Y
hasta la españolisima revista ¡Hola! hablo del manton de Maxima
y dijo que las holandesas salieron en estampida a comprar el chal.
La
princesa Maxima no se mostraba en publico desde el 19 de febrero cuando, junto
a Guillermo Alejandro, acuño una moneda con la imagen de su hija en
la ciudad de Utrecht.
Al
igual que entonces, para el concierto de la London Symphony Orchestra eligio
un peinado mas informal que el habitual, con ondas y algunos bucles.
Un look que debera abandonar ni bien termine su licencia, para volver a actuar,
vestir y peinar conforme al protocolo.
La
reina Beatriz hoy suspira aliviada. Todas sus dudas previas al matrimonio
de su hijo -heredero al trono, claro- con la plebeya argentina han desaparecido.
Hoy se muestra orgullosa junto a su nuera.
Ha descubierto en Maxima a una princesa enemiga de los escandalos, cuya aceptacion
en el pueblo dio nuevo impulso a toda la monarquia holandesa. Y, por sobre
todas las cosas, luego del nacimiento de Catharina Amalia, aseguro la continuidad
de su sangre en el trono por muchos años mas.