibe un apoyo explícito de la Comunidad de Madrid, según demando la organización. Creemos que la reivindicación de buscar una rebaja fiscal para la música es acertada (del 16% al 4) pero meter en el mismo saco al apoyo institucional cuando esta claro que debe ser la oferta privada (por muy mala que sea la situación actual para esta parte de la industria musical) la que desarrolle este tipo de actividades, ajustando precios y tratando de esponsorizar más que subvencionar su actividad, es un error y confunde a la gente.    

ESCENARIO LAGO VIERNES 24 MAYO 

15:00 horas. Tras un calor sofocante anunciándonos cómo iba  a ser el día aparecemos en Festimad el 24 de Mayo algunos de sus primeros asistentes (otros muchos llevaban allí bastante más rato que nosotros). Habían abierto Sad Man Said y el siguiente grupo en actuar fue The Smokers.

La siguiente de la lista de actuaciones prevista para ese día nos llevaba al escenario del Lago para ver a CJ SLEEZ. Provocativa en directo o muy punk eran algunas denominaciones que habíamos oído sobre ella antes de la cita de Móstoles. 

Cuando llegamos, con parte de su tiempo ya transcurrido, la primera reacción fue la sorpresa al ver a una chica cantando en bikini de color rojo tentador. Pues si que se las gasta bien, pensamos. Porque otra idea que alumbró en ese instante era que el público congregado debajo del escenario, masculino sobre todo, respondía efusivamente a la música incitados por la lascivia de la estadounidense. Y lo cierto es que ella jugaba con esa idea mediante tentadores movimientos o violentas sacudidas por el suelo. Luego nos enteramos que lo habitual es que se desnude sobre el escenario para terminar. No fue así ese viernes. Y si obviamos estos detalles teníamos detrás a un buen grupo de rock and roll, también colindante al punk, en lo que ella aportaba mucho, desgarrando la voz en cada tema. Aunque lo probable es que sea recordada más por sus formas que por su música. 


Teníamos ganas de nuevo ver a
P L T. No podemos decir lo mismo de algunos asistentes, pondríamos la mano en el fuego al hablar de los innumerables prejuicios hacia  un grupo cantando en euskera. Esos mismos cayeron rendidos ante una demostración magistral de cómo llevar un directo, y de los pequeños corros iniciales terminaron ,poco a poco como un reloj de arena, con una masa de gente exultante frente a los cuatro músicos. La llegada de David desde Evirus69 dota al grupo de mucha movilidad y fuerza en directo.

 El momento cumbre llegó con “Hil Da Jainkoa” y al terminar con Aitor dejando los teclados a un lado para tras unos insanos gestos al público consistentes en sacar la lengua y frotarla con su mano despertar a la bestia dormida de su interior agarrando el micrófono y cantando como un maníaco. Se hizo muy corto, esa tarde hubieran necesitado el escenario grande para ellos solos a tenor de la descarga ofrecida. Esa es la forma de romper barreras y mentes poco abiertas, ofreciendo todo lo que llevan dentro de si. Inconmensurables. 


No consiguieron los barceloneses THE UNFINISHED SYMPATHY conectar con un público todavía demasiado frío y que iba accediendo poco a poco al Escenario del Lago. Eric Fuentes y su banda presentaban su primer álbum de igual nombre que el grupo con muy buenos temas como “Euphoria Under Water” que abre el CD. Lo cierto es que los Unfinished Sympathy con su poderoso rock con tendencias hardcore no tuvieron capacidad de sorpresa en Festimad, ofreciendo una propuesta quizá un tanto manida que no consiguió provocar demasiado entusiasmo entre el respetable.


HUNDRED REASON movieron las caderas del personal, a las 6 y pico de la tarde,  con sus cortantes rasgueos de guitarra y sus rápidos temas punk rock de la nueva escuela. Su actuación por sencilla (no confundir con simple) merece ser destacada por lo honesto del ejercicio expuesto. Músicas para eternos teenagers enamorados que ayudaron a refrescar una calurosa tarde, ritmos calientes para el cuerpo y la mente que invitaban a brincar. 

Ya estaba el tema un poco más serio cuando los alemanes THE REVOLVERS saltaron al Escenario del Lago. Siempre se agradece un buen rato de punk-rock clásico y eso es lo que, con su aderezo glam, nos brindaron los Revolvers,

recordándonos a más de uno el concierto que hace un año ofrecieron los Backyard Babies en el mismo escenario. No tuvieron mala acogida entre un público ya mucho más receptivo y con ganas de pasarlo bien. Y no se van a conformar con su presencia en el Festimad ya que tienen programada una gira de presentación de su último trabajo “A Tribute to Cliches” para el próximo mes de septiembre con un buen número de actuaciones en diferentes ciudades españolas. 

Tampoco la actuación de A merece ser olvidada. Y no porque fuera excitante sino por todo lo contrario, por si sirve para desenmascarar tanta falta de originalidad ya que no acabamos de encontrarle el punto a la enésima fotocopia elevada a la máxima potencia del hard rock con tintes nuevo-metaleros. Poco creíble y sin sustancia su actuación paso poco menos que desapercibida entre bandas que atesoran personalidad (no como ellos) 

Si tenemos en cuenta la actuación de ANDREW WK en Festimad (23.30 h.) habría que hablar de éxito aunque a nosotros nos aburrió hasta la extenuación. Su colección de poses rockeras sobre un colchón digno del peor nieto de Los Ramones congrego a gran número de asistentes que parecieron divertirse mucho con su mezcolanza de todos los estilos que no suenan a ninguno mientras el muchacho berreo hasta la extenuación.... Si esta es la última sensación del rock que nos queda por ver, señor!. 

ESCENARIO ZONA FREAK VIERNES

Los malagueños TRIPLE XXX fueron los encargados de abrir los conciertos de la Zona Freak, un escenario prácticamente ignorado por el público del Festimad hasta que terminaron los conciertos de los dos escenarios principales. Lo cierto es que la carpa de la Zona Freak pilla un tanto alejada de los otros dos escenarios pero bien merece la pena una visita de vez en cuando porque la organización suele reservar actuaciones interesantes como la de estos dos raperos andaluces. “Sobran Palabras” es el título del álbum que nos presentaron Spanish Fly y Gordo Master acompañados por Dj Pájaro, con temas como “Ya no te akuerdas?”, derrochando ganas sobre el escenario y sinceridad en sus rimas.  

Y entre las sorpresas que reservaba la Zona Freak estaba el mexicano SILVERIO. Dj, cantante y bailarín, Silverio nos presentó su espectáculo unipersonal ante el regocijo de las escasas 100 personas allí presentes. Resulta admirable que tan peculiar personaje con tan escasa propuesta musical llegue a formar parte del cartel de un gran festival.  

Destacaba sobre el resto de los conciertos de la carpa el del cubano NILO MC. El “Guajiro del asfalto” es uno de los más importantes embajadores del rap con raíces en el son cubano con una ya larga carrera repartida entre Ecuador, Alemania y Madrid. Acompañado sobre el escenario por cinco músicos (dos coros, un percusionista y dos dj’s) Nilo nos ofreció un espectáculo con sabor caribeño, con temas como “Que se prenda el carro”, “Business L.A.” o “Cupideando”, que fue muy bien recibido por el público de la carpa. Tanto que, ante la baja a última hora de Flavor Flav, repitieron actuación el sábado en el Escenario del Lago.   

ESCENARIO FESTIMAD VIERNES 24 MAYO

Los encargados de abrir el escenario Festimad a las 16:30 fueron HORA ZULÚ. Tarea complicada por dos motivos: el papel asignado (primer grupo) y los rayos solares que seguían haciendo de las suyas. Frente a esto último camisetas negras para los músicos (no les importaba) y para lo primero el desparpajo y la categoría de Aitor Velásquez, su cantante. 

Porque no se amilanó, ni ninguno de sus compañeros, esa es la clave de un buen frontman, una de esas personas que los ves ahí y parece su segundo hogar.

Da igual las dimensiones del escenario, un palmo de terreno o muchos metros cuadrados. Transita por él con total naturalidad sin importarle que delante estén doscientos espectadores o dos mil.  Unidad, diversión y cachondeo entre ellos, recuerdos a su Granada natal y un proyecto novedoso fueron los ingredientes de la fórmula usada para ganarse a quienes se presentaron para verlos esa tarde. Además el sonido funcionó sin problemas, como fue la constante en todas las actuaciones, por lo cual todos disfrutamos de las rimas, scratches, punteos y duros riffs con total claridad, admirando la riqueza contenida en sus composiciones. Grupo muy a tener en cuenta en el futuro más próximo.   


Quien les ha visto y quien les ve (les oye) en la actualidad. THE DISMAL empezaron hace muchos años siendo una aguerrida banda de black metal que prometía grandes obras dentro del genero.

Con el tiempo, e imaginamos que algún cambio significativo de formación,  su música se ha tornado hacia un metal contemporáneo de marcadas reminiscencias a  propuestas sajonas que están muy cerca del rock melódico actual (¿nuevo metal?). El mayor viso de agresividad lo puso, en escena, su teclista que no paro de moverse y gesticular a cada nota que emitían. Su propuesta cobro, tras verles en Festimad, mucha más presencia en vivo que en los discos, aunque no podamos evitar compararles con tanto grupo similar.   


ILL NIÑO
se mostraron solventes y certeros dentro de las coordenadas que definen el particular estilo del combo. Con “Liar” desafiaron al calor y los allí congregados saltaron como hasta el momento no había viso el Soto de Móstoles esa tarde. “God save us” supuso el punto de inflexión en una actuación demoledora, puesto que este tema, quizá, define como ningún otro la dualidad estilística en la que mueven, mitad melodía de voz nítida, mitad agresividad con texturas guturales. Ill Niño realizaron una versión integra en Castellano de “Nothing´s clear”, provocando mayores dosis de excitación y complicidad entre la numerosa audiencia (algo mas de 4000 personas), el 



 

resto del set, sonó como en el disco, alternaron el Ingles y el Castellano, con las alocuciones de su vocalista que constantemente invitaron a la fiesta y a la diversión metalera-sin respiro-durante toda su actuación. Viendo a los de New Jeresy en vivo se palpo que en su disco no ha habido excesos de producción puesto que son capaces de articular en directo el mismo (o mas) ejercicio de insana potencia nu-metal de marcados ascendentes latino-africanos (por aquello de las tremendas percusiones). “Revolution-revolución”, el tema que da titulo a su primer álbum, fue una de las piezas más vitoreadas de la tarde... quizá tanto o más que la particular versión que realizaron de “Eye for an eye” de Soulfly.   

 

Sobre las 20.30 de la tarde, todavía con un sol bastante abrasador para esa hora del día aparecieron SÔBER en escena, sustituyendo a los accidentados Alient A Farm a quienes Carlos Escobedo, cantante del grupo, dedico unas palabras cargadas de complicidad y emotividad. Sôber desarrollaron el set habitual que viene desarrollando en la gira de su último y magnifico álbum, “Paradysso”, con el atractivo añadido de desenvolverse como peces en el agua en un gran escenario con muchos vatios de salida (de pegada!!). Las palmas y saltos que arrancaron entre las más de diez mil personas que asistían a su actuación, por poner un par de ejemplos muy gráficos, al interpretar “La duda” o “Arrepentido” (dos estados y momentos creativos diferentes en 



 

tiempo y espacio) constataron como Sôber sigue captando nuevas y heterogéneas audiencias sin perder un ápice de su planteamiento original. 

Retazos de “Morfología”, “Shyntesis” y “Paradysso”, arte y deleite, fueron expuestos con elegancia y potencia (una vez más... ¿y van cuentas que lo hacen tan bien, como solo ellos saben?). Los fraseos entre Bernardini y Jorge Escobedo brillaron alto y nítidos mientras Alberto Madrid, situado tras su preciosa batería, desplegaba un abanico de percusiones que demuestran día a día el gran baterista que es. Mención paralela merecen las interpretaciones y fenomenal estado de voz de Carlos Escobedo y el modo en que imprime carácter y emotividad a cada una de sus interpretaciones. Posee una voz aterciopelada que inflexiona a su antojo según requieran las composiciones. Sòber siguen despertando admiración e interés por donde van y para nosotros resulta un placer disfrutar de su estado creativo y de la profesionalidad y sentimiento que ponen en todas y cada una de sus actuaciones encima de un escenario...  La interpretación que realizaron de “Loco” y el delirio colectivo que generó, en el final de su actuación, viene a refrendar esta opinión. Una última reflexión.... resulto muy agradable constatar sobre el terreno como la franja de audiencia que conecta con Sôber va desde los adolescentes a talludos veteranos que olvidaron los cuarenta años hace poco.   

Payable on death, P.O.D., curioso nombre para un grupo que, aunque maquillado de manera bastante eficiente bajo una serie de tatuajes, pelos rastas y sobre todo, pose, no deja de ser un grupo americano más, para más inri, cristiano. Tal vez habían generado en quienes te relatan estas cuatro líneas, una ilusión y expectativas desmedidas, pero la decepción fue grande, sobre todo después de que otros grupos que habían pasado por el escenario principal hubieran dejado el listón tal vez demasiado alto, demasiado inalcanzable: otros compañeros de OzzFest (por cierto, para cuando por estas tierras de dios) Ill Niño, y, pese a quien pese, Sôber.

Con todo el montaje de luces, un volumen de sonido más que destacable y un público tan entregado como poco exigente, se fueron desarrollando los temas de su celebrado último disco “Satellite” acompañado de un par de retazos de “The Fundamental Elements Of Southtown”, pero ni con el ritmo ni con las intenciones que se muestran en estudio ¿un mal día?. Tal vez haya sido la comida española, que les obligó horas antes a buscar un establecimiento célebre estandarte de la globalización neoliberalista más salvaje en el que solo se sirve mierda precocinada a  3 euros. 

Falta de ritmo, con unas cadencias demasiado lentas, estropeaba tanto los temas, que hasta era difícil reconocerlos: grandes petardazos en disco como “Boom” o “Masterpiece Conspirancy” se convertían en temas mediocres, pesados e incluso aburridos. Tanto el guitarra Marcos con un volumen y una distorsión paupérrimos como la desidia y el cansancio a la hora de cantar de Sonny (intentando el karaoke colectivo una y otra vez) no dejaban lugar a dudas, era como si estuvieran interpretando otra vez la historia de tantos grupos de tomar la pasta y pillar la carretera. Sólo consiguieron levantar el ánimo un poco el apabullante ejercicio con las baquetas de Wuv, tal vez las ganas de tomarse vacaciones del resto de los componentes hacia que destacase demasiado, y si un bajo se oye por encima de cualquier otro instrumento es que estás escuchando a los Maiden o es debido a que el resto de una banda no da la talla. Buenos temas que se ennegrecían como la noche “Set It Off”, “Hollywood”, “Youth Of the Nation”, “Satellite”, “Southtown”, más el numero de redención pastoral cristiana con un hedor a telepredicador barato de madrugada “Celestial” acompañado de rodillas al suelo (ave maría purisima...). Nos venden la moto, como quieren.   


Vuestro corazón esta a la derecha y el mío a la izquierda”... eso canto Till en “Mein Herz Brent” cuando las luces comenzaron a mostrar el quirófano aséptico en el que RAMMSTEIN convirtieron el inmenso escenario de Festimad (el mismo que están utilizando en toda la gira europea). 

No es una metáfora, estos cinco doctores, parapetados tras sus instrumentos y micro (como es el caso de Till) diseccionaron desde ese momento algo más de una veintena de sus particulares visones en esto de las Artes escénicas y musicales. Till se arrancó un corazón, en el primer tema de la noche, anunciando (a quien todavía no les había visto en directo) que su actitud, canciones y concepción teatral esta a millas luz de lo que hayan podido ver y oir con anterioridad. Bastaba ver la cara de mucho espectador atónito para corroborar estas palabras.    

Con una calidad de sonido impresionante, nítida y potente, fueron desgranado, entre golpes de claroscuro y buenas dosis de fuego y pirotecnia su colección de himnos, a saber “Bück dich”, “Sensucht”, la increíble “Asche zu asche” o la archi conocida “Du Hast”. No seremos nosotros quienes vengan ahora a descubrir la capacidad hipnótica de su propuesta en vivo y la entrega física que realizan Rammstein en sus directos, tan solo mencionar, que creemos que se encuentran sabedores del gran potencial que manejan y disfrutan con el proceso. Todavía sorprenden a quien ya les conoce y atrapan a quien no tuvo noticias anteriores de ellos, lo variopinto de la audiencia congregada alrededor de su insania, constata la amplia franja de seguidores (por edades y tendencias) con la que cuentan. 

En mitad de la actuación nos regalaron “Alelujah”, un tema inédito hasta ese momento ya que en estos días aparece recogido en la banda sonora original de “Resident Evil”. 

La personal versión de “Stripped” (Depeche Mode), en el último tercio del set, supuso el accidentado paseo en barca neumática del bajista entre la marea humana...hasta tres veces se fue al suelo y otras tantas levanto la cabeza entre la masa (tal vez por eso el teclista ha desistido en esta gira en realizar tan particular travesía). Lamentablemente esa noche no tocaron “Engel”, con la que habitualmente venían cerrando sus actuaciones. En el intenso bis fin de fiesta en la que propusieron dos composiciones más, destacó, “Ich Will” que puso de manifiesto, una vez más y fueron varias a lo largo de la noche, la comunión tecno-metalera entre banda y asistentes... Un excitante desenlace para una excelente noche de rock y circo.    



 

ESCENARIO LAGO SÁBADO 25 

No fue la mejor tarde del Escenario del Lago, con un cartel muy por debajo del que esa misma tarde nos ofrecía el Escenario Principal. No obstante, si había algún nombre que despertaba curiosidad como Sneaker Pimps o Flavor Flav, aunque a última hora el de Public Enemy se cayó del cartel por problemas con las autoridades norteamericanas, siendo sustituido por Nilo MC que ya se había presentado el día anterior en el pequeño escenario de la carpa de la Zona Freak. 

Nos quedamos con la duda de sí a los SNEAKER PIMPS les gusta esto de subirse a un escenario. Cierto es que cuando tu música consiste principalmente en el uso de bases pregrabadas puedes presentarte ante el público sin la banda al completo y

dedicarte más a beber de una botella de vino que a tocar el bajo, por ejemplo. La verdad es que se esperaba más de esta banda británica de auténtico culto para los amantes del trip hop más vanguardista y que presentaba su nuevo disco, “Bloodsport”, del que realizaron un completo repaso con temas como “Kiro TV”, “Sick”, “The Fuel”, “Small Town Witch” o “Bloodsport”, además de alguno más antiguo y conocido como “Spin Spin Sugar”, sin conseguir en ningún momento que el público perdiera la frialdad a pesar del sol que caía a plomo sobre el escenario del Lago.   


Ya han pasado unos meses desde la publicación del primer disco de SIDONIE con título homónimo a la banda y cuyo éxito sorprendió a los propios componentes de este trío catalán y la verdad es que se ha perdido buena parte de la efervescencia inicial. Temas como “Feeling Down”, “Groove stars in the nightime” o “Sidonie goes to Varanasi” (con el sitar que proporciona ese psicodélico sonido sesentero que caracteriza a la banda) sonaron en el Festimad como si los lleváramos escuchando toda la vida. Difícil lo va a tener Sidonie si en sus próximos trabajos no muestra una evolución musical de la que estamos convencidos son muy capaces.   




Los californianos BIG SOUL tampoco ofrecen una propuesta musical demasiado reseñable y su concierto resultó poco más que un tiempo muerto necesario para digerir el atracón Fun>da>mental que acabábamos de darnos. Algunos de sus temas, resultones y fácilmente bailables, se han convertido en clásicos de los anuncios de televisión por lo que fueron bien recibidos por un público no demasiado exigente. 

Canciones como “Hippy Hippy Shake”, “The Funky Baby” o “Groovyman” no podían faltar en el conjunto de un espectáculo que entretuvo a los presentes en el escenario del Lago   

ESCENARIO ZONA FREAK SÁBADO 25

Dos de los conciertos programados para el sábado en la carpa nos llamaron especialmente la atención al tratarse de dos intérpretes noveles con propuestas que rompían la monotonía del cartel. Por supuesto, la inmensa mayoría del público volvió a dar la espalda al escenario de la carpa lo que provocó que disfrutáramos de los conciertos casi en familia. GEMMA HAYES es una cantautora (de las de guitarra acústica) irlandesa afincada en Londres que recientemente ha ganado el premio de mejor cantante femenina de su país. “Night On My Side” es el título del hasta ahora único larga duración de la irlandesa con temas como “Hanging Around”. Sencillas y frescas melodías en la tradición del mejor pop con la personal voz de Gemma que seguro volverá a visitarnos ante la gran acogida que tuvo en el Festimad. 

El noruego SONDRE LERCHE es, a sus 19 años, uno más de los representantes de la inagotable cantera musical escandinava. Acompañado por su guitarra y por una banda compuesta por bajo, batería y teclados/guitarra, Sondre nos presentó su primer álbum “Faces Down” con temas como “Sleep on Needles”. Soft rock (como nos apuntó el propio Sondre) con raíces anglosajonas que hizo las delicias de los allí congregados.   



 

ESCENARIO FESTIMAD SÁBADO 25

No tuvieron suerte SIX BY SEVEN en su presentación en el Escenario Festimad. Abrir los conciertos a las 5:30 de la tarde con el público más interesado en buscar una necesaria sombra bajo alguno de los árboles del parque que en lo que hacían los cuatro músicos que estaban sobre el escenario y encima sufrir varios cortes en el suministro eléctrico puede hundir al más animoso de los mortales. Sin embargo, la banda británica supo sobreponerse a las adversidades y nos ofreció un más que correcto recital presentando su último trabajo “The Way I Feel Today”. Sin duda el rock guitarrero de Six By Seven merece otra oportunidad en el Festimad si es que éste sigue adelante.   


Ya no se puede considerar a los gallegos
DELUXE como una simple promesa dentro del panorama pop-rock nacional.

Con el carismático Xoel López a la cabeza los Deluxe nos ofrecieron uno de los mejores conciertos de todo el Festimad. Tanto Xoel como los cuatro miembros de su banda (guitarra, bajo, batería y teclados) se mostraron en todo momento con muchas ganas de gustar y consiguieron despertar definitivamente de la siesta a los allí reunidos cuando ya eran más de las 7 de la tarde. Se sucedieron sin perder en ningún momento el ritmo los temas de su primer y único trabajo hasta el momento “Not What You Had Thought” como “Looking through the Hole”, “Destriy Another” y “I’ll see you in London”, pegadizo ejercicio del mejor pop británico, que puso fin a un magnífico espectáculo.    



 


Los que ya sabíamos como se las gastan los
FUN>DA>MENTAL y no habíamos tenido la suerte de verles en directo esperábamos con impaciencia su presentación en el Escenario Principal del Festimad. Sin duda fue el concierto más sorprendente e impactante del festival (si ya conocías el show Rammstein, claro). Y no sólo por el numerito escatológico-reivindicativo que se marcaron sobre el escenario con una bandera yankee. Los entendidos le han puesto la etiqueta de world-beat a la música que hacen el pakistaní de nacimiento y británico de adopción Aki Nawaz y su multicultural banda. 

Si con este nombre se le quiere aplicar un concepto de globalidad underground tanto a nivel de sonidos como de intenciones puede que no anden demasiado desencaminados. Dance, rap, rock, beats extraídos de la tradición musical de Pakistán, India o Sudáfrica, compromiso político, social y religioso con letras incendiarias, todo bajo una ética punk, para convertir un concierto en bastante más que una sucesión de canciones. Pocas veces hemos visto una descarga de rabia tan grande sobre un escenario como la que nos ofreció esta poco convencional banda, con tributo a los Sex Pistols incluido, que presentaba su último trabajo  “There Shall Be Love!“. Contundentes percusiones, desquiciantes bases, distorsionadas guitarras, sediciosas letras y voces y sonidos venidos de Asia para completar el mejor espectáculo del Festimad 2002.   


No tienes más que darte una vuelta por cualquiera de los carteles de los festivales europeos que se van a celebrar este verano (o por los del año pasado) para comprobar como FAITHLESS es un auténtico clásico en esto de los grandes eventos musicales al aire libre. El house épico de esta banda británica se ha convertido en elemento imprescindible en cualquier programa que busque, como no debe ser de otra manera, la diversión del respetable. Seguramente para muchos resulte insustancial la propuesta musical de Faithless pero la verdad es que tienen un directo capaz de enganchar a miles de personas (eso sí, con ganas de dar botes durante un buen rato) con irresistibles himnos como “Insomnia” o “God is a Dj”. Y es que esto de tocar en directo es especialidad de la casa a pesar de tratarse de unos sonidos más propios de club, ya que incluso antes de alcanzar la fama en su país ya se habían embarcado en una gira por tierras más lejanas.

Y en Festimad, como no podía ser de otra manera, también gustaron, a pesar de introducir algún tema demasiado lento que rompía el trepidante ritmo general del concierto. Los que fueron allí atraídos principalmente por la presencia de Jamiroquai resultaron gratamente sorprendidos por la estupenda banda que comandan Maxi Jazz, Sister Bliss y Rollo Armstrong. Guitarra, bajo, teclados, dos baterías y dos chicas de coro (Zoe Johnston también hace sus pinitos como solista en temas más soul como “Crazy English Summer” del último CD “Outrospective”) para acompañar a Maxi Jazz, auténtico maestro de ceremonias (“This is my Church”) que sabe perfectamente como conseguir la comunión con su público que en esta ocasión llenaba sin apreturas el escenario Festimad y del que pidió colaboración (sin demasiado éxito) para el tema que ponía fin al concierto, “We come 1” también de su último trabajo.   



 

Acertó, sin duda, la organización de Festimad con la contratación de JAMIROQUAI como cierre de cartel del escenario principal para la jornada del sábado. La banda británica, con el genial Jay Kay a la cabeza, es un auténtico seguro de vida para el éxito de cualquier gran festival, más aún en un programa falto de nombres atractivos para el gran público y teniendo en cuenta que esa misma noche se celebraba el, hasta hace poco denostado, televisivo Festival de Eurovisión. Más de 16.000 personas se dieron cita en el escenario principal, con un perfil mucho más heterogéneo que el del público que acudió la noche anterior para presenciar la descarga Rammstein. Desde acérrimos seguidores de la música dance de cualquier época o entusiastas admiradoras de Mr. Kay hasta cualquiera con ganas de pasar un buen rato presenciando un espectáculo realmente brillante, casi tanto como la “corona” de J. K. 

Lo cierto es que el cantante y compositor, líder absoluto del grupo, se mostró en todo momento con muchas ganas de contentar a su público con numerosos acercamientos para regocijo de las más fanáticas, demostrándonos a todos que también está muy puesto en esto del balompié y llegando incluso a dirigir al público cual director de orquesta mientras sonaban los acordes del “Danubio Azul”... ¡Vals en Festimad! Consciente de sus limitaciones vocales, el londinense hace uso de sus habilidades como bailarín durante todo el show, eso sí, sin perder nunca el tono, y además ha sabido rodearse de una magnífica banda que le arropa con absoluta solvencia.    


Con “Twenty zero one”, el más “contundente” de los cortes de su último trabajo “A funk odyssey”, saltó J. Kay al escenario con inmediata repuesta del público que desde entonces hasta el final del espectáculo no dejo de bailar.

No se centró en exclusiva el concierto en el citado último álbum, del que el grupo ha declarado sentirse especialmente satisfecha, quizá algo más elaborado y vanguardista que los anteriores lo que le hace perder bastante de la frescura que ha caracterizado hasta ahora la música de la banda. Si sonaron  “You give me something”, “Love Foolosophy” y “Little L” además de imprescindibles clásicos como “Canned Heat” y “Deeper Underground” del “Synkronized” o “Cosmic Girl”, “High Times” y “All Right” del fantástico “Travelling Without Moving”. Este último tema fue el bien elegido fin de fiesta para un recital por momentos algo monótono pero que dejo a casi todos contentos. 



 

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